Yoochun
estaba de nuevo en su forma humana en cuanto oyó el grito lleno de
dolor de Junsu.
Él corrió a su lado justo cuando él perdió
el conocimiento. Al notar los moretones
en su cara y las marcas de dientes en su cuello, casi perdió su
control apenas contenido. Alargó la mano hacia su cuerpo, tirando de él en sus
brazos, y se levantó. Se volvió para mirar a su padre, quien todavía estaba en
su forma de lobo.
—Sin importar la parte del doctor Jeong en
esto, ahora la necesitamos. Tenemos que saber cómo sanar a mi Luna.
Siwon dio un pequeño resoplido y Yoochun
tomó eso como significando que su padre no tomaría ninguna acción hacia el
doctor… aún.
>>>♥<<<
Cuando Yoochun, Yunho, y los cinco lobos
se acercaron al vehículo su mirada se fijó en la de Hani. Ella corrió hacia
adelante, mientras las lágrimas bajaban por sus mejillas, hundiéndose en el
suelo cuando Yoochun bajó el cuerpo de Junsu.
Él ayudó a Hani a recostar la cabeza de Junsu en su regazo
y luego rápidamente tomó un
par de pantalones de chándal que su eomma estaba entregando a cada uno de los lobos.
—Está bien, chicos. Todos ellos están
decentes —anunció Heechul.
Jae y Changmin dieron la vuelta por el
otro lado del vehículo y se apresuraron al lado de Junsu. Los dos chicos
estaban llorando mientras miraban a su amigo, asegurándose de que estaba vivo y
realmente aquí. Tomó todo en Yoochun evitar tomarlo de Hani y mantenerlo cerca
de él para poder asegurarse por su cuenta y a su lobo de que él estaba a salvo.
Yoochun se volvió hacia su padre
mientras Siwon acercaba.
—Necesitamos al doctor Jeong despierto.
—Voy a forzarlo a cambiar una vez que estemos
de vuelta en el hotel. Entonces nos puede decir lo que tenemos que hacer para
que Junsu mejore.
Yoochun vio como uno de los lobos que
había cambiado y ahora llevaba unos pantalones de chándal se acercaba a Hani. Yoochun
no pudo evitar el gruñido que salió de su pecho. Kim Junho levantó la vista al
oír el gruñido.
—Él es mi hijo también.
—Lo entiendo. No lo toques mientras lo
revisas. Sé que quieres asegurarte que está bien, pero ningún macho va a tocarlo. —La voz de Yoochun era letal cuando emitió la orden.
Junho asintió en reconocimiento a la
solicitud de Yoochun mientras se arrodillaba junto a Hani.
>>>♥<<<
Siwon le dio a todos unos minutos más
antes de que anunciara que había que volver al hotel.
—Junho —dijo Siwon, volviéndose hacia el otro Alfa— Puedes
volver al hotel, pero yo te pediría que tus otros lobos se mantengan alejados. Yoochun
no estará cómodo con otros lobos alrededor de Junsu en estos momentos. Como
están las cosas, él está a punto de perder el control.
Junho accedió a esto y le dijo que se
reuniría con ellos en el hotel después de que acomodara a sus lobos.
Yoochun se acercó a Hani y se arrodilló.
— ¿Puedo tomarlo, Hani?
Hani miró como Yoochun temblaba por la
necesidad de estar cerca de su compañero. Hani levantó suavemente la cabeza de Junsu,
así Yoochun podría deslizar el brazo por debajo de él, y el otro brazo
vino bajo sus rodillas mientras se levantaba con él. Lo llevó a la camioneta, sin esperar a nadie, y subió con él
en su regazo. Bajó la vista hacia su cara, alejando el cabello de su una vez
pálida mejilla ahora empañada por una contusión, y se extendió por su mente.
« Nae ma-eum, ¿puedes oírme?» Yoochun continuó deslizando sus dedos
por la mejilla mientras esperaba su respuesta.
«Me
duele, Yoochun.» La voz de Junsu fue suave en su mente.
«Vamos
a hacer que te sientas mejor. ¿Puedes abrir los ojos para mí, amor?»
Vio como poco a poco sus ojos comenzaron
a revolotear y se abrieron. Él lo protegió con su gran cuerpo, no queriendo que
nadie más viera que estaba despierto, necesitando de unos momentos
de todo para él. Se inclinó y lo besó en los labios suavemente y susurró:
—No te muevas ahora, déjeme que te vea.
—Alguien tendría que sacarme a la fuerza de
tus brazos, Yoochun
—susurró él con una pequeña sonrisa, que rápidamente se convirtió en una mueca
mientras su cuerpo se estremecía.
El corazón de Yoochun se apretó cuando
vio el dolor llenar sus ojos, odiando no poder hacer nada por él.
—Sólo descansa, mi amor.
Junsu cerró los ojos y Yoochun la acercó
a su cuerpo, compartiendo su calor con él.
Así como llegaron
a los bosques en silencio, su viaje de regreso al hotel fue igual de silencioso.
>>>♥<<<
Heechul extendió una manta sobre la
forma de lobo de Jeong Luhan recostado en una de las camas del hotel. Siwon, Yoochun,
y Hani se inclinaron hacia él mientras lo observaban empezar a cambiar de nuevo
a su piel humana. Jae y Changmin se
sentaron en la otra cama, junto a la figura de Junsu tendida sobre su dorso y Yunho
se apoyó contra la pared de atrás, con los brazos cruzados sobre el pecho,
viéndose aún más sombrío si eso fuera posible.
Luhan
parpadeó varias veces mientras sus ojos se abrían. No sabía dónde estaba, sólo sabía que él ya no
estaba en el bosque, y estaba vivo.
—Jeong Luhan, necesitamos tu ayuda —oyó que una voz que le decía.
Comenzó
a incorporarse. El brazo y la pierna que habían sido rotos habían
curado durante su cambio, pero seguían rígidos y todavía le dolían. Él sintió
la tela caliente contra su piel. Al darse cuenta de que era una manta que
cubría su muy desnudo ser, se aferró a ella mientras se incorporaba plenamente
a ver la habitación llena de rostros mirándolo fijamente. Comenzó a reconocer
las caras y luego todo lo que había sucedido se apresuró dentro.
— ¿Dónde está Junsu ¿Está bien? ¿Jiho está aún
vivo? —Las preguntas
fluyeron de su boca como el agua de un grifo, mientras sus ojos se movían de
persona a persona.
Fue Yoochun quien le respondió.
—Junsu está vivo, pero con un dolor intenso.
Por favor dígame cómo curarlo.
—Él necesita sangre —le dijo Luhan.
—Él ya ha tenido sangre. —La voz de Yoochun era mortal— Jiho
forzó su sangre en él, y no está mejor.
—No sólo la sangre de cualquiera, Yoochun. Él
necesita tu sangre, la sangre de su compañero.
Yoochun se acercó a la cama a medida que
la esperanza comenzaba a avanzar
lentamente su camino a su corazón.
— ¿Estás seguro? —preguntó.
—Científicamente, no, no lo estoy. Pero Yoochun,
somos hombres lobo, la ciencia no nos puede explicar. En mi interior sé que es
tu sangre lo que necesita. No creo que una mordida funcione, ya que ha pasado
demasiado tiempo y su cuerpo poco a poco ha estado atacándose el mismo. Él
probablemente tendrá que morderte varias veces durante el período de unos
cuantos días.
Yoochun se volvió hacia su eomma.
—Consíguele algo de ropa, por favor.
Heechul
le trajo a Luhan unos pantalones de chándal y una camiseta
y todos los hombres
salieron de la habitación. Hani y Heechul
ayudaron a Luhan a vestirse. Aunque sus huesos rotos se
habían reparado gradualmente cuando cambió, su cuerpo todavía estaba muy rígido
y dolorido. Nadie habló mientras Luhan se vestía. Heechul abrió las puertas y
dejó a los lobos entrar de nuevo. Yoochun caminó al lado de Junsu y lo miró en
silencio. Todo el mundo en la sala esperó, observando para ver lo que iba a
hacer. Yoochun tomó una decisión.
—Todo el mundo, por favor váyase —pidió sin apartar los ojos de su compañero—
Él no querría que nadie observara esto.
Sin decir una palabra, la habitación
quedó vacía y tan pronto como Yoochun oyó el clic de la puerta, se sentó junto
a Junsu en la cama.
—Luna, ¿puedes despertar para mí?
Junsu volvió la cabeza en la dirección
de la voz de Yoochun. Sus ojos se abrieron.
— ¿Estoy realmente aquí? ¿Está realmente
conmigo?
—Sí y sí —respondió él mientras yacía en su costado al lado de
él.
Él extendió su mano para tocarle la cara, pero se retiró
por el dolor. Yoochun
acarició suavemente su rostro cuando volvió la cara para mirarlo.
—El doctor Jeong dice que necesitas mi
sangre, que vas a tener que morderme varias veces con el fin de sanar
completamente. —Yoochun hizo una pausa antes de continuar— ¿Crees que puedas manejar el morderme o sería
demasiado ya que fuiste forzado antes? —Su voz se hizo más y más suave, mientras
hablaba, sus párpados oscurecían sus ojos y sus labios sostenían una línea apretada.
—Yoochun, yo no mordí a Jiho. Él se mordió a
sí mismo y derramó su sangre en mi boca. Morderte será raro, pero no debido a Jiho. —Su boca se alzó ligeramente mientras
trataba de tranquilizarlo, pero no debe de haber sido exitosa porque él todavía se veía afectado.
—Yoochun, dime qué hacer. A menos —dijo él, apartando la mirada de él
mientras su voz temblaba— a menos que no quieres que te muerda.
Yoochun gruñó.
— ¿Por qué no querría que mi compañero me
muerda, para tomar mi sangre?
Junsu se estremeció ante la furia que
escuchó en su voz.
—Porque he tenido su sangre, porque él me
deshonró —sollozó él.
Yoochun comenzó a envolver sus brazos
alrededor de él, pero cuando sus manos tocaron la espalda él gritó de dolor.
Las cejas de Yoochun se elevaron
mientras alejaba sus brazos.
— ¿Qué es? ¿Dónde te duele, amor?
Los ojos de Junsu cayeron mientras sus
labios temblaban.
—Él arañó mi espalda cuando vio mis marcas —susurró.
Yoochun gentilmente lo jaló hacia
adelante para que así él estuviera descansando sobre su estómago. Él comenzó a
levantar el dobladillo de su camiseta.
—Seré gentil —le dijo, su voz apretada y tensa.
Mientras él continuaba tirando de su camiseta hacia arriba, revelando más y más
de su piel, finalmente vio los enfadados cortes rojos que enturbiaban su
hermoso cuerpo. Ellos descendían desde su cuello hasta debajo de su espalda
media. Yoochun no pudo detener el bajo gruñido que retumbó en su pecho a la
vista de la hermosa piel de su compañero tan furiosamente desgarrada.
—Su muerte fue muy misericordiosa para el
dolor que te causó. —Su
voz tembló, exponiendo su profundo dolor por él. Yoochun se inclinó hacia
adelante y besó suavemente las heridas de su espalda y cuello. Tirándola atrás
y bajándole la camiseta él lo ayudó a recostarse en su lado.
—Quiero que tomes mi sangre. Soy tu
compañero. Tomarás mi sangre para que así puedas ponerte mejor y luego la
tomarás para que así podamos completar los Ritos de Sangre.
Yoochun inclinó su cabeza hacia atrás,
desnudando su cuello a Junsu.
—Tus instintos te deberían ayudar, amor. Sólo
cierra tus ojos y muerde.
Junsu
miró el cuello
de Yoochun, su hermosa piel lisa y las marcas
que corrían a través
de él. Él no podía
creer que fuera hacer esto, pero tenía tanto dolor que
ya no le importaba. Hizo lo que Yoochun le dijo y cerró sus ojos. Se escabulló
más cerca de él, inclinándose hacia adelante y tocando suavemente sus labios en
el cuello de Yoochun. Él le besó una vez antes
de separar sus labios y presionar su boca hacia abajo. Mientras sus dientes
comenzaban a aplicar presión a su piel, para su sorpresa, sintió a sus
incisivos alargarse y luego fue capaz de perforar la piel de él con casi
ninguna resistencia.
Él apretó sus ojos con fuerza mientras
el sabor de la sangre de Yoochun golpeaba su lengua.
En lugar del sabor metálico
que había estado
esperando hubo casi una picante cualidad
en la sangre de Yoochun.
Sintió que él lo jaló más apretado contra él y él apretó su boca
mientras continuaba tragando su sangre. Debería haberle asqueado y asustado,
pero en su lugar se sentía bien.
>>>♥<<<
Yoochun cerró sus ojos mientras sentía
la boca de Junsu en su cuello. Su cuerpo se puso brevemente rígido mientras
sentía los dientes de él hundirse en su carne. No podía describir las sensaciones moviéndose dentro con el tirón de la
boca de él si lo quisiera hacer.
Era algo tan privado y especial entre
compañeros. Él lo dejó continuar tomando
de su sangre por varios
minutos. Cuando pensó que
él había obtenido suficiente por esta vez él llego a la mente de él. Los
pensamientos que encontró
ahí le dieron pausa antes
de que finalmente le hablara.
«Amor,
es suficiente por ahora. Tienes que parar.»
Junsu separó lentamente su boca del
cuello de Yoochun. Parpadeó varias veces mientras el rostro de Yoochun volvía
despacio a entrar en su foco. La respiración de él quedó atascada cuando vio
los dientes de Junsu. Él levantó el labio superior de él para mirar los
incisivos que se habían alargado.
—Interesante —murmuró. Mientras sacaba su mano, los observó retraerse.
—Eso fue… —Junsu se pausó mientras tragaba
y recuperaba su aliento—
intenso.
Yoochun le sonrió, frotando sus manos
arriba y abajo por su espalda.
—Eso es decirlo suavemente, Luna.
Él le miró a los ojos, disfrutando
estando tan cerca de él, una vez más siendo capaz de tocarlo, olerlo y saborearlo.
— ¿Será siempre así?
Yoochun ladeó su cabeza hacia un lado.
—No lo sé, pero eres bienvenido a averiguarlo
en cualquier momento que quieras. —Él sonrió y se animó al ver una pequeña
sonrisa en los labios de él—
¿Cómo te sientes? ¿Algo mejor aún?
—El dolor en realidad se ha aligerado un
poco. Aún está ahí pero no me impide respirar.
— ¿Crees que puedes moverte? —le preguntó amablemente.
—Siempre y cuando no me pidas correr por los
árboles de un alocado lobo
—se burló él. Yoochun no lo encontró divertido cuando le gruñó.
—Estoy listo para llevarte a casa, a Corea.
Quiero vincularme a ti, Junsu. Quiero completar los Ritos de Sangre. Si estás
dispuesto, vamos a irnos en avión esta noche.
— ¿Pero, y mi mamá? ¿Jae y Changmin?
—Todos vienen con nosotros. Mi eomma y tu
mamá de alguna manera convencieron a sus padres. ¿Crees que puedes viajar,
Luna? —Yoochun estaba
de verdad esperando que él dijera que sí. Él quería salir de este país. Parecía
que aquí sólo cosas malas le sucedían a Junsu. Lo quería en casa con él, a donde
pertenecía.
—Estoy listo para vincularme a ti, también.
Hagamos esto. —Junsu
le guiñó y él sintió ese guiño hasta su alma.
Yoochun se levantó y comenzó a dirigirse
a la puerta.
—Espera, ¿a dónde vas? —le preguntó.
Se volvió para mirar el rostro de él y vio pánico
en sus ojos. Se dio cuenta
entonces que su valiente, sarcástico, feroz Luna no había salido
de esto indemne.
—Sólo voy a readmitirlos y decirles que nos
vamos. —Se sentó de
vuelta en la cama al costado de él y tomó su mano— ¿Qué pasa, Junsu?
Él vaciló pero luego lo miró en los ojos
con la barbilla en alto.
—Odio ser débil y sentirme indefenso, y me
niego a tener siempre estas necesidades, pero ahora mismo la idea de ti donde
no puedo verte me aterroriza. Si eso me hace patético entonces que así sea. —Yoochun podría decir que tomó mucho de
él admitir su temor a él.
—Nada de lo que me has dicho podría alguna
vez hacerte patética y si crees eso entonces vas a pensar que estoy
completamente loco, porque nunca te dejaré fuera de mi vista otra vez, ni otro
hombre estará nunca lo bastante cerca para tocarte.
Junsu no pudo detener la pequeña risa
que escapó de sus labios.
— ¿Por qué encuentras esto divertido? —preguntó Yoochun, verdaderamente
confundido por su respuesta.
—Tú no puedes mantener a todo hombre lejos de
mí por siempre.
—Si puedo. Soy el siguiente Alfa en línea.
Soy el príncipe de los Lobos TVXQ de Corea. Si digo que ellos tienen que estar
a ciento cincuenta metros lejos de ti todo el tiempo, entonces eso es lo que
ellos harán.
La travesura brilló en los ojos de Junsu.
— ¿Ciento cincuenta metros? ¿Estás seguro que
eso es suficiente? Tal vez deberías hacerlo, no sé, varios cientos de metros
más. Eso podría ser más razonable.
— ¿Te estás burlando de mí, Luna? —preguntó Yoochun con un gruñido bajo.
—Por qué, sí, Yoochun. Lo estoy. ¿Sin
embargo, podrías decirlo?
Yoochun le frunció el ceño mientras él
sonreía inocentemente, luego lo sorprendió besándolo en la nariz.
—Me alegra ver que no has perdido tu sentido
del humor.
—Hombre lobo, si sigues haciendo
declaraciones escandalosas como esa entonces mi sentido del humor sólo mejorará
porque me tendré que burlar de ti.
Yoochun se paró y caminó de nuevo hacia
la puerta de la habitación del motel
y mientras jalaba para abrirla, dijo lo bastante alto para que todos oyeran:
—Me alegra mucho estar a tu servicio, Junsu.
Junsu se volvió rojo brillante mientras
todos entraban, sus ojos precipitándose entre los dos.
— ¿Así es cómo lo llaman en estos días? —preguntó Jae. Él miró a Changmin— Eso
es lo que he estado haciendo mal. No he estado diciendo que quería ser servido.
Cada hombre en la habitación tosió para
cubrir las risas mientras Changmin golpeaba el brazo de Jae.
—Sólo digo, uno aprende algo nuevo todos los
días —dijo él, guiñando a Junsu.
Yoochun sacudió su cabeza, con una
sonrisa en su rostro simplemente porque su Luna estaba sonriendo.
Siwon fue el primero en recomponerse
mientras miraba a Junsu.
— ¿Cómo te sientes?
—Un poco mejor. Le estaba diciendo a Yoochun
que el dolor es soportable.
— ¿Entonces crees que puedas viajar? Es un
largo vuelo hasta Corea
— le dijo Siwon.
—Sí, estoy bien. Estoy listo para dejar este
continente. Estoy convencido que hay algo contra mí.
Yoochun
miró a Luhan, quien estaba
parado al lado viéndose como si quisiera arrastrarse a un agujero.
— ¿Crees que está bien para él viajar? — Luhan miró a Junsu y luego a Yoochun.
—Si él dice que se siente a la altura,
entonces, sí. Si a él le comienza a doler mucho otra vez tú sólo necesitarás
darle más de tu sangre.
Junsu se sonrojó cuando Yoochun lo miró
con una sonrisa malvada. Jae miró entre los dos y luego a Changmin.
— ¿Ves a ese lobo refinado sonriéndole a
nuestro mejor amigo? — Changmin
miró aprensivamente a Jae.
— ¿Sí…? —contestó Changmin precavidamente.
—Pensé que te dije que quería uno. ¿Dónde
está? —preguntó Jae
secamente.
—Y yo creí preguntarte si deseabas papas
fritas o tostadas con eso y tú dijiste que preferías crema batida. Tanto como me
duele decirte esto —Changmin tomó a Jae por los hombros y lo miró a
los ojos con toda seriedad— y tal vez quieras prepararte, aparentemente
a los lobos no le va bien la crema batida. Todos ellos dijeron que deja su
pelaje pegajoso.
Jae sonrió abiertamente a Changmin
mientras la habitación entera estalló en carcajadas, reteniendo su puño de
golpearlo.
—Liiiiindo.
Siwon se giró hacia Yoochun aún
sonriendo abiertamente, obviamente disfrutando de la alegría después de tantos
días de preocupación y miedo.
—Prepáralos para salir, Leeteuk tiene el
avión esperando.
Yoochun asintió, aún sonriendo.
—Como tú digas, Alfa.
>>> ♥
<<<
Jae y Changmin abordaron el avión
privado que Siwon había alquilado. Jae silbó mientras
la mandíbula de Changmin caía abierta ante la vista de
semejante lujo.
—Changmin, me retracto. No sólo quiero un
lobo y crema batida. Quiero un lobo millonario
con crema batida.
—Está bien, déjame anotar eso por ti ya que
pareces pensar que soy tu asistente personal —respondió Changmin, con tono cortante.
— ¿Alguna vez has notado que los asistentes
comienzan con idioteces? ¿Crees que eso es una coincidencia? —Jae se encogió de hombros mientras
levantaba sus cejas a Changmin.
>>>♥<<<
— ¡Oh, cómo he extrañado a mis dos malhumorados
mejores amigos! —
dijo Junsu sarcásticamente mientras abordaba el avión, seguido de cerca por Yoochun.
Junsu
había comenzado a seguir a Jae y a Changmin
cuando sintió a Yoochun tirar de su mano. Volteó para mirarlo.
—Déjame revisar el avión antes de que tú y tus
amigos vayan a explorarlo. —Él
le dio a su mano un rápido apretón y luego caminó hacia la parte de atrás del
avión. Junsu notó que había un pequeño vestíbulo que estaba bloqueado desde la
parte delantera del avión.
—Esta cosa es enorme. ¿A dónde crees que
lleva eso? —preguntó Changmin
apuntando en la dirección por la que Yoochun había desaparecido.
—No lo sé, pero pretendo averiguarlo —dijo Junsu a sus amigos con un guiño.
Los tres chicos se sentaron en un lujoso
asiento que se extendía a lo largo de un lado del avión. En el lado opuesto del
avión había asientos estilo envolvente, dos por fila. Cada juego de dos se
enfrentaba a otro y había una pequeña mesa entre
cada juego. Junsu contó tres juegos. A la derecha
de él, en la pared que separaba la parte de atrás del avión de ellos,
había un gran televisor pantalla plana y bajo éste había un bar con varias
bebidas en la vitrina de cristal.
Yoochun llegó y se paró al lado de Junsu,
aparentemente con la inspección terminada. Junsu, Jae y Changmin observaron
mientras los demás comenzaban a abordar el avión.
Heechul y Hani tomaron uno de los juegos de asientos envolventes mientras Siwon y Leeteuk
se sentaron frente
a ellos. Junsu tuvo que pellizcar a Changmin
cuando él comenzó a reírse
porque Donghae había intentado sentarse
en el asiento al lado de Jae, y Yunho le gruñó algo en coreano al
pobre lobo, haciéndolo palidecer y levantarse de un salto
tan rápido que parecía que había sido apuñalado
en el trasero con un atizador caliente. Jae actuó como si no lo hubiese notado.
Luhan se sentó al lado de Shindong
frente al ahora tembloroso Donghae y a un Yunho con el ceño fruncido. Yoochun
se estiró y tomó la mano de Junsu, tirando de él mientras que le indicaba los
asientos envolventes para que ellos se sentaran. Junsu se puso de pie, le hizo
señas a Jae y a Changmin para que se unieran a ellos en los asientos frente a
los otros.
Con todo el mundo con el cinturón
de seguridad puesto,
el avión comenzó su viaje por la pista, aumentando la velocidad hasta que finalmente Junsu sintió su
estómago caer cuando las ruedas del avión abandonaron el suelo. A medida que el
avión se elevaba hacia el cielo Junsu sentía como si finalmente estuviese
escapando de la pesadilla que había vivido el mes pasado. Hasta que el dolor lo
atravesó de nuevo.
Se inclinó hacia adelante en su asiento,
con los brazos envueltos alrededor
de su cintura mientras apoyaba la cabeza sobre la mesa delante de él. Escuchó
voces sobresaltadas, pero no podía distinguirlas. No con el sonido de la sangre
precipitándose en sus oídos mientras trataba de no gritar. Había pensado que
estaba mejor puesto que había tomado la sangre de Yoochun, pero Luhan tenía
razón cuando dijo que haría falta más de una toma. Sintió que alguien
desabrochaba su cinturón de seguridad y luego unos fuertes brazos estaban a su alrededor
levantándolo. Acurrucó su cuerpo en la fuerza que sabía tenía que ser Yoochun.
Junsu
no abrió los ojos hasta que lo sintió acostándolo sobre una superficie blanda. No se molestó en mirar
a su alrededor, lo único que quería ver eran los ojos de Yoochun. Él lo observó
mientras se tendía a su lado sin apartar sus ojos de los suyos.
—Necesitas más sangre, Luna —le dijo suavemente.
Junsu observó mientras él desabrochaba
los tres primeros botones de su camisa negra y empujaba hacia atrás el cuello
para exponer su garganta. A medida que el dolor continuaba su curso a través de su cuerpo él apenas
registró que sus colmillos se habían alargado en el momento que Yoochun
desnudó su garganta para él.
Él suavemente envolvió su mano alrededor
de su nuca y guió su boca a su piel. Esta vez Junsu no dudó. Tan pronto como
sus dientes se encontraron con su carne la atravesó sin pensarlo. Una vez más la picante
esencia de Yoochun
se vertió en él mientras
cerraba los ojos y le daba la bienvenida a su sangre sanadora.
>>>♥<<<
Yoochun acercó a Junsu, protegiéndolo
con su cuerpo mientras tomaba lo que le ofrecía.
Le susurró al oído usando su lengua
materna, diciéndole lo mucho que significaba para él y cómo nunca podría
imaginar una vida sin él. Y cuando le dijo que lo amaba sintió su cuerpo
temblar en sus brazos. Esta vez él se apartó por su cuenta y Yoochun vio las
lágrimas rodar por sus mejillas.
— ¿Por qué lloras, mi amor? —le preguntó con suavidad.
—Sabía que vendrías por mí, pero no sabía si
yo sería la misma persona cuando me encontraras.
Yoochun observó cuando él se movió hacia
adelante y sintió su lengua pasar
por donde acababa de morderlo. Cuando él se apartó, vio que sus mejillas
estaban ligeramente teñidas de rojo y mientras pasaba la punta de sus dedos por
su rostro sintió el calor de su piel.
—Lo siento, había, eh, algo de sangre. —Él dejó que sus palabras se fuesen
apagando.
Yoochun rió entre dientes mientras
limpiaba la evidencia de sus lágrimas.
—No tienes que estar avergonzado, Luna.
Puedes pasar tu lengua por mi cuello en cualquier momento. Te aseguro que nunca
me opondré. —Se
echó a reír cuando él le dio un manotazo,
pero se alegraba de haber conseguido sacarle una sonrisa.
— ¿Cómo te sientes ahora? ¿Ha disminuido el dolor? —preguntó en un tono mucho más serio.
Junsu respiró hondo y soltó el aire
lentamente. Él cerró los ojos, concentrándose en su cuerpo. Todavía podía
sentir un dolor sordo pero estaba incluso mejor que después de la primera vez
que él le había dado su sangre.
—Me siento mucho mejor —le dijo honestamente. Frunció el ceño cuando
le preguntó—: Yoochun, ¿esto afectará los Ritos de Sangre
puesto que he tomado tu sangre?
—No, Luna. Porque no he tomado tu sangre, los
Ritos no están completos todavía.
Junsu asintió su entendimiento. Rodó
sobre su espalda y por primera vez miró a su alrededor. Se dio cuenta que
estaban en una habitación pequeña pero lujosa.
Había suaves luces de techo a lo largo del borde de la habitación. Estaban acostados en una cama tamaño queen que llenaba el
espacio casi por completo.
— ¿Es esta la parte trasera del avión? —le preguntó él. Yoochun asintió.
—Esta es la única cabina en el avión. Vine aquí
atrás cuando embarcamos al principio para asegurarme de que estuviese lista por
si necesitaba darte sangre de nuevo.
El rostro de Junsu una vez más se tornó
de un sonrosado color rojo.
—Supongo que todos ellos —indicó con un gesto en dirección a la
parte delantera del avión— saben por qué vinimos aquí atrás.
—Bueno, estoy seguro de que están asumiendo que
es porque necesitas mi sangre, pero podemos darles una razón para creer que era
para otra cosa —
bromeó Yoochun cuando empezó a hacerle cosquillas y no pudo contener la risa
suave que brotó de él.
>>>♥<<<
Jae y Changmin
se sentaron tensamente en sus asientos
mientras se preguntaban si Junsu estaba bien. Había
estado tan pálido cuando Yoochun se lo había llevado cargado. Heechul seguía
tratando de tranquilizarlos de que Yoochun se haría cargo de él. Sin embargo,
no podían dejar de preocuparse. Para el momento en que el avión alcanzó la
altitud de crucero todos oyeron una risita suave proveniente de la dirección en
que Yoochun había llevado a Junsu. Jae puso los ojos en blanco mientras se
desabrochaba el cinturón de seguridad.
—Oh, por el amor de Dios —dijo, mientras se ponía de pie— Si Junsu
tiene derecho a tener relaciones a 25.000 metros, yo al menos voy a poner mi
juego en forma. —Se volteó
para mirar a los otros
lobos— Shindong,
Leeteuk, Donghae —pero
fue interrumpido antes de que pudiera terminar.
Yunho se puso de pie, casi rasgando el
cinturón de seguridad antes que recordara desabrochárselo.
—Jaejoong —su voz era mortalmente suave— ¿qué
condenado infierno quieres decir con poner tu juego en forma con tres de mis compañeros
de manada?
Jae tuvo que darle una palmada en la
espalda a Changmin cuando él empezó a toser ante las palabras de Yunho.
—Bueno, cuando lo pones así suena bastante
mal. Pero esas fueron tus palabras, Sparky, no las mías. —Se volteó hacia Heechul, ignorando las
dagas con las que Yunho la estaba mirando— ¿Tienen una baraja de cartas en esta nave?
Los ojos de Heechul se arrugaron cuando
sonrió.
—Apuesto a que podríamos encontrar algo. —Se desabrochó el cinturón de seguridad
y comenzó a ir a través de varios compartimentos que no parecían
compartimientos hasta que empezó a pulsar botones que los hacían abrirse.
Finalmente, después de unos momentos Heechul levantó una baraja de cartas a
modo triunfal— Estamos listos —dijo, sonriéndole a Jae.
Jae tomó la baraja mientras miraba a Changmin.
— ¿Estás dentro?
—Siempre.
—Está bien, muchachos. Vamos a ver lo que tienen —se burló Jae mientras
se sentaba en el asiento frente a los demás.
Los tres lobos miraron tentativamente a Yunho.
—Oh, por el amor de Dios, Yun. Diles que no los
vas a golpear si juegan a las cartas con los dos humanos. —Jae lo fulminó con la mirada.
Yunho no había apartado los ojos de Jae
desde que él había declarado que quería poner su juego en forma. Finalmente cedió
y se volteó hacia sus compañeros de manada, quienes se encogieron bajo su
escrutinio.
—Sin tocar —dijo, mientras se volvía a sentar rígidamente,
ladeado para poder observar todos los movimientos del juego.
Los tres lobos se unieron a Jae y a Changmin.
Sin saber dónde sentarse todos se
sentaron en el suelo, justo frente al asiento que Jae y Changmin ocupaban.
— ¿Entonces vamos a jugar hold'em? —le preguntó Shindong a Jae. Changmin
resopló mientras Jae seguía repartiendo las cartas.
Texas hold'em: Es una versión del juego póquer.
Actualmente es la más popular y también es la más jugada en la mayoría de
casinos.
—Hold'em es para mariquitas —bromeó Jae con un guiño— Vamos
a jugar algo un poco menos civilizado.
— ¿Qué sería eso… exactamente? —preguntó Leeteuk enarcando las cejas y
los labios ligeramente caídos.
—Strip Poker, por supuesto —dijo Jae inocentemente mientras los
tres lobos tosían en su mano— Pero recuerden —añadió con una malvada mirada dirigida
al amenazador lobo sentado detrás de los otros lobos—: sin
tocar.
Strip
poker: Es una variación
del juego de cartas póquer
en el que los jugadores se quitan prendas
de ropa cuando pierden sus apuestas.
El bajo sonido que retumbó desde el
pecho de Yunho tenía a los otros lobos encogiéndose.
—Jaejoong —gruñó Yunho en señal de advertencia.
—Bien. Strip poker está descartado, ¡Pesca! es
la onda. —Jae miró a Yunho— De
todos modos, ¿quién te invitó a esta fiesta? ¿Tu invitación no puede ser
revocada?
—Eso sólo funciona con los vampiros, Jaejoong. —Sus ojos se estrecharon.
—Bueno, sería un poco más conveniente si
algunas cosas fuesen universales en el mundo sobrenatural —espetó él.
—Algunas cosas son universales. Por ejemplo,
no existe un ser que no pudiera querer devorar tu trasero bocazas. —Yunho
le guiñó un ojo cuando él
se quedó a medio barajar, con la boca abierta.
Changmin se acercó y empujó la barbilla
de Jae hacia arriba, efectivamente cerrando de golpe su boca.
—Jae, ¿qué tal si yo me encargo de barajar,
de acuerdo? —Changmin
le quitó con cautela la baraja de cartas, mientras Jae continuaba mirando a Yunho.
>>>♥<<<
Yoochun yacía al lado de un durmiente Junsu
mientras el silencioso zumbido del motor
del avión zumbaba
como una canción
de cuna y se dio cuenta
de lo mucho que él parecía haber mejorado después de tomar su sangre dos veces.
El moretón en su mejilla se había desvanecido al suave color verde al que
llegaban justo antes de desaparecer. Él no había vuelto a mirar su espalda para
ver si las marcas de garras habían
empezado a sanar.
Yoochun no sabía si él tendría
cicatrices o no dado que era sólo mitad Canis
Lupis.
Se veía hermoso acostado a su lado.
Suavemente tomó un mechón de su cabello y lo llevó a su rostro. Las suaves
hebras contra su piel eran como la seda y el olor que aspiró de ellas era como
un pedacito de cielo para él. No podía empezar a expresar su agradecimiento y
alegría por tenerlo de vuelta con él.
El avión dio una sacudida cuando se
encontró con turbulencias, la perturbación haciendo que Junsu se moviera. Yoochun
vio como sus ojos se abrieron y luego
chocaron con los suyos. Su respiración fue extraída de sus pulmones ante la suavidad
y el amor que vio reflejado en los hermosos
ojos color esmeralda de Junsu.
Vio sus cejas juntarse cuando una pregunta se formó en sus labios rosa.
— ¿Por qué tus padres sólo tienen un hijo? —le preguntó. Yoochun respiró hondo
mientras pensaba en la pregunta.
—Trataron de tener más pero mi eomma seguía
perdiendo los embarazos.
—Oh, Yoochun, lo siento. Eso debe haber sido
duro para él. —Junsu
le tomó la mano y se la llevó a los labios mientras besaba suavemente su palma.
—Deberías saber, sólo en caso de que a futuro
quieras intentarlo, que para nuestra especie es difícil concebir. No sabemos por
qué, pero no es común que los compañeros tengan más de uno o dos hijos.
—Tal vez Luhan podría ayudar —le dijo mientras sus ojos se
iluminaron.
Yoochun sonrió ante su eterno optimismo,
pero luego entrecerró los ojos.
—Luhan tiene mucho por lo qué responder.
—Oh, Yoochun. —Yoochun observó como el rostro de Junsu se suavizó— Sé
que lo que él hizo estuvo mal pero entiendo que estaba herido y enojado. Me
sacó de allí y él podría haber muerto luchando con Jiho para que yo pudiera
escapar. Por favor, no le hagas daño.
Él le levantó la barbilla para poder
mirarlo a los ojos.
— ¿Realmente lo perdonas, incluso después de
todo lo que soportaste? —
Junsu asintió mientras buscaba su rostro.
—Lo perdono —dijo simplemente.
Yoochun cerró los ojos brevemente y
presionó sus labios suavemente en los suyos.
—Lo discutiré con mi padre.
Vio como sus labios se elevaban y sus
ojos se iluminaban.
—Gracias, hombre lobo.
Él inclinó la cabeza hacia él, sin
apartar nunca sus ojos de los suyos.
—Junsu, ¿cómo fueron las cosas con tu padre?
No escuché a hurtadillas tu conversación con él cuando cada uno se fue por su lado. —Los ojos
de Yoochun se suavizaron y su boca se elevó en una sonrisa tranquilizadora.
—Fue bien. Él realmente sentía como que tenía
que llegar a casa y hablar con su compañera acerca de todo. Aparentemente ella
no sabe nada de mí. Me alegra haber llegado a conocerlo. Me alegra saber que él
se preocupa por mí, pero no es a él a quien necesito en este momento. Mi
momento de tener un padre ha pasado, Yoochun, y Junho lo entiende. Él está
feliz por nosotros y eso significa mucho para mí, pero es a mi compañero a
quien necesito ahora.
Yoochun se inclinó y besó su frente
suavemente mientras sus palabras se filtraban en su corazón.
— ¿Puedo hacerte una pregunta? —preguntó Junsu cuando él se apartó.
—No podría negarte nada, Luna. Tal vez me
permitirías mirar las marcas en tu espalda para ver si están sanando tan rápido
como el moretón en tu rostro mientras satisfaces tu curiosidad —negoció él.
Él se puso boca abajo y lo dejó empujar
su camiseta hacia arriba para que
pudiera examinar su piel.
— ¿Te has preguntado alguna vez si los Canis Lupis
quieren un rey o Alfa? ¿Crees que alguna vez han querido tener, algo como, una
democracia?
Yoochun
se rió entre dientes mientras
pasaba sus dedos ligeramente a través de las marcas de garras que ahora eran
cortes rojos, con la piel ya cerrada.
— ¿De dónde vino esta pregunta? —preguntó mientras volvía a empujar su camiseta hacia abajo.
Él volvió a girar sobre su costado, con
los ojos mirando tímidamente hacia abajo.
—Sólo estoy realmente asustado que tu manada no
vaya a quererme como tu pareja Alfa. ¿Y si prefirieran tener una democracia a
tener a un mestizo como líder?
—Hay fallas en tu lógica, mi amor. —Yoochun se relajó de espalda, con los
brazos cruzados detrás de la cabeza— En primer lugar, los Canis Lupis, como nuestros
primos los lobos naturales, prosperan bajo la dirección de un Alfa. Debido a
nuestra naturaleza violenta y dominante necesitamos el liderazgo y la dirección
del que es más fuerte y está más en control que cada uno de nosotros. Sin un
Alfa habría caos y anarquía. Nos somos humanos, Junsu, ni siquiera tú. No
sobreviviríamos si tratamos de vivir como lo hacen los humanos. La manada te respetará
y seguirá tu liderazgo. Eres fuerte y eso es lo que ellos buscan en un líder. Esto
también explica por qué una democracia no funcionaría, porque los Canis Lupis
no podrían elegir a un líder. Los lobos sólo siguen al fuerte; el líder tiene
que probar que puede liderar. Su fuerza no puede estar basada en las opiniones
de los demás. Él tiene que ser capaz de demostrar que es el más dominante y más
capaz de cuidar de la manada. La pareja Alfa, por designio de la naturaleza,
llega a esta posición naturalmente porque está emparejada con el Alfa. Fuiste
elegido por el destino para ser mi Luna y por eso se demuestra que eres lo
suficientemente fuerte como para liderar, lo suficientemente fuerte para tomar
el control cuando otros traten de llevar el caos a la manada.
>>>♥<<<
Junsu se quedó callado por unos minutos
después de que Yoochun hubiera terminado de hablar. Pensó en lo que había
pasado desde que conoció a Yoochun y se preguntó si era la manera del destino de demostrarle que en realidad
él era lo suficientemente fuerte como para liderar,
para tomar el control. Después
de todo, él había sobrevivido
a dos Alfas psicóticos y aunque no había salido ileso, permanecía entero.
Todavía era el compañero de Yoochun, todavía era fuerte. Miró a Yoochun que
esperaba pacientemente su respuesta. Sus ojos se suavizaron cuando se
encontraron con los suyos y él no pudo evitar que sus ojos vagaran por su
hermoso rostro. Ellos trazaron las marcas que fluían a través de su cuello y
desaparecían bajo su camiseta y luego lo miró a los ojos una vez más.
—Puedo hacer esto. No estoy diciendo que no
tengo miedo, pero tengo esto. Siempre y cuando estés a mi lado, hombre lobo, me
apunto.
Junsu se acurrucó junto a Yoochun,
contento de estar en sus brazos y siguió pensando en su futuro, en el futuro de
ellos. No iba a preocuparse, iba a confiar en
Yoochun y en sí mismo, y lo daría todo y sería la mejor compañero y Alfa
cuando llegara el momento.
«Serás
increíble, Luna, nunca lo dudes.» Oyó la voz de Yoochun y el amor que vertía en sus palabras en su mente.
«No
me atrevería» respondió él con confianza. Su respuesta fue un suave apretón y una risita
entre dientes.
Continuara \\(^_^)//...
Niñ@s un comentario no les cuesta nada….
Gracias…
Q bueno q Junsu fue rescatado y ahora está con su yochunnie..Ahora quiero ver la historia del yunjae... Muero x leer lo próximo q nos traeras Poleht
ResponderEliminarYo tambien estoy feliz que el Yoosu por fin esten juntos y tambien quiero saber cunado se enteren de que el Yunjae si puedan estar juntos que pasara y tambien quiero saber si Chanming tendra pareja gracias por el capo esperare el siguiente con ansias
ResponderEliminarFascinante el cap. no puedo esperar por el siguiente me comen las ancias
ResponderEliminarque felicidad, cada vez que veo que subiste capitulo nuevo muero de la felicidad, diosss que bueno que junsu ya esta a salvo, y se esta recuperando, siii ya logren hacer los ritos de sangre, jajaaj morí de risa con la conversación de yunho y jaejoong,, jajaj me encanta como jaejoong provoca yunho , ya quiero saber que pasara con estos dos, por favor junsu ya diles a todos lo que pasa con la sangre de jaejoong, y tal hay muuchas probabilidades que el y yunho sean compañeros, se que estas muy feliz de estar finalmente con yoochun pero acuérdate de tu amigo que por dentro esta sufriendo de haberse enamorado de un hombre lobo que jamas sera suyo, no seas desconsiderado pliss, ya quiero leer el próximo capitulo :D
ResponderEliminarque lindo capítulo, por fin Junsu y Yoochun están de juntos para poder amarse y hacer los ritos de sangre.
ResponderEliminarMe encanta que Yoochun sea tan caballeroso y amoroso con Junsu... aunque me saca de onda que Junsu a veces sea sarcástico con él, jajaja...
Me muero porque pronto se unan y tengan su noche de bodas...
Gracias por el capi*
al fin están juntos Junsu Yoochun y los chicos y espero que a salvo de tanto loco que los quiere lastima pues ya están todos los lobos mas fuertes a su alrededor que los cuidaran y protegerán
ResponderEliminarGracias
Ay Por Dioooooos¡¡¡Como no amar a ese lobo cuando es tan lindo y amoroso con su pareja😍😍😍 juro que cada cosa que hace por Junsu me deja con la piel Chinita y se me atoran los suspiros nomas de leer y releer las cositas cukis que de suaurra😍😍😍. Estoy feliz de que esten ya junto¡¡¡ pero más por que los ritos si van a tener sus plus Romanticoooo¡¡¡ jijij Jae no entiende que cabrear a Yunho no le conviene jajaj ya era hora que Yunho le diera un poquito de su propio cocholate jajaj me mató con su respuesta jiji.
ResponderEliminarQue bueno al parecer ya fuera de peligro y sanando, ahora que sea su unión en Corea estarán muy bien y felices. Junsu dile ya a Jae que tiene aunque sea una gota d sangre de lobo, sácalo de esa tristeza que tiene por no poder estar con Yunho, aunque al parecer a Yunho no le importa ya que él es posesivo con Jae y no deja que nadie lo toque.
ResponderEliminarGracias!!!