Kim Junsu se sentó en el asiento de la ventana de su cuarto
mirando al otro lado de la calle hacia la casa de sus vecinos; en realidad no
estoy siendo fisgón pensó él para sí mismo, solo curioso.
—Seguro, —bufo él —solo si llamas ser curioso a sentarte en el asiento de tu ventana
con tus ojos pegados a la casa de tus vecinos como un sabueso en la caza a las
diez de la noche. Llamare a las cosas por su nombre mañana a la mañana —le dijo a su conciencia.
Un estudiante de intercambio extranjero se estaba quedando con
Los Henry este año. Ellos no tienen hijos propios, aunque Junsu no tenía idea
de si era por elección o porque no eran capaces de tener hijos. Le había
prometido a Changmin y a Jae que él llegaría al fondo del asunto y les
llamaría.
Así que aquí estaba él sentado en su ventana, vigilando la casa
de sus vecinos, con sus luces apagadas y sus persianas abiertas solo lo
suficiente para ver y para rematar su experiencia “James Bond”, ¡hasta tenia
binoculares! Ahora si tan solo tuviera esa ingeniosa música de fondo que fuera
con sus actividades nocturnas. Ya había estado sentado por una hora y estaba a
punto de rendirse cuando una larga limusina paro en la esquina. Ahora no es
esto raro, pensó él, ¿un estudiante de intercambio extranjero llegando en una
limusina? Acerco sus binoculares a su cara y los ajusto para tener obtener un
vistazo mejor, ajustándolos sobre la puerta del pasajero para ver justo quien
iba a salir. Junsu sabía que esto era un poco extremo pero honestamente en una
sociedad de 700 no hay mucha emoción y Junsu iba a tomarla de donde pudiera.
El chofer salió de la limusina para darle la vuelta y abrir la
puerta del pasajero, pero antes de que pudiera llegar a la puerta ya se estaba
abriendo, y el chico que salió de la limo era el chico más hermoso que Junsu jamás
había visto, y eso era solo su perfil. “Wow, quiero decir, wow,” fue todo lo
que Junsu pudo pensar. Junsu ni siquiera podía imaginar cómo se vería su cara
entera. Él era alto, probablemente un metro ochenta y cinco o algo así, su
cabello era de un negro intenso, era largo en la cima y él podía ver que él
tenía mechones de cabello que caían sobre su cara barridos hacia la izquierda
cubriendo parcialmente su ojo. Él tenía hombros amplios y por lo que podía ver
de su perfil, altos pómulos, una nariz recta y labios llenos. Se dio cuenta
rápidamente de que su boca se había abierto y estaba todo menos babeando sobre
el bello ser humano que había emergido del vehículo. Observo mientras él y su
chofer charlaban, todo parecía muy formal hasta que el chofer abrazo al chico
con un obvio y profundo afecto. Él debe de ser más que solo su chofer, pensó Junsu.
Repentinamente, él se dio vuelta como si hubiera escuchado lo
que él estaba pensando y miro directamente a su ventana, directamente a él. Junsu
se congelo, incapaz de apartar la mirada de los hipnóticos ojos Ónix que lo
mantenían en ese lugar. Todos sus pensamientos parecieron desvanecerse en la
distancia mientras escuchaba, o pensaba, no estaba completamente seguro de
cual, las palabras “Al fin, mi Junsu.” Susu sacudió su cabeza, tratando de aclarar la bruma que lo
llenaba. Luego de volver a sus sentidos por la intensa mirada recapitulo en su
mente como su cara se había visto.
Estaba en lo correcto acerca de sus pómulos; nariz y labios,
para lo que no estaba preparado era para que sus cristalizados ojos Ónix como
la noche que parecieran casi brillar en la luz de la luna; el cabello que caía
sobre su frente y sobre su ojo izquierdo solo agregaban a su aire misterioso,
sobre todo él tenía un muy masculino, muy hermoso rostro. La remera que el
llevaba puesta era negra y gracias a sus súper, súper binoculares era capaz de
ver que se ajustaba a su forma y hacia alarde de su muscular pecho y estomago
plano. Él tenía puesta una chaqueta de motociclista de cuero negro, pero más
que eso Junsu no llegaba a ver porque el auto estaba en el camino, pero
imaginaba que sus piernas eran tan buenas como el resto de él.
Cuando volvió a mirar a la calle el chico misterioso estaba
caminando en la casa de Los Henry. Mientras veía la puerta cerrarse escucho esa
voz de nuevo “Pronto”.
Junsu se sentó allí por un par de minutos tratando de que su
cerebro se pusiera en marcha de nuevo, todo parecía tan confuso. Luego de
parpadear lo que se sintieron como mil veces, se recompuso, levanto el teléfono
y llamo a Jae.
Tres tonos más tarde Jae respondió.
— ¿Qué se dice?
—pregunto él.
Junsu tomo una lento inspiración y dijo — ¿creo que es mejor que
vengas.
—Ya estoy allí chico,
te veo en cinco —respondió y luego colgó.
Junsu sonrió mientras pensaba lo grandioso que era tener un amigo
como Jae de la que siempre podía contar, estar allí cuando lo necesitara.
Levantó el teléfono nuevamente y llamo a Changmin, ésta
respondió luego de un tono, obviamente había estado atendiendo diligentemente
el teléfono, esperando que Junsu llamara con detalles del ultimo drama de la
pequeña ciudad.
—Jae está en
camino—dijo Junsu —.Necesito que también vengas, debemos hablar.
—Está bien —dijo Changmin simplemente y colgó.
Quince minutos después los tres amigos estaban reunidos sobre el
suelo del cuarto de Junsu, con chocolate caliente en mano, porque naturalmente,
¿Cómo puedes tener una reunión de chicos sin chocolate caliente?
—Entonces,
cuéntanos —dijo Jae.
—Está bien —dijo Junsu respirando hondo—Entonces estoy sentado en el asiento de la
ventana, persianas poco abiertas, luces apagadas, binoculares en mano…
—Binoculares, en
serio, ¿de verdad estabas usando binoculares?— Interrumpió Changmin.
—Bueno, dijeron
que querían detalles, así que les estaba consiguiendo detalles —se defendió Junsu.
—Ohh, tenías la
canción de la película “Misión
Imposible” en el fondo porque eso hubiera sido totalmente espia-tactico—dijo Jae con entusiasmo.
—En realidad —dijo Junsu distraído—.Estaba pensando más estilo James Bond con todo eso de la operación
de vigilancia…
—No, no, no, eso
sería más como estilo Dog el Caza recompensas. Pero no puedes ser Beth porque
no está apilada en la cima, así que tendrás que ser pequeña Lisa la hija…— parloteo Jae.
—¡No puedo creer
que me estés comparando a la hija de Dog el caza- recompensas ahora mismo y por
qué estamos hablando de esto de todos modos porque no es para nada el punto! —gruño Junsu con frustración. —Analogías espías a un lado, estuve sentándome allí por algo así
como una hora cuando una larga limo para en la esquina enfrente de la casa de
Los Henry.
— ¿Una limo?
¿Qué tipo de estudiante de intercambio extranjero aparece en un limo?
—Lo sé ¿verdad?
Eso es lo que yo estaba pensando — estableció Junsu —. Te aseguro que la limo no es lo que tuvo importancia una vez la
persona adentro salió. Jóvenes, he visto al chico más hermoso que alguna vez ha
cruzado mi línea de vista.
—Cuando dices
hermoso —comenzó Jae— ¿estamos hablando de los looks varoniles de Brad Pitt, o los de
Johnny Deep que te hacen querer darle una cachetada a alguien?
—No, estamos
hablando de Brad y Johnny necesitando hacerle una reverencia y reconocerlo.
—Aparte de que
él se haya bajado de una limo y sea un anuncio de Calvin Cline caminante, se
comienza a poner extraño en este punto de nuestra historia niños y niñas —dijo Junsu en voz narrativa fantasmagórica.
— ¿Cómo si no
fuera ya lo suficientemente raro?— Pregunto Changmin.
—Bueno, está
bien, más raro. Justo cuando está a punto de entrar por el camino, se da vuelta
repentinamente y mira directo a mí, ¡como si pudiera sentir que lo estaba
mirando! Como, directo a mis ojos. No me podía mover, literalmente, era como si
me tuviera hipnotizado o algo. ¡Hombre! ¿Cuando comencé a usar la palabra
“como” tantas veces?— dijo Junsu
con exasperación. —Hasta ahí era raro, pero ahora vamos a entrar en el mundo de “que mierda”. Mientras me está mirando
tan fijo escucho una voz en mi cabeza y esta dice “Por fin, mi Junsu,” luego mientras se da vuelta para entrar en la
casa escucho la voz decir de nuevo “Pronto.”
Junsu fija la mirada con expectación en sus dos mejores amigos,
esperando que ellos le digan que finalmente ha saltado al otro lado, pero
simplemente se sientan allí mirándolo fijamente. — ¿Y bien?— pregunta Junsu. Finalmente Jae se mueve tomando una inspiración
profunda, mira abajo hacia su taza vacía de chocolate caliente y dice — Vamos a necesitar más
chocolate caliente.
—Concuerdo —dijeron Changmin y Junsu al mismo tiempo.
Una vez Jae había vuelto con tres tazas frescas de chocolate
caliente y galletitas oreo dijo.
—Así que déjame
ver si entendí bien lo que me estás diciendo. Un ardiente estudiante extranjero
llega en una limosina, sale, cambia tu mundo, te mira fijo a los ojos y ¿habla
en tu cabeza? ¿Entendí el quid del asunto?
Junsu asintió con su cabeza tímidamente mirando al piso —Lo que quiero decir es, que
supongo que era su voz en mi cabeza. Podría ser un familiar muerto hace mucho
tiempo que ha estado buscándome desde su muerte y lograron encontrarme justo en
el momento que ese bombón me miro a los ojos.
Jae y Changmin le dieron una mirada que decía “no te pases”.
— ¿Qué? —Preguntó él— Solo digo —dijo, lanzando sus manos
al aire en frustración.
Tambaleándose de vuelta en el suelo Junsu gruño audiblemente y
cubrió sus ojos con el dorso de su mano — ¿Me estoy volviendo loco chicos?—preguntó.
—No, dulzura,
hace tiempo que lo estás, solo que no queríamos que supieras que lo sabíamos —dijo Changmin con humor en su voz.
—En serio, sé
que suena loco, pero les prometo chicos que escuche una voz, una hermosa,
profunda y masculina voz, en mi cabeza ¡y sabía mi nombre! ¡Esto es loco,
neurótico; totalmente loco del estilo pónganle-un- chaleco de fuerza! —Junsu los miro a los dos con miedo en sus ojos; él realmente se
preguntaba si finalmente se había vuelto loco.
Había después de todo, gente en su familia con cordura
cuestionable, su madre siendo una de ellas. Junsu amaba a su madre y tenían una
buena relación, pero ella no estaba siempre en contacto con la realidad. El
padre de Junsu no estaba en el panorama y nunca lo había estado, él había desaparecido
en el momento en que descubrió que su mamá estaba embarazada. Afortunadamente él
tenía a sus dos mejores amigos que lo mantuvieron con los pies en el suelo, que
era la razón por la que Junsu estaba buscando tan fervientemente la opinión de
los suyos en este asunto. Changmin finalmente hablo —No creo que estés loco, Susu, realmente no lo estás. Debe haber
algún tipo de explicación. Lo descubriremos, siempre lo hacemos.
—Sí —accedió Jae— Faltan 2 semanas para que la escuela comience. Desde ahora hasta
ese momento estamos en detalles exploradores. — Changmin asintió en señal de acuerdo.
Los tres estuvieron quietos por unos minutos, cada uno
imaginando formas de “encontrarse casualmente” con el nuevo estudiante de intercambio extranjero sin parecer
muy obvios. Jae estaba recostado en el suelo mirando hacia arriba al ventilador
de techo cuando dijo— Necesitamos encontrar una manera de presentarnos a él para darle
un buen vistazo y ver si Changmin o yo escuchamos una voz en nuestras cabezas.
—Mi mamá estaba
planeando en llevarle una buena cena sureña para él ya que no es de aquí. Le
podemos preguntar si nos deja acompañarla ¿o seria eso demasiado patético?
—No creo que es
prefecto — estableció Jae.
Finalmente, a la medianoche ya habían pensado algo así como un
plan de juego medio débil, todo el giraba alrededor de ir con la madre de Junsu
a la casa de Los Henry a darle al nuevo estudiante de intercambio un poco de
pollo asado, patatas y mazorca de maíz. En serio, cuan patético puedes ponerte,
pensó Junsu mientras descansaba en el suelo de su habitación. Jae y Changmin se
habían quedado dormidos en el otro lado de la habitación cada uno con su propia
frazada envolviéndolos.
Junsu se sentó y miro alrededor de la habitación, y aunque este
lugar se sentía seguro y cómodo. La cama de dos plazas con la nueva colcha
verde profundo que su madre le había comprado para su cumpleaños, la empañada
lámpara de vidrio que no tenía ningún tema sentada en su pequeño escritorio de
madera, él, Changmin y Jae habían tallado varias cosas en su superficie. Vio al
espejo de su vestidor con fotos a los lados, mayoritariamente de Jae, Changmin
y él en varios lugares y poses; hace tan solo unas horas él era otro chico de
17 años que estaba por comenzar su cuarto año en la secundaria, tan normal
pensó.
Él tenía a tres madres hogareñas colgadas en la pared al lado de
su cama, y del otro lado había una ventana con un asiento donde se sentó esa
noche, donde su vida cambio en una forma de la que todavía no estaba seguro. Junsu
se volvió a recostar sobre su espalda mirando el ventilador de techo moverse en
círculos, el motor induciéndolo a dormir. Su último pensamiento mientras se
quedaba dormido era una luna llena, lo que sea que eso significara.
Mientras su limosina paraba
en frente de la casa donde Yoochun se hospedaría, él no podía deshacerse del
sentimiento de que algo estaba fuera de lugar. No necesariamente de una mala manera,
simplemente se sentía inestable, agotado y tenso.
Bueno, podría ser porque
estaba a más de mil millas de casa, no conocía a nadie, estaba en su último año
de escuela y lo iba a pasar en un país en el que nunca había estado antes. Sí,
me imagino que eso podría poner a alguien tenso, se dijo Yoochun. Miró hacia la
casa y se dio cuenta de que era bastante grande, dos pisos con una terraza que
la rodea. En realidad se veía como una casa que podrías ver en las afueras del
país no en un suburbio. El jardín estaba arreglado pulcramente con césped verde
y corto. Había un alto y grande árbol a la derecha del camino con un banco
debajo. En la terraza había dos mecedoras y una hamaca de jardín, una pequeña
mesa entre las dos mecedoras tenía una maceta con una de esos guantes para el
agua saliendo de ellos. Sobre todo era una hermosa casa, una donde una persona
se sentiría cómoda, un hogar normal.
Yoochun esperaba que este
fuera el caso porque “normal” no
estaba usualmente en su vocabulario. Él provenía, después de todo, de una
familia de hombre lobo, específicamente un lobo TVXQ (Canis lupus), no sólo
eso, pero daba la casualidad de que era el hijo del Alfa actual. Espera, se
vuelve peor, su nombre, Park Yoochun, significaba literalmente “Lobo Coronado” que adecuado para el príncipe de los TVXQ
Coreanos.
¿Qué puede ser posiblemente
normal acerca de que tu familia sea capaz de transformarse en lobos, o ser el
príncipe de los lobos también? Nada en ese escenario podría ser alguna vez
normal.
Tú tomaste esta elección, se
dijo Yoochun. Ahora tienes que vivir con él así que sal del auto.
Yoochun no estaba realmente
seguro de porqué había decidido inscribirse al programa de intercambio
extranjero, él simplemente sabía que sintió una atracción, como la de una
polilla hacia una llama, a venir a Estados Unidos y no cualquier ciudad sino a
Coldspring en Texas. Porque pensó que era una buena idea dejar su hogar en Corea,
el cual tiene la mayor cantidad de TVXQ en el mundo, no tenía idea. Hay otros
lugares que los Canis Lupus tienen de territorio, como Irlanda, Los Balcanes y
Polonia, hasta Colombia, Brasil, Perú, Italia y España tenía algunos lobos TVXQ.
Uno pensaría que un TVXQ iría a un territorio donde estuvieran otros TVXQ’s,
pero el problema es que los lobos eran extremadamente territoriales y a no ser
que un lobo quisiera pelear, en especial un lobo macho, no merodeabas por el
territorio del otro. Afortunadamente no había ningún Canis lupus en esta
pequeña ciudad de Coldspring Texas, así que Yoochun era libre de ir y venir en
su propio territorio, lo que era totalmente natural para el hacer.
Está bien, no más andarse con
rodeos pensó Yoochun. Levanto su mirada hacia Leeteuk, su chofer y amigo, y
dijo.
—Supongo que aquí llegamos, gomawo
(gracias) amigo por venir todo este trayecto para dejarme aquí, lo aprecio.
—No hay de qué mi príncipe; siempre es un honor servirle.
—Oh, vamos no te pongas todo formal conmigo. Aquí en Coldspring soy
sólo un estudiante de secundaria, no un príncipe —dijo Yoochun.
Yoochun sabía que esto era
difícil para su amigo, aunque el título de Leeteuk era actualmente “Guardia del Príncipe” y lo había sido desde que Yoochun era un
niño. De hecho, Leeteuk había querido quedarse en Estados Unidos con Yoochun,
pero él insistió en que Leeteuk fuera a casa y le dejara arreglárselas solo por
un tiempo. No había otro TVXQ en la zona por lo que era improbable que se
metiera en una batalla territorial. Leeteuk salió del auto para abrir la puerta
de Yoochun pero éste estaba desplegando su alta figura antes de que Leeteuk
pudiera siquiera llegar al frente del auto.
Yoochun sostuvo su altura de
1,87 lo que era unos buenos 12 centímetros más alto que Leeteuk, así que una
vez fuera del auto tuvo que mirar sólo un poco para abajo para ver a su antiguo
amigo a los ojos. Leeteuk se inclinó en reverencia sólo un poco, una muestra de
respeto y amor y luego se rompió con la formalidad y lo abrazo. Los lobos toman
un gran bienestar en tocarse, es tan normal en sus naturalezas como respirar y
aún en forma humana tienden a tocarse más que los humanos. Yoochun le dio
palmaditas a Leeteuk en la espalda y se separó.
De la nada Yoochun captó un
pensamiento errante en su mente que causó que su lobo se avivara.
«Él debe de ser más que solo
su chofer. Ahora, no es esto raro, ¿un estudiante de intercambio extranjero
llegando en una limusina?»
Yoochun volteo su cabeza para
para mirar el origen del pensamiento y fundió su mirada con la de un chico en
una ventana de la casa de dos pisos de enfrente.
Desde que la creencia de que
los humanos se “convierten” en lobos
es falsa. Yoochun es capaz de hacer lo que los Canis Lupus llaman entrar en
fase. El lobo y el hombre son uno, y no hay ninguna conversión de uno a otro,
una conversión significaría que una vez que el hombre esta en forma de lobo ya
no es un hombre sino completamente lobo y cuando es humano es completamente
humano. Cuando Yoochun está en su forma lobuna él todavía puede pensar y
razonar como si estuviera en su forma humana. Cuando está en su forma humana
puede llamar a su lobo a entrar en fase sólo en las partes que necesita usar,
en vez de convertir en lobo todo su ser.
Él entro en fase lo
suficiente para dejar que sus ojos de lobunos hicieran el trabajo de ver.
Aunque la vista de los lobos TVXQ no era tan buena como su oído, su visión
nocturna era la mejor de todas las razas de lobos. Se encontró a si mismo
observando unos profundos ojos verdes del color de las esmeraldas. Se registró
en el cerebro de Yoochun en ese momento que había “escuchado” sus pensamientos. Sólo había una persona en el mundo de la cual
un TVXQ podía escuchar los pensamientos, su compañero. Su lobo gruñó
posesivamente, y le tomó varias inspiraciones profundas evitar entrar en fase.
Él descubrió que era la
primera vez que era estaba en armonía con su lobo. El lobo quería salir, quería
ir con su compañero, su otra mitad. Yoochun sabía que era mejor no entrar en
fase e ir a clavarse en su ventana como un perrito hambriento de cariño. No
podía conseguir su olor así que su ventana debía de estar cerrada. El compañero
de un lobo también lleva un cierto olor que sólo éste puede reconocer.
Reflexivamente le mandó un pensamiento mientras recogía su nombre de su mente.
«Al fin, mi Junsu » Era tan natural para él reclamarlo como
suyo, y él era sin duda suyo, aún si él lo sabía o no.
Juzgando por la mirada en su
cara él lo había escuchado y por un minuto pensó que él se desmayaría por la
conmoción. Confirmando aún más que era su compañero, podía sentir su
desasosiego y confusión, pero sabía que estaría bien, él era fuerte. Debía de
serlo para ser el compañero de un Alfa, y él iba a ser su Luna. Llamada así
porque él, al igual que la luna, tenía una fuerza sobre muchas otras cosas, lo
que significaba que tenía un poder que otras parejas TVXQ no tenían.
Yoochun se dio la vuelta,
ignorando sus instintos lobunos de ir a él, y caminó hacia la casa rompiendo la
mirada que los había fundido. Mientras tocaba la puerta no pudo evitar enviarle
otro pensamiento, uno para asegurarle que su encuentro no era el último.
«Pronto »pensó, y una vez más sintió su confusión.
Los Henry eran la familia con
quienes estaría viviendo por el próximo año, la familia “anfitriona” es como le llamaban en el programa de
intercambio. Esta era la primera vez que los había visto y se sorprendió de
cuan jóvenes eran. Los dos parecían estar en los inicios de sus treinta.
El Sr. Henry era más bajo que
Yoochun con un cabello marrón arena y ojos marrones, era delgado, como un
corredor y tenía una cara amigable. La Sra. Henry era mucho más corta, con
cabello castaño oscuro y pálidos ojos marrones, era de estatura normal pero no
era ni robusta ni delgada. Tenía una corta y simpática nariz y mejillas color
rosa.
—Bienvenido a nuestro hogar, Yoochun —dijo la Señora Henry estirándose para abrazar a Yoochun al mismo
tiempo.
Yoochun estaba un poco
sorprendido ya que sabía que los estadounidenses eran un poco fríos a la hora
de tocarse. Una vez más encontró bienestar en ese tacto y se hundió en el
sentimiento. El Sr. Henry extendió su mano y Yoochun respondió estrechándola.
—Estamos muy felices de tenerte aquí con nosotros —dijo el Sr. Henry.
—Gracias a ustedes por dejarme quedarme en su hogar. Aprecio mucho
su generosidad —dijo Yoochun con sinceridad.
—Debes estar cansado por el largo viaje así que por qué no te mostramos
tu habitación y te dejamos acomodarte para la noche. Si tienes hambre, te puedo
mostrar la cocina y eres bienvenido a servirte cualquier cosa que encuentres.
Podemos visitar más mañana y conocernos mejor una vez hayas descansado —estableció la Sra. Henry.
Yoochun los siguió arriba
donde ellos doblaron a la derecha justo a la cima de la escalera, bajaron por
un largo pasillo pasando varias puertas.
—Te daremos el tour completo mañana — Le dijo la Sra. Henry a Yoochun.
Eso estaba bien para él,
estaba muy cansado pero su cerebro iba muy rápido, pensando acerca de lo que
acababa de descubrir. El lobo en su interior estaba inquieto sabiendo que su compañero,
por quien tendría posiblemente que haber tenido que esperar una eternidad,
estaba justo cruzando la calle.
Finalmente al final del
pasillo, en la última puerta a la izquierda la Sra. Henry dio un paso al
costado y dijo.
—Aquí está tu habitación, nos tomamos la libertad de decorarla un
poquito, pero puedes cambiarlo de cualquier forma que quieras. Entonces, te
dejaremos solo, duerme bien.
— Gamsahabnida —dijo formalmente en su lengua nativa. Los
Henry lo miraron interrogativamente— Oh, eso significa “gracias”
en Coreano. Algunas veces me olvido y comienzo a hablar en mi lengua nativa,
perdónenme.
—Oh, no, eso es genial Yoochun —dijo
la Sra. Henry— Me encantaría aprender tu idioma y cultura, por favor siéntete
libre de usarla cuando quieras.
—Bueno, de nuevo annyeonghi
jumuseyo, lo que significa “buenas noches”— Les dijo Yoochun. Con eso, Los Henry se
dieron la vuelta y alejaron, dejando a Yoochun para explorar su nuevo
territorio.
Él entro en su cuarto e
inmediatamente se sintió en casa. Ellos habían, inadvertidamente, decorado su
habitación en tonos invernales con lobos como el tema principal, cuan adecuado,
pensó Yoochun.
Las paredes estaban pintadas
de un blanco que brillaba como la nieve y una tenía un mural de un bosque
invernal. En la distancia había un lobo en una colina nevada, su cabeza girada
hacia el cielo posicionada en un aullido solitario.
La cama era de tamaño natural
con un grueso edredón azul y muchas almohadas. A la izquierda de la habitación
había otra puerta.
Yoochun la abrió y entró en
un enorme armario con cajones armados todos alrededor de una pared; la pared
del fondo tenía una barra para ropa que la cruzaba. Junto al lado derecho del
vestidor había estantes de varios tamaños del techo al suelo. Considerando que
todo era una muy buena vista, había un colgador para calzado incorporado al
fondo del vestidor todo alrededor del perímetro.
Yoochun salió del vestidor y
giró a la derecha para ir a la otra puerta y entró a un espacioso cuarto de
baño con una ducha con paredes de vidrio y una bañera separada. Había una
encimera de mármol con un lavabo en forma de bowl. El espejo que colgaba sobre
el lavamanos parecía una antigüedad con un largo y curvado marco color peltre.
El suelo eran mosaicos de piedra, y el mobiliario para la luz en la pared eran
linternas viejas del viejo mundo. El mobiliario de la luz colgante eran luces
eléctricas en un marco de metal circular. Se estaba volviendo más y más obvio
que Los Henry eran adinerados.
Luego de chequear todo su
nuevo territorio, aún en su forma humana Yoochun no podía evitar ver las cosas
como su territorio o no su territorio. Decidió tomar una ducha y lavarse el
olor de los aeropuertos llenos de gente no familiar. Se tomó su tiempo
disfrutando del agua caliente y finalmente decidió que estaba listo para ir a
la cama.
Su último pensamiento de la
noche mientras comenzaba a quedarse dormido fue de ojos esmeraldas, no podía
ver el color de su pelo porque nunca había pasado de ver sus ojos. La sorpresa
de quién y qué era él le distrajo lo suficiente de verlo completo. Aun así,
esos ojos esmeraldas lo guiaron al descanso.
Continuara
\\(^_^)//...
Niñ@s un comentario no
les cuesta nada….
Gracias…
Yoochun ya sabe en donde se encuentra su pareja de vida y el Junsu ni enterado de ello pero creo que muy pronto se dará cuenta de ello pes el lobo de Yoochun se ve que es muy desesperado y le buscara pronto
ResponderEliminarGracias
Se ve que esta emocionante el capítulo pero parece que esa familia sabe algo para que le hallan arreglado el cuarto con dibujo de lobos es porque saben algo ya quiero que salga rápido el siguiente capítulo ha y no te olvides de amarte a esposo también gracias y disculpa
ResponderEliminarJajaja me mataron de risa los tres alegres "Detectives" jajaka super lindos hablando tan fresca y estrategicamente¡¡¡ ok ni como negar que me encata cuando Leeteuk esta en em bando de Chunnie y es su incondicional. Así que totalmente enganchada a la historia. Junsu con ojitos verdes???? Mmm bueeno... no es que no me guste pero sus ojotos castaños son hermososooo.
ResponderEliminarBUENISIMO .....YUNHO SERA EL TERCERO EN DISCORDIA?.....JUNSU YA LLEGO TU LOBITO.....GRACIAS
ResponderEliminarEsos tres locos aventureros me encantaron, jugado a ser detectives. Yoochun encontró a su pareja de vida y Junsu lo sintió, aunque no sabe ni que, muy interesante, me encanto.
ResponderEliminarGracias!!!