Los únicos sonidos en la gran sala eran
sollozos ahogados, y sonidos tranquilizadores viniendo de aquellos que trataban
de consolarlos. Luhan y Key sentados a ambos lados de Leeteuk y él sostenía a ambos
cerca, un compañero de manada ofreciendo consuelo a dos doceles que amaba como
hermanos.
Heechul estaba envuelto en los brazos de
Siwon, sentados en una de las sillas más grandes cerca del fuego.
Hacía mucho tiempo
que Siwon no había visto a su compañero perder el control y eso
rompió su corazón.
Yoochun
y Junsu se sentaban en un extremo
del sofá, mientras
Hayami y Changmin en el otro. Aunque
cada uno estaba
envuelto en brazos fuertes se habían acercado al otro a través del sofá para
agarrar sus manos.
Changmin había enterrado su rostro en el
pecho de Hayami y aunque sabía que debía apartarse no podía. Sus brazos eran
tan fuertes, tan seguros. Sus palabras susurradas en su oído se vertieron sobre
él como una lluvia sanadora. En un momento había sentido
su abrazo aflojarse y pensó que estaba liberándose de él. Así, él había
envuelto sus brazos alrededor de su cuello en un férreo control y suplicó para
que no lo dejara ir. Su respuesta había sido simple pero absoluta:
—Nunca —le había susurrado al oído. Eso, por
supuesto, hizo a Changmin llorar con más fuerza, porque él lo dejaría. Al igual
que Jae, no tendría otra opción. Hayami encontraría su verdadero compañero y entonces él
estaría roto y llorando de nuevo, sin brazos fuertes para sostenerlo.
El corazón de Hayami se había roto
durante la misma escena, quería gritar porque no sabía cómo consolarlo. Así que
sólo siguió abrazándolo, diciéndole que cuidaría de él. Por ahora, eso era todo
lo que podía hacer.
Junsu miró a Yoochun y él limpió las
lágrimas de sus mejillas.
—Lo siento mucho, Luna. Estoy tan apenado. — Yoochun estaba al borde
y su lobo estaba aún peor
sabiendo que su compañero estaba sufriendo tanto y sabiendo que había una
amenaza muy peligrosa para él al otro lado de esa puerta.
—Voy a tener que llamar a su familia. —Hundió
la cara en su cuello
y con voz entrecortada gritó—:¿Qué
le voy a decir a sus padres, Yoochun? ¿Qué puedo decirles acerca de cómo murió
su hijo de dieciocho años?
—Shh, amor. Vamos a averiguarlo luego.
Entonces, como si se diera cuenta por
primera vez, él lo miró con horror.
—Alguien tiene que quitárselo. ― Yoochun asintió.
—Sí.
—Él va a matar a cualquiera que entre en esa
habitación. ― Yoochun
miró a su padre, quien asintió.
—Probablemente, tendremos que dormir a Yunho,
Junsu. ― Junsu se quedó
sin aliento.
— ¿Quieres decir como un perro? ¿Van a
practicarle eutanasia? —
La indignación que sentía no sólo estaba en su voz, sino un fuego en sus ojos.
—Él no es seguro, Junsu. —Esto vino de Siwon— No
va a ser seguro para nadie nunca más. La luz que Jae le traía se ha ido. Su
lobo buscará la sangre… sangre de cualquiera. Sólo quiere reivindicación para
su compañero. Y sería natural para Yunho morir con él. Ese es el camino de
nuestra especie y la única razón por la que no ha pasado aún es porque los
Ritos de Sangre no se completaron.
—No pueden simplemente matarlo. No está bien.
—Nosotros no somos humanos —dijo Siwon con firmeza— Junsu,
eres el compañero de mi hijo y mi yerno, pero también eres de la manada y soy
tu Alfa. No me vas a retar.
Junsu sintió el poder de Siwon sobre él
y su cabeza se inclinó en sumisión. No se sentía sumiso, pero su Alfa había
hablado y no lucharía contra sus palabras.
—Luna, todo estará bien. —Yoochun trató desesperadamente
consolarlo. La cabeza de Junsu se levantó y gruñó a su compañero:
— ¡Jae ha muerto! Nada volverá a estar bien
otra vez.
La habitación se quedó inmóvil, las
palabras de Junsu resonando con fuerza en el silencio. Junsu comenzó a
levantarse del regazo de Yoochun, necesitando salir de la atmósfera sofocante,
cuando oyó una risa proveniente de la habitación donde yacía Jae.
Inmediatamente todo el mundo
se puso de pie. Junsu
llevaba la ventaja
y cuando giró el pomo, la sintió cerrada con llave. Yoochun lo hizo a un
lado y giró el pomo con firmeza. La cerradura se rompió y la puerta se abrió,
sin saber qué esperar. Una cosa era segura… no lo que encontraron.
Junsu entró y vio a Yunho de pie, listo
para atacar cualquier cosa que amenazara al chico de pie detrás de él.
El chico era Jae.
Jae se asomó alrededor Yunho, sonriendo,
y con voz nerviosa dijo:
—Sorpresa.
—Estabas muerto. — La voz de Junsu estaba temblando de
ira, y esperanza también — Los vi hacerte RCP y luego vi a Yunho… él no
dejaba que nadie se acercara a ti. Estabas jodidamente muerto, KIM JAEJOONG, ¿y
todo lo que puedes decir es “sorpresa”?
Jae trató de empujar a Yunho fuera del
camino, pero este no se movió.
— Yunho, no van a hacerme daño. Muévete.
Yunho se hizo a un lado para dejar a Jae estar
junto a él. Cuando se puso
delante de él para acercarse a Junsu, envolvió un fuerte brazo alrededor de su
cintura y lo atrajo hacia su pecho.
Jae puso los ojos en blanco, pero se centró
en Junsu.
—Voy a explicarlo todo, Susu, te lo prometo.
Por favor, no te enojes.
—Estábamos sentados allí, doloridos por la
pena. Trataba de encontrar la manera de decirle a tus padres que su niño está
muerto y luego escuchamos a Yunho riendo. Infierno sí estoy enojado. ¿Cuándo
ibas a dejarnos unir a tu pequeña fiesta de “oigan, estoy vivo”?
Changmin caminó alrededor de Junsu y
miró a Jae. No dijo nada, se limitó a mirar.
Jae no se movió. Junsu estaba enojado,
no quería a Changmin enojado
con él también.
— ¿Estás bien? —preguntó Changmin en voz baja.
—Sí, Changmin, estoy bien.
—No pude salvarte. —Los ojos de Changmin bajaron al suelo,
su vergüenza evidente en la caída de sus hombros.
Jae trató de salir de las garras de
Yunho, pero todavía no lo dejaría moverse. Lo miró y, en su vínculo, gruñó:
«Déjame ir a él, Yunnie. Necesita saber que está bien, que estoy bien».
«Si alguno de los hombres te toca, perderán sus vidas».
Jae dejó escapar un suspiro exasperado y
finalmente lo dejó ir.
Mientras se acercaba a Changmin, miró a su alrededor, haciendo
contacto visual con cada
hombre mientras hablaba.
—Atención compradores, sólo un breve anuncio,
hombre lobo demente en el pasillo tres. Aquellos con una abundancia de
testosterona, no toquen la mercancía y podrán salir de aquí intactos.
Junsu trató de no reírse porque estaba
enojado, pero era imposible no hacerlo porque la expresión del rostro de Yunho
no tenía precio.
—Debidamente señalado. —Siwon habló por el grupo.
Jae envolvió sus brazos alrededor de Changmin y sintió a su dulce
y tierno amigo comenzar a llorar.
—Lo intenté, Jaejoong. Lo intenté, pero no
respirabas.
—No es tu culpa Changmin. No eres Dios.
Sanador o no, no puedes arreglar todo. Y tienes que estar de acuerdo con eso o
te vas a volver loco.
Junsu se acercó y abrazó a los dos chicos.
—Sabes que el mundo se ha ido al infierno en
una cesta de mano cuando Kim Jaejoong es la voz de la razón.
Todo el mundo se echó a reír
vacilantemente, sin querer perturbar la frágil paz que había descendido.
Jae se apartó y miró a sus dos mejores amigos.
—Así que, ¿has dejado de estar enojado
conmigo, Junsu? ¿Y has terminado de culparte por mi prematura muerte, Changmin?
—Claro, ¿por qué no? —bromeó Junsu.
—Estoy bien —añadió Changmin.
—Está bien, curiosos, tenemos mucho que
discutir. Convocaré una junta de manada. —Jae miró a Siwon con un guiño—Sin ánimo de ofender, A, pero tengo que
encargarme de esta. Sé algo, y todos ustedes necesitan saberlo.
Siwon miró a Yunho.
— ¿Estás bien? ― Él asintió.
—Me disculpo por lo de antes.
—No es necesario, Beta. Tu compañero te había
sido arrebatado, y en un cruel giro del destino no se te permitió seguirlo
porque los Ritos de Sangre no se completaron. Yo habría hecho lo que fuera
necesario.
—Y por eso siempre estaré en deuda contigo. — Yunho
desnudó su cuello para Siwon en sumisión y respeto.
Jae se giró hacia su compañero, le tomó la mano, y empezó a tirar de él en dirección a la puerta.
— ¿Está bien, todo el mundo? Convoquemos esta
reunión a orden.
Yunho puso los ojos en blanco.
—Me alegra ver que el casi morir no te quitó
tu inteligencia.
— ¿Crees honestamente que una pequeña cosa
como morir podría ajustar mi actitud? —Jae le sonrió,
mientras todos tomaban
asiento en la gran sala junto
al fuego.
—Espero que no, porque entonces no serías mi
Jaejoong. No quiero a alguien que siempre
hace lo que le dicen,
o simplemente sigue
la corriente. ¿Dónde está la
diversión en eso?
Jae puso los ojos en blanco y esta vez
habló en voz alta.
— ¿Dónde de hecho estaría la diversión en dar
órdenes a una persona quien simplemente estaría de acuerdo con todos tus
caprichos? — Cuando
trató de sentarse junto a Yunho en el sofá, él pasó un brazo por su cintura y lo
atrajo hacia su regazo. Lo fulminó con la mirada— ¿Es esto realmente necesario?
—Acabas de morir, nene. Si parezco un poco
pegajoso contigo puedes jodidamente superarlo. —Para
sorpresa de Yunho,
en lugar de dar alguna
replica inteligente su compañero se echó a reír.
—Oh, hombre, esta vida va a ser divertida. —Jae se limpió las lágrimas mientras
todo el mundo lo miraba, todavía en estado de shock porque estuviera allí ante
ellos… vivo, riendo.
Jae se acomodó en el regazo de Yunho
para estar frente a todos, y luego miró a Peri, quien estaba de pie cerca del
fuego, con una tranquila JiMin, sentada en la chimenea.
—Les puedo contar todo, ¿verdad?
—Como si pudiera detenerte —resopló Peri. Jae asintió.
—Buen punto. Muy bien. Así que, como todos
ustedes saben, morí.
—Gracias por la aclaración, Jae, no estábamos
muy seguros ya que no tenías pulso y no respirabas —espetó Junsu, todavía irritado porque
su amigo hubiera estado en la habitación toqueteando a su compañero mientras él
y los otros se habían sentado en la sala principal sufriendo.
— ¿Terminaste? —preguntó Jae, alzando las cejas a su amigo
pelirrojo. Cuando Junsu le hizo un gesto, Jae continuó— Así
que, me desperté en esta habitación blanca. Esa es la única manera que conozco
para describirla. Era blanca y llena de luz. Miraba alrededor, pensando que ya
no estaba en Kansas, cuando de repente aparece nuestra amigable vecina Fae.
Todos
en la sala se volvieron
para mirar a Peri, que miraba hacia
ellos con aburrimiento.
—Así que le pregunto a Peri si estoy muerto y ella, tan amablemente y con fines de aclaración, dijo que sí… oh, y no. Le pregunté si me podía traer de vuelta.
Dijo que sí, pero eso significaría que interferiríamos con el destino. Yo
cortésmente… —Justo en ese momento Peri resopló al
oír las palabras de Jae, una vez más. Jae miró a la Fae— Fui
educado en comparación con mis estándares habituales. De todos modos, le dije
básicamente que acababa de ser acoplado a un hombre lobo caliente y realmente
no había hecho planes para morir virgen. Así que aquí estamos.
Yunho había empezado a ahogarse ante las
palabras de Jae y, para sorpresa de todos, se volvía color rojo brillante.
Changmin sacudía la cabeza
a su mejor amigo mientras
Junsu cubría la risa que iba a explotar en cualquier momento.
—Le informé que podría haber consecuencias
por desafiar el destino — agregó Peri.
— ¿Podría? —preguntó Siwon. Peri puso los ojos en blanco.
—Podría ser, habrá, lo que sea —dijo
con un gesto desdeñoso de la mano.
Yunho se levantó, casi tirando a Jae de su
regazo, después de haber pasado la vergüenza de los comentarios embarazosos de
su compañero.
— ¿Qué quieres decir con: “podría haber
consecuencias”?
—Miró a Jae— No mencionaste esto. —Sus palabras fueron un gruñido.
—Bueno, estabas un poco ocupado jadeando
sobre mi cuello, si mal no recuerdo —gruñó Jae.
— Jaejoong —dijo a modo de advertencia.
—Jae, ahora tal vez no sea el mejor momento
para poner a prueba su carencia de sentido del humor —señaló Siwon.
Jae asintió en señal de dar marcha
atrás, una cosa rara para Jae.
— ¿Qué tipo de consecuencias? —preguntó Yunho a Peri.
Peri se apartó de la pared contra la que
había estado apoyada y se acercó al grupo.
—Honestamente, no lo sé. Tampoco sé cuándo
podrían volver por él. Podría ser mañana o dentro de un siglo.
—Bieeeeeen. Bueno, eso apesta —murmuró Junsu.
—Oye, estaba muerto, Junsu. No estaba listo
para estar muerto. Trataré con las Parcas cuando se metan conmigo.
Junsu levantó las manos.
—No estoy diciendo que no habría hecho lo
mismo en tu lugar, Jae, sólo digo que es una mierda no saber cuándo podrían
dejar caer una bomba en tu cabeza.
Yunho gruñó al oír las palabras de Junsu, que
a su vez tuvo a Yoochun gruñendo.
— ¡BASTA! —Siwon se levantó y la habitación pulsó con su poder— Yunho,
Yoochun, cálmense. Ahora. —Siwon
volvió sus ojos a los chicos— Chicos, van a, por una vez, tener en cuenta
que su sarcasmo y comentarios sabelotodo podrían posiblemente provocar una
pelea entre sus compañeros. Todo el mundo se siente posesivo y protector en
estos momentos. Yunho está fuera de la escala en esos departamentos. Así que
cuiden sus lenguas.
Jae, Changmin, y Junsu miraron a Siwon y
realmente vieron a su Alfa. Era la primera vez que realmente los reprendía y no
era un sentimiento con el cual alguno de ellos estuviera familiarizado.
—Pido disculpas, Beta. —Junsu miró a Yunho, pero se aseguró de no hacer contacto visual— No
quise faltarle al respeto a tu compañero.
Las palabras de Junsu tuvieron el efecto
deseado. Yunho se relajó visiblemente.
— ¿Y ahora qué hacemos? —Luhan
habló desde su posición en el extremo del brazo del sofá.
—Ahora tenemos que traer a Taemin y Minho
aquí. —Cuando habló,
Peri observó a Siwon y Heechul
por su reacción— Changmin
tiene que aprender lo que puede hacer. Lo necesitaremos y a Taemin para
desterrar a la bruja.
—No —dijo Hayami. Él había estado de pie en silencio contra la pared detrás
de la silla que Changmin ocupaba.
— ¿Qué? —espetó Peri al joven lobo.
—Changmin y Taemin no pueden hacer esto solos —gruñó Hayami.
— ¿Y por qué exactamente dices eso, lobo?
¿Porque has vivido por siglos y
conoces el pasado, conoces la historia de las brujas y sanadores? —Las palabras de Peri fueron una
bofetada en la cara de Hayami. Él no dio marcha atrás.
—No, hada, no soy viejo, no estoy bien
informado sobre el pasado. Pero voy a donde vaya Changmin. No hay negociación
en eso.
Era muy evidente para todos que Peri
estaba perdiendo la paciencia con Hayami. Si Hayami lo notó, o bien no lo
demostró o no le importaba.
Changmin se puso de pie y fue hacia Hayami.
Lo empujó y él a regañadientes cedió. Después de que Peri rompió el contacto
visual, él volvió su atención a Changmin.
— ¿Qué estás haciendo? —le preguntó él.
—Te estoy protegiendo. Te lo dije… te
protegeré pase lo que pase.
— ¿Por qué, Hayami? No lo entiendo. No soy
nadie excepto el sanador de tu manada. ¿Por qué todo este repentino interés en mí? —Changmin se estaba
poniendo nervioso bajo su intensa mirada— No puedo dejarme atrapar por sentimientos
que no van a ningún lugar. Por favor… —Antes de que pudiera continuar, Hayami lo atrajo hacia sí y se inclinó hacia abajo para que su
boca estuviera junto a su oído.
—Yo tampoco lo entiendo, y lo siento si mi
comportamiento es angustiante para ti. Pero no voy a ninguna parte. A donde sea
que vayas, ojos marrones, yo voy. Necesito que confíes en mí, Changmin mío, no
voy a hacerte daño.
Changmin se apartó bruscamente, como si
la hubiera abofeteado.
—Pero de eso se trata, Hayami. Lo harás. Me
harás daño. No querrás, pero un día encontrarás a tu verdadero compañero y
seré pateado a la acera. No soy tan fuerte como Jae y Junsu. Una vez que
entrego mi corazón, no puedo recuperarlo. Una vez que se ha roto, está más allá de la reparación. ¿Cómo puedes esperar a
que me arriesgue a un enamoramiento?
Hayami le gruñó.
— ¡No es ningún enamoramiento, Shim Changmin! —Había dado un paso más, sin siquiera
darse cuenta. Él y Changmin estaban tan cerca que sus cuerpos estaban casi
tocándose. Ambos tomaban respiraciones pesadas, tratando de contener su ira.
Hayami bajó la voz cuando habló de
nuevo.
—No es ningún
enamoramiento. No sé lo que es. No entiendo por qué está sucediendo ahora. Lo que sí sé es que nunca he sentido esto por nadie, y mi lobo
no te dejará ir, incluso si quisiera, lo que no hago.
Changmin bajó los ojos y negó. Era obvio
que nada de lo que pudiera decir disuadiría a Hayami. Una parte de él estaba
radiante debido a eso, la otra parte se revolcaba en la oscuridad, sabiendo que
pronto todo su ser se consumiría por la oscuridad de un corazón quebrantado y
sueños rotos.
Sin decir nada más, Changmin se apartó
de Hayami y tomó asiento en la silla. Miró a Junsu, luego a Jae. El rostro de Junsu
era de confusión y dolor por su amigo; la cara de Jae, sin embargo…
la cara de Jae estaba llena de picardía y algo
más. Changmin lo miró un poco más, tratando de saber por qué las pequeñas
ruedas de Jae estaban girando. Entonces Changmin lo notó. Era conocimiento.
Tenía la sonrisa de alguien que sabía algo que los demás no. Para la confusión
de Changmin, realmente no sabía si quería saber lo que era.
>>>♥<<<
Peri se giró para llamar a JiMin hacia ella,
sólo para darse cuenta que la joven Fae había desaparecido.
—Discúlpenme por un momento —dijo Peri al grupo. Ella salió por la puerta del frente y cerró los
ojos, llegando al consejo de su pueblo. Sus ojos se abrieron de golpe cuando
recibió la información que necesitaba. Tenía los labios apretados mientras
empujaba la puerta trasera y entraba en la
cabaña.
—Parece que mi pueblo ha tenido que llamar a JiMin.
Iba a enviarla por Taemin y Minho,
pero eso, obviamente, no va a pasar. Tengo que enviar
a algunos de ustedes.
Siwon se levantó.
—Yo iré.
—No. —Peri habló antes de que las palabras de Siwon salieran completamente
de su boca— Tú no debes ser comprometido, Siwon.
— ¿Puedes ocultarnos de alguna manera? —preguntó Junsu.
Junsu se dio cuenta que los labios de
Peri hicieron esa cosa apretada de nuevo y sus ojos brillaban levemente.
—Parece que nuestra bruja amistosa ha estado
trabajando mientras hemos estado tras el velo. Ha puesto un hechizo de rastreo
en los Alfas.
— ¿Lo que significa? —la alentó Jae.
—Significa que cualquier persona o cualquier
cosa que posea magia producirá un rastro para que ella lo siga.
— ¿Pero no son todos los hombres lobo mágicos? —Changmin frunció el ceño.
—Sí, pero los latentes y los mestizos no
cargan ni de cerca tanta magia en ellos como un lobo de pura sangre.
Esta vez Yunho lanzó a Jae fuera de su
regazo mientras él se disparaba del sofá antes de que incluso registrara el
movimiento.
—Ni siquiera digas lo que estás pensando.
Jae fulminó a Yunho con la mirada
mientras se levantaba él mismo del suelo.
—Está bien, voy a olvidar que me lanzaste
sobre mi trasero ya que puedo ver claramente que estás magníficamente cabreado.
—Jae estaba de pie de puntillas,
tratando de llegar a la cara de su compañero. Yunho simplemente envolvió un
gran brazo alrededor de él y lo empujó fuera del camino, empujándolo detrás de
él.
—Junsu y Jae tienen la mejor oportunidad de
ir sin ser detectados. Una vez que estén con Taemin y Minho, Taemin será capaz
de proporcionar algún pequeño encubrimiento.
Todos los hombres en la sala se
molestaron con lo que estaba sugiriendo Peri.
— ¿Quieres que envíe a dos de mis doceles al bosque, solos?
—habló Siwon lentamente y sus ojos comenzaron a
brillar. Heechul le puso una mano en el brazo, tratando de calmar al Alfa.
Yoochun
se levantó y empujó a Junsu detrás
de él justo como Yunho le había hecho a Jae. Jae miró a Junsu desde atrás de Yunho y puso los ojos en blanco.
Junsu asintió su acuerdo con la opinión.
—Tal vez la decisión debería corresponder a los
chicos en cuestión —
anunció Jae desde detrás de la pared que era su compañero.
—No. —Yoochun, Yunho, Hayami, Leeteuk, y Siwon
dijeron a la vez, todos en varios estados de asombro al comentario de Jae.
Jae y Junsu ahora estaban completamente
enojados.
Junsu se abrió paso alrededor de Yoochun
mientras Jae hizo lo mismo con Yunho. Cada chico rodeó a su compañero y la
habitación quedó en silencio mientras las dos parejas se dedicaban a lo que
parecía ser una competencia de miradas. En realidad, estaban hablando entre sí
a través de sus vínculos.
«No va a suceder, Jaejoong. Puedes fulminarme con la mirada,
despotricar, llorar, o pisotear todo lo que quieras. No vas a dejar esta casa».
Jae gruñó. Un verdadero gruñido. Eso
sólo causó que Yunho sonriera.
«Idiota», pensó para sí mismo.
«Juegos previos, nene, juegos previos».
Esta vez Jae sí pisoteó su pie. Dejó
escapar un gruñido y se volvió hacia Peri y Siwon.
—Junsu y yo podemos hacer esto. No somos
algunas damiselas indefensas en peligro. Si no producimos suficiente magia para
que la malvada bruja nos rastree, entonces deberíamos estar bien.
Yunho resopló detrás de él.
— ¿Bien? Compañero, hace mucho frío ahí fuera.
Y los hombres lobo no son los únicos en el bosque, ¿o has olvidado que hay
otras cosas que aparecen en la noche?
—Estás muy cerca de dormir en el sofá. Sólo
quiero que lo sepas. —Jae
sonrió cuando sintió su sorpresa y luego su frustración ante su comentario. Un
punto para el chico acoplado/casado que no debería estarlo, pero podría usar el
sexo como un arma. Jae sabía que no era agradable, pero a tiempos desesperados…
—Eso no va a funcionar conmigo, Jaejoong. No
soy un chico de dieciocho años virgen que se muere por estar entre las piernas
de su pareja.
Jae se dio la vuelta tan rápido que su cabello abofetearía a cualquier de las
proximidades en la cara.
— ¿De verdad acabas de decir eso? —Sus
manos se habían
ido a sus caderas y sus
hombros estaban jalados hacia atrás.
—Oh, hombre —susurró
Changmin a Key, que había estado sentado en silencio a su lado— He
visto esa mirada. No quieres estar en el otro extremo de esa mirada.
—Es necesario que entiendas con quién estás
acoplado. No voy a ser manipulado para que puedas salirte con la tuya. S…
—Tienes razón — interrumpió Jae — Me
alegro que me lo hayas aclarado. Ya que eres tan experimentado con el sexo
opuesto, entonces no hay manera de que yo conteniéndome a ti te moleste, porque
tienes recuerdos de esas otras u otros libertinos para mantenerte caliente durante
la noche. Gracias por eso, mi dulce compañero. Desde ahora sé que a diferencia
de otros hombres que desean estar con sus parejas — dijo
Jae su voz burlona — no eres persuadido fácilmente, voy a tener
que encontrar otras formas que podrían hacer llegar esto través de tu grueso
cráneo, infestado de pulgas: no voy a ser dictado, no voy a ser controlado, no
voy a ser tratado como un docel del siglo XVIII que camina dos pasos detrás de
su hombre y sólo habla cuando se le habla.
— Jaejoong. — Yunho dio un paso hacia él.
—No, Yunho. No utilices ese tono de voz conmigo. Soy tu compañero,
tu esposo, tu igual. —Finalizó
sus palabras a través de su vínculo. «Y no me olvidaré de tus palabras, mi amor.
No voy a olvidar tu falta de entusiasmo por tu pareja».
— Jaejoong, nene, no quise decir que no te
quiero. —Las palabras
de Yunho cayeron en saco roto porque su compañero le había dado la espalda y
bloqueado sus pensamientos.
El grupo pasó el día descansando y
evitando el elefante en la habitación. Los hombres no querían que los chicos
fueran, los chicos querían pegar atizadores calientes en los ojos de los
hombres. Sí, no estaba tenso en absoluto.
Cuando cayó la noche, uno por uno, todos
encontraron sus camas en las que habían estado durmiendo dieron por terminada la
noche. A lo largo del día, Jae y Junsu se habían encontrado a los ojos de Peri
con miradas que cada uno entendía eran un mensaje tácito.
Jae casualmente fue a la cocina para tomar una copa antes de ir a la cama. Peri pasó
por delante y murmuró:
—Ve al baño, voy a sacarte. —Jae no cuestionó cómo, sólo siguió moviéndose.
Cuando pasó junto a Yunho, él se levantó
y lo siguió. Al entrar en la habitación que compartían, Jae pensó en cómo se
iba a sentir raro ya que estaba casado y su marido ahora estaría durmiendo en
su cama. Pero, suponía que, estaba demasiado enojado como para sentirse raro.
Casado. El término pasó a través de su
mente. «¿Cómo diablos le voy a decir a mis padres?» Jae realmente no quería pensar en eso en
ese momento, teniendo en cuenta que tenía cosas mucho más grandes en su plato.
Yunho se quitó la camisa y la arrojó sobre una
de las sillas vacías. Jae dejó escapar un lento suspiro y trató de no babear
por el cuerpo bien tonificado de su compañero. Él emitió un suspiro mental de
alivio cuando comenzó a meterse en la cama con los pantalones todavía puestos. «Salvados
por los Levis», pensó Jae con una risita.
Yunho habló y él se sorprendió al escuchar
verdadero dolor en su voz.
— ¿Por qué sigues bloqueando tu mente de mí?
—Estoy enojado contigo.
—Así que cada vez que estés enojado conmigo,
¿me vas a bloquear?
—No lo sé. Estoy seguro que tus castigos
variarán. La variedad es la sal de la vida.
Yunho le gruñó, y luego dijo en voz baja.
—Duele. Cuando me bloqueas, me lástima.
Jae cerró los ojos ante sus palabras. No
quería contentarse todavía, no quería sentirse mal por hacerle daño. Pero lo
hizo.
Se subió en la cama junto a él, pero no
se acostó. Se sentó con las piernas cruzadas y lo miró. Yacía de espaldas, con
el brazo sobre el rostro, bloqueando la vista de sus ojos.
— Yunho, mírame. —Jae tiró de su brazo.
Él le permitió halarlo lejos de su cara,
pero seguía sin mirarlo a los ojos.
Jae se levantó en cuatro patas y puso
una mano en cada lado de su cara para que así él mirara directamente hacia él. Si no quería mirarlo ahora, tendría
que cerrar los ojos. No lo hizo.
—Lo siento —dijo
él, realmente sintiéndolo.
Jae comenzó a sentarse pero Yunho puso
una mano en la parte posterior de su cuello y empujó su cara más cerca de la
suya. Presionó sus labios firmemente contra los suyos y ambos suspiraron ante el contacto. Jae no se había
dado cuenta de lo vacío que se sentía de no tocarlo durante todo el día. Se apoyó en él, sacando el peso de sus
manos para ese modo poder pasar sus dedos por el cabello de él. Yunho gruñó y
envolvió su brazo alrededor de él, acercándolo. Mientras Jae se sometía a su
beso, abrió su vínculo también y sintió su alivio barrer sobre él. Realmente había estado lastimándolo. Eso era lo último que Jae
quería hacer a su compañero. Provocarlo, sí. Volverlo loco, absolutamente.
Ponerlo sexualmente frustrado, dah. Pero nunca hacerle daño.
—Lo siento —le
dijo mientras profundizaba el beso. Él abrió la boca cuando sintió su lengua
acariciar sobre sus labios, y por primera vez en su vida Jae quiso hacer todas
las cosas sobre las que bromeaba.
Yunho se retiró.
Por mucho que deseaba a su compañero, ahora no era el
momento. Había atrapado algunos de los pensamientos a la deriva a través de la
mente de Jaejoong y sabía que tenían que parar. Él tenía que parar.
Yunho vio como el dolor se formó en los ojos
de Jaejoong cuando la empujó hacia atrás.
—Nene, esto no es rechazo. —Se rió al ver su expresión desolada.
—Entonces, ¿qué es? ¿En serio quisiste decir
lo que dijiste? Quiero decir… — Jae agitó sus manos frente a él para evitar que interrumpiera — sé
que no eres virgen, ya hemos ladrado a ese árbol. Pero, ¿realmente tenías que
echármelo en cara, Yunnie? ¿Tenías que hacerme sentir como si mi propio
compañero no me desea?
Yunho
se frotó la cara mientras dejaba escapar un profundo suspiro.
— Jaejoong, si tuvieras alguna idea de cuánto
te deseo, probablemente tendrías miedo de estar a solas conmigo. Te quiero… en
todos los sentidos, pero no quiero que utilices mi necesidad de ti, mi deseo
por ti, en contra de mí. No cuando es para no tomar en cuenta tu seguridad.
Observó
mientras Jae procesaba sus palabras. Yunho
jugó con un mechón
de su largo cabello y esperó a que él hablara.
Jae se sentó allí, mirando a su oh, tan
guapo compañero y se tragó sus palabras. Yunho lo quería, y en base a ese beso su deseo era evidente. Pero él no quería
que lo manipularan. Se dio cuenta entonces que tenía que ir al baño de manera
que Peri pudiera sacarlo. Así que, nada de manipulación, bien. Él podía hacer
eso. Él no dijo nada acerca de ser astutos.
—Está bien. —Él
comenzó a bajar de la cama, pero se detuvo abruptamente cuando se dio cuenta
que Yunho no había soltado su cabello.
— ¿Está bien? — Yunho miró a su compañero con
suspicacia— ¿Eso es todo?
—Sí, tienes razón. No debería usar el sexo
para manipularte. Es infantil. Puedo admitir cuando me equivoco Yunho, caramba.
Es sólo que ocurre tan raramente que en cierto modo me pilla por sorpresa.
Yunho se rió entre dientes, pero aún no estaba
convencido de que todo estaba bien con él.
Jae podía decir que Yunho no estaba
creyendo su aceptación tan de repente, así que él se arrastró de vuelta en la cama y a medida que él se apoyaba
contra la cabecera, él se subió a su regazo. Envolvió sus brazos alrededor de
su cuello y lo besó suavemente.
—Sé que soy difícil, Yunnie. Pero eso no
quiere decir que no sé cómo ser razonable. Y entiendo por qué me rechazaste.
— ¿En serio?
—Claro que sí. Estás nervioso. Ha pasado un
tiempo y te preocupa no ser capaz de estar a la altura de mis expectativas.
Está bien, vamos a ir lento. Te daré todo el tiempo que necesites. —Jae estuvo a punto de morder su labio
tan fuerte para no reírse ante el horror en la cara de Yunho ante sus palabras.
Él sabía que lo que estaba diciendo era un montón de basura, pero no pudo
resistirse. Se había sentido como si él no lo deseara. Se había sentido herido
cuando él lo apartó. No le haría daño si pensara que él pensaba que él estaba
realmente estresándose sobre toda la cosa de la consumación. —Voy a ir al baño y prepararme para la cama.
No te preocupes por mí, ¿de acuerdo? Cuando estés listo, podemos explorar
nuestra relación física. —Jae
empezó a bajar de su regazo mientras él lo miraba con la boca abierta y luego
la cerraba. Al llegar a la puerta del baño, le oyó gruñir.
— ¿Explorar nuestra relación física?
¿Nervioso? ¿Preocupado? —
Con cada palabra su voz se hizo más fuerte
y el gruñido aumentó. Para el momento
que Jae había cerrado con
llave la puerta del baño, Yunho estaba en ella moviendo el pomo de la puerta.
— Jaejoong, abre la puerta.
— Yunho, en serio. ¿Puedo tener un poco de
privacidad? No hemos estado juntos el tiempo suficiente para hacer pis en
frente del otro.
Lo oyó gruñir algo en voz baja, pero se
apartó de la puerta. Jae se quedó allí, esperando. Para qué no estaba seguro.
Entonces, de repente, la pared más cercana a su lado simplemente desapareció. Junsu
y Peri aparecieron justo en frente donde había estado la pared.
— ¿Qué dem…?
—Shhh. —Junsu le dio un gesto a Jae para que bajara la voz.
Jae se acercó hasta Junsu y la Fae y la
pared volvió a aparecer como si nunca hubiera desaparecido.
—Eso es jodidamente genial y divertido. —Jae le sonrió a Peri. Peri puso los
ojos en blanco.
—Lobos. Tan fáciles de impresionar.
—Entonces, ¿vamos a planear nuestra operación
secreta? —Jae
se frotó las manos, viéndose mucho más como un niño travieso.
Peri
les indicó que la siguieran. La puerta principal se abrió sin hacer ruido y se cerró tras ellos. Jae y Junsu
esperaban comenzar a temblar, pero a pesar de que había nieve a su alrededor,
no sentían frío.
— ¿Supongo que nos estás manteniendo
caliente? —preguntó Junsu
con una ceja levantada.
—No puedo hablar claramente con ustedes dos,
si sus dientes están castañeando sin cesar, es molesto.
—Bien entonces, Peri-hada, cuéntanos cómo te
sientes. —Jae puso los ojos en
blanco.
Peri ignoró el comentario.
—Los machos en su manada nunca dejarán que
ustedes dos vayan por su cuenta.
Junsu y Jae se miraron entre sí y luego
a Peri.
—Sí, sabemos eso a la perfección. Lo que no
entendemos es por qué no estás trabajando tu mojo para atarlos como hiciste con
Yunho. —Junsu
decidió que sus palabras
deben haber sorprendido a Peri porque
la Fae dio un paso atrás.
— ¿Quieren que ate a sus compañeros? —preguntó ella con incredulidad. Una
risa emanó de Jae.
—No, tontita.
Peri tomó una respiración audible y la
dejó escapar, obviamente aliviada. Jae le devolvió la sonrisa.
—Queremos que ates a todos los machos.
>>>♥<<<
— ¿Qué están
haciendo exactamente ahora?
—preguntó KangTa
a la bruja que su
manada había empleado durante siglos. Ella se sentó en una silla en la
habitación que llamó su “cueva”. KangTa trató de no mirar alrededor, a las
cosas colgando del techo o la mirada fija sobre él desde los frascos que
llenaban las estanterías que cubren
las paredes. No vio al suelo para ver en lo que podría estar pisando, o peor aún, sobre qué. Mona miró por la ventana mientras
giraba su muñeca hacia él con aire ausente.
—Estoy haciendo lo mío. Una mejor pregunta
sería: ¿qué estás haciendo tú, Alfa? —le arrojó Mona de nuevo a la cara del
Alfa.
— ¿Qué puedo hacer yo? — Bramó
KangTa— No
sé dónde están. Es un poco difícil atacar a alguien cuando no sabes su
ubicación.
—Sabes, KangTa, los mendigos no pueden
elegir. Así que, o mejor esperas pacientemente a que te diga cuándo es el
momento adecuado, o te puedo convertir en un sapo. Realmente, es tu elección.
El rostro de KangTa estaba tornándose de
un tono antinatural de rojo mientras fulminaba con la mirada la parte posterior
de la cabeza de Mona. Sus pensamientos de antes se arremolinaban en su mente. «¿Qué
había en todo esto para Mona?»
—Mona —dijo KangTa su nombre dulcemente— ¿Por qué sigues ayudándome y a mí manada
después de todo este tiempo?
—Sabes por qué. Para protegerme de las Fae.
—Las Fae no han puesto un pie al otro lado
del velo en siglos y tu poder es más fuerte que nunca. ¿Por qué estás pasando
el rato con los lobos, Desdémona? ¿Cuál es tu interés en el sanador?
Mona se volvió en su silla lentamente.
Sus ojos disparejos se encontraron con los suyos. Sonrió mientras se levantaba
y caminaba hacia él. KangTa sabía que era mejor no alejarse de un depredador,
por lo que se mantuvo firme.
—KangTa, KangTa, KangTa —ronroneó Mona — Sabes
que es mejor no cuestionarme. —Mona levantó una de sus uñas largas y afiladas y la arrastró a través
de la mejilla de KangTa y abajo por su cuello. Se acercó a su oído y le
susurró— No empieces a cavar donde no debes o
simplemente podrás encontrar que has estado cavando tu tumba todo el tiempo.
KangTa
no la dejó ver cuánto le perturbaron sus palabras. Mantuvo
su rostro frío y carente de emoción. Ella se alejó con un balanceo en sus caderas
y dijo por encima del hombro:
—Me pondré en contacto contigo cuando sea el
momento adecuado. Ten a tus lobos preparados, Alfa. Cuando todo esté listo
tendrás más que un poco de sangre en tus pulcras manos. —Justo cuando él pensaba que había terminado, saltó cuando la oyó
gritar—: ¡Oh, y VETE!
>>>♥<<<
KangTa irrumpió en la mansión de su
manada, las palabras de Mona haciéndose eco en su cabeza. Cavando. Hay algo enterrado que ella no quería que él supiera.
Algo sobre los sanadores y lo que significaban para una bruja. Ya era hora de
que visitara los archivos de su manada, incluso tanto como odiaba entrar en el lugar
que olía a viejo pergamino
y polvo. Pero necesitaba saber lo que Mona
estaba tramando. Él no era ningún tonto, era evidente
ahora que Mona no
estaba ayudando a KangTa, ella lo estaba usando para lograr su propio objetivo.
Había sido un ciego desde
el principio. Si ella creía que iba a poner sus manos
en su sanador, entonces no era tan inteligente como siempre creyó que
era. Como una bruja, sí, era poderosa. Pero no estaría más allá de él asegurarse
de que quedara atrapada en el fuego cruzado de la lucha contra los lobos. Ella
podría hacer frente a algunos, pero no había manera de que Mona pudiera hacer
frente contra dos manadas. Menos de manadas
con Alfas y dominantes tan fuertes como la suya y la de Siwon. En realidad,
era una pena que tuviera que desgarrar la manada de Siwon en pedazos… una
verdadera lástima, pero necesario.
>>>♥<<<
— ¿Quieren.
Qué. Ate. A todos los machos? —Las
palabras de Peri salieron
entrecortadas y su rostro les dijo a Jae y Junsu todo lo que necesitaban saber.
Pensaba que ellos habían perdido la cabeza. Probablemente estaba más cerca de
la realidad de lo que creía.
—Sí. —Jae y Junsu respondieron a la vez, sin dudarlo.
—Mira, sabemos que estarán enojados…
Continuara \\(^_^)//...
Niñ@s un comentario no
les cuesta nada….
Gracias…
Junsu y Changmin estaban sufriendo por la muerte de Jae pero al ver que estaba vivo se enojo y el otro se sentia mal pero eso no duro mucho.
ResponderEliminarYunho hizo sentir mal a Jae pero era necesario que el entendiera que no lo va a chantajiar con el sexo y mas por su seguridad,el no quiere perderlo de nuevo.
Jae y Junsu se saldran con la suya como sienpre,como reaccionaran los demas????
Kangta hace bien en averiguar mas sobre mona
pues si peri ata a los machos nomas que este al pendiente de desatar los cuando salga esa malvada bruja y kagta por que sino Jae y Junsu estarán en peligro con ese par de locos cerca y los machos los destrozaran
ResponderEliminarpues Jae y Junsu lo hacen para que no los sigan y no los pongan en peligro pero estoy segura que todo estará bien y no pasaran por peligros y los locos quedaran impresionados por que no se darán ni cuenta de lo que traman Jae y Junsu y les tumbaran sus planes y su venganza contra la manada de Siwon y sus chicos
Gracias
Que emocionante lo has dejado, Jae y Junsu incursionarán en el bosque solos, son ninguna protección, ojalá no les pase nada. Los machos alfa si que estarán enojados y preocupados.
ResponderEliminarGracias!!!
Jajajaj Jae discutiendo y poniendonsus puntos sobre la mesa me hace recordarlos en los NG's de los banjudramas jajjaj, sacando una cosa y luego otra y volviendo al punto A jajja tan adorable. DIOS Hayaaamiiii eres un cruel con mi ChangMin lo estas poniendo al limite de un punto donde él no tiene el control de su kokorito y OMG por que El SiChul no dice nada por qur él resro de la manada no dice ni pió sobre ese raro efecto entre ambos??? Aigoo¡¡ Ok No me puedo ir sin preguntar. Sé que Poleth es una de las personitas que tiene la respuesta y me la va a adar.
ResponderEliminar¿POR QUÉ LIAN A CHANGMIN CON HAYAMI?
He seguido a esta couple por mucho tiempo pero no sé si sostiene algo como una amistad muy cercana o algo que haya dado origen a esta HEEMOSA COUPLE¡¡¡ SÉ DE SOBRA QUE NO TENGO PERDON DE DIÓ POR NO SABERLO JAJA Y en serio agradesería que alguien pudiera darme antecedentes.
Por otro lado... me quede sorprendida... creía que Luah era un dominante macho y no un Docel¡¡¡¡ vaya sorpresa.
Jajjaja mi querida Chunsadycta, lo del HayaMin lo veas en los proximos capitulos. No puedo hacer spoiler.
EliminarUn abrazo y gracias por leer y dejar tus comentarios.