How to be a Maid for Yunho? I

Autor: DorianTolentino

Couple : YunJae

Genero : Yaoi

Categoría: Slash, Lemon Hard.

Advertencias: N+18

Extensión: Two — Shot

Estado: Proceso

Resumen:

Jaejoong necesita un trabajo decente que le rinda para pagar las deudas que tiene y el alquiler de su miserable apartamento, pero esta harto de no encontrar ni uno, a si que un día renuncia de su patético empleo y decide buscar otro, encontrándose con la sorpresa de que se requiere una MAID. Pero él no sabe que es una MAID, sin saber va a la entrevista de empleo y lo terminan aceptando y él se encuentra con la sorpresa de que vestirá de mujer vestidillos con encajes y olancitos y hasta ¡¿Ligueros?!

¡Un momento porque nadie le dijo acerca de eso!

Pero lo peor es soportar a su misterioso amo que poco a poco le empieza a atraer y pensar cosas indebidas. (Soy un asco para los resúmenes e — e)

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 — ¡Pues tome su estúpido traje ridículo! — Jaejoong boto al suelo aquella gran cabeza que llevaba soportando durante 6 horas y más aun con ese traje ridículo donde su cuerpo sudaba como si estuviese en un sauna.

— ¡No pienso pagarte nada de dinero mocoso insolente! — aquel ahjussi le restregó aquello en la cara.

— ¡Pues sabe que no hace falta, porque Renuncio! — El pelinegro piso aquella cabeza saltándole encima y giro su rostro mirando a las personas que estaban en aquel restaurant mirándolo con las caras sorprendidos, se giro con el ceño fruncido y les hablo a todos — ¡Esa comida es un asco! ¡Saben que aquí hay cucarachas, la comida de aquí es horrible! — dicho esto se fue y pudo escuchar a lo lejos como aquel ahjusshi le gritaba diciéndole, que regresara y aclarara aquello, pero no regresaría, porque Jaejoong había aguantado 3 largos meses trabajando dentro de aquella botarga, que lo hacia verse estúpido y encima actuar, bailar y ser amable con las personas no era para nada algo que le gustaba hacer — ¡Maldita Sea! — Grito mientras caminaba por la puerta de salida y metía sus cosas en su mochila — por este impulso ahora Kim Jaejoong te has quedado sin trabajo — se maldijo a si mismo — Ahora falta soportar a aquella vieja de los tubos que me saldrá con alguna reprimenda... aigo…

— Ahora a buscar nuevo trabajo — tomo su mochila y la coloco en su hombro y se dispuso a andar — tengo que tomar el bus — miro su bolsillo y enchueco la boca — ¡Mierda! — ya no tenia dinero eso era otro problema — a caminar — lo bueno era que al menos en su casa tenia un poco de dinero que lo mantuviera esta semana, “Al menos” tenia algo…

A si era la vida de Kim Jaejoong un joven de 19 años con sueños por delante, pero tenia muchos sacrificios que hacer para llegar a estos, dejo su casa para progresar no para quedar mas bajo, porque le demostraría a su padre que si podía hacer algo, al menos eso pensaba el, Jaejoong a veces tenia ganas de rendirse e irse a su casa, llegar derrotado pedir perdón a su Omma y su Appa y volver a vivir con ellos, aunque no tenia la mejor vida, pero no le faltaba comida y un techo donde dormir, no que de ahora en adelante los días eran preguntándose cosas como: ¿Qué comería? ¿Cuando pagaba de renta? ¿Cuánto dinero le quedaba en los bolsillos?, hacer presupuestos, buscar ofertas, cosas por el estilo, la vida era difícil sin duda alguna.

Supuso que llegaría a su departamento sencillo a pie, lo bueno de esto es que no estaba tan lejos, eso era lo único bueno de eso — Tengo hambre — pero como decíamos el no llevaba ni un centavo en el bolsillo — Pues comerás en tu casa, algo como ramen instantáneo — ya resignado se dijo a si mismo, Jaejoong camino mucho hasta que llego a su edificio hostil, no era nada lindo, de hecho el departamento estaba en las peores condiciones, entro y la puerta casi podía ser derrumbada con una patada ligera sin usar tu fuerza de mas, y que decir del techo que goteaba, pero para la buena fortuna de Jaejoong no había tenido muchas lluvias, y cuando llovía, pues que decir, Jaejoong nos diría que llovía mas dentro de su departamento que fuera de este, porque su casa chorreaba de agua, en resumen era un asco, pero esto le alcanzaba solamente para pagar, solo eso, no tenia mas.

Jaejoong suspiro frustrado cuando ingreso al edificio, tenia que subir las escaleras y oraba mentalmente pidiéndole al cielo, que no le pusiera en su camino a la casera, ya que seguro lo reprendería con un nuevo sermón y exigiendo dinero y ahora no tenia nada para pagarle  — No esta que suerte — después de mirar ambos lados, empezó a correr como nunca pero la suerte no estaba de su lado, porque terminado chocando justamente con ella.

— Yah mocoso fíjate por donde vas — ella sin darse cuenta con quien choco, levanto la vista y enseguida junto las cejas con desdén de molestia, jalo aire y comenzó a hablar — ¡A si que eras tu! ¿Cuando piensas pagarme la renta? Mira Kim si sigues a si mañana quiero tus cosas fuera de aquí o si no yo misma te las saco — no le dio ni oportunidad a Jae que respondiera porque se había marchado, dejándolo sumiso y pensando que diablos iba a hacer.

— ¿Como conseguir 30,000 wons en un día? Aun sigo pensando que la renta por esta pocilga es realmente cara — pateo el suelo del edificio saltando en el, haciendo un berrinche prácticamente — Vamos tienes que actuar y no lamentarte.

Acelero sus pasos entro a la pocilga donde vivía que no tenia gran cosa, su departamento tenia lo esencial una cama, una parrilla eléctrica, unos cuantos platos, cucharas y vasos solo para el que eran tal vez 2, sus accesorios, ropa y zapatos nada del otro mundo, no tenia muebles solo una cama el cuarto estaba casi vacío, había una gran ventana donde precisamente fue Jaejoong a mirarla como si esperara una respuesta de el cielo, bajo la mirada y fue directo a asearse, entro al baño se ducho salió de este con una tolla, se seco y cogió ropa cómoda, tenía que seguir en su búsqueda de un nuevo trabajo y estaba descartado sin duda el de ser una botarga no mas, porque ya había sido ridiculizado con tantas estupideces, ahora solo quería un trabajo normal, solo eso.

Dio una vuelta mirando su mediocre departamento y se coloco la chaqueta y salió en su aventura con algún trabajo.

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 — Ya fui a mirar en esa tienda y la tipa es una abusiva — era el 10cimo empleo que había visto y no es como si Jaejoong no quisiera trabajar en alguno de estos, pero las personas de ahí le daban un sueldo tan miserable que no le iban alcanzar mas que para unas cuantas comidas y sin mencionar el trato altanero que tenían — Diablos — se sentó en una banca resignado no sabia que hacer ahora, el viento soplo muy fuerte haciendo que revolotearían muchas hojas de arboles por ese parque, el polvo se levanto y antes de que cubriera su rostro con su mano, esta vez una hoja de papel se estampo en su cara — Que diablos — musito y despego aquella hoja con el entrecejo arrugado y miro el papel, ahí había una vacante un gran anuncio que decía :

~Se solicita Maid personal chica — chico~

Requisitos:

Buena apariencia

Amable

Habilidades para la cocina

Disponible las 24 horas de el día

Si están interesados favor de presentarse a la siguiente residencia:

Seul, Bonghwa calle 6 Gwajje .

Teléfono: 33 45 55 68

Sueldo: [Esto se hablara personalmente con el empleado]

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Tomo el papel y enseguida fue en busca de un teléfono público, no tenia idea que era una Maid pero decía habilidades en la cocina, seguro querían un cocinero y él estaba dispuesto a hacerlo, Jaejoong sonreía al menos había conseguido algo bueno de ese viento.

Tecleo el número y la ultima tecla dio el tipido y el teléfono fue contestado.

— ¿Residencia Jung en que puedo servirle? — una voz femenina se escucho al otro lado de la línea, Jaejoong atolondrado respondió

— E… este llamo por lo de el trabajo de Maid y quería saber si todavía esta disponible yo…

— Dígame su nombre y su edad — el abrió los ojos esperanzado tenia una oportunidad.

— Kim Jaejoong 19 años – la mujer de la otra línea sonrió.

— Mañana preséntese a las 10 am en a dirección que tiene impresa la hoja mas le vale ser puntual porque si no llega a la hora indicada no será contratado, bueno que tenga buenas tardes — ni si quiera le dio una oportunidad de hablar con ella, pero le habían dicho que se presentara mañana a esa residencia a si que lo haría y por nada de el mundo faltaría, esa era su oportunidad, Jaejoong sonrió y esta vez su estomago anuncio que tenia hambre y fue a comprar algo para comer, ya pronto tendría un nuevo trabajo, esperaba que la paga fuera al menos media que le alcanzara para la renta y sus comidas, al menos...

— Bien esperemos que te den el trabajo Jaejoong — cerro los ojos y camino feliz — Un nuevo trabajo...

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Estaba puntual ya en esa dirección que se le había indicado y llego exactamente puntual con unos minutos adelantados, miraba la gran ¿Casa? ¡Eso era una mansión sin duda!, era enorme se veía la gran estructura que era esta, Jaejoong pensó que trabajaría para ricos o para algún millonario, eso no le agradaba de el todo, pero no quedaba otro, no tenia mas opciones ahora solo se disponía a que comenzara la entrevista, la puerta le fue abierta automáticamente cuando dijeron su nombre y enseguida puso pie dentro de esa residencia, camino mirando los alrededores, una mujer de cabello castaño se apareció enfrente con un traje de encajes blanco y negro, Jaejoong pensó que estaba en esos animes de pronto, pero no le tomo importancia, la mujer le indico que la siguiera y este lo hizo de ese modo.

— Por aquí, Boa-sshi te entrevistara — la mujer le dedico una mirada frívola para después marcharse, el ni si quiera entendió de el porque la mirada, pero no tenia tiempo y no le importaba saber, pocos segundos después apareció una mujer de cabello marrón y ojos oscuros que le indico que entraran a un cuarto.

— Siéntese — el hizo caso y tomo asiento — A si que Kim Jaejoong 19 años, y ¿porque quieres el trabajo? — la pregunta fue formulada rápidamente y ella quería una respuesta, que tenia que decir el, no sabia que le preguntarían ese tipo de cosas.

– Por necesidad — fue lo único que dijo cosa que era real.

— Bien entonces ¿estas disponible las 24 horas? Porque a veces de aquí no se sale todo el día, tu horario será de 8:00 am a 8:00 pm, tu tarea será sencilla, solo limpiaras, cocinaras y cosas por el estilo, igual mandados, ¡!ahh!! — de pronto la mujer se acordó de algo — Tendrás que usar un uniforme siempre tienes que llevarlo – la mujer se levanto y salió y Jaejoong se quedo boquiabierto pensando, que lo iba a dejar así, ¿sin despedirlo al menos?, él estaba apunto de irse, ya que había fracaso, pensó, pero poco después la mujer volvía a aparecer con algo en las manos — Este será tu uniforme, ve a probártelo quiero ver como te queda, sí no para hacerle unos ajustes — el asintió y tomo el uniforme que yacía en un perchero — Ahí hay un vestidor, cámbiate ahí — Jaejoong entro al cuartito que estaba ahí, y comenzó a quitarse su ropa, la cosa le resultaba ciertamente algo extraña, pero bueno, ya que estaba desnudo, quito el uniforme de el perchero y frunció el ceño, asomó su cabeza sacándola de la puerta para hablarle a la mujer.

— Disculpe….

— ¿Qué pasa? — Ella pregunto y Jaejoong junto las cejas.

— Este creo que se equivoco de uniforme, esto es para una chica — la mujer alzo una ceja y se cruzo de brazos.

— No me he equivocado le di el uniforme correcto — menciono y Jaejoong palideció — ¿E-eh? — No sabia de que hablaba esa mujer — pero yo soy un hombre — de nuevo lo miro de arriba abajo.

— Bueno lo se porque me lo acaba de decir, pero no veo el problema.

— ¿D…de que habla? — Estaba sin entender nada.

— Usted ha venido por el empleo de Maid, y una Maid es esto, tiene que vestir con estos uniformes – Jaejoong quedo sin palabra alguna.

— ¿Qué? Ósea que tengo que vestir eso!? — señalo incrédulo el uniforme la mujer no dijo nada y lo miraba cada vez mas de mala gana.

— Si no quiere hacerlo no tome el trabajo, no veo porque el miedo a vestirse de mujer si parece una, nadie lo notara, y la paga es muy buena — entonces recordó, porque estaba ahí y era verdad necesitaba el dinero. — Yo nunca insisto a alguien por un empleo, pero es mejor contratarlo a usted, que a las demás mujeres que han venido solo para coquetearle a mi amo — esas palabras las dijo bajito — tu eres un chico y para mi no hay problema con eso — Jaejoong no entendía a que se refería la mujer — ¿Entonces lo toma o lo deja? ¿Esta necesitado no? — tartamudeo pensó que decir.

— ¿Cuanto es la paga? — y lo único que pudo preguntar fue por el dinero.

— Cada hora que trabaje aquí será de 20,000 wons — la mandíbula de Jaejoong casi iba al suelo, eso era mucho, fácil salía de ese departamentucho en una semana.

— Acepto — no lo pensó mas, que importaba vestirse de mujer, después de todo su tarea seria sencilla, limpiar, cocinar y hacer unas mandadillos extras, nada mas...

¿Que podría pasar, lo raro era vestirse de mujer, pero vamos que podía salir mal?

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La estancia en la residencia Jung para Jaejoong era agradable bueno del todo, solamente descartaría que viste de mujer y su cabello a crecido muy rápido, pensaba cortárselo, pero Boa le dijo que lo hiciera, porque era parte de el trabajo, se siente raro usar calzoncillos de encajes color rosa, o con fresas, nunca en su vida había observado ropa interior tan tierna, era algo infantil para su gusto, pero era su trabajo, su tarea era realmente fácil, y le gustaba, ya había salido de ese departamento horrible donde había estado, ahora estaba en uno mejor, que tenia agua caliente y tenia clima, el ya no sufría mas por el agua fría, y menos por la lluvia.

Y bueno el lugar era hermoso, era grande, elegante, precioso, como esas casas que salen en las películas, y ese sueldo lo amaba, cuando recibía su pago, Jaejoong amaba el olor de el dinero fresco, odiaba vestirse de mujer con toda su alma, pero vamos eso le daba el dinero, a si que aguantaría otra ridiculez mas.

También Jaejoong tenia una grande curiosidad, pues escuchaba por las demás sirvientas que trabajaban ahí, que el Lord que no tenia idea de quien era, era un hombre realmente Guapo, encantador, hermoso, perfecto, elegante, varonil y muchas mas cosas que aquellas mujeres cuchicheaban mientras trabajan, todas suspiraban por ese hombre que desconocía el, no sabia nada acerca de ese tal Lord que ni el nombre sabia.

Ese hombre misterioso le daba algo de curiosidad, pero no tenia demasía hora, lo importante era conservar su empleo.

— Jaejoong te toca limpiar el 2do piso — la mujer de cabello chocolate le ordeno y el obedeció sin cuestionar — solo has tus cosas y no andes husmeando donde no debes, eso depende de que tu estancia aquí continúe — no sabia de él porque el misterio, pero algo le daba de igual intriga, ¿que era lo que escondía ahí? No tenia idea alguna.

— Entendido — simplemente menciono y fue a hacer su labor, subió los escalones de aquel material de cuarzo de cristal y comenzó. A limpiar esos escalones, sus manos tallaron los pisos con sumo cuidado, repito el proceso en los 30 escalones mas que habían — si son tan ricos deberían poner un elevador — se quejo mientras limpiaba su frente — aigoo...

Y aun no había terminado, ahora estaba en los pasillos tenia que limpiar los pisos de estos, cogió el trapeador que era especial para ese piso, había escuchado una voz que lo llevaba a una curiosidad mas haya de lo que el quería, sin que se diese cuenta, sus pies se deslizaron solos por aquel fino piso y comenzó a tratar de llegar a aquella voz, quería encontrarla, su búsqueda no duro mucho, porque estaba detrás de una puerta que estaba entreabierta, solo alcanzo a mirar una gran figura de espaldas que era obviamente le pertenecía a una figura masculina, la espalda era ancha y la fragancia de esta, mas su aroma, eran embriagantes para los sentidos de Jaejoong, que quería mirar el rostro de esa persona, pero justo cuando pensaba mirar otro poquito aunque sea al menos poquito, aquella espalda estaba a punto de girarse, y el sin entender había salido corriendo de ahí, prácticamente huyo, porque había recordado las palabras de Boa-sshi mencionándole, ¿que esa tarea definiría su estancia en ese trabajo, y donde iba a encontrar otro trabajo también pagado como este? En ni un lugar.

Aunque todavía no le agradaba para nada estar vestido de mujer, pero era parte de ese retorcido empleo, pero estaba agradecido que al menos su falda le llegaba por debajo de las rodillas, porque las demás sirvientas se les veía más de lo que no debía verse, y la imaginación quedaba corta. Agradecía interiormente esto, después de ese susto e incertidumbre que sentía, camino hasta la cocina, le tocaba preparar la comida, ya que esa tarea ahora era asignada para el.

– Este es el menú de hoy — una mujer de edad mayor le entrego un folder con una hoja dentro de esta — Ahí esta el procedimiento de cada una y también — saco un sobre y lo coloco en la mesa — este es el dinero con el que compraras los ingredientes, recuerda que — mirando su reloj — en 3 horas Lord tendrá su comida y debes ser puntual — Jaejoong miro a la mujer y asintió.

 – Si ya voy solo me iré a cambiar y...

— ¡Ve ahora, no puedes cambiarte, no te dará tiempo! — aquella mujer le había ordenado y su cabeza aun estaba shockeado

— ¡Que! — él no podía ir a la calle vestido de esa manera, suficiente era tener que pasearse en olancitos y encajes por esa mansión y ahora a las ¿calles? ¿Estaban locas esas mujeres? – No me tardare nada, seré breve.

— He dicho que no, mientras trabajes aquí y estés en tu horario de trabajo, ese uniforme no se mueve de tu cuerpo — el frunció el ceño e inflo las mejillas, dio media vuelta y siguió su camino

— Maldita Bruja — dijo bajito, mientras se colocaba los zapatos de ese uniforme y se marchaba por las compras — ¡La odio!

De esa manera fue a hacer las compras en busca de aquellos ingredientes raros y al parecer tendría que cocinar comida ¿Hindú?, Jaejoong solo sabia que la comida Hindú era muy fuerte en sabores y que el curri era lo característico de esta, pero el nunca había cocinado comida hindú, ¿Como pretendían que cocinara esta? Cuando toda la vida había cocinado comida coreana, y bueno sabia que su comida era rica, pero tampoco se daba el lujo de alardear de mas, solo era consiente que gustaban de su comida, pero ahora le pedían que cocinara especialmente para el Lord de la mansión, comida Hindú cuando no tenia la mas mínima idea de cómo hacerlo, se percato de esto ya que estaba en el taxi de regreso para cocinar, respiro profundamente después que pago el taxi y bajo con las bolsas en las manos, Jaejoong tuvo que soportar las miradas de viejos pervertidos hacia su persona con ese uniforme de Maid. Observo su reloj y se dio cuenta que tenia 2 escasas horas y media para preparar aquella comida que en su vida había hecho, seria la primera vez para Jaejoong, pero lo bueno a eso es que sabia que el pollo era un gran elemento en el curry a si que lo mezclaría simplemente, tendría que improvisar algo, eso debía hacer, pero el nerviosismo albergaba en el, ya que de esa comida dependía su vida, ¿Qué tal y era corrido por esto?, Jaejoong no quería ser echado de la mansión, era un trabajo muy bien pagado por algo tan simple . Si así toda su vida se vestiría de mujer por permanecer ahí, su dignidad y orgullo ¡Hombreal! Se iría al caño con tal de soportar y permanecer en este. Entro a la mansión y fue directo hacia la cocina, vaciando las bolsas que había comprado, saco los alimentos de estas, y empezó a mirar un libro que compro donde había recetas de comida Hindú, las releyó por unos minutos mas, y seria su primera vez preparando ese tipo de comida, Jaejoong se encontraba realmente nervioso, pero tenia que intentarlo, esperaba que lo que cocinara resultara comestible.

Concentrado en su preparación, comenzó con la cocción de el pollo que coloco a que hirviera, junto con varias hierbas de olor, para que el sabor fuera mas fuerte, el curry lo empezó a hacer en una olla aparte, coloco algunas almendras, cacahuates, tomillos, y pimienta negra molida, y combino con el aromático clavo, todo esto lo machaco en un molcajete, la esencia de la cocina era deliciosa, solo seguía instrucciones de la revista, aunque al final termino improvisándolo el mismo, después que aquellas almendras se tostaron, vacío leche de coco y crema en esta para que se fundieran e hirvieran juntos, coloco el curry ahí para que el sabor impregnará estos, después que el pollo completo su cocción lo retiro y coloco en un coladora a que se secara, para después pasarlos en donde el caldo esperaba y termino tapando la olla junto con aquel guiso de curry con pollo y leche de coco, cogió una cuchara y probo el sabor — Oh es Bueno — sonrio satisfecho ante el sabor que tenia esta comida — El arroz — murmuro y fue a prepararlo en aquella arrocera con unos huevos hervidos — Espero le guste al tal Lord — que aun no sabia quien diablos era. Después de una hora de cocinar el ya tenia la comida lista, la mujer de mayor edad, ingreso hacia la cocina y lo miro para hablarle.

— ¿Esta listo? Debes colocar la mesa ahora mismo — dijo y salió, Jaejoong obedeció llevando la comida en una bandeja y la mesa estaba ya servida solo llevo los platos y los dejo ahí, se le hizo extraño no ver ala persona que comería, pero igual no pregunto nada, solo cumplía ordenes.

Camino de nuevo hacia la cocina, limpio las cosas que había ocupado y dejo todo limpio, su tiempo se había cumplido, era hora de retirarse, y esta era la parte favorita de Jaejoong, cuando se quitaba aquel uniforme de encajes y se colocaba su ropa, fue hasta el baño a cambiarse, después de ponerse su ropa normal, se miro al espejo – De verdad parezco una mujer — pues su cabello le llegaba por mas debajo de los hombros y su cara era realmente femenina — Diablos — se quejo frunciendo el ceño y mirando su rostro — Y lo peor es que no puedo cortarlo, esa bruja no me deja — tenia prohibido cortárselo y ahora tenia que llevarlo a si, disgustado tomo una liga y amarro su cabello en una cola, se coloco una gorra cubriéndose el cabello — Ahora si parezco un chico — esta vez hizo una pequeña sonrisa que fue dirigida al espejo y giro para retirarse, en los pasillos se encontró a las demás personas que trabajaban ahí, se despidió de el jardinero – Hasta luego Junsu que tengas un buen dia — el muchacho de cabellos cobrizos salió de su escondite sonriendo, y con las tijeras podadoras en las manos, despidió a Jaejoong

— Igualmente Jaejoong — fue un gritillo chillon que salió esa boca

— Bien ahora a casa.

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 — Me puede decir ¿quien cocino esto? — El lord miraba su platillo con la cuchara en la mano

— Fue la nueva Maid le asigne esa tarea, ¿Pero que pasa? ¿Sabe mal? — Ella camino hasta donde estaba postrado su amo

— Quédate ahí, no es necesario, solo dime el nombre de quien cocino esto — miro el guiso sin ninguna emoción

— Jaejoong...

— ¿Solo Jaejoong? — la mujer no entendía a que se refería su amo, pero no iba a cuestionarlo y simplemente contesto

— Kim Jaejoong.

— Bien de ahora en adelante quiero que ese Jaejoong cocine siempre para mi — Boa alzo una ceja sorprendida, pues su Lord su amo Yunho nunca había dicho algo a si, siempre rotulaban a los chefs, porque a Yunho nadie le complacía, pero ese Jaejoong se las había ingeniado para capturar el sentido del gusto de su Amo

— Pero Amo-sshi, él es nuevo y…

— No me hagas repetir las cosas — su mirada fue severa, y la empleada bajo la cabeza

— Como usted ordene.

Ella asintió y se retiro de el salón donde su Amo comía sus alimentos, desde lejos observo como Yunho sin ninguna expresión comía, pero al final sonrió y eso fue ultimadamente raro –¿Que es lo que pretende Yunho-sshi? — fue lo que pensó mientras salía de ahí, y boa no estaba nada contenta que a Jaejoong se le hubiera tomado importancia, nada contenta.

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Un mes mas había transcurrido, Jaejoong estaba incluso sorprendido que se le hubiera asignado especialmente a el la tarea de la cocina, porque Jaejoong era exclusivamente el Chef — Cocinero de el Lord el dueño de la mansión, que aun no había tenido la fortuna de mirar como era, era un misterio total para el, ya que cuando cocinaba solo servía los platillos y se retiraba, estaba aun con curiosidad, pero seguía escuchando por las empleadas de ahí, que el Lord no tenia trato con la servidumbre, solo hablaba con ellos lo mas esencial y era alguien de estándares altos; pensaba que ojala alguna vez lo viese, solo tenia curiosidad, Jaejoong en estos momentos ojeaba un libro de cocina, ya que el menú para el Lord había pasado a comida Italiana y ahora estudiaba algunas recetas, Jaejoong gracias a ese Lord le había llamado mucho mas la atención la cocina, y el interés crecía mas, y que decir de la repostería, sin duda era uno de sus favoritos. – Este es el nuevo menú – Boa le entrego el folder con las recetas como de costumbre — ya sabes que hacer.

La mujer le dijo y salió de la cocina, Jaejoong no contesto, últimamente esa mujer lo miraba realmente mal, y el no sabia el porqué, puesto que no le había hecho absolutamente nada — Fetuccine con Pesto — era una suerte, pues ya había leído la receta y lo había practicado en su casa — Bueno comencemos — Jaejoong disfrutaba cocinar era algo que lo despejaba de todo y relajaba, comenzó a cantar mientras preparaba la pasta y la salsa — Espero le guste — sonrió lindamente. De pronto sintió una mirada pesada en su espalda y rápidamente voltio, pero su sorpresa era que no había nadie — Que raro.

— Tráeme al cocinero – el Lord ordeno a la servidumbre la mujer que estaba parada a su lado para que fuera a traer a Jaejoong

— Enseguida Lord-sshi — ella se desplazo adentrándose a la cocina, donde Jaejoong permanecía jugando sus manos y uniéndolas a sus dedos, con algo de sudor — Jaejoong quiere verte — simplemente dijo esto para salir de el lugar, Jaejoong rápidamente arreglo su uniforme Maid, no sabia que le diría el Lord, pero suponía que al menos algo bueno, o tal vez lo iba a ¿despedir?, él no quería eso desde luego, daría su mejor esfuerzo por ello, porque Jaejoong sabia que lo había dado esos meses, rindiendo frutos y dar lo mejor de si mismo, temeroso y con nerviosismo llego hasta el gran comedor, donde una larga mesa de 3 metros estaba situada en aquel comedor gigante, aunque Jaejoong creía que era muy exagerado, puesto que solo comía el ahí, avanzo un poco y solo vio una espalda frente sus ojos

— ¿Puedes decirme que es esto? — aquella voz que era grave, ronca y tenia un toque sensual le pregunto, solo con la voz te hacia imaginar a alguien muy atractivo, ¿ese era el gran Lord? Pues solo su voz te intimidaba, el pelinegro se tenso, no sabia que responder, que diría, por lo visto una descripción de su comida

— Lo que ordeno señor — simplemente musito

— ¿Y que ordene? — Era claro que quería una explicación a eso

— Bueno pues — él lo pensó un momento ante como iba a responder — Fetuccine en salsa de pesto — escucho claramente como los cubiertos eran movidos y una servilleta fue estampada en el piso, ¿Se había molestado? ¿El Lord, él lo había hecho enojarse?, no podía ser verdad cierto? el solo contesto la pregunta, pero no quería esa respuesta? ¿Era obvio?, Jaejoong tembló, cuando la silla fue removida de su lugar y aquel hombro solo giro su rostro con el entrecejo arrugado

— Cuando pregunto algo quiero una respuesta coherente, no algo absurdo — el hombre esta vez jalo su silla para salir de ahí y ponerse de pie, Jaejoong lo observo era muy alto, le llevaba 10 cm de diferencia o tal vez mas — Espero haya entendido eso — la forma en que le hablo fue arrogante, puesto que lo miro de reojo y con un aire de superioridad, él se molesto por tal acción, ¿Qué acaso se creía demasiado solo porque tenia rico?, el destetaba a ese tipo de personas creídas

— Yo solo respondí lo que me pregunto, ¿acaso no era obvio? — pero Jaejoong no se dejaría, aunque fuera corrido, es que su orgullo estaba en juego y no dejaría que lo pisotearan, ¡No señor!, porque suficiente era estar vestido de mujer, ¿y encima esto?

Era claro que ¡NO! Un Stop en grande.

— ¿Qué has dicho? — el hombre mas alto se acercó a él, y Jaejoong por fin, había visto el rostro misterioso, aquel rostro del que tanto hablaban las mujeres de el servicio, y aquellas mujeres se quedaban cortas al hablar de la atracción que hacia sentir ese hombre, es que ¡Joder! Estaba buenísimo.

 — Yo...yo solo — tartamudeaba al hablar esa persona si intimidaba a su persona, era prepotente e imponente el hombre a su vista

— Solo te diré una cosa –Yunho coloco sus ojos sobre los de Jaejoong que estaban asustados y sin color, sin vida — Cocinas delicioso — dicho esto Yunho se salió de el lugar dejando a un Jaejoong desconcertado y no entendía nada — ¡Ah! Y desde ahora vestirás otros uniformes — menciono mientras subía las escaleras elegantemente y el no entendió nada.

¿No lo había amenazado? Solo lo dejo descolocado con dudas en la cabeza y no entendía nada, ¡JODER!

Pero ahora si sabia que el Lord era Atractivo, elegante, hermoso, perfecto y un momento, porque pensaba el de esa manera acerca de un hombre — ¡¿Que fue eso?! — volvió a preguntar y sacar de su mente esos pensamientos nada propios para un hombre como el.

 — Bueno al menos sigo trabajando aquí — volvió a sonreír y fue de nuevo a la cocina y fue donde cayo en un momento de intensividad de pensar — ¿Uniformes nuevos? — esperaba que fuera uno decente y vistiera de chico, con esa sonrisa Jaejoong fue a casa ese día, sonriendo y muy feliz como una lombriz.

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Cuando le dijo que usaría otro uniforme jamás imagino que seria algo como eso, se veía tan mas GAY tan mas mujer, tan afeminado, parecía una chica una chica muy hermosa — No puedo salir a si — Jaejoong volvió a mirarse al espejo ese nuevo uniforme o mas bien traje de cosplay era mas corto ahora sus piernas estaban al descubierto con unas largas calcetas que cubrían sus rodillas y estas tenían moñitos en los olancitos y sus blanquecinas piernas un poco de su piel estaba al descubierto — ¡Esto es tan injusto! — volvió a decir mientras se veía, aquel uniforme con ese estampado de fresas, el collarcito en el cuello y las dos coletitas que se había hecho por petición de aquella mujer era demasiado, y que decir de la ropa interior que llevaba puesta eran unos calzoncitos de olancitos tiernos, a la vista de cualquiera, pero el simplemente los detestaba, si los odiaba desde ahora, no iban como el y nunca seria a si de tal modo.

 — Me siento tan – no podía ni si quiera continuar hablando, ahora se le había ordenado vestir ese uniforme y un montón mas que habían estado apinados en el closet que se le había asignado — mujer — cerro los ojos y volvió a mirarse al espejo

— Ven aquí Jaejoong — Boa lo llamo y le hablo — Desde ahora tu labor será limpiar la habitación de Lord Yunho, su baño, acomodar su ropa, cocinarle y estar al pendiente de lo que se le ofrezca, solo obedecerás ordenes de el – aquella mujer tenia la cara fruncida de coraje mientras decía aquello a Jaejoong

— Ahh…esta bien — Jaejoong no entendía como es que ahora seria el sirviente únicamente de ese hombre, no comprendía porque a él le habían asignado ese tarea.

 — Ahora ve a limpiar su alcoba — el pelinegro camino yendo por las herramientas de limpieza e ir a la habitación donde aquel hombre dormía, subió las escaleras y estaba ya por entrar..

Abrió la puerta lentamente y fue acompañada de un chirrido de esta, lentamente asomo su cabeza para verificar si podía entrar, miro que no había nadie, entonces entro, pensó que la habitación de el Lord seria simple, pero no era a si, todo era pulcro, un color blanco habitaba en toda la habitación se veía tan grande, la enorme cama que estaba cubierta con colchas de diseñador de igual modo blancas, unas cuantas pinturas que para Jaejoong parecían simples garabatos, pero el no sabia de arte, supuso que el Lord era amante de este, un sillón estaba al lado de la ventana y cantidades de libros era lo que mas habitaba ese cuarto, habían muchos libreros y todos llenos de libro, Jaejoong calculo mas de 2,000 libros ahí, y se pregunto.

 — ¿Habrá leído todos estos libros? — no pudo retener su, pregunta porque fue hablada en voz alta y unos pasos detrás de él se escucharon.

— Si – ese era el Lord que acababa de salir de la ducha con una toalla en su cintura y otra en su cabeza secando su cabello

— Oh yo lo siento, no vi a nadie y entre, ahora vuelvo, yo me retiro — Jaejoong estaba por marcharse pero la voz de Yunho lo detuvo

— Esta bien, sécame el cabello de igual modo estas aquí para obedecerme — dio media vuelta y con nerviosismo se acercó a Yunho que estaba sentado de espaldas en la cama — ¿Qué esperas? — el tono irritado en la voz de Yunho lo saco de su trance

— Oh yo… ¿le s…seco el cabello? — el aun no entendía esa clase de orden, Jaejoong nunca le había hecho eso a nadie y mas a un hombre tan importante como el, no sabia como actuar

— Si te dije que me seques el cabello es porque a si es, hazlo y punto — no dijo mas y tomo la toalla, pero Yunho le indico aquel artefacto — Usa el secador — señalando — esta ahí en el baño — Jaejoong fue por la secadora hasta el baño y regreso de vuelta con ella en las manos, la encendió y ahora comenzaba con su trabajo — ¡Esta muy caliente la temperatura! — Yunho giro su rostro mirándolo a los ojos — ¿que nunca has tocado una secadora? — Pregunto incrédulo

— Yo no… uso eso, me seco a lo natural — se sentía apenado por fallarle a su amo

— Esta bien, te diré como usarla — Yunho aun con las cejas juntas y esa mala cara, fastidiado tomo el secador — Mira este botón rojo indica lo caliente y el azul lo frio — viendo a Jaejoong — cuando quieres la temperatura media, solo colocas los botones a la mitad, has ¡¿Entendido?! — Jaejoong sonrió con nerviosismo

— Este, podría volver a explicarme de nuevo — Yunho viro los ojos

– ¡Que estos botones sirven para regularizar la temperatura…

— ¿Cómo?

— ¡Olvídalo, sécame con la maldita toalla! — resignado Yunho se sentó en la cama dándole la espalda

— Lo siento yo...

— Esta bien no es nada — de algún modo Yunho no se sentía tan molesto como con los demás sirvientes, este chico era diferente, tal vez por la humildad que tenia — ¿Cuántos años tienes? — mientras Jaejoong paseaba sus manos por su cabello Yunho cerro los ojos y le pregunto

— 19…

— Eres muy joven…

— Este bueno algo a si.

La sensación de los dedos finos de Jaejoong sobre su cabello era relajante Yunho incluso se sentía cómodo, pero quería estarlo aun mas a si que miro a Jaejoong — siéntate en la cama — tocando el colchón, el pelinegro no entendía esa clase de invitación y aun no se movía — ¡Que te sientes en la cama! — irritado Yunho volvía a ordenarle

— Si...

— Ahora me acostare en tus piernas y quiero que me acaricies el cabello — Jaejoong no entendía que clase de orden, trabajo era ese, pero parecía que el tipo quería que lo mimaran y se preguntaba porque precisamente tenía que ser el – Es tan cómodo — cerrando los ojos — deberías comer más … tus piernas son muy delgadas como las de un pollo — quería golpearlo y botar su cabeza lejos de sus muslos, pero se tranquilizo

— Nadie le dijo que se acostara en mis piernas — recrimino entre dientes, a Yunho le pareció gracioso la actitud de Jaejoong

— Si eso lo se, pero es cómodo aun a si — sonriendo — pero te vendrían bien comer mas, de ahora en adelante comerás conmigo — quería saber que rayos pasaba, no entendía absolutamente nada, era un amo extraño, realmente…

La tranquilidad que estaba en ese dormitorio, las manos suaves de Jaejoong acariciando su nuca, el cerrando los ojos, el olor de ese chico para Yunho era relajante, su fragancia le encantaba, desde que había llegado a trabajar ahí, no había podido quitarle los ojos de encima, ahora lo tenia mas cerca, era muy joven realmente joven.

Jaejoong se relajo en acariciar el cabello de Yunho lo miro detenidamente unos momentos, dándose cuenta que el hombre que estaba recostado en sus piernas era atractivo, demasiado realmente cualquiera podría desearlo, era perfecto, sus facciones tan marcadas tan varoniles, deseo al menos verse como el, tan hombre.

En cambio el su apariencia parecía de una chica, toda la vida le habían dicho bonito eso no le ayudaba y menos esa vestimenta de chica que le habían optado en ese trabajo, para nade le ayudaba, pero era su trabajo, y solo lo aguantaba por eso, por el dinero en pocas palabras.

La incomodidad que había al principio desapareció rápidamente, pero esa paz se esfumo en segundos por un escandaloso chillido que salieron de unos labios — ¡Yunnie Beaaaaaaaaaaaaaaaaaar! — claramente se escuchaba como la escalera era subida con pasos acelerados, el cuarto de Yunho incluso tembló, ni cuenta se dio Jaejoong cuando observo que encima de Yunho había una mujer abrazándolo (prácticamente ahorcándolo) dejándolo sin aire — ¡Yunnie Beaaaaaaaaaaaaaaaar te extrañe taaaaaaaaaaantoooooooo! — Esa chica era muy exaltadora y gritona demasiado para su gusto.

— ¡Hey bájate de mi! — Yunho trataba de decirle pero se escuchaba entre gruñidos, a Jaejoong comenzaba a molestarle que aquella mujer estuviera encima de Yunho y no eran celos, si no porque Yunho estaba encima de él y aguantaba el peso de ambos — ¡Ji Hye puedes quitarte de encima me aplastas! — Empujándola

— ¡Yah! Yunnie vengo a ver a mi hermoso hermano y a si me recibes ¡Maldito amargado! — Sacándole la lengua — ¿Y tu eres? — Ella pregunta mientras veía de pies a cabeza a Jaejoong — ¡Eres novia de mi hermano! ¿O su nueva aventura? — Sonriendo — ¡Yunho! Es muy bonita...

 — ¡Lárgate y vete por donde viniste! — tan imprevista como siempre

— Claro que no me iré, acabo de llegar Yunnie Bear — el ceño fruncido nunca desapareció de la frente de Yunho, Jaejoong se sentía incomodo ahí a si que estaba por irse

— Yo me retiro Yunho — sshi, si necesita algo mas llámeme — Yunho lo miro juntando las cejas

— Tu no vas a ni un lado te quedas aquí conmigo — la posesividad en su tono era demasiada

— Pero tengo que prepararle la cena y..

— Saldremos a comer — dijo de pronto, Ji Hye sonrio sarcásticamente

— ¿Entonces supongo viene con nosotros? — Ella pregunto a su hermano

— ¿Y quien dice que tu vienes con nosotros?

— ¡Oh por favor! ¡No seas tan aburrido, entre mas vayan es mejor! Y mira lo que he traído para tu colección — enseñándole una enorme bolsa — Sabes me costó mucho trabajo encontrarlo pero al final termino en mis manos y pensé en ti, enseguida — Jaejoong miraba a la chica que no dejaba de sonreír, hasta ahora entendía que era hermana de Yunho, pero eran tan opuestos, el tal Yunho siempre tenia la cejas fruncidas y ella sonreía — Es el nuevo señor Oing Oing — mostrando un cerdo de peluche — Y es para ti solito Yunnie...

— Te lo regalo Jaejoong — dándole el cerdo a Jaejoong

— ¡Yah! ¡Lo compre para ti! — Ella le arrebato el cerdo a Jaejoong — Dame eso..

— No se lo quites se lo acabo de regalar yo.

— ¡Pero yo te lo regale a ti!

— ¡Pero yo se lo acabe de regalar a el!

— ¡Pero fue comprado especialmente para tu colección!

— ¡Que no lo quiero!

— ¡Pero porque!

— ¡Porque tengo demasiados!, ¡¿Para que querer mas cuando tengo muchos?!...

— ¡”Eso es porque es una colección que parte de colección no entiendes”!, ¿Crees que es fácil encontrar al señor Oing Oing disponible en las tiendas?

— Eso no me interesa te he dicho que no lo quiero, y deja de molestarmeeeeeeeeeee

— Yo me retiro...

— ¡Tu no te vas a ni un lado!

— Este...

— ¿Por qué estas al pendiente de el? — Mirando a Jaejoong — ¡Dime quien es!

— ¡Que te importa!

— ¡Eres mi hermano tus aventuras me importan!

— ¡Que no es una aventura!

— ¿Entonces es algo serio?

— ¡Callateeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee!!

— ¡No me grites!

— Oh por Dios — Jaejoong masajeo su frente y se sentó en el sillón observando la pelea de ese par que no paraba

— Esta bien tu ganas — tomando el peluche — Jaejoong tira esto a la basura — entregándole el cerdo

— ¡QUE! — Yendo por el cochinito — ¡YAH!

— Esta bien, ponlo en esa puerta — señalando la puerta

— Esta bien — dijo Jaejoong caminado hacia aquella puerta, la abrió despacio y lo que miro lo dejo sorprendido — ¿Qué es esto?

— ¿Verdad que es hermoso y tan Kawaii? — la chica entro con el al cuarto — este cuarto es la colección de el señor Oing Oing de Yunho.

— ¡Que no es mía! ¡Tú prácticamente hiciste esto! …

— Vamos te gusta

— ¡Claro que no! Nunca me ha gustado, lo hiciste en contra de mi voluntad!

— ¡Pero aun lo conservas!

— Si no lo hacia estarías mas pegada a mi — sentándose — Bótalo por ahí Jaejoong.

— Yo lo acomodo — dijo Ji Hye arrebatándole de las manos al peluche

— Bueno

— ¡Ji Hye que haces aquí! – cada visita de su hermana terminaba por reventarle los ojos a Yunho

— Pues a verte a que más, he estado muy ocupada y te he extrañado tanto…

— Si no sabes cuánto lo he hecho yo — el sarcasmo era obvio

— Oh si yo sabia que me extrañas Yunnie y ¿tu eres Jaejoong verdad? — el pelinegro acepto — pero ese nombre es de hombre, ¿Qué eres? — Jaejoong no sabia que responder opto por decir hombre pero esa vestimenta no le ayudaba y cuando iba a responder se encontró con la sorpresa de Ji Hye estaba mirando debajo de sus faldas — ¡Pero que….!?

— ¡Que mierda haces! — Yunho la empujo hasta el suelo — ¿Ahora quieres violar a mi servicio? — Ji Hye se sobo la cabeza

— YAH eso fue agresivo, solo verificaba si era macho o hembra...

— ¿Qué diablos? — esa mujer era una rareza extrema...

— No es un animal

— Es un decir — sentándose — y descubrí que eres macho…

— Yo...

— ¿Hombre? — Volvió a decir ella — pero eres muy bonito — sonriendo — ya se porque Yunho te quiere aquí con el — mirando a Yunho – ¿verdad hermanito?

— Cállate...

Los dos hermanos estaban sentados en los sillones frente a ellos y Jaejoong en medio de pie — Puedes sentarte Jaejoong — dijo Yunho, Jaejoong no entendía nada ni mierda, no entendía nada de esa situación, todo ocurrió tan pronto

— Hoy te quedaras conmigo — dijo Ji Hye mirándolo con el ceño fruncido — Si no le mostrare tus hermosas fotos a Jaejoong y se enterara de tu GRAN secreto — sonriendo maliciosamente

— ¡Tu de verdad! — El pelinegro tosió

— Yo me tengo que retirar Yunho — sshi mi turno ha terminado por hoy –pero Yunho bufo de nuevo

— Pues te pagare horas extras.

— Pero yo tengo que irme de verdad.

— 10,000 $ Wons más por horas extras — incluso sintió que se iba a atorar

— ¿Q-que? — eso era mucho dinero, incluso podría pagarle la risa a cualquiera — No yo no…

— ¡Que te quedes he dicho! — Ahora no le gustaba la actitud de ese patán

— ¡No me puedo quedar!

— Yunho tiene una vida déjalo en paz — mirando a Jaejoong — puedes marcharte ve con cuidado — ella miro a Yunho que este no dijo nada cruzándose de brazos y Jaejoong se retiro con una inclinación

— ¿Por qué hiciste eso? — Yunho se puso de pie mirando a su hermana

— Porque estas muy raro con ese chico — chica pareces un obsesivo.

— ¡Eso a ti que te importa!

— ¡Me importa eres mi hermano!

 — ¿No crees que estoy demasiado grande?, Se cuidarme solo...

— Bueno tienes 43 años, pero sigues siendo un inmaduro insensato, necesitas de mi siempre lo harás incondicionalmente...

— Comienzas a irritarme Ji Hye…

— ¡Anda vamos a comer! — Jalando su brazo — te llevare a ese restaurant mexicano

— Oh no tengo ganas de comer comida mexicana...

— ¡Que iremos y punto!

— Tú nunca te dejas vencer…

Resignadamente Yunho termino en aquel restuarant donde comió tacos y guacamole, y escucho cada de las cosas que Ji Hye tenia para decirle, Yunho amaba a su hermana en verdad que lo hacia, pero no lo demostraba siempre lo había fastidiado de alguna manera su madre y ella eran sus dolores de cabeza andantes, esa imagen que Yunho tenia de atractivo varonil, podría ser manchada con su vergonzoso pasado que quería ocultar debajo de las piedras, y esas dos mujeres lo sabían y el mismo estaba consciente que cuando quisieran podrían sacarlo a relucir a la luz, simplemente porque les parecía lindo verlo de esa manera como diría Ji Hye muy KAWAI.

Se preguntaran ¿el porque los cerdos? El señor Oing Oing es un peluche muy conocido en el Japón y especialmente amado por Ji Hye y toda la vida le ha obsequiado de estos a Yunho, siempre le mando a Yunho estos, pero el mayor nunca presto atención, cuando Ji Hye fue a visitarlo los encontró a todos los señores Oing Oing en el bote de basura a si que especialmente mando a hacer un cuarto especial para estos peluches(obviamente no tenia el permiso de Yunho, cosa que poco le importaba), y ahí adorno a todos, colocándolos de una manera Kawaii para que estuvieran juntos, esa era la mayor obra de arte de Ji Hye, amaba fastidiar a su hermano mayor, se enojaba tan rápido, tenia muchas debilidades, le hacia feliz verle, aunque Yunho siempre se veía irritado cada vez que la veía, pero sabia muy bien que era querida a su manera pero lo era.

 — Eso estuvo realmente picante — limpiándose con una servilleta – muy picante — bebiendo jugo — después traeremos a Jaejoong esa niño bonito — dijo para mirarlo y alzar una ceja — ¿Te gusta? — le dijo sin rodeos, Yunho bajo la mirada viendo su comida

— ¿Y que si es a si?

— Algo me decía que cuando entre a tu cuarto y te vi durmiendo en sus piernas no era por una simple orden — su sonrisa que salió de sus labios fue maliciosa — no te culpa es muy bonito, pero eres muy viejo para el... puedes ser incluso su Appa o peor aun su Abuelo o de esos maestros que salen en los Magas grandes que violan a niños de 13 años ¡OMOOO! — Cubriendo su boca — Violador y….

— ¡Cállate!..

— No creo que te haga caso se ve centrado...

— Que te calles — Yunho masajeo su frente — no empieces ahora...

— Vale no diré más tío...

— Yah respeta soy tu Oppa.

— ¡Solo eres Yunnie Bear!

 — ¡Mocosa de el demonio!

— Te quiero Yunnie Bear — besando su mejilla — aunque tu me odies — Yunho limpio su mejilla

— No me babees.

— Si fuera Jaejoong no te limpirias verdad

— Aja...

Era mejor ignorarla en estas situaciones, porque nunca pararían, nunca…

— Vamos a comprar mas peluches Oing oing!

— No sé que clase de mujer de 32 años tiene por hobbit comprar cosas gordas rosadas

— ¡Ji Hye!

— Supongo no tengo como escapar de aquí, tu ganas soy tuyo por el resto que queda de el día.

— ¡Yupi! Iremos al karaoke…

— ¡Oh por favor no!

De esa manera el tormento para Yunho continuo toda la tarde al lado de su grandiosa hermana, porque Ji Hye era la única persona que compartía con él cosas de su vida, y bueno aunque fuera insoportable la quería, a su modo pero la quería…

Pero en estos momentos quería llenarla de cinta adhesiva la boca y meterla en un bote de basura, que se callara la boca, porque en verdad desafinaba muy mal, aquella voz era irritable... Muy irritable, pero nadie podía salvarlo, Nadie…

>>> ♥ <<<

Después de dos meses el estar cerca de Yunho ya era algo natural para Jaejoong, prácticamente tenia que ser la sombra de Yunho, se había acostumbrado a ello, y de cierto modo le caía bien la persona que era Yunho, sabia hasta ahora que tenia un gran secreto que ocultar y era ese cuarto lleno de peluches Oing Oing (diseñado por Ji Hye) y que era un hombre que odiaba las mentiras, también sabia que era muy grande le doblaba la edad (cosa que no le importaba), acompañarlo a todos lados tampoco era muy natural pero no le incomodaba, le pagaban solo por estar a su lado .

¡Y por favor quien te paga de esa manera! Pues a nadie obviamente

— Jaejoong iras conmigo a una fiesta y serás mi pareja — mientras Yunho bebía te en la terraza y leia el periódico le decía, e pelinegro que regaba las plantas no entendió

— ¿Qué?

— ¿Qué nunca escuchas, estas sordo? — dejando el periódico en la mesa — Que serás mi pareja este viernes.

— ¿Pareja?

— ¡Si pareja!

— ¿Fiesta de que?

— Nada solo me darán un premio iré a recogerlo y listo…

— ¡Premio! ¿Pero porque no me dijo antes?  ¿Premio de que? ¿Que gano?

Yunho rodo los ojos — Tu solo serás mi pareja, mi acompañante… no tengo ganas de explicar la razón, solo asistirás conmigo

— Pero no tengo idea que llevar a esa fiesta yo no se...

— Iremos de compras — poniéndose de pie — ahora mismo — viéndolo — que esperas sígueme...

— Pero me faltan hacer mis demás tareas – Yunho giro y hablo

— Eso déjalo y punto yo te mando y tu obedéceme a mi!

 — Esta bien...

Era raro pero comenzaba a agradarle ser la pareja de Yunho, era divertido, inesperado, imprevisto y enojón, Yunho era agradable para Jaejoong, y para Yunho Jaejoong le hacia sus días alegres llenos de luz y esperanza.

Jaejoong iba detrás de Yunho saliendo junto con el, Boa miro a ambos y bufo en su interior, últimamente su amo se la pasaba pegado a ese niñato eso la hacia intensamente enojarse, porque ella no soportaba la idea de que alguien mas estuviera pegado a él, todos esos años ella había servido a Yunho y nunca tuvo la oportunidad en todo ese tiempo ser tan cercana a Yunho como lo había logrado Jaejoong en unos simples meses, la hacia rabiar — Maldita ramera — dijo pensando en voz alta pero nadie la había escuchado — Maldita sea — azoto la puerta y fue a hacer sus tareas correspondientes, nada podía hacer.

Miro una vez más por donde se habían ido aquel par y frunció las cejas alzando los brazos para marcharse e ignorar lo que había pasado.

>>> ♥ <<<

 — Este, este, este — mirando la camisa — esta también –caminado hacia la demás ropa — ¡También quiero esto! Y ¡ESO! — señalando un vestido — esto igual...

— P…pero Yunho — sshi eso es demasiado yo no puedo aceptarlo — negando con las manos

— Tu lo agarras y punto yo pago tu no — Yunho siguió avanzando ignorando completamente a Jaejoong, que en esos instantes estaban haciendo las compras para la fiesta ya que no sabia que vestuario llevaría Jaejoong

— ¿Vestiré de mujer? — cuando miro todos esos vestidos y accesorios de mujer se había dado cuenta de ello

— Si… — mirando a Jaejoong — no cambia nada si vas vestido de hombre o mujer… Jaejoong — el pelinegro inflo las mejillas mirando fulminadamente a Yunho

— Yo soy un hombre no una mujer — colocando las manos en la cadera

— Si sobre todo con esa pose varonil — el moreno se burlo de la posición Jaejoong y el junto las cejas

— ¡Yah! Yo no quiero vestirme como una mujer, ¡estoy harto! — Dijo mientras cogía los vestidos y ponía en su lugar, pero las grandes manos de Yunho lo detuvieron

— ¡Dije que iras vestido a si y punto! — Arrebatándole la ropa — ¡Y ahora ve a probarte esto! — Dándoselas — ¡Ve ahora!

Jaejoong viro los ojos estaba enojado, pero ese jefe que tenia siempre lo ordenaba cada cosa, que su poca hombría “la poca que quedaba” se esfumara en instantes, ¿Era necesario vestirse de esa forma para esa dichosa fiesta?..

Además no sabia que diablos haría Yunho en esa celebración – ¿Lo premiarían? — ¿Pero de que? él no sabia, aun con demasiadas dudas fue hasta los vestidores, miro aquel vestido color rojo que tenia una pequeña abertura por las piernas y era escotado por la espalda — Esto es para una puta — dijo mirando aquel vestido — ¡Yo vestiré de esa forma! — Saco la cabeza asomándose para ver a Yunho y hablarle — Yunho — sshi…

El moreno alto lo miro interrogantemente — ¿Qué pasa quieres que te vista? — una sonrisilla maldosa se dibujo en su rostro y el pelinegro cerro la puerta enseguida

— Que le pasa a este sujeto de pronto — sus mejillas estaban teñidas de color rosa carmín intenso, aquello le había llegado, y de rara forma su cuerpo se había calentando — Aigo…

Se desvistió ya sin remedio alguno y miro el vestido – Bien todo consta de sacrificios Jaejoong nada es fácil ni color rosa — no le quedo de otra, deslizo el vestido sobre su cuerpo y miro como su cuerpo se delineaba a aquel vestido y en verdad parecía una chica en verdad lo parecía — ¡Parezco una chica! — Dijo mirando su silueta — Diablos… con razón me quiere vestir así – y su cabello largo no le ayudaba mucho para reclamar su masculinidad — Mierda…

 — ¡Jaejoong quieres apresurarte sal quiero ver como te queda! — La desesperación de Yunho se escuchaba en su tono fastidiado en que hablaba

— ¡Yah! No saldré a si — dijo gritando, sin que lo sintiera Yunho abrió la puerta la cerro tras el y quedo en ese vestidor encerrado con Jaejoong

— Bueno supongo que solo te veré yo — esa sonrisa que hacia ladina en el rostro tenía malos principios para Jaejoong, sentía algo

— Yunho — sshi esta muy cerca — dijo colocando sus delgadas manos en el pecho del moreno que acortaba la distancia más y más

— El lugar es pequeño después de todo — mirándolo de pies a cabeza — sabes te ves muy hermoso – la voz de Yunho llego a sus oídos, el cuerpo de Jaejoong quedo perplejo, estaba tenso, nervioso de pronto comenzó a sudar en frio

— ¿Y — Yunho — sshi que hace? — Cuando Yunho se acercaba mas a su rostro y su nariz rozo solo un pequeño roce su cuello sentía que las piernas se doblarían y caería, aquel poder que tenia ese hombre sobre su cuerpo lo sobre exaltaba

— Apresúrate te espero afuera – Yunho dio un diminuto beso en su níveo cuello para girarse y mirarlo — Por cierto te ves muy sexy — el moreno paseo su lengua por sus labios y le guiño un ojo, Jaejoong llevo su mano a su pecho que estaba respirando con dificultad

— ¡¿Qué diablos fue eso?! — grito interiormente se miro al espejo y sus mejillas estaban rojizas, ese hombre.

¡Por Dios!

Como le hacia sentirse lo había excitado solo con hablarle al oído y la forma sensual, coqueta en que le hablo fue demasiado para el — ¡Como podre sobrevivir! — Soplándose la cara — Aigoooo..

>>> ♥ <<<

Todo habían comprando desde zapatos, accesorios y el vestido estaba en sus manos — En cualquier momento llega la estilista — Yunho estaba sentado y cruzando las piernas en su sillón mientras leía un libro, de repente miraba al pelinegro que permanecía sentado en su cama con ambas manos en las rodillas con el rostro teñido de un rojo intenso, Yunho no sabia que tenia ese chico que necesitaba de su presencia a diario, le gustaba mirarlo nunca se cansaba de ello, y mas encantaba molestar al pelinegro se enojaba rápidamente, era muy gracioso .

— Aja — dijo desinteresado jugando con sus dedos, una franja de sudor estaba acumulada en su frente

— Si sigues arrugando la frente de esa manera te quedaran de por vida arrugas — Jaejoong aun mas frunció el ceño

— Mira quien lo dice — Yunho en vez de enojarse dio una sonora carcajada

— ¡JaJaJa! ¡Eres demasiado gracioso! — menciono mientras cerraba el libro — Ya no te preocupes todo saldrá bien – sonrió tiernamente mirando a Jaejoong, solo unos instantes pequeños segundos Jaejoong se había perdido en la mirada de el mayor, acercándose lentamente a su rostro a punto de cometer una locura que quería hacer hace mucho, pero un ruido que se acercaba lo hizo parar en seco

— ¡Yunnie! — un chico de cabellos cobrizos fue hasta el cuello de Yunho abalanzándose a el — ¡Mira que guapísimo estas! – El chico apretaba su cuello y daba besos en este, Jaejoong arrugo aun mas la cara, con desdén de molestia, no le gustaba nada el tacto que tenia ese chico sobre Yunho — ¡No entiendo como quieres que te embellezca mas cuando es mas imposible hacerlo cariño! — Acariciándolo — Yunho sonrió mirando al estilista

— No es para mi Heechul, es para él — señalando a Jaejoong, Heechul alzo las cejas desconcertado

— ¿Y esta quien es? — Dijo mirando con molestia a Jaejoong — nunca la había visto — respondió ante la incrédula figura que lo miraba expectante y enojado

— Es Jaejoong mi Maide — Yunho orgullosamente dijo aquello, en cambio Heechul se volteo a mirarlo con una cara de querer matarlo

— ¡Que una Maide!, ¡pero porque no me dijiste que querías una, yo pude haberlo sido para ti de a gratis! — aquel chico peli naranjo quería estar con el a su lado — Yunnie tu sabes que me encantas no se porque escogiste a esta — la cara de fuchi que tenia Heechul para Jaejoong era obvia

— Ya déjate de dramas y por favor ¿arréglalo si? — los ojos marrones miraron a Heechul coquetamente, en cambio el peli naranjo se cruzo de brazos y azotaba el pie en el piso

— ¿A cambio de que? — Quería algo que le hiciera pasar ese coraje

— Lo que tú quieras...

— ¡Bien te quiero en mi cama desnudo! — fue directo muy directo Yunho sonrió y Jaejoong caminaba molesto hacia la puerta

— !Yo puedo arreglarme solo no necesito su ayuda! — Menciono cuando pensaba irse, pero Heechul lo detuvo

— ¡Mira “Cielo” no creas que me agrada embellecerte — hizo una pausa mirándolo con una cara de pocos amigos — pero conseguiré algo a cambio que he querido obtener hace mucho tiempo, a si que te sientas ahí ahora mismo — dijo señalando la silla giratoria que yacía enfrente de el tocador

— ¡No quiero! — Respondió el pelinegro

— ¡Oh pues ‘¿sabes que? ¡No me interesa! — sentándolo — y ahora quieta! — Tomando el cepillo

— Lo dejo en tus manos Chul…

Yunho menciono mientras salía de la habitación, el pelinaranjo le sonrió seductoramente y Jaejoong veía todo ese cinismo por el espejo

— ¿Te gusta cierto? — pregunto a Heechul que lo estaba peinando

— Eso es obvio, a quien no le gusta Yunho es algo obvio — respondió mientras colocaba unos pasadores en su cabello — siempre me ha encantado Yunnie, es muy sexy verdad? ¿A ti igual te gusta? — HeeChul arrugo la frente mirándolo molesto y Jaejoong negó con la cabeza

— Claro que no, ¡No me gusta! …

— Si claro y yo soy la madre teresa de Calcuta — dijo Heechul mientras tomaba una plancha y la encendía — Oh por favor…

— Piensa lo que quieras — el pelinegro estaba molesto no entendía porque se sentía de esa manera y menos con una persona que acaba de conocer apenas hace unos minutos

— No me interesa yo conseguiré lo que quiero — arreglando su fleco — Bueno eres — observando el rostro de Jaejoong — supongo bonita bonito... Whatever…

No le tomo importancia y siguió arreglando a Jaejoong — No tengo mucho que hacer contigo sobre ti, solo falta tu maquillaje — sacando los correctores — solo tengo que marcar mas tus facciones — Heechul rodo los ojos — eres bonito en verdad pero no tanto como yo — odiaba admitirlo pero era la verdad, pocas veces le tocaban personas como Jaejoong, en cambio el pelinegro esta vez quería saber algo

— ¿Sabes tu que es lo que hace Yunho?... dice que ira por un premio yo no entiendo nada…

El cepillo que estaba en las manos de Heechul termino en el piso — ¡Que no sabes en que trabaja Yunho! — Era un grito lo que salieron de los labios de la diva

— ¡Si supiera no crees que no te estaría preguntando! — irritado Jaejoong jugaba con sus puntas

— ¡No lo puedo creer! No sabes nada de el en verdad…

— ¿Seguirás burlándote de mi? O me vas a decir ¬¬

— ¡Esta bien solo me sorprende! — tomando una brocha de maquillaje — Yunho es escritor de novelas Yaoi...

— ¿Eh? — el de cabello negro se sorprendió — ¿Escritor? ¿El escribe?

— Aja… y es muy bueno es el mejor, sus historias en verdad te llegan al corazón — la cara soñadora de Heechul lo decía todo — por eso Yunho es el soltero mas codiciado de Corea del Sur y Japón, ¡Todos los hombres lo deseamos! Es el SEMENTAL ANDANTE ALFA PERFECTO!

— ¿Qué libros ha escrito? — ignorando la cara de orgasmo que había colocado Heechul, el pelinegro cuestiono

— Oh por Dios no sabes nada — maquillando los ojos de Jaejoong — yo conocí a Yunho con su primer libro y desde ahí soy fiel seguidor de él y por un accidente hermoso termine siendo su estilista — sonrió satisfecho — ha sido lo mejor que me ha pasado — decía mientras delineaba los labios de Jaejoong — Y no entiendo como diablos es que Yunho te da tantas confianzas con el — cuando delineaba los ojos de Jaejoong la punta se sumió mucho a sus parpados

— ¡Yah! Eso dolió...

— “Oops” — dijo sonriente — bueno ya paso lo siento…

— ¡YAH! Tú lo hiciste a propósito ¬¬

— Claro que si — revisando su maleta — ya casi termino…

— ¡Eso espero!

— Cállate ¬¬

Ambos quedaron en silencio, Jaejoong fue el que de nuevo hablo — ¿Qué tal escribe Yunho? — Irritado Heechul puso los ojos en blanco

— Él es muy bueno es excelente, pero debes leer sus libros — miro a Jaejoong con la cara de fastidio — no se porque hago esto, supongo me das pena — abriendo su maleta y sacando un libro, la molestia que sentía Jaejoong tenia que ocultarla ¿Pena? Ese chico de verdad... — este es su nuevo libro, y te lo estoy prestando ¡EH! — Viendo a Jaejoong — me lo tienes que dar y me escribirás un ensayo acerca de este libro y tus partes favoritas! — Entregándole el libro — ¡Y cuídalo mas que a tu miserable vida! — el pelinegro asintió y miro la tapa de el libro — “Kill my paint” –el titulo de el libro color negro mezclado con rojo era llamativo, la portada era simple pero delicada sin perder elegancia — Debes leerlo es buenísimo — Heechul sonrió — ese libro me deja y me pone todo — de pronto comenzó a abanicarse la cara — muy intenso..

— Ok…   — Jaejoong no quería saber más

— ¡Es escritura explicita eh! — le recordó

— Gracias..

Después de 30 minutos después aquella aura de color negra había desaparecido, ambos andaban hablando acerca de Yunho, en ese poco tiempo, Heechul ya le había contado casi toda la vida de el mencionado a Jaejoong, que no sabia todo lo que el peli naranjo le decía — Oh eso es magnifico ¡Que asombro soy! — Mientras se veía dijo — He terminado — dijo Heechul mientras le daba el toque final con el Spray al cabello de Jaejoong — ¡Oh!

La puerta se abrió sin tocar ni nada Yunho había entrado — ¡Ya has terminado! Comienzo a desesperarme...

— Ya esta lista, y Reconoce que soy el mejor...

— Tengo que ver primero...

— Ok... Jaejoong sal...

Con pena y cuidado Jaejoong salió detrás de la espalda de Heechul con la cabeza baja y poco a poco la subió, la mirada de Yunho sobre él era pesada e intensa, aquel hombre lo veía como si lo fuese a desnudar en cualquier momento y llevarlo en la cama, Heechul se dio cuenta de ello y le grito

— ¡YAh! Casi quieres saltar encima de el ¬¬ ¡Estoy aquí!

— Ok Gracias Heechul, ahora puedes irte, yo te recomenzare después — Yunho tomo, por los hombros a Heechul empujándolo sutilmente hacia la puerta

– ¡YAH! Mis cosas!

— Esta bien apresúrate...

Él recogió todos sus utensilios y sonrió yéndose poco tiempo después — Supongo que mi esfuerzo no durara mucho — dijo para sus adentros dejando a Yunho y Jaejoong solos

>>> ♥ <<<

Aquel lugar era elegante y todas las miradas estaban sobre ellos dos, el rostro de Jaejoong estaba tenso y rojo a morir

— Pareces un tomate — Yunho paso de nuevo la lengua por sus labios mientras lo llevaba por el hombro

— ¡Hace calor! — se quejo el menor

— Si es verdad — a Yunho le gustaba molestar al chico, se ponía nervioso fácilmente, pero nunca llegaba a mas...

— ¡Yunho — Sunbae! — varios chicos rodearon al mayor mientras veían a Jaejoong con desagrado, pero lo ignoraron solo dirigiéndose a el — ¡Su libro ha sido tan espectacular me ha encantando! ¡Usted es mi ejemplo a seguir! — aquel pelinegro le sonría con descaro, Jaejoong dedujo que era otro de esos chicos que quería revolcarse con Yunho...

¿Tan deseado era el hombre que estaba llevándolo por las manos?

— Gracias Karam — Yunho le sonrió sinceramente y el no pudo evitar el no sentir celos, desconociendo la razón

— De nada solo digo la verdad — miro a Jaejoong y enchueco la boca — Yunho — Sunbae quiero mostrarle algo — apartando la mano de Jaejoong — me lo prestas un momento — no le pregunto a Jaejoong, simplemente le afirmo, mientras se llevaba a Yunho lejos de él, el pelinegro arrugo las cejas y fue hasta las bebidas encontrándose con aquel fino Champage, y enojado comenzó a tomarlas rápidamente.

 — ¡Me hace vestirme, me hace venir como un chica, tengo que soportar a un estilista bipolar que quiere matarme y encima a este mocoso que ha venido a quitármelo ¡Y me ha dejado yéndose con el! — Estaba molesto realmente

— ¿Señorita gusta? — un mesero se acercó a él con una charola de bebidas, Jaejoong tomo 3 copas con las manos como pudo para bebérselas de un sorbo, el mesero lo miro confundido y el pelinegro lo miso

— ¡QUE! — Mirando al mesero

— ¡Nunca habia visto a una mujer tomar a si! — El mesero acelero el paso ignorándolo por completo, el pelinegro bebía todo lo que estaba en aquella mesa

— ¡Que ABURRIDA FIESTA!

Era aburrido la música también, las personas también, todas estaban pendientes de Yunho, encima de él, Jaejoong quería mandarlo al diablo y largarse de ahí, encima los tacones le empezaban a lastimar — Auch...

Se quejo, fue a sentarse hasta un sillón un lugar lejano donde no había tanta arpía de personas y miro sus pies, su tobillo estaba hinchado y una ampolla parecía que saliera de ahí — Malditos tacones…

Maldijo a esos tacones por hacerlo sentirse cansado, la música de pronto paro atrayendo la atención de todo el público, un hombre de unos 45 años aproximadamente tomo una copa y un cubierto para hacer un ligero ruido y captar la atención de todos, que lo miraron rápidamente – Buenas noches tengan todos ustedes — sonriendo — como saben esta fiesta es únicamente para nuestro gran escritor — tomando el micrófono — que ha sido el mejor por 5 años consecutivos y lleva mas de 20 años de carrera y no hay nadie como el… A si que aquí — una mujer subió al escenario con un trofeo que tenia la forma de un libro de oro — este premio te lo queremos entregar personalmente Jung Yunho, ya que “Kill my Paint” ha sido el libro mas vendido y ha impuesto records, con mas de 200,00 copias vendidas en tan solo una semana — el publico dijo un “Ooooooooooooooh” sonoro que se escucho por todo el lugar — A si que por favor bríndenle aplausos a nuestro escritor favorito ¡Jung Yunho! — varios aplausos y halagos fue lo que Yunho subió mientras subía al escenario tranquilamente simplemente, tomo el premio que se le entrego y sonrió al publico

— Gracias por esto — mirando el premio — Yo escribo por que me gusta y bueno obtener un libro por esto es mucho, Gracias a las personas que siempre han seguido mis publicaciones — mirando a todo el publico — Esto se los debo ha ustedes — alzando el premio — Gracias..

Las personas aplaudieron y muchas porras se escucharon en el lugar, Jaejoong fue ahí donde supo que Yunho era muy importante, ¿en verdad era tan bueno?, tenía que leer sus libros para saberlo.

>>> ♥ <<<

Después de despedirse de esa multitud de personas Yunho regreso hasta donde un Jaejoong aburrido permanecía sentado

— ¿Aburrido? — Yunho le pregunto sonriendo

– No solo decidí poner mala cara — lo miro fulminadamente — ¡No se porque me haces venir a esta fiesta si me vas a dejar botado e irte con otro! — no se había dado cuenta que eso se escucho como un reclamo y fue donde capto su respuesta — Yo no dije, bueno yo...

— Esta bien — Yunho lo tomo de la mano — Vámonos….

Jaejoong estaba a punto de levantarse pero su tobillo le dolía, recordó que la maldita ampolla se había desarrollado — Yo…este…

— ¿Qué te paso? — inclinados hacia Jaejoong

— Yo... me lastime con los tacones…

El pelinegro miro sus pies, Yunho preocupado tomo su tobillo — Déjame ver...

La mano calidad y suave de Yunho sobre su tobillo lo había descolocado y su cuerpo se puso nervioso, Yunho se agacho y le hablo.

 — Sube a mi espalda — Jaejoong lo miraba sin entender

— ¿Eh? ¡NO! — Negó enseguida — nos van ha ver y…

Yunho no dejo que continuara porque ya lo había trepado a su espalda — Cállate…

Antes de que el pelinegro comenzara a replicar ya estaba montando en la espalda de Yunho, era cómoda y calidad, su fragancia le llegaba hasta sus fosas nasales, cerro los ojos contento y Yunho lo llevo hasta el carro, le coloco el cinturón de seguridad — Vamos...

El moreno ladeo la cabeza, subió a su convertible y encendió el motor, el carro arranco yendo aun rumbo desconocido, después de 20 minutos conduciendo no decían nada, Yunho hizo una parada en un lugar que Jaejoong no entendió que era y bajo del auto — ahora vuelvo — 5 minutos después el moreno apareció con una bolsa en las manos — dame tu tobillo — Jaejoong lo miraba

– ¿Eh? — no le dijo nada mas y Yunho tomo su tobillo subiéndolo hasta su pierna, saco de la bolsa agua oxigenada y unos curitas de Hello Kitty

— Supongo a si no te dejara ni una marca — colocando el curita — Listo...

El pelinegro se habia enternecido ante ese acto que el mayor habia tenido con el, bajo el rostro mordiendo sus labios — G — gracias...

— Umm... ¿quieres ir a cenar algo? — Jaejoong asintió tenia hambre

— Si..

— Vale — el aumento la velocidad en busca de un restaurant.

>>> ♥ <<<

Hasta ahora sus intentos no habían logrado en el nada, porque el simplemente no caía, Jaejoong se había dado cuenta después de ese mes que transcurrió que el deseaba, soñaba, amaba a su Amo Jung Yunho.

Después de leer sus libros que eran tan explícitos una literatura erótica tan sexy, solo pensaba en Yunho y el haciendo aquello — ¿El me tocaría a si? — siempre se preguntaba con cada libro que leía de él, Jaejoong incluso le había llamado a Heechul para que le prestara mas libros o recomendara el peli naranjo había cedido, en ese tiempo se había terminado 6 libros de Yunho, su rostro siempre terminaba rojo y terminaba masturbándose pensando en Yunho.

Odiaba a Heechul en esos momentos le había hecho desear a Yunho hasta un punto que el mismo desconocía, se había masturbado pensando en él.

— Nunca debí de leer sus libros…a si yo no tendría estos pensamientos indebidos…

— ¿Cómo hago para que me mire? — no entendía a su jefe, pues Yunho parecía interesado en el unos días, y otros donde simplemente lo ignoraba y el solo limpiaba, pensaba que coqueteaba con el, pero estaba equivocado...

¡Yunho era a si con todas y todos!

Un mujeriego que solo daba alas a las personas y después te dejaba con...

 — ¡GANAS!

Unas malditas ganas que tenia Jaejoong de llevar a la cama a Yunho, que estuviera encima de él, cuantas veces no había soñado con eso, ¿cuantas? — hasta ahora unas 45 veces — porque el enfermo las contaba — ¡Que me ha hecho! — ya no era normal lo que pensaba, entraba a su trabajo y lo primero que quería observar era a Yunho en su cama dormido, o cuando salía de el baño mostrando aquellos poderosos abdominales.

Esperaba que no se casara con nadie hasta ahora, no antes de que estuviera con el, lo deseaba tantoooooooooooooo…

 — ¡Maldito hijo de... es tan Sexy!

Primero pensó que Yunho estaba detrás de él, pero no era a si, simplemente era amabilidad, solo coqueteaba con él, le gustaba molestarlo, pero a Jaejoong esa manera que le hablaba Yunho lo dejaba deseoso e intenso por él, lo quería a él, quería que se lo cogiera de una buena vez.

¡El incluso había tratado de seducirlo!

¡COSA QUE NUNCA HABIA HECHO CON NADIE!, ¡NI SI QUIERA CON UNA CHICA LO HABIA LLEVADO A CABO!

 — Las cosas que me hace sentir y hacer...

Pues había probado tantas tácticas, pero simplemente no funcionaba con nada, incluso los uniformes de Maid los había subido aun mas arriba de la rodilla, y aquellos calzoncillos de olancitos, habían sido remplazados por pequeños bóxer de encajes, pero hasta ahora nada — Creo que esto si me servirá — decía mientras miraba su nuevo uniforme, porque si bien antes le habían molestado y avergonzado esta vez serian sus armas, con esto era el medio de conquista para Jung Yunho — tiene que caer no puede negarse a mi — acomodándose los ligeros — a si me veo sexy — acomodo aquel moño que permanecía en su cuello níveo, el vestido le caía por un hombro y los ligeros venían desde las rodillas hasta sus piernas, aquella ropa interior que llevaba era de cerditos (regalo de Ji Hye), porque su hermana de Yunho había colaborado con el plan y dado algunas ideas para conquistar a Yunho, sabia que para cualquiera a la vista era irresistible, el perfume a ligeras rosas y el sabor a fresas que permanecía en su cabello y labios era adictivo al olfato de cualquiera, tomo la bandeja con el desayuno de Yunho y subía las escaleras lentamente — Tienes que caer Yunnie — sonrió para sus adentros mientras ya giraba la manija de la puerta — Yunnie..

Porque Jaejoong ahora le hablaba de modo meloso a Yunho, después de ese tiempo era muy descarado con su amo, pero eso lo desesperaba entre mas se descaraba Yunho lo ignoraba…

Y eso lo frustraba ya no sabia que hacer para captar la atención de Yunho, quería decirle que lo follara por una buena vez, pero razonaba un momento y no quería verse de esa manera como una ramera que abre las piernas a cualquiera, pero…

¡Yunho no era cualquiera!

Era el hombre más deseado y el lo deseaba con toda su alma, con locura...

 — Buenos días — abrió las cortinas sutilmente mientras bajaba la cortina blanca transparente, ya que Yunho odiaba que la luz le llegara tan fuerte a los ojos — Yunnie despierta el desayuno esta listo — el mayor se removía en la cama

— No tengo hambre…

Dijo girándose y cubriéndose con la sabana — Yunnie..

Jaejoong le toco los hombros y cuando sintió aquellos poderosos bíceps se sonrojo y re lamio los labios había recordad aquella parte que leyó de el libro de Yunho llamado “Pasion Adictiva”

>>> ♥ <<<

Él lo había tomado por los hombros, cuando sus finos dedos tocaron aquellos músculos su miembro comenzaba a gotear, solo con tener el tacto de aquel cuerpo de Zeus radiaba de placer, porque él era adictivo, se tenso cuando la respiración de el chico se acercaba a su oído, se excitaba, los pezones se le irguieron y quería que el solo lo mordiera y lo poseyera de una buena vez…

¡Que lo hiciera suyo! ¡Quería gritar para el! ¡Gemir para el! ¡Solo para el!

¡Porque su corazón y cuerpo pertenecían a el!

>>> ♥ <<<

Jaejoong cerro los ojos, Yunho seguía durmiendo el movía su mano de arriba hacia abajo acariciando los bíceps de Yunho, eran muy duros, muy fuertes le encantaban, el sentía su cuerpo hervir de deseo, quería aventarse sobre Yunho y besarlo, pero no podía hacer algo a si, pensándolo bien retiro sus manos sutilmente y se levanto de la cama mirando el rostro de Yunho donde sus labios se veían, el contemplaba solo esos labios y su lunar...

¡Oh Dios su Lunar lo volvía loco!

Quería lamerlo, hundir su lengua en ese pequeño lunar, es que ese hombre era condenadamente sexy…

¡Entre mas los años pasaban Yunho mas bueno estaba!

¡A la mierda los años, Yunho estaba como quería a el no le importaba, amaba a Yunho lo deseaba tanto!

Ese deseo no se iba de su mente y no se iría hasta que él lo hiciera suyo, pero no lograrlo lo desesperaba. Había pensado que Yunho solo jugaba con el, ese jueguito Jaejoong se la creyó.

 — Yunnie despierta el desayuno se enfría y ¡no volveré a servírtelo! — esta vez hablo molesto, Yunho se dio cuenta en el tono de el pelinegro que no venia de buenas y enseguida se levanto

– Ya voy…

Se sentó en la cama y Jaejoong fue hasta la bandeja que estaba en la mesa para llevársela a la cama — Aquí tienes — el pelinegro se giro para ir por él te, pero se le había caído unas servilletas – Diablos — masculló molesto y se agacho para levantarlas, Jaejoong había olvidado por completo que llevaba esa ligera ropa interior y esos ligeros donde su parte trasera era expuesta, pues prácticamente todo se le veía, su trasero estaba a la vista de un Yunho que casi se ahogaba con aquel pedazo de pan tostado.

¡Si se había reprimido todo este tiempo por no tirarse a Jaejoong de una buena vez!

¡Como aguantar eso! ; Él estaba viéndole la entrada pues esa ropa interior tenia prácticamente libre esa aérea dejándole ver por completo aquel lugar sagrado que se miraba de un color rosa pastel…

Yunho pensaba que esa estrechez que tendría el pelinegro seria deliciosa y adictiva, Jaejoong estaba de mal humor ahora, ya se había rendido ante todos sus intentos, quería hasta renuncia de aquel trabajo, pues sentía que podría saltarle encima a su jefe e iba a terminar siendo corrido — Bueno si necesita algo mas me llama, estaré abajo — se giro para bajar sin darle oportunidad de hablar a un Yunho que no tenia habla prácticamente, aquella sorpresa que se llevo fue mucha, tanta que se dio cuenta que ahí abajo había un GRAN problema.

 — ¿Qué le pasa? — ignorando su pene abultado se pregunto el porqué de el comportamiento distante de Jaejoong, hace unos momentos le decía Yunnie y ahora le hablo de una forma ¿Fría?, no entendía.

En fin se encogió de hombros tratando de olvidar la entrada anal que sus ojos habían visto de Jaejoong, concentrándose en su desayuno que el mismo Jaejoong le había preparado — Siempre cocina tan rico — sonriendo disfrutaba de su desayuno.

>>> ♥ <<<

Las últimas dos semanas Jaejoong había hecho de todo por controlar sus impulsos y su cuerpo, Yunho cada vez tenia mas confianza con él se había reprimido demasiado, sentía que no aguantaría mas, ya no podría aguantarse mas, ¿como iba a hacerlo?, cuando encontró a Yunho desnudo en su cuarto tumbado en la cama, ¡le había visto TODO!

Y si hablamos de todo fue incluyendo a su GRAN atributo.

Los rumores acerca de que Jung Yunho la tenia GRANDE

Jaejoong podía contestarles que se quedaban cortos, porque aquella cosa era una MUTACION BESTIAL, era GIGANTE, y eso que la había visto flácida, ya la imaginaba excitada seguro seria una bomba de orgasmos dentro de un ano dentro de el suyo eso quería, que estuviera dentro de el.

Ese día Jaejoong quiso sentarse encima de Yunho e introducir su pene en su ano y saltar sobre el, quería montarlo y que lo llenara de su semen, si fuese posible que hijos le hubiera dado, tener un hijo de Yunho sería un sueño, formar una familia con el, ¿que mas podría pedir?

Pero eso era demasiado, el debería dejar de seguir soñando..

Por eso el pelinegro había tomado una decisión, que lo hacia dudar, aunque lo amaba y deseaba con todas sus fuerzas, la única manera de que Yunho no lo odiara y lo recordara como la Maid de lindas manos que cocinaba rico era renunciar, porque no quería que lo recordara como la Maid zorra que quería follarlo y violarlo.

No quería que lo mirara de esa forma, era mejor dejar los buenos recuerdos de el en Yunho a tener todos esos malos.

A si que ese día iba especialmente a entregar su carta de renuncia, ya que esta ocasión la aprovecharía ya que Yunho se había ido de viaje, la publicidad de su libro la requería, e insistió a Jaejoong a que lo acompañara pero el pelinegro se negó excusándose que tenia a su Omma enferma y necesitaba cuidarla(mentira) ya que su Omma no vivía con el, pero era la manera de renunciar sin que Yunho le pusiera trabas y lo cuestionara y el terminara por confesarle todo lo que sentía y pensaba de el, que peor cosa que esa, era mejor irse silenciosamente . — Tengo que hacerlo, no quiero dejar un mal recuerdo de mi — tristemente estaba fuera del enorme portón negro, pulsó el timbre y la cámara ya lo conocía le abrieron las puertas y se adentró a la mansión…

…

Boa tenia en sus manos la carta de renuncia inesperada de Jaejoong, la había tomado con sorpresa el porque la repentina renuncia de el chico, cuando pensó que nunca se iría de ahí, ya se había dado la idea de acostumbrarse a este, estaba desconcertada realmente, pero no dijo nada, suponía tenia sus razones.

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By Yunho:

Una semana donde no estaba su presencia, donde su olor se había ido de mi cuerpo, donde no podía observarlo, donde simplemente todo a mi alrededor no tenia sentido, me di cuenta en esa semana que mi vida sin Jaejoong era aburrida era igual que siempre, antes de la presencia de Jaejoong claro, porque anteriormente mi vida era aburrida y rutinaria, las demás personas para mi no significan nada, pero desde que ese chico piso mi hogar mi mansión, aquel lugar para mi tuvo color, me di cuenta los primeros días que era precioso, después mis ojos se hicieron adictos a él, a su figura a su hermosa silueta, me di cuenta que me encantaba mirarlo, mas con esos vestidos que a él se le veían lindos.

Era una hermosa muñequita, por primera vez la servidumbre había hecho algo bien en escoger a Jaejoong, después de mirarlo un tiempo decidí que lo quería a mi lado, poco a poco conocí mas de él, y también me di cuenta que su sonrisa era preciosa y brillante, me descolocaba y me robaba una a mí, nadie me hacia reír como el en segundos lo conseguía, me abrí demasiado a él en poco tiempo, ahora que no estaba a mi lado me sentía incompleto.

No podía esperar por llegar a Corea y estar de nuevo a su lado que el estuviera junto a mi. Me preguntaba como es que yo había podido controlarme y no saciarme de su cuerpo, mas al mirarlo con aquellas vestimentas tan sexys y atrevidas que últimamente me estaba mostrando.

Jaejoong intentaba seducirme y lo había conseguido solo que yo no cedi, y no es porque no quisiera, si no porque quería aclarar muy bien lo que ocurría conmigo, no quiero lastimarlo, hacerle daño, pero he pensado y me he dado cuenta que solo quiero llegar y hacerlo mio.

Me encanta, me fascina, sus ojos son enormes cada momento que hace un gesto su mirada dice mas que unas palabras, pues siento que su mirada desnuda mi corazón. El hielo que había ahí él lo ha derretido, él pudo conmigo.

Y no me di cuenta en que momento sucedió, después de todo ahora no importaba solo tenerlo cerca a mi lado y verle enseguida.

Tener a Jaejoong debajo de mi lo estaba soñando día y noche, desde antes que estuviera mas cerca de mi, yo pensaba de esa manera con el, es que me encanta simplemente a si de sencillo.

Ya quería llegar ahora mismo, que el maldito vuelo se apresurara, lo necesitaba ver, quería abrazarlo y besarlo, hacerle saber que sentía, porque yo mismo se que Jaejoong siente algo por mi, tal vez puede ser deseo…

Pero con eso me basta, ya que de esos sentimientos se desarrollan los demás, mis ojos poco a poco se fueron cerrando y yo sonríe porque en mi mente estaba mirar a Jaejoong e ir por el.

>>> ♥ <<<

La limosina fue abierta para el y bajo de esta, miro su mansión de un modo sereno y se apresuró en entrar, estaba de un gran humor que hasta el simpático Jardinero Junsu recibió un saludo de parte de su amo, cosa que lo dejo extrañado y casi se cortaba un dedo cuando escucho un “Buenas tardes Junsu”, supuso que estaba de buenas aquel señor.

Yunho saludo a todo su personal sonrientemente y subió a su habitación, a esa hora Jaejoong se encontraría ahí mismo acomodando su alcoba, cambiándole las sabanas a su cama, quería verlo de una buena vez y cogerlo por la cinturilla que se cargaba para abrazarlo y hacerle algo mucho mas que un beso.

Su mente andaba vagando muy lejos de la realidad, muy lejos, estaba soñando despierto, Yunho quería verlo de una buena vez.

A si que abrió su puerta encontrando todo en un silencio perturbante, pensativo en saber en donde podría estar Jaejoong, camino por los pasillos y no lo vio ahí, pues el único que podía subir ahí era únicamente Jaejoong nada mas y bueno (Ji Hye que aunque no tuviera el permiso ella misma se lo otorgaba),bajo las escaleras en busca de la principal servidumbre

— ¡Boa! — grito y la mujer rápidamente fue a buscarlo

— ¿Qué pasa Lord — sshi? — pregunto extrañada por el tono en que le hablo

— ¿Y Jaejoong? — la obviedad ansietical en que Yunho preguntaba por aquel chico perturbaba a Boa

— No se encuentra — menciono

— ¿Pues a donde fue? ¿Se sentía mal? ¿Esta enfermo? — la preocupación albergaba su rostro, Boa desconoció al ver tanta preocupación en el rostro de su amo

— No el no esta enfermo, esta bien — dijo mientras caminaba para la ventana

— ¿Entonces, porque no esta? — Yunho estaba cabreándose por dar tantas vueltas al asunto

— ¡Dime Ya!

La mujer pensó en decir la verdad, tal vez la correría, pero ella no tuvo nada que ver en ese asunto el chico solo prácticamente pido aquello solo

— El renuncio hace 3 días — dolor fue lo que sintió Yunho cuando escuchaba aquello

— ¿Renunciar? — se cuestionaba el mentalmente, pero no había hecho nada por tratar mal a Jaejoong, siempre le dio el mejor trato a él, era la primera vez que se comportaba a si con una persona.

— ¿A dónde fue? — estaba molesto de algún modo

— Yo no lo se Lord — sshi..

 — ¿Cómo que no sabes? — La mirada de Yunho estaba llena de ira — ¡Lo dejaste ir sin mi consentimiento! — La regaño

— Lord — sshi el chico llego solo, pidiéndome renunciar que él lo había elegido que fue su decisión, yo no pude hacer nada...

 — ¿Al menos le preguntaste porque renunciaba? — la mujer negó — ¡Desaparece de mi vista Inutil! Antes de que tu seas la otra que renuncie pero esta vez por mi — le grito totalmente alterado — ¿Cómo se fue a si como a si? — Yunho frotaba sus cabellos una y otra vez.

— ¿A dónde habrá ido? ¿Dónde?...

Se cuestionaba una y otra vez en esos momentos queria encontrarlo, fue hasta la oficina donde estaba la información de todos los empleados y busco la de Jaejoong, encontró la dirección de su casa — Mas te vale tener una buena explicación Kim Jaejoong de el porque tu renuncia inesperada.

>>> ♥ <<<

Bien no era lo mejor ni la mejor paga que podía recibir, pero al menos ya no vestía de mujer y de cierta forma extrañaba esos uniformes que utilizaba

— Aigo estoy tan cansado — limpiando su frente

— ¡Jaejoong 5 ordenes de ramen de cerdo para la mesa 5! — el chef le entregaba el pedido de aquella mesa, Jaejoong tomo los platones y los coloco en la charola

— Si..

Fue hasta la mesa llevando la orden para aquellas personas que estaban sentadas — Aquí esta su comida disfruten — se retiro sonriendo y regreso de nuevo a la cocina, esperando los demás pedidos.

Su mente no dejaba de pensar en Jung Yunho…

Ya era casi dos semanas que no sabia nada de él, Jaejoong lo extrañaba, le echaba de menos — ¿Me pregunto como estará? — Sus ojos comenzaban a cristalizarse — Lo extraño tanto…  —  mordió sus labios

— ¡Jaejoong entrega de la mesa numero 15! — a si era ese trabajo de cansado el lugar siempre estaba abarrotado y lleno, agradecía interiormente que aquel lugar se llenara, de nuevo llevo la charola colocando las ordenes y llevarlas a la mesa

— Aquí tiene su….

Tuvo un desequilibrio en su cuerpo que la comida término cayéndole parte de su cuerpo, logrando que se quemara su mano y ensuciara un poco a aquella mujer que estaba armando un drama

— ¡Mira como me has ensuciado Inepto Inútil! — la mujer crujía los dientes de coraje — Eres un Idiota que no se fija por dónde camina — limpiando su vestido — ¡Vez venir a estos lugares siempre son a si, por eso no me gusta venir a este tipo de – mirando el lugar — pocilgas…

A Jaejoong de verdad le ardía la mano, comenzaba a dolerle y que decir de su abdomen el ramen le había caído ahí — ¿Qué esperas no me piensas limpiar? — la mujer lo miraba enojada

— Yo lo siento señorita yo no,… quise ..

— Eres un perdedor — aquella mujer se metía personalmente con el — ¡Yo no pagare por eso! — Señalo los platos en el suelo, aquel escándalo se escuchaba en toda la pequeña fonda y miraban el espectáculo

— ¿Qué ha pasado? — el gerente de el restaurant fue hasta donde aquella mujer armaba un escándalo

— Pasa que su personal no esta capacitado para traer unas simples órdenes sin derramar nada — Jaejoong bajo la cabeza disculpándose, la mano seguía ardiéndole más

— ¿Jaejoong tienes algo que decir? — no quería disculparse con esa mujer que lo había tratado mal, además ella no se quemo él se había llevado la peor parte

— No...

Su orgullo era demasiado no dejaría que lo humillaran — ¿Qué? — La mujer se indigno — ¿Ósea ahora me quiere decir que tiene los pantalones para no disculparse? — Incrédula miraba a Jaejoong, su gerente lo miro enarcando las cejas molesto

— ¿Jaejoong que esperas para disculparte? — El pelinegro relamió sus labios y sonrió burlonamente

— Yo no pienso disculparme con esta – mirándola de pies a cabeza — “mujer”

La mandíbula de la tipa cayo por el suelo, ella quería matar a ese mocoso — Yo lo mato… es un irrespetuoso…

— ¿Jaejoong? ¡Apúrate que esperas discúlpate!

— ¡Yo no me disculpare con ella!

— ¿Eh? no lo puedo creer.

— Jaejoong si no lo haces estas despedido.

— ¡Pues hágalo no me importa! — Quitándose el mandil — Tenga su cochino mandil — tirándolo en el suelo — Renuncio...

— YAH! Mocoso ven aquí — escucho los gritos a lo lejos de su ex – gerente y aquella mujer loca que estaba que hervía de coraje

— Idiota

Dijo en voz alta, no era justo, era una injusticia que lo trataran de esa manera, el no había hecho nada, camino un poco mas ya iba por la cuarta cuadra caminando sin rumbo alguno, incluso quería llorar, era injusto el trato que le habían dado, y ¿esperaban a que él se disculpara con esa mujer? Ni loco lo haría, como iba a hacer algo a si.

— ¡No es justo! — una lagrima cayo por sus ojos — ¡Ahora no tienes trabajo de nuevo Jaejoong! — se maldijo a si mismo — todo por no dejar que te humillaran y pisotearan — sentándose en una banca — supongo que tendré que buscar otro empleo — mordiendo sus labios — ¿Por qué a mi? — mirando el cielo.

— Porque te alejaste de mi lado — aquella voz ronca la conocía a la perfección, pero no podría ser el, estaba alucinando totalmente, Jaejoong negó con la cabeza creyendo que rea imposible que se encontrara ahí y enterró su rostro entre sus rodillas, sentía los ojos arder y su mano le ardía al igual que su abdomen, el frio descendía esa noche en Seúl y comenzaba a congelarse — Lo siento..

Fue lo que dijo sin entender bien sus palabras — ¿Jaejoong estas bien? — Yunho fue hasta su lado hincándose y tomando su rostro entre sus manos — ¿Qué te ha pasado? — en verdad era el, Yunho estaba ahí a su lado mirándolo con sus ojos preocupados, el quería llorar, sin preguntarle nada enterró su cabeza en su pecho y empezó a llorar

— Yunho…yo…. Perdóname….yo no…quería…y — yo…

Yunho acaricio su cabello suavemente como si fuera a romperse

— Dime quien te ha hecho daño yo lo mato — abrazándolo

 — Yunho te he extrañado tanto…. Au…  — no pudo el no evitar quejarse cuando Yunho tomo su mano el moreno miro sus manos

— ¿Qué te paso? — Cuestiono mientras observaba su mano

— Yo me queme…

— ¡Dios Jaejoong se te va a hinchar la mano ven vámonos! — Jaejoong no tenia ni ganas de caminar, Yunho enchueco la boca pero lo cargo como a una princesa

— Yunho…

Cuanto había extrañado aquellos desplantes inesperados de Yunho, el hombre lo llevaba entre sus fuertes brazos lo metió al auto y arranco rápidamente, Jaejoong no supo en que momento llegaron a un lugar que el desconocía, pues estaba comenzando a dormirse, pero él estaba ya en una cama acostado y escuchaba que hacían mucho ruido — Con esto debe sanar — un recipiente lleno de hielo llevo Yunho hasta donde Jaejoong yacía acostado tomo su mano delicadamente y la sumergió en el agua congelada, Jaejoong sintió frio y quería sacarla pero Yunho lo detuvo — Tranquilo pasara pronto de esta manera no se hinchara — de ese modo permaneció y no la movió, cuando Jaejoong se movió miro que su abdomen se encontraba en las mismas condiciones se paro de ahí y fue por aquella bolsa congelada que era como un parche para bajar heridas inflamatorias, Yunho maldijo al idiota que había tratado así a Jaejoong o causado esas heridas, no le gusto para nada ver al pelinegro herido.

Jaejoong estaba mas delgado, y su cara lucia demacrada, estaba seguro que el chico se mataba trabajando, el no quería eso para el, odiaba mirar como sufría, no le agradaba nada, si como Maid cuando estaba con él no le ponía hacer nada, porque simplemente él era un muñeco que debía permanecer sentado para admirarlo no para trabajar — Jaejoongie esto te bajara la hinchazón de tu abdomen — alzando el jersey — sentirás frio pero te sentirás mejor después confía en mi — tomo el gel y lo coloco en el abdomen de Jaejoong

— Au…

El pelinegro se quejo — Yunho…duele…

Los ojos marrones se llenaron de brillos acuosos, miro de nuevo el rostro de Jaejoong con ojeras, los huesos se le marcaban mas, su piel era aun mas pálida, sus labios habían perdido aquel rojo característico que tenían ahora lucían morados por el frio, el temblaba, el chico estaba realmente en las peores condiciones

— Joongie no te alejes de nuevo…

Jaejoong ya no escucho aquellas palabras. Esa noche Yunho permaneció cuidando de Jaejoong, nunca solto su mano siempre la sostuvo.

…

La mañana era distinta el amanecer fue diferente y reconfortante para ambos, Jaejoong abrió los ojos pestañeando y lo miro a su lado Yunho sostenía su mano

— Yunnie — yah..

Murmuro apenas en un ruidillo sonriente mientras veía aquel hombre que dormía en una mala postura — se lastimara la espalda — dijo mientras se levantaba con cuidado y retiraba delicadamente la mano de Yunho con la suya que permanecían unidas — así dormirás mejor — acomodo a Yunho en una mejor postura y se puso de pie, encontrado desconocido el lugar donde estaban, miro la ventana y veía un gran edificio eso era un departamento de lujo que Yunho tenia mas nunca había conocido, Yunho lo trajo un lugar donde pudieran estar solos, mordió sus labios, aquel hombre había cuidado de el la noche anterior de corazón, incluso lo consoló, Jaejoong se sentía protegido con el a su lado, el Ancio tanto ese abrazo lo necesitaba en verdad, siempre lo había necesitado, estaba agradecido con el — Gracias…

Cerró los ojos y sonrio, fue a la cocina a prepararle algo a Yunho pero no había nada en las alacenas se dio cuenta que Yunho nunca iba a ese lugar — ¿Qué hago ahora? — se cuestiono mientras buscaba la manera de hacerle algo a Yunho, pero el hombre mayor abrió los ojos y se dio cuenta que Jaejoong no estaba en la cama se alteró pensando que tal vez de nuevo se abría ido

— ¡Jaejoong! — grito queriendo oír su voz, Jaejoong camino en cuanto escucho su voz

— Yunho...aquí estoy…

— Menos mal — se sentía aliviado — pensé que te habías ido de nuevo — esta vez Yunho frunció el ceño y sus ojos se tornaron tristes

— No yo no…

— ¿Me dirás porque renunciaste? — Yunho palmeo la cama para que sentara con el — Ven aquí — Jaejoong mordió sus mejillas interiormente de nuevo ese nerviosismo que sentía cuando aquel hombre le hablaba — Jaejoong que esperas...

Camino hasta donde estaba Yunho y se sentó en la cama — Bien mas te vale tener una buena explicación del porque tu renuncia...

No sabia que decirle, de hecho no había ninguna explicación, solo era el y sus deseos de querer algo mas con Yunho – Te escucho…

¿Qué diablos le iba a decir? No tenia idea, a si que lo primero que se le ocurrió fue aquello — Estaba aburrido y harto de vestir de mujer, me estresaba demasiado — Yunho alzo las cejas sin poder creerle

— Oh por favor no es eso ambos lo sabemos… ¡Dime que es!... ¿Alguien te trato mal? yo lo despido si es así...

Jaejoong negó con la cabeza — ¡NO! No eso...

 — ¿Entonces? Jaejoong comienzo a perder la paciencia — azotandolos dedos en el mueble al lado de la cama

— Es que yo no puedo decírtelo...

— ¿Qué? ¡Ahora me dirá que es!

Yunho insistía si seguía así terminaría confesándose, ¿Qué podía decirle?, cuando el hombre se acercaba mas a el y su corazón se aceleraba como loco desenfrenado que incluso sentía que iba a salir volando y darse cuenta de sus sentimientos

— Yo…

— Jaejoong mas te vale que hables de una buena vez — irritado el tono en que Yunho le decía

— Yo no puedo decírtelo — bajo la cabeza avergonzado

— Ahora me lo dirás — Yunho exigía — necesito saber el porque Jaejoong.

Tras la insistencia de Yunho Jaejoong sabia y supo que cuando aquella acción la había hecho no podía haber vuelta atrás, porque ya lo había hecho, ahora nada podía cambiar, las cosas sucedieron y ni modo, si Yunho no lo quería volver a ver, y si lo odiaba no lo culparía, pero lo había hecho, porque lo deseo tanto tiempo.

Sus labios se habían unido a los de Jung Yunho que permanecía en shock sin moverse, dejando que Jaejoong lo besara, fue en ese momento donde comprendió que la había cagado totalmente, que cometió un error al hacer aquello, Jaejoong se alejó sus labios avergonzados de los de Yunho bajando la mirada — Yo lo siento Yunho…yo no podía…en verdad si tu no quieres verme mas lo comprenderé, yo soy un malagradecido…que se aprove…

Pero Jung lo callo enseguida con sus labios, porque aquellos suaves labios se posaron por los suyos uniéndolos intensamente, como si la vida dependiera de aquel beso, hasta el aire les falto, es que ese roce era tan suave, Jaejoong incluso sintió que iba a morir de tanta felicidad que sentía besar a Jung y que le correspondiera no tenia precio, amaba a Jung Yunho, amaba aquel beso tan fogoso e intenso.

Yunho se separo lentamente jalando el labio inferior de Jaejoong, logrando que este chocara contra los suyos y sus ojos se miraron intensamente, los ojos marrones no apartaban la vista de los suyos

— ¿Entonces quieres decir que renunciaste por esto? — eso no lo había pensando, incluso la pregunta de Yunho lo dejo sin habla, no sabia que decir, pero ahora lo había besado que mas daba

— Umm… sii…

— ¿Solo por un beso? –las cejas de Yunho se juntaron

— ¿Un beso? — Jaejoong lo cuestiono ahora

— ¡Oh por favor Vamos Jaejoong dímelo de una buena vez! No juegues conmigo que me estas cansando — que acaso ese hombre era bipolar, decía una cosa y ahora resultaba con otra

— Yo... bueno — como iba a decirle que estaba enamorado de él, no podía incluso pensar como reaccionaria su querido ex – jefe

– Jaejoong, comienzo a irritarme… ¿Qué esperas?

— ¡Esta bien me gusta mucho! — El pelinegro mordió sus labios — y lo deseo, yo no se que hacer cada vez que lo miro yo…

— ¿Qué tanto me deseas? — aquel hombre estaba sonriendo maliciosamente, Jae dedujo que pareciera como si le afectase, todo lo contrario era como si le gustase la idea de que Jaejoong gustara de el

— Este…

— ¿Mucho?, ¿Poco? — mientras el moreno decía eso iba acercándose a Jaejoong, y poco a poco lo sumía en aquel colchón que la espalda de Jaejoong toco suavemente — ¿me deseas incluso hasta soñar conmigo? — los labios de Yunho estaban sobre su cuello hablándole sensualmente, estaba el hijo de puta logrando ponerlo sumamente caliente, sus ojos incluso se entrecerraron.

Jaejoong sintió los labios calientes de Yunho sobre su cuello, el hombre poco a poco llevaba su Jersey dejándolo caer por un hombro — ¿Te has tocado pensando en mi? — su cara enrojeció instantáneamente, eso era verdad, como se había dado cuenta el hijo de su...

 — ¿No me equivoco cierto? — Yunho sonreía satisfecho y al mismo tiempo victorioso mientras sus labios se pasaban por su frágil cuello, es que ese era el punto débil de Jaejoong.

Habían sido muchas veces las que Jaejoong se había masturbado pensando en Yunho, aquella vez mientras leía y no pudo evitar el no tocarse y terminar en su mano, o cuando miro aquel porno gay pensando que él era el protagonista y que Yunho estaba encima de él, tantas veces que incluso había perdido la cuenta — ¿Te tocas aquí cuando lo haces? — la mano de Yunho fue hasta su pene que estaba despertando rápidamente

— nnngg...

Un jadeo se escapo de los labios de el pelinegro — Veo que si….

Yunho seguía en su plan de querer calentar a Jaejoong, solo haría que el chico se desesperara, y que el terminara rogando por aquello, además le encantaba mirar su rostro como se enrojecía apenado, resultaba ser toda una ternura hermosa — ¿Lo sabes no… baby? — Su lengua lamio su lóbulo — ¿Tambien quieres tocarte aquí? — sus dedos rozaron su entrada sobre la ropa

— Umm…

El pelinegro mordía sus labios para no ser un escandaloso y escucharse como una niña gritona gimiendo — Yo…

 — Shh…déjate llevar cariño…

En estos momentos Yunho haría lo que tenia que hacer con ese chico, porque le tenía ganas desde hace mucho tiempo. — Yunho...ahh… dámelo…ya..

Jaejoong comenzó a desesperarse cuando el hombre mayor estaba sobre su cuerpo acariciando su erección y su entrada sobre la ropa, quería que se la despojara y tener encima esa lengua caliente que lamia su cuello y aquellos dedos que tiraban de sus pezones lo estaba haciendo delirar, su vista comenzó a nublarse — por favor…

En cambio Yunho lo miraba sonriente, viendo la desesperación del menor debajo de su cuerpo.

¿Qué más podría ser tan sexy que esa imagen del pelinegro?

Él estaba debajo de su cuerpo, con el cuerpo hirviendo y los labios entre abiertos dejándole el pase cuando quisiera entrar en el, sus pezones erectos y lo tiernos que se vean eran rocitas, preciosos simplemente.

¿Su cuerpo?, era el cuerpo mas hermoso que había visto, era blanco sin rastro de nada, un hermoso lampiño, su cuello era exquisito pálido y largo, y su lengua se deslizaba sobre el, arrancándole gemidos ahogados al pelinegro que cubría su boca y lo abrazaba tímidamente por la espalda.

Y ahora le pedía que de favor, ¿Por qué Jaejoong pensaba que Yunho le hacia un favor con cogérselo?

Cuando el moreno lo había deseado desde el primer instante que puso un pie en su mansión, eso no era un favor, era un deseo que ambos tenían — Yunho…..co…

Yunho masajeaba su entrepierna una y otra vez, y su mano daba circulitos encima de su ropa, su lengua lo torturaba en su cuello y lo estaba haciendo gemir solo con esos roces, su ropa incluso se empezaba a humedecer y se veía la mancha que estaba entres su entrepierna — Oh… te has mojado tan pronto — la voz de el mayor era sensual y caliente, hacia que Jaejoong deseara mas

— ngg…. Yo…ya…no..

— ¿Qué quieres mi Maid? — Yunho sumió su dedo en su punta

— Que me co..

— ¿Qué te co… que? — Le encantaba mirar al chico lleno de frustración

— ¡Que me cojas Yunho!... ¡Que me la metas! … ¡YA!

Había sido muy claro como la misma agua — Que te la meta…

La idea le agradaba, ya quería sentir la calidez de su entrada anal y sumergirse en el y darle placer, haciéndole gritar

— Como tu digas baby — Jaejoong debajo de él mirando como el mayor se desvestía delante de su rostro, Jae paso su lengua por sus labios relamiéndoselos deseoso y ansioso

— ¡Apresúrate! — le insistió, arrancándole una sonrisa juguetona a Yunho

— Voy baby…. Pronto estaré ahí — señalo su entrada — Y te hare gritar… Baby — cuando vio que Yunho quedo en ropa interior trago saliva.

¡Su entrepierna era enorme!

¡Por los cielos esa cosota iba a entrar ahí en su ano!

¿Pero como?

 — No tenemos lubricante baby — dijo mientras veía como Jaejoong abría los ojos con sorpresa — ¿Qué? ¿Pensaste que la tenía chica? — el pelinegro lo observaba sin decir nada — Y eso que no es su tamaño máximo, esto no es nada — musito mientras tocaba su propio pene — Te enseñare que tanto puede crecer — se bajo los bóxer y se sentó en un sillón que estaba frente a la cama donde Jaejoong estaba acostado mirándolo — Fijate muy bien baby — Yunho tomo sus manos llevándolas a su pene y comenzó a bombearlo desde la base hasta la punta — Umm….

El hombre mayor comenzaba a hacerse una paja enfrente de su cara, Jaejoong estaba excitándose mas, cuando miraba como ese pene crecía rápidamente, Yunho tenia razón. ¡Es que ese no era su tamaño original!

Incluso podía ser más grande y se daba cuenta de la anches que tenía y que decir de la longitud era enorme, no creía que su entrada se adaptara a esa monstruosidad de pene que se cargaba Yunho.

¿Es que eso era una especie de mutación acaso?

 — Nngg…

El moreno cerraba los ojos entre abriendo los labios y gimiendo como una bestia, mirar los abdominales preciosos que tenia Yunho, lo bronceado de su piel, sus facciones tan marcadas, sus piernas.

¡Por Dios!

Sus piernas eran tan tentativas, Jaejoong quería lamerle los pies, las piernas, el mismo culo si fuese posible, todo el cuerpo.

Es que el hombre estaba bueno por todos lados.

¿Qué tenia 43 años?

¡Que le importaba la edad! El solo quería que lo cogiera de una buena vez y lo hiciera gritar como una puta niñata de 13 años, que lo empotrara contra la pared, Jaejoong quería que ese hombre fuera una bestia con el, solo pensarlo lo estaba poniendo mas excitado, sin poder evitarlo Jaejoong comenzó a imaginar que esa extensión estuviera en su ano, y llevo sus dedos sin lamerlos a su entrada caliente que estaba palpitando por recibir aquello — umm…

Gimió cuando metió dos dedos de una buena vez en su interior, Yunho miro como el pelinegro se introducía sus propios dedos y movía sus caderas de arriba abajo — Yunho…

Su nombre salió de sus labios, Yunho se sentía tan caliente mirando como el menor se autosatisfacía con sus dedos, y quería ir a quitarlos y meterle su pene de una buena vez, pero seguía bombeándose…

Queriendo alcanzar el máximo tamaño para estocarlo, la imagen de tener a Jaejoong penetrándose y mirar como humedecía sus dedos estaba haciendo que el llegara en segundos a su MAXIMUM tamaño.

 — “Keep You Head Down Baby” — Yunho le dijo cuando llego hasta el con su máxima longitud y miro su entrada quitando sus dedos de una vez

— Ah...

Jaejoong jadeo cuando sentía la punta rozando su ano — ahh... dios… mio….

Cuando el moreno comenzó a introducirse lentamente solo poquito quitando la punta y deslizándola por todo su ano, haciéndolo tener un hambre por ese pene — Yunho…ya… por… favor…!Cógeme! — Estaba desesperado por que lo hiciera suyo

— Te puedo last…

Jaejoong frunció las cejas mirando como Yunho no se apresuraba dejándolo con demasiadas ganas, por eso empujo a Yunho en la cama quedando el sobre el, vio como aquel pene tenia un perfil antojable, estaba completamente parado lo tenia derecho como un metro, así que abrió sus piernas y se coloco encima de su abdomen, apoyo sus rodillas en la cama teniendo soporte de cómo moverse, Jaejoong podía calcular unos 35 cm de aquel pene y de ancho? No le pregunten ahora no quería saberlo, porque todo eso tendría que expandirse su virginal entrada — ay…ay….

Lentamente con cuidado tomo el pene de Yunho y la punta estaba rozando su ano, miro a Yunho que tenia apretando los dientes fuertemente mirando como el pelinegro se autopenatraba — Jae…

Jaejoong poco a poco fue sentándose hundiéndose poco a poco todo ese pene en su cavidad anal — ahh..dios….ahh….

Jaejoong se quejaba sintiendo como esa brutalidad de miembro lo desgarraba, podía ver las venas que tenia el pedazo de carne de Yunho, era enorme, ancho, gordo, delicioso, y se le dolía, ¡DEMASIADO!, pero le estaba gustando ese dolor — Oh….mi….oh…

Fue bajando hasta sentir que tenia la mitad apenas en su ano — Oh…mierda…

Yunho estaba debajo de él mirando como el pelinegro estaba encimándose en el, y comenzaba a dar brinquitos pequeños — ah...ah…oh…que... Ancha…oh..

Yunho acariciaba su cintura sin poder aguantar mas que el pelinegro no se apresuraba con penetrarse su propio pene, el moreno sentía como aquel pequeño agujero no cedía ante su polla, era virgen en extremo, demasiado estrecho, le gustaba la sensación apretada que tenia esa entrada, queriéndolo botar y no cederle, pero Jaejoong seguía insistiendo empujándose mas lentamente, pero el moreno ya no aguantaba así que con una fuerza que saco en esos momentos causados por la desesperación de sentirse prisionero en esa cueva anal.

¡LO CARGO!

Y arrempujo a la cabecera de la cama y a si como estaba Jaejoong con la mitad de su pene aun sin meterse, se hundió en el.

 — ¡AHHHHHHHHHHHHHH! — Jaejoong grito sin poder controlar aquel ruido que causo — ¡AH! — le había lastimado, sintió que lloraba como una niñata le había dolido, Yunho no había aguantado mas

— Como te dije baby te hare gritar — volvió a decirle mientras mordía su cuello, dejándole una marca ahí — Y ahora gritaras para mi — sin esperar a que se acostumbrara se movió de una forma sorprendente

— Oh…

Su ano se tensaba cada vez que Yunho salía completamente de él y volvía a entrar, deteniéndose unos momentos mientras veía como su entrada cedía poco a poco a la polla de Yunho — Ah…ah…. AHHH!!!

Lo estaba volviendo loco, su espalda sentía los azotes en la pared, y también lo frio de esta, pero su cuerpo estaba caliente pidiendo mas y mas, y esa escritura explicita sexual que Yunho escribía en sus libros, se había quedado atrás con la realidad.

¡El Hijo de Puta era buenísimo en la CAMA!

Lo estaba haciendo gritar como prometió, su lado salvaje le encantaba — AHHH….

Lo hacia gritar mas y mas casi delirando.

 — Oh mierda….nggg…. estas sangrando baby…oh… — Yunho miro como su pene se llenaba de la sangre anal de el pelinegro — Sangraras mas…umm...

El mayor nunca bromeo cuando menciono esto, porque le estaba causando una hemorragia anal, sintió como su interior se desgarraba o puta madre lo estaba partiendo en dos.

Las sabanas blancas estaban salpicadas de sangre mucha, Jaejoong debería asustarse por ver toda esa sangre saliendo de su ano, pero..

¿Saben que?

¡No le importaba de una mierda!

Solo quería que lo follara mas duro que lo hiciera sangrar mas — Mas… dame… mas… ahh... así Yunho…Oh… ¡AHHH!!

Yunho jalo de sus cabellos hacia atrás mordiendo su cuello sintiendo los filosos dientes como en su níveo cuello — Ah..Oh dios... Mierd.a..

Lo estaba azotando a esa pared, el pelinegro estaba gritando escurriendo en sangre y líquidos anales que el mayor le estaba causando, Jaejoong gemía estaba gimiendo como un loco maniático y al mismo tiempo lagrimas escurrían por sus mejillas.

Sentía dolor y placer al mismo tiempo, eso era tan masoquista, pero el no quería moverse de ahí, todo lo contrario quería que Yunho le hiciera mas daño, le estaba encantando la manera en que lo penetraba — Ah… ah... ah… hay… hay… mas…mas… rápido… ¡Yunhooooooooooooooooo!

Yunho lo tomo por sus nalgas abriéndolas con sus dedos mas, separándolas y tener mejor acceso, Jaejoong sintió esos finos dedos en su parte anal colándose con todo y el pene de Yunho que latía en su interior con vida propia — ahh…ah…

Volvió a cargar al pelinegro, Jaejoong enredo sus piernas en su cintura de el moreno, Yunho fue hasta el al baño dejándolo en el tocador sentado, abriendo sus piernas una vez mas y poniéndose entre ellas, y seguía embistiéndolo, todo ese pasillo se había llenado de la sangre que escurría de la parte trasera de Jaejoong — ah… ha…..ah…o...hh mas…umm…

Lo estaba lastimando, lo estaba desgarrando, lo hacia gritar, gemir, llorar, babear, correrse, Yunho estaba excitadísimo con esa imagen de Jaejoong, lo estaba raspando, cogiéndolo tan duro, que aquella parte anal sentía las duras embestidas de su ancha polla, pero el pelinegro lo quería de ese modo y el también, no le importaba que Jaejoong no pudiera caminar bien durante una semana. Aunque permaneciera en cama toda esa semana sin moverse él le cuidaría y también tendrían sexo claro.

— Jae…oh...dios…apriétame...mas… ciérrame..nggg..

 — Yunho...!Yunhooooooooo! ¡YUNHO!! ¡AH!!

Sintió como se había hundido en espejo que estaba detrás de él, mirando la cara de extasiado de Yunho que seguía estocándolo mas rápido, Jaejoong miraba como seguía sangrando, sabia que lo habían lastimado, pero que mierda le importaba sentía el placer mas delicioso que pudiese haber sentido antes.

Hacerlo con Yunho era exquisito.

 — oh...Dios…Yunho...me...es...tas…. ohh….

El orgasmo estaba por llegar — Vente dentro…ah… yo quiero…sentirte en mi…

— Umm..Jae..

Yunho acaricio su cadera y mordió sus pezones con una mano tiro de ellos y con su boca mordió uno haciéndole sangrar, lo mamo un buen momento haciéndolos erectar una vez mas — AHHH…….

— Umm….dios…

 — Hay…AHH!!...oh..Yunho…

— Mierda…

Yunho lleno todo su ano de su semen y el pelinegro se corrió en su mano y parte de sus abdómenes, Yunho se hundió en el cuerpo de Jaejoong sobre su cuerpo y recargo su cara en su cuello, el pelinegro respiraba con dificultad — Yunho...pesas…umm..

 — I Know Baby — decida mientras lamia su cuello — sabes tan exquisito — volvió a musitar mientras su mano acariciaba su abdomen — hermoso..

 — Yunho…ahh...me duele…

— Te he partido en dos…  —  sonrio — al menos no podras caminar ahora…y en una semana ¡”Tal vez “

 — ¡Eres un salvaje….y cinico!

 — Pero a si te gusto…no lo niegues…

No dijo nada mas tenia razón él lo quiso a si y ahora se atenía a las consecuencias, el moreno acariciaba sus pezoncitos circularmente y le hablo al oído — Regresaras a la mansión conmigo — dio una lamida a su oreja — Y no acepto un no como respuesta..

 — Yunho...yo..

— No quiero que andes en esos trabajillos donde te tratan mal.

— Yunho…

— ¿Siempre renuncias a ellos? — una risilla escapo de los labios de Jung, el pelinegro mordió sus labios pensando que él lo había visto aquel día, que vergüenza sentía al pensarlo solamente

— ¿Y ahora que hare? … ¿Seguiré vistiendo de mujer? — el frunció las cejas

— Pues no me disgusta mirarte vestido a si, te ves sexy, pero si quieres vestir normal no hay problema, pero verte con ligueros de vez en cuando no estaría mal — su mano acariciaba su ombligo

— Ahh..Yunho…

Jaejoong cerro los ojos sintiendo aun a Yunho en su interior — ahh…

 — ¿Entonces volveré a trabajar para ti? — Yunho mordió su cuello y esta vez Jaejoong lo paro — ¿Qué eres un maldito vampiro? — Yunho rio

— No lo soy pero contigo si — y lamio su cuello — Y regresaras a trabajar conmigo de nuevo, porque te quiero a mi lado — acariciando su cabello — no puedo estar sin ti Jaejoongie...

— Yunnie...

— ¿Serás mi Maide de nuevo?

El pelinegro cerró los ojos sonriendo.

¿Qué cosa pudiera pasar ahora?

Si decidía ser de nuevo la MAID de Yunho, pues tendría todo como siempre, además que no se engañe quería estar al lado de ese hombre, si bien termino lastimado, afónico, sangrado, abierto, penetrado, lleno de semen, sudado, incluso lagrimeo, Yunho le había hecho todo eso.

Pero no le importaba después de todo quería que lo siguiera cogiendo y que nunca se cansara, el pelinegro relamió sus labios observando a su AMO y acaricio su cabello sintiendo aun dentro la extensión de el mayor en su ano — Solo espero que me des un muy buen seguro…que me asegure que al menos tendré un entierro decente.

El hombre mayor no pudo evitar embozar una sonrisilla traviesa al punto de derramar lagrimas, y lamer los pezones de Jaejoong y hablarle al oído de nuevo — Oh claro que la tendrás y será la muerte mas placentera que puedas imaginar mi MAID Sensual.

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Nota final:

¿Les ha gustado?... yo esperaba mas sexo... ¿pero saben que? Es solo la primera parte XD aun falta la segunda, porque siento que tiene continuación serian dos Two Shots. Por cierto estos Shots los tenia pensando hace siglos, pero no me animaba a escribirlos aun, pero mi Chinu Sensei me presiono y me dio varias ideas a si que también ella tiene créditos en este shot que es dedicado a mi baby Cinty : 3, ¡Hey espero cumplir tus expectativas,ya que espero sus criticas!

¿Lo quería mas salvaje verdad? xD

Bueno hize de el culo de Jaejoong una fuente llena de sangre xD no se ahora .. xD pero te lo recompezare en la segunda parte, ya que tengo mas ideas enfermas en mente : ),aunque no creo que sea tan largo como este tal vez mas corto pero remarcando las mejores partes, a por cierto este es de 80 paginas ._. .. espero escribir algo no tan enfermo ahora .

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Atte : Dorian :B