viernes, 24 de febrero de 2017

Just One Drop. Cap 3




Yunho descansaba en su cama, viendo sin rumbo fijo hacia el techo. No podía dormir. Cada vez que cerraba los ojos veía su rostro. Jaejoong.

Su esencia estaba marcada a fuego en su cerebro, y el daño que él le había causado grabado en su memoria. El rostro de él se había ensombrecido con eso en el avión. Por primera vez en su larga vida estaba realmente inseguro sobre el camino que debía tomar.

Los sentimientos que se agitaban dentro de él hacia Jaejoong le eran ajenos.
La única cosa con la que podía compararlo era con lo que había sentido por Jihye, su hermana menor.

Ella había sido la luz más brillante de su vida.


Dulce, amable y gentil. No había un día que pasara sin que sintiera el agujero interno causado por su muerte. De alguna manera, cuando estaba con Jaejoong no se sentía tan vacío, tan solo.

Seguía esperando a que las señales de apareamiento aparecieran, a oír sus pensamientos, a que sus marcas cambien. Al mismo tiempo temía los cambios. Si los signos de apareamiento aparecían no tendría opción. Tendría que reclamar a Jaejoong, y eso lo asustaba más que nada desde el día en que vio a su hermana morir en sus brazos.

Volvió a pensar en ese horrendo día, lo impotente que se había sentido. Jihye estaba siendo cortejada por dos lobos, uno de los cuales era su verdadero compañero. Después de varios meses de persecución más o menos pasiva, se desafiaron el uno al otro. Jihye tenía que estar presente en el desafío por ley de la manada. Yunho le había suplicado que no fuera pero ella no era una infractora. Jihye siempre hacía lo que se esperaba de ella.

Los lobos pelearon y el vencedor tuvo compasión del otro lobo y lo dejó vivir. El lobo perdedor se tornó salvaje ante la idea de no tener a Jihye y la atacó antes de que nadie pudiera detenerlo.

Un auténtico compañero nunca sería capaz de ponerle una mano encima a su pareja, iba en contra de todo dentro de ellos. Su lobo moriría antes de levantar una mano contra su compañero.

El lobo perdedor había decidido que si él no podía tener a Jihye entonces nadie podía. Yunho había alcanzado al lobo demasiado tarde, la garganta de Jihye había sido desgarrada y la sangre brotó de ella desbordándose.

La rabia que consumió a Yunho le había dado más que suficiente fuerza para matar al lobo culpable y lo había descuartizado miembro por miembro.

Mientras sostenía a su hermana y veía la luz desvanecerse de sus ojos, ella dijo sus últimas palabras:

Cuando llegue el momento, hermano, no luches contra el destino. Deja que ocurra incluso si no sucede de la manera que piensas que debería. — Y entonces se había ido.

Jihye siempre había tenido la habilidad de saber cosas, cosas futuras. Nadie lo entendía y la manada con el tiempo lo aceptó.

Ahora mientras Yunho yacía sobre su cama, con sus emociones como una tormenta turbulenta dentro de él, se tuvo que preguntar si ella habría estado hablando de Jaejoong.

Agarró su teléfono de la mesa de noche para ver la hora. Una de la mañana.

Gruñó.

Mañana, u hoy, mejor dicho, iba a ser miserable si no conseguía dormir. Como Beta de la manada era su trabajo entrenar a los lobos más jóvenes. Incluso en el siglo XXI era necesario para los lobos saber cómo defenderse, en forma humana y de lobo.

Después del entrenamiento debía asistir a una conferencia telefónica con Siwon. Algunas de las manadas de los alrededores habían llamado y pedido hablar con él, pero no especificaron de qué se trataba. Cuando Yunho le había preguntado si tenía alguna idea del tema, Siwon negó solemnemente y le dijo que lo que fuera no creía que fuera una buena cosa. Aunque las manadas trataban de mantener la paz entre ellos, había veces que era más fácil decirlo que hacerlo. Los hombres lobo eran extremadamente territoriales y no les tomaba mucho meterse en un concurso de meadas… sin doble sentido.

Con un suspiro de frustración agarró los auriculares de su iPhone y se los puso, a continuación activó la canción “Down” de Jason Walker. Normalmente escuchaba rock clásico, pero necesitaba algo relajante para calmarlo esta noche, algo que le ayudara a enfocarse. Cerró los ojos y escuchó mientras las palabras de la canción se vertían sobre él. Mientras escuchaba, sintió como si hubiera sido escrita exclusivamente para él. Con cada palabra el rostro de Jaejoong se hizo más claro en su mente. Su contagiosa sonrisa, sus ojos brillando con malicia, el rápido ingenio que podría cortar a una persona a la mitad, o hacerlos sentir como la persona más importante en su mundo.

Imágenes corrieron a través de su mente de su tiempo en los Estados Unidos cuando él estuvo en el accidente, el miedo que había rasgado a través de él cuando había visto su forma inmóvil en el suelo. Recordó sentirse tan fuera de control mientras los médicos intentaban tratar a Jae cuando su lobo no quería a nadie cerca de él. Dejó escapar un gruñido bajo mientras su mente vagaba a su pequeña jugarreta con el macho humano, Matt. Claramente recordaba el nombre que Jaejoong había susurrado en su oído. Todavía no había hablado con él acerca de esa noche, acerca de lo que había pasado con este tipo Matt. Sonrió lentamente a sí mismo cuando finalmente comenzó a ir a la deriva. Planeaba hablar con él muy pronto acerca de Matt, y Yunho tenía el presentimiento de que no iba a estar demasiado contento al respecto.

Eso sólo le hizo sonreír más ampliamente.


>>>♥<<<


Jae, despierta. — Changmin quitó las sábanas de encima de su dormido amigo, permitiendo al aire frío verterse sobre él — Si no te levantas, traeré algo de agua y reviviremos algunos de esos buenos recuerdos del hospital.

Realmente creo que necesitas ayuda, Changmin — murmuró Jae — Arrojar agua en mi cara, tirar mi maleta por la ventana, ¿y tú crees que soy yo el perturbado? Es hora de que la bruja malvada mire en el espejo y pregunte quién es la más bella de todas. — Jae se incorporó y trató de quitar el sueño de sus ojos—  ¿Qué hora es? — gimió.

Son las nueve de la mañana y se supone que debemos encontrarnos con el tutor en treinta minutos. Empieza a moverte. Todos sabemos cuánto tiempo te lleva convertirte en una persona en la mañana. Te juro que eres tan malo como Junsu — le amonestó Changmin mientras tomaba la mano de Jae y lo jalaba fuera de la cama, empujándolo en dirección del baño.

Maldita sea, Changmin. Estoy levantado — se quejó Jae. Mientras cerraba la puerta del baño, Changmin lo oyó murmurar— Nota para mí mismo, cerrar la puerta del dormitorio en la noche para mantener a la alegre gente mañanera fuera.

Jae se paró frente al espejo del baño, con una toalla envuelta a su alrededor y peinó los enredos de su cabello mojado. No se iba a mentir y decir que hoy no estaba nervioso, estaba más allá de nervioso sabiendo que él estaba aquí. Yunho, el hombre lobo que al parecer no era capaz de dejar ir, sin importar lo que su mente le estaba diciendo. Su corazón le estaba dando a su mente el dedo medio.

Saltó ante el sonido de Changmin golpeando la puerta del baño.

Está bien, Bella Durmiente, vámonos. No vas a un concurso de belleza.

Jae abrió la puerta con fuerza.

Prueba con un personaje de Disney diferente, Thelma, porque para poder ser la Bella Durmiente tendría que estar durmiendo. — Las palabras de Jae salieron un poco más fuerte de lo que pretendía, pero Changmin no pareció estar afectado por eso.

De acuerdo, Jae. Habla. ¿Qué pasa? — Changmin entrecerró los ojos. Su mejor amigo estaba más tenso que un rollo de hilo de pescar.

Jae salió del baño y se dirigió hacia el armario. Agarró unos bóxer y comenzó a rebuscar a través de la ropa. Finalmente decidiéndose por un par de jeans a la cadera y un jersey de lana caliente, salió del armario y tomó un profundo respiro.

Estoy nervioso. Yunho regresó, como en está aquí en la mansión, lo que significa que las posibilidades de verlo son mucho mayores que cuando se había ido.

Changmin se acercó a su amigo y le echó los brazos a su alrededor por un rápido abrazo.

Realmente te tiene. — No era una pregunta. Changmin nunca había visto al firme y seguro Jae en tal confusión.

Tengo que hacer algo, Changmin. No sé qué, pero no puedo soportar esto. Nunca he querido a un hombre que no puedo tener. Tan presuntuoso como eso suena, la verdad es la verdad.

El dedo de Changmin estaba golpeteando en sus labios mientras cerraba los ojos pensando.

Uhm, ¿qué se está cocinando en ese cerebro sádico tuyo? — preguntó Jae nerviosamente.

Los ojos de Changmin se abrieron de golpe.

Estaba pensando que tal vez si conoces a alguien más entonces podrías pasar de tu peludo problema.

 ¿Mi peludo problema? ¿En serio? Haces que suene como si tuviera un crecimiento anormal de vello en las piernas o algo así. — Jae puso los ojos en blanco.

Mira. — Changmin detuvo a Jae antes de que pudiera salir de la habitación—  Sólo vamos a darle una oportunidad. Tú, yo, y Junsu… esta noche. Conseguiremos que Leeteuk nos lleve a algún lugar donde haya chicos. Entonces tú podrás hacer lo tuyo.

 ¿Lo mío? — preguntó Jae, alzando las cejas.

Sí. Ya sabes, lo tuyo. La cosa de la cacería caliente. ― Jae se rió.

Amigo, suena como una idea terrible con este tiempo. ― Changmin gimió.

Oh, vamos, Jae.

Jae lo interrumpió antes de que Changmin pudiera continuar.

No. No pongas esa voz quejumbrosa.

Entonces di que irás esta noche. — Lo retó Changmin — ¿O eres una gallina?

Realmente te gusta vivir al límite, ¿verdad, Thelma?

Oye, sólo digo lo que veo. — Changmin se encogió de hombros. Jae gruñó mientras echaba la cabeza hacia atrás.

Changmin sabía que no podía soportar ser llamado gallina. Kim Jaejoong era muchas cosas, pero una gallina no era una de esas.

Bien, iré. — Hizo una pausa, pensando en la idea de Changmin — Creo que una noche de fiesta es justo lo que recetó el doctor.

Excelente. — Changmin sonrió, frotándose las manos en contenido regocijo.

Hombre, me asustas a veces, Min. Verdaderamente, lo haces. — Tomó la mano de Changmin y comenzó a caminar hacia la puerta del dormitorio — Hagamos esto.


>>>♥<<<


Si esa tutora trata de meter algo más en mi cabeza, juro que va a explotar — se quejó Junsu.

Te apoyo. Estas tres horas al día están pateando mi trasero súper fino — gimió Jae mientras se deslizaba en un asiento en el comedor — Quiero decir, entiendo que tiene que condensar siete horas de la escuela en tres, pero en serio.

Lo sé, ¿verdad? — concordó Changmin mientras apoyaba la cabeza sobre la mesa después de tomar asiento frente a Jae.

Junsu se sentó al final de la larga mesa y se reclinó en la silla.

«¿Cómo estás, Luna?» Escuchó la voz de Yoochun en su mente y sintió sus dedos correr por su mejilla. Eso lo hizo temblar involuntariamente.

«Oh, ya sabes, aparte de sentir que mi cerebro se va a convertir en papilla y supurará por mis oídos, estoy genial». Lo escuchó reír, lo cual lo hizo a él sonreír como un idiota.

Veo que has estado trabajando en esa cara de estreñido cuando hablas con Cujo — bromeó Jae.

Junsu sólo le puso los ojos en blanco a su amigo.

«Los chicos quieren salir esta noche. ¿Te parece bien?» preguntó a Yoochun.

«Seguro, ¿a qué hora? Mi padre tiene una conferencia telefónica que iba a tener lugar esta tarde, pero se ha pospuesto para más tarde esta noche.»

«Está bien. Íbamos a pedirle a Leeteuk que nos lleve. En cierto modo quieren que sea del tipo sólo chicos.»

Eso realmente hizo reír a Yoochun.

«Estoy seguro de que Leeteuk estará muy feliz de saber que todos ustedes lo consideran uno de los chicos».

Junsu soltó una carcajada, provocando que Changmin y Jae ahora entornaran los ojos hacia él.

Lo siento — murmuró.

«Entonces ¿estás bien con eso, hombre lobo?»

«Creo que siempre y cuando Leeteuk esté con ustedes puedo lidiar con eso. Te amo, Junsu».

«Qué curioso. Precisamente estaba pensando lo mismo de ti». Sintió los labios de Yoochun contra los suyos. Todavía se estaba acostumbrando a ser capaz de sentirlo aunque no estuviera con él.

Houston, estamos listos para despegar. — Sonrió Junsu. Jae miró a Changmin, luego otra vez a Junsu.

 ¿Fumaste algo esta mañana y no compartiste? ― Junsu puso los ojos en blanco.

 ¿De verdad crees que tengo que fumar algo para estar feliz cuando me despierto junto a Yoochun todas las mañanas?

De acuerdo, punto para ti — dijo Jae, despachándolo con un movimiento de la mano.

Entonces, ¿entiendo que estás diciendo con toda esa referencia a Houston que saldremos esta noche? ¿Que la operación “olvidar al hombre lobo mandón” ha obtenido luz verde? — preguntó Changmin.

Jae se cubrió la cara y gimió al oír las palabras de Changmin.

 ¿En serio acabas de decir eso? ¿Operación olvidar al hombre lobo mandón? ¿En serio, Changmin?

Changmin asintió con toda seriedad.

Bien, si vas a llamar a nuestra salida una operación, y sabes cómo me encantan las operaciones, al menos hazlo bien. Es operación “olvidar al jodido hombre lobo atractivo, taciturno y mandón” — completó Jae.

Muy apropiado. — Changmin chocó puños con Jae, contento de ver que su amigo estaba recuperando su sarcástico sentido del humor.

Bien, chicos. Creo que tenemos que irnos y comenzar la fase uno de la operación OAJ, HLA, TM. — Junsu intentó decirlo con una expresión seria pero tan pronto como se dio cuenta de que OAJ no rimaba con el resto en su pequeña abreviación perdió la batalla. Jae y Changmin se rieron con él mientras se dirigían a las escaleras.

 ¿Cuál es exactamente la fase uno? — Jae enarcó las cejas ante Junsu.

La fase uno, querido, es encontrar a tu papacito interior.

Ahh, lo entiendo. — Asintió Changmin — Todo se trata de abrazar a tu zorra interior.

Jae negó.

Creo que el aire es más escaso aquí porque ustedes dos claramente no están recibiendo suficiente oxígeno para el cerebro.

Oh, vamos. Danos un respiro. De todos nosotros, tú eres quien ha abrazado a su zorra interior como una forma de arte — le dijo Changmin.

Cierto, muy cierto, Changmin. Soy un experto en todas las cosas de putas. — Jae se estaba riendo tan fuerte como Junsu y Changmin cuando Yunho dio la vuelta en la esquina.

Los tres chicos se congelaron mientras Yunho siguió adelante hasta que se detuvo frente a Jae. Por un breve momento simplemente se miraron el uno al otro. La intensidad que fluyó entre ellos era fuerte y casi sofocante.

Puse tu ropa y tu maleta en tu habitación — le dijo Yunho.

Jae dio un paso atrás, sorprendido por sus palabras. Yunho había visto la ropa en su maleta, y por ropa se refería a sus prendas íntimas. Sabía que su rostro debía estar rojo brillante porque los ojos de Yunho brillaron cuando le devolvió la mirada. Antes de que él pudiera responder, él se inclinó y le susurró al oído.

Por favor, no permitas que tus amigos lancen tu ropa por la ventana. Tuve que asegurarme de que los lobos que encontraron tus cosas regresaran todos los recuerdos que tomaron; recuerdos que causarían que tu bello rostro se encienda en diez tonos de rojo. — Él sintió su aliento en su cuello, y él inhaló profundamente antes de alejarse.

Junsu una vez le había dicho que cuando un hombre lobo hacía esa treta, era porque estaba asimilando el olor de una persona. Se estremeció ante el pensamiento y no pudo evitar girar para ver a Yunho alejarse.

Jae por fin notó a sus dos amigos, quienes lo miraban con la boca bien abierta.

 ¿Escucharon eso? — preguntó.

Ambos chicos negaron, todavía incapaces de hablar, todavía atrapados en sus estados de shock por el comportamiento de Yunho.

Maldita sea, ustedes dos. No sólo se queden ahí de pie. Métanse a mi habitación para poder darles el 911. — Jae empujó a sus dos mejores amigos hacia la puerta de su dormitorio, todo el tiempo tratando de averiguar lo que había tenido lugar en el pasillo.

Una vez en la habitación, Jae cerró la puerta y se recargó contra él. Con la cabeza presionada hacia atrás, cerró los ojos y ralentizó su respiración. El condenado lobo iba a darle un infarto. La frustración lo recorrió por completo. ¿Por qué él? ¿Por qué su corazón tuvo que escoger al único hombre que nunca podría tener?

 ¿Qué te susurró al oído, Jae? — preguntó Junsu. Jae negó, tratando de aclararse.

Me dijo que no dejara que mis amigos tiraran mi ropa por la ventana. — Hizo una pausa y miró fijamente a Changmin, quien tuvo el buen sentido de parecer avergonzado — Porque tuvo que recuperar mi ropa, la cual llamó recuerdos, de los lobos que al parecer la encontraron. — Se rió para sus adentros, sabiendo que estaba una vez más del color de un betabel — Y por el tono de su voz, al decir recuerdos debieron de haber sido mis prendas íntimas.

Junsu se echó a reír.

 ¿Acabas de llamar a tus boxers y tangas “prendas íntimas”?

Eso es clásico. — Changmin se rió.

 ¿Podrían por favor ustedes dos Pollyanna1 centrarse? — los amonestó Jae.
1 Pollyanna: Se usa para describir a una persona que es optimista de manera exagerada.

Lo siento — dijo Junsu, tratando de recuperar la compostura — No, de verdad. Estoy bien. Por favor, continúa.

Jae puso los ojos en blanco.

Entonces hizo toda esa cosa de la olisqueada que dices que Yoochun te hace. La cabeza de Junsu se levantó como rayo.

 ¿Te olfateó? — La alarma en su voz causó que algo de incomodidad levantara su fea cabeza en Jae.

Uhm, sí. ¿Eso es un problema?

Sólo es tremendamente posesivo… y muy íntimo. Si Yoochun ve a otro lobo olfateándome lo desmembraría.

Jae reflexionó sobre esto sólo brevemente antes de decidir que era hora de seguir adelante.

Olvidemos todo esto. Ni siquiera quiero entrar en el hecho de que Yunho ha visto…

Tu ropa interior — resopló Changmin mientras interrumpía a Jae.


Oh, cállate, Thelma — espetó Jae mientras se dirigía hacia el armario en busca del traje para la noche.

De acuerdo, pensó, tengo que recurrir a mi zorra interior.

Se echó a reír mientras empezaba a rebuscar a través de su ropa. Changmin y Junsu se unieron a él en el gran armario y comenzaron sus propias búsquedas.

Oooh, ¿qué tal esto? — preguntó Changmin mientras sostenía un corto mini short de mezclilla y una camisilla sin mangas.

Uhm, Changmin, estamos en Corea en la época de invierno. ¿Te dice algo eso? — preguntó Junsu.

Oh, cierto. Frío. Lo tengo — dijo mientras colgaba el traje de nuevo. Jae sacó un par de jeans Lucky a la cadera. Él y Junsu compartían amor por la marca. Después agarró un mullido jersey profundamente colorido con un escote bajo. Tenía corte entallado para un ajuste perfecto.

Me gusta. — Asintió Junsu en señal de aprobación.

Junsu y Changmin tomaron prestadas camisas de Jae. Changmin eligió un suéter rojo oscuro de amplias mangas que colgaba elegantemente de sus hombros. Junsu escogió uno del color de su preferencia, un suéter tipo vestido verde que planeaba llevar con mallas gris oscuro y botas. Con sus elecciones hechas, se dirigieron hacia sus respetivos baños a cambiarse.

Está bien, encontrémonos aquí de nuevo en veinte minutos para la fase dos — advirtió Changmin.

 ¿Me atrevo a preguntar cuál es la fase dos? — preguntó Jae aprensivamente.

Ha pasado demasiado tiempo desde que hemos salido si tienes que preguntar — le dijo Changmin — Peinado y maquillaje, Jaejoong. Tenemos que tomar toda esta belleza natural y hacerla brillar.

 ¡Cieeeeeeerto, brillar! Estoy en ello, jefe — bromeó Jae.




>>>♥<<<


¡Vamos! ¿En serio, Shindong? ¿Eso es todo lo que tienes para darles a estos cachorros? — gruñó Yunho mientras observaba a los lobos que estaba entrenando en boxeo.

Yunho sabía que su frustración no venía realmente de las deficiencias de los lobos sino de cierto rubio bocazas que tenía sus garras en él tan profundamente que podía sentir la sangre bajando por su espalda. Lo triste acerca de toda la situación: a él le gustaba. «Sí», pensó, «definitivamente hay algo mal en mí.»

Shindong le gruñó a su Beta.


Guárdatelo para la lucha, Shindong. No estarías gruñéndome si no supieras que tengo razón. — Yunho entró en el círculo de combate que estaba pintado en el suelo del gimnasio — Tómate un descanso por un minuto — le dijo, luego se volvió hacia el joven lobo conocido como Suho.

Yunho sonrió lobunamente.

 ¿Preparado para un verdadero desafío?

Antes de que el cachorro pudiera responder, el Beta atacó.

Yunho enseñaba artes marciales mixtas a todos los lobos, incluso las hembras y doceles. Era imperativo que todos ellos supieran cómo defenderse en caso de que otra manada atacara alguna vez. Por supuesto, había pasado más de un siglo desde la última batalla entre manadas, pero Yunho era un firme creyente en “mejor prevenir que lamentar”.

Lanzó una serie de golpes y patadas practicadas en el Muay Thai. Era un tipo de kickboxing, y el arte marcial mixta predominante que enseñaba junto con el Judo y lucha en el suelo.

Suho intentó contrarrestar los movimientos de Yunho, pero sin importar lo que hiciera no pudo evitar que los golpes dieran en su objetivo. Después de sólo cinco minutos Yunho derribó a Suho.

No se molestó en mantener al cachorro subyugado. Se puso de pie y retrocedió, indicando que el combate había terminado.

Comprobó su reloj y vio que tenía sólo veinte minutos antes de que tuviera que estar en la reunión con Siwon y los demás Alfas.

Eso será todo por hoy — le dijo al lobo más joven — Hiciste un buen trabajo. — Yunho agarró su toalla del suelo y se dirigió de vuelta a su habitación para tomar una ducha rápida. Mientras caminaba, su mente vagó de nuevo a donde parecía estar siempre: Jaejoong.

Recordaba caminar a través del ala de la mansión que alojaba a los machos sin compañero y captar su aroma. Yunho podía admitir ahora que tal vez había sobreactuado ligeramente cuando irrumpió en la habitación y encontró a dos machos rebuscando en su maleta. Así que, tal vez no tenía que haber arrojado a Chen a través de una pared. Y, sí, podía haber evitado lanzar a Kai justo encima de Chen. Pero en ese momento su lobo había tomado el control, y todo en lo que podía pensar era en que su aroma estaba alrededor de los machos sin compañero, que estaban tocando sus cosas… cosas que sólo él debería conocer. Yunho había pasado por alto ese pequeño dato, acerca de por qué en la tierra pensaba que tenía derecho a conocer su ropa interior.

Había sentido que si no tomaba sus cosas y su esencia de la habitación de ellos iba a matar a alguien, sin lugar a dudas. Uno de aquellos cachorros habría muerto esa noche.

Gracias a Dios, habían sido un tanto inteligentes y se habían sometido inmediatamente. Cuando Yunho les preguntó cómo habían conseguido las cosas de Jaejoong le habían contado acerca de cómo una maleta había caído de una ventana de la mansión. Siendo estúpidos veinteañeros, vieron lencería y simplemente tuvieron que echarle un vistazo… estúpidos lobos jóvenes.

Yunho se había calmado de alguna manera antes de devolver la maleta a la habitación de Jaejoong, pero realmente no había estado preparado para tropezar con él. Sin embargo, tenía que decir que verlo solo — o sin otros machos a su alrededor, mejor dicho — calmó a su lobo inmensamente. Era otra cosa que no quería analizar. Después de todo, ¿por qué debería él calmar a su lobo? No había signos de apareamiento.

El Beta dejó salir un gruñido bajo mientras entraba en su habitación y se dirigía a la ducha.

Tenía que dejar de pensar en él, simplemente estaba fastidiándolo. Llamó estúpidos a los veinteañeros, pero en ese momento él los hacía parecer genios.

Yunho entró en la oficina de Siwon. Una gran pantalla había sido instalada para la vídeo conferencia con los demás Alfas de manada.

Siwon estaba sentado ante su escritorio, y Yoochun y Shindong estaban sentados directamente delante de la pantalla.

Yoochun, ¿a qué hora dijo Leeteuk que estaría de vuelta con los chicos? — preguntó Siwon a su hijo.

Yunho observó curiosamente cuando la cabeza de Yoochun se alzó rápidamente.

No lo hizo — dijo a medio gruñido.

Bueno, ¿a qué club dijeron que iban a ir? — continuó Siwon, ignorando muy obviamente la irritación de Yoochun.

No lo dijeron.

Yunho olió la mentira que Yoochun acababa de decir y eso fue suficiente para decirle que algo estaba pasando.

Disculpa, Alfa, pero cuando dices Leeteuk y los chicos, te refieres a… ―Siwon le interrumpió antes de que pudiera terminar.

Jae, Junsu, y Changmin, por supuesto.

Yunho sintió a su lobo animándose y si hubiera estado en su forma de lobo el pelaje de su cuello se habría puesto de punta.

 ¿Dices que fueron a un club?

Sí. Leeteuk dijo que habían acudido a él y le habían rogado que los llevara a una noche de chicos. Algo acerca de hacer que Jae y Changmin conectaran con el… creo que usaron las palabras “mojo coreano”, o alguna tontería así. — Siwon puso los ojos en blanco — Ya sabes cómo hablan esos tres. Es como una lengua extranjera por sí sola.

Yunho había dejado de escuchar después de las palabras “conectar”, y antes de que se diera cuenta de lo que estaba haciendo se dirigía a la salida.

Yunho, detente. — La voz de Siwon rezumó autoridad y Yunho no tuvo otra opción sino permanecer inmóvil. Su Alfa había dado una orden y usado su poder. Yunho no podía desobedecer.

Alfa, tienes que saber que esos tres van a meterse en alguna clase de problema. Son como imanes para el caos. — Yunho trató de razonar con su Alfa. Sintió el poder de Siwon suavizarse y fue capaz de darse la vuelta y mirar a la cara a los demás lobos. Hizo contacto visual con Yoochun y gruñó — ¿Sabías que este era su plan y aun así dejaste ir a tu compañero?

Yoochun soltó una risa.

Espera hasta que tengas un compañero, hermano, y luego me cuentas cómo lo dejas hacer algo o no lo dejas hacer algo, y cuando lo estés compartiendo yo me reiré mientras te sacas su zapato del trasero.

A Yunho no le hizo gracia, y aunque entendía que ser compañeros era una alianza, tenía que haber momentos en los que, como su protector, tenías que ponerte firme.

Leeteuk vigilará a los chicos y las mantendrá a salvo. Tengo completa confianza en él — le apaciguó Siwon — Si después de la conferencia con los Alfas aún sientes la necesidad de ir a acorralarlos entonces tienes mi bendición, y mi simpatía.

Yunho cedió y tomó asiento en una de las sillas junto al sofá. Justo cuando se sentó la pantalla se encendió y allí estaban cuatro hombres cada uno en su propio cuadrado pequeño mirando hacia ellos. Yunho estuvo bastante sorprendido de ver a Kim Junho, el padre de Junsu, entre ellos.

 ¿Sabías que él estaría en esto? — le susurró Yunho a Yoochun. Yoochun sacudió la cabeza.

Estoy tan perdido como tú.

Siwon caminó alrededor de su escritorio y permaneció de pie detrás del sofá. Era el Alfa y no se sentaría en presencia de otro Alfa, aunque fuera a través de la pantalla de un ordenador.

Junho, ¿cómo estás? — preguntó Siwon al padre de Junsu.

Estoy bien, Siwon. Gracias por preguntar. — Junho miró a Yoochun — Yoochun, ¿cómo están tú y tu nuevo compañero?

Estamos muy bien — le dijo Yoochun.

Ni Yoochun, ni Siwon, ni Junho mencionaron que el nuevo compañero de Yoochun era el hijo de Junho.

Si los demás Alfas no lo sabían, no era algo que pudieran usar potencialmente contra las manadas de Junho o Siwon. Aunque era una manera triste de vivir, las manadas podían ser muy volátiles entre unos y otros. Los lobos eran astutos y siempre buscaban una forma de tener la sartén por el mango.

Me gustaría presentar a los miembros de mi manada que están presentes — dijo Siwon a los Alfas.

Señalando a cada lobo mientras hablaba, anunció:

Este es Yunho, mi Beta. — Yunho dio un simple asentimiento en reconocimiento a los demás Alfas. No era irrespetuoso, pero tampoco estaba concediéndoles su dominancia sobre él.

A decir verdad, Yunho podía ser el Alfa de su propia manada, era más que suficientemente dominante. Pero acontecimientos de su vida y su lealtad hacia Siwon habían configurado sus decisiones, dirigiéndolo a donde estaba ahora.

Este es Yoochun, mi hijo y heredero — continuó Siwon — Y este es Shindong.
Está entre mis cuatro lobos principales.

Cuando Siwon terminó sus presentaciones, a continuación, cada hombre en la pantalla se presentó. Estaba Jin de Japón, KangTa de China, Jiro de Taiwán, y Junho de los Estados Unidos.

Completadas las presentaciones, Siwon y sus lobos esperaron a que uno de los cuatro Alfas explicara por qué habían convocado una conferencia.

Me doy cuenta que no es una práctica común para nosotros reunirnos de esta forma, Siwon, pero los demás Alfas y yo estamos preocupados acerca de la continuación de nuestra especie — explicó Jin — Verás, ha pasado más de una década desde que alguno de mis lobos ha encontrado un compañero. Ha pasado media década desde que cualquier niño ha nacido. Nos estamos convirtiendo en una especie en extinción.

Durante un momento, nadie habló. Luego Siwon dio un paso adelante, de brazos cruzados, y miró a cada Alfa brevemente antes de hablar.

Obviamente has llegado a algún plan si se has convocado esta reunión. ¿Cuál es este plan para ayudar a nuestra especie a sobrevivir?

Esta vez fue KangTa el que habló.

Después de discutirlo con Jin decidí hacer algo de investigación en nuestros archivos de manada y ver si había alguna documentación que pudiera ayudar. — Las palabras de KangTa comenzaron a tomar velocidad mientras compartía lo que había descubierto — Ha habido muchas prácticas realizadas por antiguas manadas que simplemente se han desvanecido del conocimiento. Una de esas prácticas se llamaba El Encuentro. — KangTa levantó lo que parecía un pergamino muy antiguo y comenzó a leer — Yo soy Aron, Alfa de la manada de Taiwán. Este es el reporte de las cuatro manadas, Japón, China, Corea, y la mía propia, Taiwán, todas las cuales han acordado una tregua. Los Alfas de estas cuatro manadas se han reunido esta noche y decidido implementar una nueva tradición. Deberá escribirse en nuestros archivos de manada como una tradición para ser seguida cada cuatro años. El decreto es como sigue: Todos los miembros de la manada de sangre pura sin compañero mayor de edad debe asistir a El Encuentro. El Alfa, cuatro parejas acopladas dominantes, y su compañero deben acompañar a estos miembros de la manada. Las hembras y doceles sin compañero pueden traer damas para ayudarlas a prepararse para El Encuentro. El mismo se llevará a cabo en los Alpes de Transilvania en una propiedad que ha sido adquirida por tres Alfas de manada como regalo para ser usada por nuestra especie en este evento. El propósito de El Encuentro es ayudar a reunir a lobos sin compañeros de otras manadas y con suerte encontrar verdaderos compañeros entre ellos. Está en nuestra naturaleza ser territoriales y poco colaboradores con otras manadas, pero si no dejamos de lado estos hábitos y ponemos el bien común de la especie en primer lugar, un día dejaremos de existir. Este mundo seguirá adelante como si los Hombres Lobo TVXQ nunca hubieran existido. Si un Alfa y sus miembros sin compañero de la manada son invitados a unirse a El Encuentro y rehúsan, será tratado como un acto contra la especie y ese Alfa estará sujeto a un desafío. Si es derrotado, sus miembros de la manada serán divididos entre las otras manadas. Tenemos que estar alerta si queremos sobrevivir. Tenemos que reconocer que las mismas cosas que con frecuencia nos hacen más fuertes y nos mantienen a salvo tienen el potencial de aniquilar a nuestra especie.

Cuando KangTa terminó de leer, cada uno de los lobos simplemente miraba fijamente, estupefactos. De todas las cosas sobre las que esta reunión podía haber sido, ésta no había sido siquiera registrada en su lista de posibilidades. El propio Siwon nunca había oído hablar de tal decreto en su larga vida.

Podía apreciar el hecho de que era definitivamente un modo de encontrar a su otra mitad para aquellos que no tenían compañero, pero era también un riesgo poner a tantos machos sin compañero juntos. Sólo por esa razón comprendió la importancia de tener parejas dominantes acopladas allí.

 ¿Estás diciéndonos que quieres implementar este decreto ahora, en estos tiempos? — Preguntó Siwon incrédulo, pero continuó antes de que otro pudiera responder — Caballeros, no vivimos en una época donde a las hembras y doceles se les dice qué hacer. Vivimos en el siglo XXI con jóvenes liberales.

Siwon, sabemos que este concepto es extraño y un tanto anticuado, pero nosotros no somos humanos. — Era ahora Jiro, el Alfa de Taiwán, quien tomó la palabra — Puede que vivamos en su mundo pero no, podemos vivir como ellos. Somos una especie creada para la manada, para la familia. Nuestros machos, especialmente los dominantes, no tienen el lujo como los humanos de salir con quienquiera que quieran durante tanto tiempo como quieran. Necesitan la luz y la paz que un verdadero compañero les traerá. Necesitan que la oscuridad que reside en el interior de su lobo sea mantenida a raya por su verdadero compañero. ¿Qué mejor manera de ayudarnos a nosotros mismos que reunirlos?

Supongo que si lo planteamos de modo que sea visto como en beneficio de nuestra especie, tal vez los que no tienen compañero lo aceptarán y lo verán desde una perspectiva positiva — concedió Siwon, sabiendo que si estos Alfas habían puesto su mente en hacer esto entonces había poco que pudiera hacer para detenerlo sin traer una guerra a su puerta.

Siwon notó que Junho no había tomado la palabra.

Junho, ¿qué tienes que decir con respecto a este método?

Fui abordado por KangTa, y aunque en el pasado era difícil incluir manadas que estaban tan lejos, los viajes modernos obviamente han solucionado eso. Los Alfas pensaron que sería bueno que una manada americana viniera y trajera sangre nueva, por así decirlo. Creo que la idea tiene fundamentos y vale la pena examinarla.

Antes de que Siwon pudiera responder, KangTa habló de nuevo.

Pensamos, si quieres ceder, que debido a que tu hijo encontró a su compañero en los Estados Unidos sería pertinente para nosotros incluir a una manada americana. Ya que conoces a Kim Junho, él fue el primero en el que pensamos.

 ¿Ya no hay secretos en este mundo? — farfulló Yunho. Hasta ahora, sin embargo, no tenía realmente ninguna objeción a la idea. La persona que no quería que fuera no era pura sangre, así que no tenía que preocuparse por ello. «Gracias a la luna», pensó.

También hemos decidido, ya que el compañero de Yoochun no es pura sangre, que tal vez sería conveniente incluir a los mestizos y latentes en El Encuentro. Obviamente son verdaderos compañeros potenciales.

«Y aquí va el otro zapato» pensó Yunho.

Ahora él tenía un problema con ello. Si éste era su decreto, entonces Jaejoong sería requerido para ir. Ya que estaba bajo el cuidado de Siwon, y tenía sangre de lobo, básicamente haciéndolo de la manada, él sin duda tenía que acudir a El Encuentro.

«Este día simplemente se pone cada vez mejor», pensó Yunho mientras pasaba las manos por su cabello, apretando la mandíbula. Primero encontró a sus sarnosos compañeros de manada examinando las cosas de Jaejoong, luego descubrió que Jaejoong estaba en un club haciendo Dios sabe qué con algún chucho… o peor, un humano. Un gruñido bajo retumbó en su pecho ante el pensamiento.

Ahora Jaejoong sería requerido para estar alrededor de otros machos sin compañero. Yunho era muy consciente del hecho de que todo este día, lo bueno y lo malo, giraba alrededor de un bocazas, perverso y mandón rubio, y que alguien lo salvara, porque a su lado era el único lugar donde quería estar en este momento. Las palabras de Siwon finalmente lo trajeron de vuelta al aquí y ahora.

Dado que obviamente han asumido la responsabilidad de planificar todo esto ustedes mismos sin consultarme primero — las palabras de Siwon estaban atadas con poder; incluso los Alfas en la pantalla pudieron sentirlo y apartaron sus ojos del Alfa coreano — ¿han fijado también una fecha para El Encuentro?

No queríamos faltarte al respeto, Siwon — le dijo Jin — Estabas en los Estados Unidos, ocupado con tus propios asuntos y no quisimos agobiarte con esto hasta que estuvieras de vuelta con tu manada.

Siwon ofreció un simple asentimiento en reconocimiento a sus palabras, pero continuó haciéndoles bajar la mirada mientras esperaba una respuesta.

La fecha está fijada para un mes a partir de hoy — respondió KangTa — Será realizado en el emplazamiento tradicional de los Alpes de Transilvania y la gran propiedad mencionada en el decreto ha sido renovada y ampliada a lo largo de los años. Está ahora siendo preparada para nuestra llegada.

Les concederé esto — comenzó y los demás soltaron el aliento — Pero — continuó Siwon, su voz calmada y controlada — si alguna otra vez hacen tales decretos sin mi conocimiento, sin mi aportación y sin mi visto bueno, les recordaré por qué soy el Alfa de la manada más grande del mundo. Los respeto a todos como Alfas y espero lo mismo de cada uno de ustedes.

Como tú has dicho, así será. — Cada Alfa habló en su propia lengua, reconociendo la dominancia de Siwon.

Estaré en contacto a medida que el tiempo se acerque — les dijo Siwon justo antes de apagar la pantalla, poniendo fin a la conversación. Se volvió a Yunho — Pon a Junho al teléfono.

Yunho asintió mientras sacaba su teléfono móvil y marcaba el número de Kim Junho. Le tendió a Siwon el teléfono tan pronto como oyó el “hola” del otro lobo.

Junho, soy Siwon. ¿Cuándo llegarás?

Creo que iré aproximadamente una semana antes de El Encuentro. Mi compañera quiere reunirse con Junsu — explicó Junho.

Tú y los tuyos son bienvenidos a quedarse en nuestra casa en los Alpes hasta que sea hora de ir a la propiedad. Estoy seguro de que me darás más detalles sobre la forma en que todo esto se produjo y por qué no me llamaste y me advertiste acerca de lo que los demás habían estado planeando. — Las palabras de Siwon, aunque firmes, no fueron amenazadoras o crueles.

Hablaremos cuando llegue. — Junho hizo una pausa — ¿Cuándo estás planeando decírselo a los chicos?

Mientras antes mejor — respondió Siwon — Esos tres son casi tan impetuosos como un lobo pura sangre Coreano.

Entonces llamaré a Junsu mañana. — Con eso, Junho desconectó.

Siwon se frotó la cara como si finalmente cediera y se sentó en una de las sillas vacías.

 ¿De verdad esperan que Jaejoong vaya a este Encuentro? — Yunho escupió las palabras como si fuera un bicho asqueroso.

No tengo elección, Yunho. — Siwon miró ferozmente a su Beta — Ya sea que tú y tu lobo lo hayan aceptado o no, él es de la manada. No importa la cantidad de sangre en él, tiene Canis lupis en sus venas y eso lo hace someterse a nuestras leyes. Trata con ello de la manera que necesites. Gruñe, ten un berrinche, permite a tu lobo cazar, acepta tu atracción hacia él… haz lo que sea que debas, pero supéralo. ¿Queda claro?

Cristalino — gruñó Yunho, pero se sometió mostrando su cuello.

Shindong. — Siwon se dirigió al lobo que había estado sentado silenciosamente y observando como era su costumbre — Necesito una lista de todos los miembros sin compañero de la manada.

La tendré para ti en menos de una hora — respondió mientras se levantaba y salía de la oficina de Siwon.

Yunho, organiza una reunión de manada para mañana por la noche. Nos reuniremos en la sala audiovisual más grande a las 8 p.m.

Hecho. — Asintió Yunho.

De repente, Yoochun dejó de pasearse. Cerró los ojos como si se concentrara.

 ¿Qué ves, hijo? — preguntó Siwon.

Yoochun estaba captando destellos de la mente de su compañero, aunque él estaba tratando de bloquearlo. Aún no había aprendido que ahora que estaban emparejados le tomaría una concentración íntegra para bloquearle. El pequeño arpía y sus dos amigos estaban causando bastante revuelo en uno de los bares locales. Vio a Jae en su mente. Estaba encima de la barra… bailando. Yoochun sonrió.

 ¿De qué te ríes? — gruñó Yunho, sabiendo que no iba a gustarle la respuesta.

Creo que es hora de acabar con su noche de chicos antes de que Jae se caiga de la barra — le dijo Yoochun, y aunque lo intentó no pudo esconder la risa burlona en sus ojos mientras veía sus palabras penetrar en la mente de Yunho.

 ¿Está en una barra?

Oh, necesitarás algo mejor que eso, Beta. — Se rió Yoochun — Está encima de una barra, como en bailando sobre una barra. Los clientes están bastante cautivados con él.

Yunho estaba fuera de su asiento y abriendo de golpe la puerta de la oficina de Siwon antes de que Yoochun terminara su frase.

 ¿Tenías que burlarte de él? — le regañó Siwon. Yoochun se encogió de hombros.

Ver al duro y calmado Beta ser sacado de quicio es demasiado como para dejarlo pasar, Alfa.

Siwon trató de esconder su sonrisa mientras sacudía la cabeza a su único hijo.

Bien. Pero date prisa y ve con él o destrozará el maldito bar. No tengo el tiempo o la energía para tratar con ese desastre.

Como digas. — Yoochun le dio un guiño a su padre mientras seguía a Yunho.

«Luna, te estoy dando una advertencia justa. Tu pequeña salida nocturna ha sido descubierta por el objeto de tus burlas. ¿Crees que es acertado, mi amor, hostigar a un macho dominante?»

Yoochun pudo sentir su sorpresa al escuchar la voz de él en su mente. Sonrió; le encantaba sorprenderlo. Era un buen cambio de ritmo ya que él era normalmente el sorprendido.

«Mierda. ¿Está de camino hacia aquí?» Yoochun oyó la ansiedad en su voz.

«Está pisándote los talones, amor».

«Estás disfrutando demasiado de todo esto, Colmillo Blanco».

«Aw. Vamos, Junsu, esa no es forma de hablarle a tu compañero». Rió Yoochun.

«Sólo recuerda, hombre lobo, seguiré adelante con mi amenaza de tener esa caseta de perro que hablamos construida para ti. Ahora, ¿cuánto tiempo?»

«Me hieres con tus palabras, Luna».

«Yoochun, no estoy jugando contigo. ¿Cuánto tiempo hasta que la taciturna bola de pelos llegue?»

Yoochun no se molestó en decirle a Junsu que él y Yunho habían estado conduciendo mientras ellos habían estado conversando. El bar estaba a sólo cinco minutos de la mansión. Sonrió para sí mismo cuando él y Yunho se bajaron del Hummer. Yunho había estacionado directamente detrás del auto de Leeteuk, bloqueando efectivamente cualquier oportunidad para escapar.

Mientras Yoochun abría la puerta del bar, se fijó en la escena y casi pierde la compostura.

«Estás impresionante, Luna, aunque un poco escaso de ropa.» Yoochun observó mientras los ojos de Junsu, grandes como platos, se encontraban con los suyos a través del bar. Sonrió perversamente. Levantando las cejas, susurró en su mente: «Te tengo.»

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Continuara \\(^_^)//...

Niñ@s un comentario no les cuesta nada….
Gracias…

7 comentarios :

  1. Oh wow este capítulo me encanto y promete que el siguiente será super genial con un Yunho enojado y emberrinchado x un Jae seductor arriba de la barra... Muero x leer el siguiente.....

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  2. por todos los cielos espero que con todo esto se termine de animar Yunho y acepte lo que siente por Jae y lo reclame el primero antes de que otro se adelante pues tendrá pelea segura y Jae el mas feliz de hacerlo reventar de los celos
    Gracias esto se pone muy bueno

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  3. Si seria bueno que Yunho se anime y acepte lo que siente por Jaejoong para que el no pueda ir a ese encuentro y por que la compañera de Junho quiere conocer a Junsu ojala nque no pase nada malo ni con el Yunjae y el Yoosu y por favor pareja para Min gracias por el capo esperare el siguiente

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  4. omg omg omg, dios estuvo buenísimos este capitulo, ya quiero saber como sera la cara de yunho cuando vea a jaejoong bailando, jajaj, sera tan divertido, ahhhh esa reunión me preocupa, dios que pasara con jae y yunho , esperare con ansias el próximo capitulo

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  5. Yunho es un caos ni el sabe lo que quiere pero ys debe dejar de pensar en lo que paso a jihye.
    Si va a poner emocionante ahora que Yunho esta en el bar

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  6. Jajaja Yunho esta contagiado de ese sarcástico chico que le volteo el mundo de cabeza jajaj me.mató de risa su"Cristalino..." jajajaj. Muero de ganas por saber que caramba esraban haciendo ese trio con taaan poca ropa... cuando salueron con lindo sueteres de su casa... jajaj nooo puedo creer que Junsu ordene y mande lo qye Chunnie le debe permitir o no hacer... Eso enbdefinitiva hace añicos la posesivodad de Yunho jajaj ni el sabe para donde jalar cuando se trata de Jae y sus sentimientos por el. Que hay de ChangMin???? Como es que él no muestra indisios de querer amar y ser amando???

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  7. Ya sabía que Yunho era así con Jae por una razón y fue lo que paso con su hermana. Haber que pasa en ese bar, Yunho llegó embravecido y ver como reaccionan ambos, haber si así Yunho se anima y reclama a Jae como suyo antes que en El Recuentro alguien quiera hacerlo.

    Gracias!!!

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