El resto de la semana que tenían juntos
pasó muy rápido tanto a los ojos de Jaejoong como a los de Yunho. Una semana
era muy poco tiempo para conocerse con la persona con la que ibas a pasar el
resto de tu vida, pero aunque Yunho estaría ocupado después, aun así pensaba
hacerse tiempo para estar con el salcor, solo que tal vez no tanto como le
gustaría.
Yunho se enteró que Jaejoong adoraba
comer mandarinas, el momento en el que el sol comenzaba a ocultarse en el
horizonte, el olor a tierra mojada y a pino fresco, que era el menor de nueve hijos,
que necesitaba estar al menos día de por medio unas horas bajo el sol, que su
gente tenía de diosa principal a Demeter y que su mejor amigo se llamaba
Yoochun.
Jaejoong aprendió que Yunho comía comida
además de beber sangre, que su mejor amigo se llamaba Donghae, que su madre es
una enfermera, que es muy bueno en hapkido y karate, que su dedo meñique se
dobla hacia atrás hasta tocar su mano, que le encantan las frutillas, que
tiende a olvidar las cosas con facilidad, que le encantan los niños y que odia
perder en lo que sea que haga.
Las cosas iban muy bien entre ellos, pero
la semana que les habían dado se acababa de terminar esa misma noche, así que
el ambiente estaba tenso. Ambos querían aún más tiempo juntos, pero eso no era
posible.
Yunho sacó la pizza del horno y la
depositó sobre la vieja mesa de madera de la cocina. En los días que había
tenido al salcor en su casa había cocinado más que en toda su vida. Pero es que
sentía esta necesidad de mantener a Jaejoong sano en toda la extensión de la palabra.
Si Jaejoong necesitaba tener sexo para poder vivir, Yunho le daría todo el que
necesitara. Si Jaejoong necesitaba sol y lluvia, Yunho haría todo lo posible
para que Jaejoong lo tuviera y si Jaejoong necesitaba comida, él la prepararía
personalmente por que no quería que nadie más hiciera nada por Jaejoong.
¿Gorila territorial descerebrado y posesivo? Tal vez, pero no era como si
pudiera controlar estas nuevas tendencias violentas que nacían en él. Sería
como luchar consigo mismo.
El vampiro se gira en busca del rubio y
lo encuentra en la puerta, de brazos cruzados y con el rostro contraído por la
molestia. Aunque si Yunho era sincero consigo mismo, el mohín que Jaejoong
estaba haciendo era el más tierno que había visto.
-
Jae… la comida está lista… - murmuró Yunho acercándose lentamente.
Jaejoong levanta la vista y ve la pizza
sobre la mesa. Inmediatamente una enorme sonrisa se abre paso en su rostro y
mira a Yunho contento.
-
¿Qué es eso, Yunho? ¡Se ve genial!
-
Pizza… ven, seguro que sabe bien también – dice tomándolo de la mano.
Jaejoong se deja guiar hasta la mesa,
pero en cuanto llegan y está a punto de servirse una porción, vuelve a fruncir
el ceño y hacer pucheros.
-
¿Si quiera vamos a tener tiempo de comer tranquilamente? – pregunta refunfuñando.
Yunho se carcajea ante la actitud del
rubio y se deja caer en una silla, antes de atraer al salcor para sentarlo en
su regazo. Aunque Jaejoong sigue haciendo caras, se acomoda en el regazo de
Yunho, escondiendo el rostro en su cuello. La noche pasada habían recibido una
carta traída por Siwon, en la que les informaban que una modista y un joyero
irían a visitarlos la noche siguiente, y que hasta que el día de la coronación permanecerían
en la casa de Yunho, pero recibiendo diferentes personas para prepararlos para
el gran día. Al parecer Jaejoong y él necesitaban estar usando ropas especiales
para el día en el que serían coronados oficialmente como los gobernantes de los
vampiros. A Yunho tampoco le agradaba la idea de compartir a Jaejoong con nadie,
pero su cerebro le recordaba todo el tiempo que no podía encerrar al muchacho
fuera de la vista del mundo, tenía que al menos hacer un esfuerzo para actuar
como una persona normal. Por esa razón no mostró ante Jaejoong lo molesto que estaba
con la primera visita de esa noche.
-
Claro que tenemos tiempo. Tu come todo lo que quieras comer, que si esas
personas llegan antes, tendrán que esperar.
Yunho siente los labios del salcor
estrecharse en una sonrisa contra la piel de su cuello, para luego volver a ser
un puchero.
-
No es justo. Tú eres mío y no me importa lo que ellos digan, ni las estúpidas
responsabilidades que te dieron, yo quiero estar contigo. Cuando los de mi raza
encuentran a su destinado a veces pasan un año entero solos con su pareja, ¿Por
qué yo tengo que compartirte? Colmilludos entrometidos y amargados que no
tienen vida. Susu y Chunnie estuvieron solos por cinco meses sin que nadie les
dijera nada, ni los interrumpiera y yo solo una semana, no es justo. Aunque umma siempre dice que yo hago las cosas
totalmente al revés que el resto, entonces ¿es mi culpa que tengamos tan poco
tiempo? Pero si yo no hice nada, al contrario yo solo quiero estar contigo.
¿Será karma? Cuando Susu y Chunnie volvieron yo no dejaba de interrumpirlos,
porque quería que me prestaran atención y ellos se enfadaban conmigo… bueno, no
enfadarse, enfadarse… pero Chunnie me perseguía y una vez utilizó su magia para
quemarme el pelo, y olía horrible ¿Lo crees? ¡Me quemó mi cabello! ¡Mi hermoso
pelo rubio! Estoy seguro que lo hizo porque siempre ha querido el mismo tono
que el mío, porque el suyo es castaño. Yo creo que es bonito, luce como la
tierra recién mojada pero él siempre dice “Joongie-hyung
tu cabello es igual al sol de mediodía, ojalá tuviera el mismo color” y yo le digo “Chunnie el tuyo también es bonito…” No entiendo porque no lo ve…
Yunho oculta su sonrisa en el cabello del
salcor parlanchín. Jaejoong tiende a dejarse ir de una idea a otra y para Yunho
es completamente hilarante. El rubio incluso olvidó que estaba molesto por que
los iban a interrumpir, así que Yunho aprovecha el momento para hacer que
Jaejoong coma su comida, mientras continua parloteando sin pausas.
Una hora más tarde Yunho y Jaejoong están
en el mismo lugar y en la misma posición, solo que en vez de comer están
besándose como dos adolescentes cachondos. Jaejoong tiene ambas manos
enterradas en el grueso cabello del vampiro y sus piernas enrolladas en su
cintura. Yunho por su parte disfruta explorando toda la perfecta piel debajo de
la camisa blanca que le dio al salcor para vestir. Los días con Jaejoong son
así, un momento están haciendo algo completamente inocente como enseñarle a
utilizar el control remoto de la tv y al siguiente está tomando al salcor en
cualquier superficie que encuentra. Al principio se sentía un poco incómodo y
confundido con todo lo que cruzaba por su mente, pero después simplemente se
acostumbró al hecho de que Jaejoong lo era todo para él ahora. No necesitaba
explicaciones. Los dioses habían decidido que Jaejoong era para él y Yunho no
podía estar más de acuerdo.
Cuando escuchan los golpes en la puerta,
Jaejoong refunfuña y se aferra más firmemente a Yunho mordiendo sus labios para
que el vampiro no se separe de él. Yunho solo tiene que deslizar sus manos
desde la cintura del rubio hasta su culo y darle un ligero apretón, para que
Jaejoong suelte sus labios para poder gemir dulcemente. Yunho aprovecha ese segundo
para levantarse y dirigirse a la puerta, evitando que Jaejoong vuelva a
capturar sus labios. Los sonidos de disgusto que hace el salcor, combinado con
los jalones de cabello le hacen gracia al vampiro, que llega la puerta y la
abre para encontrarse a dos personas esperando pacientemente. La primera una
vampiresa rubia y con aire de princesa distante y el segundo un vampiro algo
bajo y con aspecto de dinosaurio, extrañamente parecido a Donghae. Ambos
parecen tomados por sorpresa por la imagen que presentan Yunho y Jaejoong, pero
se componen lo más rápido que pueden y hacen una reverencia pronunciada. Yunho ve
que detrás de ellos hay tres guardias también en posición de profunda
reverencia, cargando paquetes.
-
Sus majestades, mi nombre es Jung Sooyeon y tengo el honor de ser la modista
que los asistirá esta noche. – dijo la mujer aun haciendo una reverencia.
-
Mi nombre es Kim Jonghyun, sus majestades. Tengo el placer de ser el joyero que
se encarga de las joyas de la familia real.
Yunho aún no se acostumbraba a toda la
pompa con la que lo trataban, Jaejoong al contrario parecía divertirse
muchísimo cada vez que le decían su majestad. Cuando Yunho le preguntó la
razón, Jaejoong dijo que en su “casa”
a su madre la trataban como a una más, llamándola por su nombre de pila
incluso, así que toda la pompa era nueva para él y aparentemente divertida.
-
Si… esto… Yo soy Jung Yunho y este es Jaejoong. Pasen… - murmuró caminando
hacia adentro dejando la puerta abierta.
Sooyeon, Jonghyun y los tres guardias
entraron en la pequeña sala de Yunho, mientras este se sentaba en el sofá, aun
sosteniendo a Jaejoong. Parecía que se había hecho costumbre abrir la puerta
con Jaejoong en brazos, pero la verdad es que la única forma que se sentía
cómodo con gente alrededor de su salcor, era si Jaejoong estaba literalmente
pegado a Yunho y aun así no se sentía del todo tranquilo.
Los guardias dejaron las cajas cerca del
sofá y se fueron haciendo reverencias, cerrando la puerta detrás de sí, sin
hacer ningún sonido. Jonghyun y Sooyeon se sentaron en el otro único sofá que
Yunho tenía.
-
¿Quieren beber algo? – preguntó Yunho acariciando distraídamente la espalda
de Jaejoong, mientras este los miraba a los nuevos allegados con ojos críticos,
más intrigado que enfadado ahora.
-
No, su majestad. Estamos bien – responde la vampiresa.
-
Ok… mmm… no tengo idea de cómo hacer esto, así que por qué no me dicen ustedes
por donde comenzamos… – comienza Yunho
-
Creo que sería prudente su majestad, que trataran conmigo primero señor.
Después de todo tenemos que crear una corona para usted, su majestad – dijo Jonghyun
mirando a Jaejoong.
-
¿Yunho no tendrá… esa corona que dices? – pregunta Jaejoong en un tono ligeramente
indignado, como si el vampiro hubiera ofendido a su Yunho por no ofrecer
hacerle una de esas cosas que le iba a hacer a él.
-
Si tendrá una su majestad, solo que la corona del rey es siempre la misma para
todos los reyes desde hace siglos. Me ocuparé de pulir y ponerla en condiciones
para ese día, no se preocupe por favor.
Jonghyun saco dos catálogos de su bolso y
se acercó cautelosamente hacia ellos. Yunho se puso algo tenso, mientras
Jaejoong se giraba en sus brazos para enfrentar a Jonghyun sin salir del regazo
de su vampiro.
Jonghyun extendió uno hacia Jaejoong pero
Yunho lo tomó primero y se lo dio a su salcor. Jonghyun parecía asustado, pero
no dijo nada.
-
Lo siento… no puedo explicárselos ahora, pero no se acerquen demasiado a
Jaejoong. Por favor.
-
Si… no se preocupes, su majestad. – respondió Jonghyun mientras él y Sooyeon
hacían una reverencia.
Yunho baja la mirada a lo que Jaejoong
está ojeando y ve que es un catálogo de metales preciosos y joyas. En su vida
Yunho había visto esto, pero eso era de esperarse. Jaejoong miraba todas las
imágenes con el ceño fruncido.
-
¿Qué es esto? – le preguntó a Jonghyun
-
El catálogo es para que usted seleccione el material que más prefiera para su
corona su alteza, personalmente creo que oro es el mejor material para
trabajar, y este… - dijo entregándole a Yunho el otro catálogo – Es para que vea los diferentes tipos de
diseños que puede seleccionar.
Jaejoong recibe el otro catálogo de las
manos de Yunho y comienza a mirar las diferentes tipos de coronas que había
para elegir.
-
¿Por qué no usa la corona de la antigua… la que ya tienen hecha? – pregunta Yunho
confundido.
-
Es una ley que impuso el rey Kim Hyunjoong cuando se casó por segunda vez y su esposa no quiso usar la
antigua corona de la reina. Desde entonces el cónyuge del rey siempre debe
estrenar corona, su majestad.
Yunho abrió la boca para decir que era
una soberana estupidez, pero la cerró al final. Le parecía un desperdicio de
dinero y materiales, pero era mejor dejar que Jaejoong elija tranquilamente sin
que él le arruinara la fiesta. Jaejoong pasaba página tras página del catálogo pero
nada parecía agradarle.
-
Todas estas cosas se ven muy pesadas… no me gusta llevar ropa ni cosas pesadas
Yunho…
Jonghyun se puso colorado al escuchar al
salcor, pero ni él ni Sooyeon comentaron nada al respecto. Yunho miraba por
encima del hombro de Jaejoong las fotos de las diferentes coronas y la verdad
es que si parecían bastante pesadas, sobre todo para alguien como Jaejoong que prefería
andar por ahí en su traje de Adán.
-
¡Oh! ¿Qué es esto? – preguntó el salcor repentinamente, girando el catálogo
hacia Jonghyun para mostrarle la imagen que había descubierto.
-
Eso es una corona su majestad, pero una muy simple para su posición si me lo
pregunta…
-
¡Me gusta! ¿No te gusta Yunho? – pregunta Jaejoong girando la imagen
hacia el vampiro.
Yunho mira la imagen y si parece muy
simple, pero se ve muy liviana y cómoda, tanto que puede que Jaejoong se olvide
que la lleva puesta.
Además el diseño es muy… natural, así que
suena perfecta para su salcor.
-
Es perfecta para ti… - responde Yunho asintiendo hacia el sonriente rubio.
-
¡Quiero esta! Justo como está, no le cambien nada…
Jonghyun parece un poco contrariado, pero
asiente y le sonríe a Jaejoong y a Yunho amablemente.
-
Como usted lo prefiera, su majestad. Y su alteza – dijo Jonghyun dirigiéndose
a Yunho – necesito medirles a ambos el
dedo anular y el cráneo para las coronas y el anillo de casamiento.
-
¿Casamiento? – pregunta Jaejoong mirando a Yunho con el ceño fruncido.
-
Es cuando dos personas prometen estar juntos para siempre, y como símbolo de
ello se dan un anillo. – respondió Yunho pacientemente.
-
Ustedes los vampiros hacen cosas muy raras. Tú eres mío, no necesito prometerlo.
Pero si te hace feliz…
Yunho se para y deja que Jonghyun tome
las medidas necesarias en él, pero Yunho se ocupa él mismo de tomar las medidas
de Jaejoong, con direcciones del joyero.
-
¿Quisiera algún anillo en especial su majestad? ¿Algún material quizás?
-
No, solo simples bandas de oro. Nada especial. Mantenlo simple, por favor.
-
Como más le guste, su majestad. – responde Jonghyun
Después que terminan, Jonghyun se despide
y se retira para ir a trabajar en la simple corona que Jaejoong eligió y en los
anillos. Entonces llega el turno de Sooyeon que se adelanta y comenta que debe
tomarles las medidas para hacerles la vestimenta para la coronación. Es
bastante más complicado, porque prácticamente se tienen que tomar medidas de
todas las partes del cuerpo. Yunho se encarga de tomar las medidas de Jaejoong,
quien parece divertido ante el comportamiento del vampiro.
-
Sus majestades, los colores oficiales de la familia real son por tradición el
rojo y el negro – explica Sooyeon -
por lo cual las ropas que usarán en esta ocasión y en las futuras ocasiones sociales,
tienen que ser en esos dos colores. Estaba pensando que el rey podría vestir
principalmente de negro, con solo alguna prenda roja y usted su majestad,
podría…
-
¿Por qué solo rojo y negro? – pregunta Jaejoong interrumpiendo a la
mujer.
Sooyeon parece un poco sorprendida por la
infinita curiosidad de Jaejoong, pero Yunho está acostumbrado a ella a esta
altura, así que solo mira expectante a la vampiresa rubia esperando que
responda la pregunta.
-
Pues… el rojo es la representación de la sangre que nos mantiene vivos y
fuertes y el negro simboliza la muerte que el rey llevará a quien quiera que
nos desafíe, su majestad.
-
¿Entonces yo llevaré el rojo? – pregunta Jaejoong.
-
Si, su majestad. Pero también llevará algo negro.
Una vez que terminan de hablar de que es
lo que llevarán puesto dentro de tres días, Sooyeon comienza a mostrarles toda
clase de telas en tonos rojos y negros que estaban dentro de las cajas que los
guardias habían traído consigo. Las telas para Yunho las termina eligiendo
Jaejoong principalmente con ayuda de Sooyeon y parece divertirse mucho haciéndolo.
Los diseños que Sooyeon dibuja delante de ellos, son geniales y Jaejoong lejos
de seguir enfadado como hace unas horas antes, está lleno de energía y
emocionado. Yunho no tiene idea que fue lo que el par decidió que él usaría al
final, porque simplemente desconectó su cerebro cuando las opciones comenzaron
a hacerse tediosas, cosa que Jaejoong no parecía notar y Sooyeon tampoco. Yunho
volvió a conectar el cerebro cuando Sooyeon llamó a los guardias para que la
ayudaran a cargar las telas de nuevo.
-
Sooyeon, le voy a pedir que cuando termine de hacer este vestuario nos traiga
también ropa para Jaejoong. No tiene absolutamente nada, así que le pido el
favor.
-
Será un honor para mí, sus majestades. Tengan una buena noche.
Una vez que Sooyeon se fue Jaejoong se
giró en el regazo de Yunho antes de pasarle los brazos por el cuello al
vampiro.
-
Eso fue divertido. No sabía que la ropa podía ser divertida… pero hay un
problema – dijo Jaejoong cambiando su tono de repente.
-
¿Qué problema, Jaejoong?
-
¿Cómo voy a poder mantener mis manos quietas, cuando solo imaginándote en esas
ropas quiero tenerte?
Yunho se carcajea fuerte y niega con la
cabeza.
-
Tal vez deba ocuparme de darte tanto de mí, que logres soportar una hora para
la ceremonia.
-
¿Es eso una promesa, chupa sangre? – pregunta Jaejoong susurrando en el oído
de Yunho.
Jajajaja Jaejoong me hace reir, es tan mono, sensual y celoso...me gusta q vea la vida tal cual le parece a el. Yunho va a ser un buen rey, solo q vamos a ver como les va a afectar todo esto, porq les van a acarrear nuevas responsabilidades y el Yunjae la unica responsabilidad q quieren tener es estan pegados como conejos. Lindos, me encantan, me encantan
ResponderEliminarYunho posesivo no quiere q le toquen ni un dedo a jae XD que lindo, se aman mucho estos dos y son tan sencillos, escogieron anillos y una corona sencilla se nota que van a gobernar con justicia <3
ResponderEliminarYunho es tan celoso y posesivo con Jae que ni quiere que lo toquen ni nada,Jae solo quiere estar pegado a su Yunho,me encanta que Jae tenga curiosidad y Yunho le explique las cosas
ResponderEliminarese Jae es imposible no puede mantener sus manos alejadas de su Yunho y el otro celoso compulsivo no permite que nadie lo toque ni se le acerque pues muere de celos por su Jae me encanta ese par de posesivos
ResponderEliminarGracias
Cada capitilo me hace sonreir o reir ante las situaciones que se les presenta, pero la inocencia de Jae me fascina.
ResponderEliminarGracias!!!
Ajajaj Oh Jae sacó si lado fashonista cosiito me lo imagine como gatito curioseando entre tanta tela (^.^). Uuuy cuidadito con ese Yunho posesivo asomandose, otro poquito y le arranca el brazo a JungHyung jaja. Este cap me recordo el episodio de XMan donde a Jae revela que habían bebeido "cola amargo" jajaja dios que risa. Esto esta genial, no puedo creer mi estimada autora que te permitueras dudar de semejante historia. Es de 10+
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