jueves, 19 de julio de 2012

Vendras a mi. Cap. 7


En el otro lado de la ciudad había un pelirrojo indeciso discutiendo por teléfono
 — ¿Qué hago? ¿Qué hago? ¿Qué hago? – preguntaba ya prácticamente histérico el pelirrojo por teléfono
 —  ¿Y me lo dices a mí? Pues ve y punto, nada te pasará si no le permites que te haga nada ¿o acaso ya le dijiste algo que no debías? —  respondió la otra voz por teléfono
 —  ¿Cómo se te ocurre cariño? Que va, no soy fácil, además ese chico piensa que soy un trabajador de una de las tiendas de mamá –
 —  Bueno al menos sabemos que no va detrás del dinero de tu familia – suspiró la otra persona
 —  Tengo una idea, ¿porque no me acompañas?, y así me ayudas si algo pasa – pregunto emocionado
 —  Heechul no tienes 13 años, te sabes cuidar solo – dijo ya resignada la otra persona
 —  Sungjong, el hecho de que te cuides solo porque eres muy valiente, no quiere decir que yo también lo sea, acompáñame, ¿sí? Por favor, mira si lo haces, te compro otro peluche para que te desquites y tres mudas de ropa ¿sí? –
 —  Pero yo escojo la ropa, hay unas cuantas que vi la última vez, que fuimos juntos a la tienda que me encantaron, ¿el paquete incluye accesorios no? – sentenció el otro sonriente
 —  De acuerdo, tú la escoges y también los accesorios  – Heechul rodó los ojos, sabía que eso le saldría caro
 —  Siii. Qué bien!… ¿Y?¿ cuando es el encuentro? –
 —  Pues este sábado en frente del cine al que fuimos la semana pasada, lo recuerdas?
 —  ¿Claro cómo no recordarlo? Si la película fue fantástica, en especial la parte del beso, waa, fue tan hermoso y romántico – el otro chico ya se había emocionado demasiado
 —  Si, si, si esa misma, a las doce del mediodía, te espero en el café de la entrada, la invitación es a las dos de la tarde, pero ya sabes quiero ir a comprar primero –
 —  Yay! Okey! Nos vemos allí pues – cerró el teléfono el teléfono
Heechul dejó el teléfono de un lado – Espero que sea buen chico – se colocó una almohada en la cara – era tan guapo – y se tiró a la cama sonriente.
El sábado tan esperado llegó más rápido de lo que todos pudieron saber, el resto de la semana la habían pasado tranquilamente, las personas se habían acostumbrado a ver a Jaejoong con Yunho y los demás en el comedor, y Mir se estaba aburriendo a lo grande ya que no tenía ninguna chica con quien divertirse en los ratos libres como lo hacía antes.
Eran las diez de la mañana y Mir se encontraba en frente de una elegante puerta tocando el timbre con insistencia
 — Abre la puerta sé muy que estas allí y entrare aunque no quieras – insistió pero nadie salía – te lo buscaste – gritó y seguido de esto subió la reja del patio, sacó una llave que estaba en un masetero, abrió la puerta trasera de aquella casa y subió las escaleras del segundo piso rápidamente hasta que encontró su destino   —  Levántate ¿que no ves la hora? – pateo un bulto que estaba encima de la cama, luego tomó un rociador y hecho su contenido en aquel bulto.
 —  Ahhh! ¿Qué quieres Mir? ¿No ves que estoy durmiendo mi pacifico sueño de ocho horas diarias? – Jaehyo solo le lanzó una almohada a la cara
 —  Que sueño ni que nada, son las diez, ¿a que maldita hora te acostaste entonces? —
 —  Me acosté a las tres haciendo un trabajo, aun me falta una hora de descanso, no molestes – y se acobijo de nuevo
 —  No importa, hoy me acompañaras al centro comercial, ¿sabes porque? – preguntó con estrellitas en los ojos
 —  Otra vez no por favor, no me digas que iremos a otra discoteca – rogó a través de la sabana
 —  Pues te informo de que si iremos, ¿no es fantástico? Es a la que fuimos el día de mi cumpleaños, también invite a Chunji y L.Joe –
 —  Mir, no tengo dinero tampoco, mi padre dijo que ya gaste demasiado la semana pasada, así que me toca esperar hasta la próxima semana o tal vez dos semanas más – dijo mientras se levantaba con el pelo hecho un desastre
 —  Yo te presto, el caso es que vamos a ir y listo, te vengo a buscar a las ocho en mi auto, nos vemos, mis padres se van de viaje hoy y no vuelven hasta dentro de un mes – le guiñó un ojo a Jaehyo y sin más, Mir salió de la casa como un rayo.
 —  Maldito suertudo, con dinero, solo en la casa, y un hermano que lo consiente que más puede pedir? – se revolvió un poco más el cabello dirigiéndose al baño
Una hora después sonó el teléfono en la casa de Jaehyo
 — ¿Bueno? – preguntó Jaehyo
 —  ¿Aló? Soy Joon –
 —  Joon! Que sorpresa, q¿ue sucede? –
 —  Pues, quería saber si ibas hacer algo hoy, es que tenía pensado invitarte a ver películas en mi casa y que conozcas unas amigas
“¿Porqué tengo de amigos a dos calenturientos?, incluso uno de ellos es mi primo y con eso de amigas no me imagino que sea algo bueno, además yo le soy fiel a Subin” – Lo siento Joon, no puedo, Mir me pidió que lo acompañara salir hoy en la noche y ya le dije que sí, así que no podré ir a tu casa –
 — ¿Oh? ¿Y a cual irán? – preguntó Joon con interés
 —  Pues esa la que queda al sur de la ciudad, ¿recuerdas? –
 —  Sí, ¿a qué hora irán? —  
 —  Él dijo que pasaría por mi casa a las ocho, a todo esto, ¿por qué lo preguntas? – a Jaehyo le dio curiosidad las preguntas de su primo.
 —  Quería saber el motivo de porque mi primo favorito no vendría a mi casa, en fin, hablamos otro día entonces, adiós – Joon colgó el teléfono
 —  Anda pues, que le pasa a esta gente, todo el mundo me necesita cuando no quiero salir – dijo algo histérico Jaehyo, para luego sacar una foto de su maleta – Ahh! Subin algún día podre decirte todo lo que siento por ti, aunque solo nos veamos a distancia – le dijo a la foto
Mientras tanto en el centro comercial del centro de la ciudad…
 — Sungjong!!! Si viniste querido, ¿cómo te fue? ¿Ningún pervertido se sobrepasó contigo cuando venias hacia acá? Porque si es así yo lo puedo… —  se precipito un pelirrojo
 —  No me sucedió nada mamá, no vivo en el peor barrio de la ciudad tampoco – interrumpió el menor al pelirrojo que parecía hacer una escena en pleno café
 —  Pues no vivirás en el peor, pero aun así hay mucho peligro y mas que no tienes auto, ¿cómo no quieres que me preocupe por mi pequeño? —  dijo sentándose al frente de Sungjong –
 —  ¿Como sea mamá, donde iremos hasta que sean las dos? —
 —  Cierto!, vamos! –Heechul jaló al menor y se lo llevo por cada tienda que se le cruzaba en frente hasta que fueran las dos.
El reloj del centro comercial dio las dos y cierto chico estaba esperando frente al cine principal mientras que otros dos miraban desde lejos
 — Mira, mira, es el chico del que te conté, el que me dejo la nota en la tienda – Heechul señaló a Siwon en la entrada del cine
 —  Vaya!, no está nada mal, deberías aprovechar, ve, ve…  —  y empujo a Heechul hacia el cine
Sungjong se les quedo mirando a lo lejos por media hora, para percatarse de que su segunda mama estuviera bien, cuando vio que Heechul se la pasaba bien, decidió irse para no interrumpir más, así que dio media vuelta con una sonrisa en la cara cuando se chocó con alguien – Disculpe, no lo vi, fue mi culpa – cuando vio hacia arriba se fijó de que aquel chico era más alto que él y no se veía nada mal “Oh parece que hoy, los chicos guapos salieron a pasear” fue su pensamiento después de haberlo visto
 — No perdona, la culpa es mía por no haberme fijado como recompensa te invito un helado – le respondió el otro chico con una sonrisa
 —  Yay! Gracias, disculpa ¿cómo te llamas? Si voy a aceptar algo de alguien, debo saber al menos el nombre, tú sabes, por precaución – dijo Sungjong con media sonrisa
El chico le devolvió la sonrisa – Claro, me llamo Changmin, ¿y tú? —  preguntó rápidamente
 — Sungjong – le dedicó otra sonrisa
 —  Bueno Sungjong, vamos por ese helado – Changmin guió al más bajo hasta su heladería preferida, ya que se conocía casi todos los establecimientos de comida de aquel centro comercial.
El reloj del centro marco las tres y media de la tarde, cuando un grupo de cuatro chicos entraba por la puerta principal
 — ¿A qué hora es la función? – preguntó Yunho a un lado de Jaejoong
 —  Aquí dice que a las cuatro y media tenemos una libre, ¿porque no vamos a esa tienda? – Yoochun señaló una tienda al final del pasillo que parecía ser de curiosidades – Parece divertido –
 —  Estoy de acuerdo vamos – levanto el brazo Junsu como un niño pequeño emocionado
 —  ¿Vamos Jae? – Yunho le pregunto entusiasmado a Jaejoong
 —  ¿Qué más da? Vamos entonces – y camino hacia la tienda detrás de Yoochun y Junsu y a un lado por Yunho
Al entrar a la tienda se separaron en dos grupos porque la tienda era bastante grande
 — Llamaré a Siwon, para ver donde está – le dijo Yoochun a Junsu, mientras el primero sacaba su celular y marcaba, el segundo vigilaba que Yunho y Jaejoong estuvieran en otro lugar entretenidos.
 —  ¿Siwon?... si ya llegamos… ¿un amigo? Claro tráelo pero cuéntale para que sepa que haremos… está bien frente al cine a la hora de la película, adiós – colgó el celular – Junsu, Siwon dice que traerá un amigo –
 —  Que bien, un nuevo amigo!!, mira Yoochun unos llaveros, viene el par igual, ¿no son bonitos? – le pregunto Junsu mostrándole unos llaveros de ratoncitos en miniatura.
 —  Si están bonitos – los tomo y volvió a los tres minutos – toma tu tendrás y yo tendré el otro – le dijo dándole uno de los llaveros
 —  No tenías por qué hacerlo, pero gracias – dijo tomando uno de los llaveros con la cara sonrojada
 —  Que lindo – Yoochun le tomo uno de las mejillas y se las jalo un poco
 —  Yoochun, no soy lindo, soy un chico – dijo con la cara aún más sonrojada
 —  Entonces eres un chico lindo – Yoochun le sonrió y lo tomó de la mano – Vamos que Yunho y Jaejoong están en la caja, y tenemos tiempo para llegar al cine a la hora – cuando se acercaron vieron que Yunho sacaba llevaba una bolsa de la tienda
 —  ¿Que compraste Yunho? – le pregunto Junsu
 —  ¿Eh? Nada… solo algo para mi hermana – respondió algo nervioso
 —  Ya veo – Junsu y Yoochun notaron que Jaejoong tenía estaba algo enojado
 —  ¿Jaejoong no compraste nada? – le preguntó Yoochun
 —  No vi nada de interés, ahora vámonos que supongo que comenzara dentro de poco la función – caminó dejando a los demás atrás.
 —  ¿Qué le paso? – le preguntaron Yoochun y Junsu a Yunho
 —  Nada, ya saben cómo es él – les respondió Yunho con una media sonrisa nerviosa – vamos si? –  y los tres chicos caminaron siguiendo a Jaejoong.

3 comentarios :

  1. Kyyyaaa me lei los siete capos de corridito!!!!

    Y dejame decirte que esta genial la historia!!!

    Espero pronto actualices.

    Gracias!!^^

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  2. pues que le hizo a Jae para que se moleste pero el siempre esta enojado XD y ya todos con pareja que lindos
    Gracias

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  3. ChangMin con este niño??? No sé... no me cuadra... Minnie y ese caracter suyo sabelotodo, listillo y maduro, definitivamente necesitan a alguíen con experiencia¡¡¡ Hayami por ejemplo jajaj no entendí como de la nada le da por compensar torpesas con helado.... pero bueno.... Ay Diooos que cosas habrá comprado YUNHO??? Obvio algo coqueto y tan sugerente como que hizo enojar a Jae¡¡¡ Chunnie es tan detallista OmG¡¡¡

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