— Entiendo lo que necesitas que haga, Jiho. No
necesito que lo expliques de doce maneras diferentes. —La frustración del doctor Jeong Luhan hacia el lobo se mostró
claramente en su rostro.
—Si algo cambia en el plan, si por alguna
razón Yoochun es capaz de permanecer con él esta noche, tenemos que tener un
plan B — le dijo.
— El Plan B es que me aparezco a decirles que
los análisis de sangre que tomé de Jae son anormales y que quiero llevar a Junsu
al laboratorio y extraer más sangre para que pueda comparar los dos. Ellos
estarán enfocados en el hecho de que dije que la sangre de Jae es
anormal
— explicó.
— ¿Y es anormal? —le preguntó Jiho.
—Eso es parte de la confidencialidad del
paciente, Jiho, sabes que no puedo decirte eso.
— ¿Estás ayudándome a secuestrar al compañero
de un futuro Alfa y estás preocupado por la confidencialidad del paciente? — le preguntó con incredulidad.
—No tengo nada en contra de Jae, por lo
tanto, sí, estoy preocupado por su privacidad. Tú sólo necesitas preocuparte
acerca de Junsu.
— Bien — gruñó Jiho — Sólo asegúrate que de una manera u otra
consigues alejar a Junsu de esos mestizos y que está sedado para nuestra
salida.
>>>♥<<<
El doctor Jeong Luhan vio al lobo dejar
su oficina. Se preguntó, no por
primera vez, si estaba haciendo lo correcto. Entonces veía el rostro de su
hermano en su mente. Había sido tan infeliz en los últimos años. Él sabía que la
incomodidad de su lobo estaba creciendo por haber estado sin pareja durante
tanto tiempo, sobre todo en un Alfa que podría ser más peligroso. Su muerte fue
una prueba perfecta de lo que podría suceder cuando un lobo perseguía a una pareja
que no era su verdadero compañero. Así que, ¿por qué estaba ayudando a Jiho?
Era obvio que Yoochun era de hecho el compañero de Junsu. La verdad era que estaba enojado y herido, y Yoochun
era la causa de esa ira y dolor. No podía desafiar a Yoochun por matar a su
Alfa, pero él podía herirlo igual. Eso es todo lo que buscaba. Yoochun había tomado lo que era de él y ahora él tomaría
lo que era suyo. Los papeles
que llevaba en la mano lo sacaron
de sus pensamientos mientras
se dirigían de nuevo a través de los resultados de laboratorio que pertenecían
a Kim Jaejoong. Si bien Jaejoong parecía bastante normal, no había nada normal
en su sangre, y él sabía que si Jiho lo sabía, Junsu no sería el único joven
que estaría tratando de tomar para su manada.
— Junho, sólo déjalo
pasar la noche con él — estaba diciendo Hani — No
veo cuál es el gran problema.
— El gran problema, Hani, es que él tiene sólo
17 años y estás diciendo que está bien para él pasar la noche con un chico. ¿En qué más estás de acuerdo con que nuestro hijo haga? — Las fosas nasales
de Junho se ensancharon mientras su frustración por la situación
se incrementaba.
Jae, Changmin, Siwon, Heechul y Yunho
todos se sentaron en la sala de espera familiar que se había convertido en el
punto de encuentro no declarado. Todos miraban mientras Hani y Junho se
enfrentaban.
— ¿Se da cuenta de la gran equivocación que
acaba de hacer? — le susurró Changmin al grupo.
— Ah, tienes razón Changmin. Criticó la
crianza de su hijo. Esa fue probablemente la cosa más estúpida que podía hacer — coincidió Siwon.
Heechul palmeó la pierna de su
compañero.
— Sabía que eras inteligente cuando te conocí.
— Vamos, Naui. No seas demasiado tímido para
admitir que estabas tan encantado con mi buen aspecto que no podías
concentrarte en nada más.
— Él está recordándolo al revés — les susurró con complicidad a Jae y Changmin — La
primera vez que nos vimos las únicas palabras que podía decir era Luna y Naui,
e incluso entonces no las decía en el orden correcto. — Los chicos se rieron con Heechul.
—Ahh, mi amor, ahora sólo estas siendo malo — se quejó Siwon, y escuchar un Alfa lloriquear sólo los hizo reír más
fuerte. Jae atrapó a Yunho mirándolo pero rápidamente desvió la vista cuando él
atrapó su mirada.
Un golpe fuerte puso fin a su risa, ya
que todos se volvieron para ver a un impresionado Kim Junho de pie con la impresión roja de una mano en su cara.
— Tú puedes irte al infierno, Kim Junho, y
llevarte a todos tus malditos malolientes lobos infestados de pulgas contigo. — Hani se dio la vuelta,
golpeando la puerta de la sala de espera al pasar por ella. Todos
saltaron cuando se cerró de golpe.
— ¿Todos ustedes piensan que tenemos pulgas? — preguntó Yunho mientras miraba a Jae y Changmin.
— Creo que sólo lo asumimos
por el pelo y qué no, que tú, ya sabes, puede ser que tengas un problema con
pequeños bichos cuando estás en tu forma de lobo. — El rostro de Yunho se veía más dudoso con cada palabra que Jae hablaba.
— ¡Bueno, mierda! Todo lo demás con pelaje tiene pulgas ¿Qué esperabas que
pensemos? — le espetó.
La única respuesta de Yunho fue una
ligera elevación de sus labios que podría haber incluso pasado por una sonrisa…
tal vez.
Changmin miró hacia Yunho con una
pregunta obvia escrita en su rostro. Cuando Jae ya no estaba mirando, Yunho le
guiñó un ojo a Changmin, un reconocimiento silencioso a que él sabía que algo estaba
pasando, y él no estaba compartiendo.
Siwon
se acercó a Junho y respiró hondo. Él puso sus manos en las caderas
y miró al suelo durante un largo rato.
— ¿Estás seguro de que esto es todavía
lo que quieres intentar y hacer? — le preguntó a Junho.
— Ya no lo sé — admitió Junho — Hani está enojada conmigo, Junsu
probablemente me odia, y tu hijo podría simplemente matarme tan pronto como me
vea. Pero Siwon, él es mi hijo, es tan joven.
— Él es joven, y también lo es Yoochun, pero
eso no cambia el hecho de que son verdaderos compañeros. Sus marcas están en su
piel.
— ¿Qué? — Esta observación hizo que Junho girara
la cabeza de golpe.
— ¿No lo sabías? — le preguntó Siwon.
— No — dijo Junho, sacudiendo la cabeza con incredulidad.
— Si tratas de separarlos Yoochun
sólo ira detrás
de él, y él va a matar a todos los lobos que se interpongan en su
camino. Él puede ser joven, Junho, pero es más dominante que cualquier lobo que
conozca, yo incluido — admitió Siwon.
Junho apretó los dientes y se pasó la
mano por el cabello, se sentía como si hubiera envejecido veinte años durante
la noche. Todavía no le había dicho a su compañera en lo que estaba realmente.
Esa conversación iba a añadir otros veinte años a su acortamiento de vida. Respiró
profundo, lo dejó escapar, y luego
miró a Siwon.
— Déjame pensar en ello esta noche. Estoy
cansado, todo el mundo está cansado. Yoochun puede quedarse con él esta noche.
Tus lobos pueden protegerlo si eso es lo que quieres. Hablaré con todos ustedes
sobre esto en la mañana. — Junho se detuvo cuando estaba abriendo
la puerta para salir — Dale las buenas noches a Junsu por mí, tengo
la sensación de que no sería la mejor idea ir a verlo
ahora mismo.
— Teniendo en cuenta que es probable que esté
de labios bloqueados con Colmillo Blanco, entonces no, definitivamente no sería una buena idea ir a verlo. Oww, ¿qué demonios Jae? — Changmin frotó el brazo donde Jae lo había golpeado.
Mientras Junho se quedaba
muy quieto en la puerta abierta, Jae fulminó a Changmin con la mirada.
— ¿Tenías que señalarle que su hijo estaba
besuqueándose con un chico, solos, en una cama, solos? — murmuró.
— Jae — se quejó Yunho.
Jae continuó como si no lo hubiera oído.
— Quiero decir, caray, Changmin, ¿por qué no
sugieres que vaya a darles un condón sólo para, ya sabes, estar en el lado
seguro y mientras él está ahí podría tomar un plátano y demostrar cómo ponerlo,
y…
— ¡JAEJOONG! — gruñó
Yunho finalmente.
Changmin y Jae saltaron, se volvieron
hacia él y oyeron la puerta cerrarse con un chasquido metálico.
— ¿Qué? — gruñó Jae de vuelta.
— Creo que él sólo estaba
tratando de decir que todos entendemos el punto,
Jae — dijo Heechul suavemente.
— Oh — dijo Jae sorprendido — Bueno,
¿por qué no lo dijiste? No tienes que gruñirme — resopló.
— No te gruñí. — La voz de Yunho era baja y tensa.
— Sí. Lo. Hiciste — argumentó Jae.
—Estoy de acuerdo Yun, hubo definitivamente
un gruñido — dijo
Changmin, asintiendo.
— Está bien — dijo
Yunho calmadamente — Lamento haberte gruñido
— le dijo.
— Mi nombre.
Yunho ladeó la cabeza y lo miró con
curiosidad.
— ¿Qué?
— Mi nombre — le
dijo él — Si vas a pedirme disculpas,
tienes que decir mi nombre. — La mirada en el rostro de Jae era completamente malvada.
Yunho apretó la mandíbula. Sus ojos
estaban comenzando a brillar dorados, pero se las arregló para decir
educadamente:
— Lo siento, Jaejoong, por gruñirte.
Jae sonrió y levantó el teléfono que
había estado sosteniendo.
— Eso va a ser mi nuevo tono de llamada,
el gran lobo feroz disculpándose por meterse conmigo. — Él batió sus ojos inocentemente.
Changmin estaba tosiendo con una
carcajada, al mismo tiempo, deseando que Jae no sólo hubiera pinchado a un león
dormido.
Yunho no dijo nada mientras se
levantaba. Caminó hacia Jae quien tuvo el buen sentido
de no huir de un depredador, aunque
sus ojos se abrieron un poco
más. Él se detuvo a su lado y se inclinó hacia abajo para que su boca estuviera
al lado de la oreja.
— Un plátano, Jae, ¿en serio? — le susurró y luego se alejó.
La puerta estaba casi cerrada en el
momento en que su cerebro comenzó a
funcionar de nuevo.
— ¡Oh, vamos! ¡Era todo lo que tenía! — gritó él, sabiendo que su audición de lobo lo escucharía.
Heechul y Siwon se habían sentado en
silencio durante el intercambio.
— ¿Alguna vez te he dicho cuánto me alegro de
que no tenemos una hija o un docel? — le preguntó Siwon en voz baja.
Heechul le dio una palmada en la pierna.
— Calla, ¿acabas de ver lo que yo vi?
— Sí — respondió Siwon sonando muy cansado — Lo
vi. Aún no he decidido qué hacer al respecto.
Heechul lo miró con recelo.
— ¿Hacer al respecto? Alfa, vas a dejarlo ser
y dejar que el destino siga su curso.
— Naui — comenzó a discutir Siwon, pero Heechul
ya estaba volviendo su atención a Jae y Changmin.
«Hombre
obstinado» pensó Siwon.
>>>♥<<<
—Voy a estar en casa en pocos días, Dahae — le estaba diciendo Junho a su compañera a través del teléfono. Ella había llamado
a su teléfono celular varias veces y le envió mensajes de texto
también, los cuales no había respondido.
Por decir lo menos, estaba enojada.
— ¿Por qué no me dices lo que estás haciendo?
Y no me digas que una mierda de la manada, siempre me dices lo que está pasando
entre la manada. — Casi podía verla gruñendo hacia él
mientras hablaba.
—No es algo para hablar por teléfono, sólo
vas a tener que confiar en mí. — Junho estaba perdiendo la paciencia.
— Junho, sólo dímelo.
— ¡Basta! — gruñó Junho.
El silencio llegó a través del teléfono,
todo lo que podía oír era su respiración.
— Dahae, lo siento
amor, no quise gritarte. Estoy
un poco estresado en este momento,
¿podrías por favor confiar en mí? No fue correcto irme sin hablar contigo
primero, pero lo hecho, hecho está.
Ella no respondió de inmediato y Junho
estaba empezando a pensar que podría haberle colgado.
— Confío en ti, pero no hagas esto otra vez,
compañero. Yo soy tu Luna y merezco más que esto. — Su voz era tranquila y firme, una vez más demostró por qué era su hembra Alfa. Ella era
engañosamente pequeña y tranquila, pero cuando Dahae tenía que ser Alfa no
tenía ningún problema cumpliéndolo.
—Tienes razón, Luna. No voy a dejar que
suceda de nuevo. Te amo — le dijo Junho justo antes de colgar.
Se puso de pie en su habitación de
hotel, velando el whisky que se había servido. Había llamado a Jiho y le dijo
que retirara a los lobos por ahora, que iban a reagruparse en la mañana. Jiho
insistió en quedarse en el hospital sólo para mantener un ojo en la manada Coreana.
Junho le dijo que se asegurara de quedarse fuera de vista y no causara ningún
problema. Junho había subestimado
la reacción de Yoochun a su anuncio de llevarse a Junsu a casa con él. No tenía
la menor duda de que lo que dijo Siwon era cierto, Yoochun
mataría a cualquiera o cualquier cosa que lo alejara de su compañero. Que es la
manera en que debería ser, ¿verdad? Él movería cielo y tierra por Dahae, la
única razón por la que no le había hablado de Junsu era porque sabía
que iba a ser un recordatorio más de que ella no era capaz de concebir. No
quería hacerle daño a su compañera, que se sienta inadecuada por no haber sido
capaz de criar sus cachorros. A Junho no le importaba, era muy feliz con su vida, o lo era, hasta que se enteró
de Junsu.
La verdad es que estaba siendo un cobarde de nuevo, igual que cuando dejó
a Hani sin decir una palabra.
Y ahora había dejado a su compañera sin
decirle una palabra acerca de un
niño que no sabía que había tenido porque tenía miedo de que ella no quisiera
que él tuviera una relación con Junsu. Tendría que arrastrarse servilmente
mucho cuando regresara. Primero tenía que arreglar
las cosas con Junsu y Yoochun.
No quería perderlo, pero obligarlo a ir con él no iba a hacerlo quedarse, se
dio cuenta ahora, sólo lo alejaría aún más. Él le diría mañana que se había
equivocado, y no eran esas las palabras más duras para cualquier Alfa decir.
Parecía que esas eran las únicas palabras
que Junho necesitaba decir a las dos
personas que le importaban.
>>>♥<<<
Jiho estaba en el estacionamiento del hospital. Había estado observando y escuchando cualquier información que pudiera obtener
de lo que Siwon o Yoochun
planeaban sobre Junsu. No sospechaban nada de Junho o la manada, incluso
después de que Leeteuk, el aparente guardaespaldas en la infancia de Yoochun,
había encontrado el mecanismo
que había colocado
en el vehículo de Hani. Siwon había decidido que debía haber sido la manada de Coldspring contraatacando, y envió a dos de sus otros lobos para reunirse
con su nuevo Alfa. Por supuesto, el nuevo Alfa no tenía idea del motín que
tiene lugar en su propia manada, por lo que Jiho estaba seguro por ese lado. Su
siguiente paso iba a ser llamar al doctor Jeong ya que el plan B iba a tener
que ser ejecutado.
Yoochun
no dejaría a Junsu esta noche, por lo que sólo tendrían
que conseguir alejar a Junsu
de Yoochun. Sacó su teléfono y marcó el número dos, donde había puesto al
doctor en marcación rápida.
— Doctor Jeong — contestó él.
— Vas a tener que conseguir a Junsu hablándole
sobre la sangre de su amigo. Yoochun se está quedando esta noche — le dijo Jiho.
— Bien — hizo una pausa — Son
las 5:30p.m. ahora, así que, dame un par de
horas. Voy a tener que esperar hasta que uno de los laboratorios esté despejado.
Una vez que lo tenga en el laboratorio y bajo un sedante puedes
venir a ayudarme a ponerlo en la camilla para sacarlo. Tendré que
conseguirte algunas ropas de hospital para que no te veas sospechoso empujando
lo que parece ser un cadáver a través del hospital.
—Estaré esperando tu llamada. —Jiho no esperó su respuesta, simplemente colgó.
Respirando hondo, volvió el rostro hacia la puesta
de sol, sintiendo el calor incluso tan tarde en el día. Odiaba el calor, lo deprimía, incluso
a su lobo. Estaría
encantado de volver a sus montañas en Denver. Una sonrisa perversa
se extendió por su cara, sus
ojos de lobo brillando. Él no iba a volver a sus montañas solo. Ese pensamiento
lo animó a él y a su lobo enseguida.
>>>♥<<<
Después
de que Yunho había salido
de la sala de espera,
Jae y Changmin habían decidido encontrar
un juego de cartas y amansarse, como a
Jae le gustaba decir.
—Así que, ¿crees que Yoochun y Junsu han…? — Changmin dejó flotando la palabra como una pregunta.
— ¿Han qué? — Preguntó
Jae mientras miraba sus cartas — ¿Tienes un
dos de corazones?
— Péscalo — dijo
Changmin con aire ausente — Lo han, ya sabes, hecho eso — susurró Changmin, inclinándose sobre la mesa.
Jae estaba mirando sus cartas con tal
concentración que era casi como si estuviera deseando que apareciera en sus
manos la que necesitaba.
— ¿Hecho eso? ¿Qué,
te refieres a si él lo ha mordido? ¿Tres de espadas? — añadió él.
— Péscalo. No, Jae, ese no es el “eso” al que la gente se refiere cuando
hablan de “eso”. — Changmin estaba haciendo señales de acotación con sus dedos mientras
hablaba, lo que le dio a Jae efectivamente un vistazo de sus cartas.
— Seis de picas, excelente. Entrégalo, lo vi — le dijo Jae, extendiendo su mano, haciendo un gesto de “dame”.
— Ni siquiera es tu turno, tramposo. Ahora escúchame — intentó Changmin de nuevo.
— Changmin, santo cielo. Cómo Junsu y tú han
permanecido tan puros conmigo como su mejor amigo, nunca lo voy a saber. Sexo,
dilo conmigo: S-e-x-o — dijo Jae, deletreando letra por letra.
— ¡Shhh! No lo digas tan fuerte. — Changmin miró a su alrededor para ver si alguien había oído.
— ¿Por qué? No es que la gente no sabe lo que
es, o no saben que todo el mundo lo está haciendo. Ahora dame tu seis de picas,
mujerzuela.
— Bien, ten — gruñó
Changmin, golpeando la carta sobre la mesa.
— Qué delicado — murmuró Jae mientras él colocaba su propio seis de picas encima de la
que Changmin había colocado.
— La respuesta es no — dijo Jae con aire ausente.
— ¿No, qué? — Preguntó
Changmin y luego añadió —: Rey de diamantes.
— Maldita sea — murmuró Jae y le entregó a Changmin la carta que había solicitado.
— No, no creo que hayan cerrado el trato.
— ¿Por qué no? — preguntó Changmin sorprendido.
— Uno — dijo Jae, reclinándose en su silla,
inclinando la cabeza hacia un lado mientras miraba a Changmin — Junsu
no lo hará hasta que se case.
—Sí, pero es Yoochun. Me refiero, a míralo.
¿Me estás diciendo que si tienes eso para ti solo no lanzarías esas ideas por
la ventana? — interrumpió Changmin.
— ¿De verdad quieres hablar de lo que yo haría
si tuviera eso — Jae
asintió en dirección a la habitación del hospital donde sabían que Yoochun
y Junsu estaban — a solas?
Changmin negó con la cabeza y lo
descartó con las manos.
— Buen punto. Está bien, sigamos, ¿cuál era el
número dos?
— Dos, Yoochun es demasiado caballeroso con toda esa mierda de: “Yo respeto tu elección de esperar”.
Podría seducirlo si quisiera. Junsu caería como una mala mano de Texas Hold ‘em. Y tres,
sabríamos si ellos lo hicieron. — Jae comenzó a mirar sus cartas de
nuevo, como si acabara de aclarar los misterios del mundo.
— ¿Qué quieres decir con que sabríamos? — le preguntó Changmin, poniendo sus cartas
sobre la mesa. Jae levantó los ojos hacia Changmin y lentamente llegó a través de
la mesa y recogió sus cartas. Eligió las que hacían juego con las suyas y luego
las puso de vuelta
— No tengo nada de lo que necesitas, así que
ve a pescar.
—Jae, lo digo en serio.
¿Cómo podríamos saberlo?
No creo que Junsu nos lo diría, se avergüenza demasiado por
ese tipo de cosas. Él nunca nos habló de lo que él y Trent hicieron.
—Trent no era Yoochun — comenzó Jae — Lo sabríamos porque estaría escrito sobre
todo él. Estaría resplandeciente a la mañana siguiente, la pequeña sonrisa en su cara de saber que su
inocencia se ha ido y que él la perdió con un enloquecedor dios griego.
— Ja — dijo Changmin, pensativo — Nunca
he visto esa mirada en ti antes. — Él miró a Jae dudoso.
—Por supuesto que no lo has hecho, yo soy
virgen. Eso y que ningún dios griego se me ha ofrecido últimamente, pero no he
perdido la fe. — Jae arrojó eso por ahí como si no fuera
una gran sorpresa.
La mandíbula de Changmin cayó abierta.
— ¿Tú eres QUÉ? — Las palabras de Changmin salieron justo
cuando Yunho entraba.
—Sí, Jae, ¿eres qué, exactamente? — le preguntó, su voz tan seria como siempre, su ceja levantada.
Jae fulminó a Changmin con la mirada.
— Una palabra, Changmin…
Changmin levantó las manos en señal de
rendición.
— Oh, créeme, no he olvidado lo que vas a
hacer si yo digo una palabra cuando no debo. Sabía que debería haber conseguido
deshacerme de esos malditos muñecos — se quejó él.
— Hola Yunho — dijo
Jae, sonriendo inocentemente y actuando como si hubiera acabado de notar su
aparición.
Yunho entrecerró los ojos hacia él,
luego su cara se limpió de toda expresión como un paño pasando a través de una
pizarra de borrado en seco.
—Siwon y Heechul querían que yo los invitara
a venir a comer con todos en la cafetería del hospital.
Jae arrojó sus cartas.
— Yo podría comer. ¿Y tú, Changmin?
Changmin seguía mirando a Jae con los
ojos llenos de conmoción.
— Tú, tú, túuuuuuu — siguió diciéndole Changmin a Jae, con diferentes inflexiones en su voz.
— Changmin vamos a pasar de esto y seguir con
cosas más importantes, ¿de acuerdo? — Jae tomó su vía intravenosa con una
mano y a Changmin con la otra y empezó a jalar a un reacio Changmin con Yunho
siguiéndolos.
— ¿Qué podría ser más importante que el hecho
de que eres un mmrrm? — Jae había puesto su mano en la boca de Changmin.
Estaba tratando de evitar perder el equilibrio y golpear su vía y mirar
atrás a Yunho, quien estaba observando todo con curiosidad.
— Vas a tener que disculparnos un segundo, Yunnie,
él se tragó su lengua. Sólo voy a ayudarlo a expulsarla. Podemos
encontrarte allí — dijo
Jae dulcemente mientras seguía
manteniendo la boca de Changmin cubierta.
—Está bien, entonces. — Yunho
sonaba inseguro mientras
pasaba junto a los dos chicos. Los miró de nuevo una
vez más antes de girar y alejarse mascullando en coreano.
— ¿Qué te pasa? — farfulló Changmin cuando Jae finalmente descubrió su boca.
—Tengo una reputación que mantener. No puedes sólo ir soltando
por ahí que soy tan puro como
tú y Junsu — dijo Jae, con las manos en las caderas,
los labios colocados en una línea apretada.
— Oh, créeme, Jae, nadie te confundiría con un
ser puro, la virginidad estaría maldita — lanzó Changmin hacia él con sarcasmo — Por
curiosidad, ¿Junsu lo sabe?
— No y no necesita saberlo.
¿Cuál es el gran y asombroso problema, Changmin? No soy tan experimentado como lo demuestro. ¿Qué
importa siquiera? — Jae se estaba tornando irritado por la curiosidad de su amigo
en su vida sexual, o la falta de la misma.
— No es que en realidad sea un gran problema
tanto como que es sólo, un poco decepcionante — dijo Changmin, sonando desinflado.
Jae lo miró con los ojos medio entornados.
— Está bien, así que lo que estoy escuchando
que dices — comenzó Jae
luego se detuvo, sacudiendo la cabeza con incredulidad — ¿Es
que estás decepcionado de que sea virgen? ¿Te he entendido mal? ¿Mi audición
está mal o simplemente eres un idiota?
—Bueno, déjame explicarte esto, Lucy.
—Por todos los medios, Ricky, explícalo —respondió Jae secamente.
—Así que, ¿sabes
cuándo eres un niño y ves Disney
World en la televisión?
— Jae asintió con comprensión mientras Changmin
continuaba — Es tan increíble y más grande
que la vida, te muestran
los fuegos artificiales sobre el gran y hermoso castillo en el que toda niña
sueña con vivir, y tú piensas: “vaya,
quiero ir allí.”
— ¿Estás comparándome en serio con un parque
de diversiones? — Changmin
lo hizo callar.
—Espera.
Jae le indicó a Changmin que siguiera
adelante con eso.
—Por fin tu día llega y tus padres te llevan
a Disney World. Vas a ver el hermoso castillo que has visto tantas veces
en la televisión. Sólo que cuando llegas allí y caminas hacia el gran castillo,
te das cuenta de que es sólo un gran edificio con forma de castillo, con un
agujero atravesando el centro, por donde las personas están entrando y saliendo. — Dejó
escapar un suspiro
desinflando — A pesar de que todavía era un lugar bastante
impresionante, fue un poco decepcionante que el castillo terminara siendo una
farsa.
Jae se quedó allí parado
mirando a Changmin.
Él no sabía en verdad qué decir, estaba realmente desconcertado por el hecho de que la noticia
estaba teniendo un efecto perjudicial en su mejor amigo.
—Changmin, ¿te das cuenta de que acabas de
comparar la noticia de mi virginidad con el castillo de un parque de
atracciones, verdad? Sólo quiero ser claro en eso.
Changmin asintió, mordiéndose el labio
inferior.
—Sí, ahora que lo pones así es realmente algo
preocupante — dijo él, cerrando los ojos y negando con la cabeza —
Supongo que sólo estaba esperando que fueras el que me dijera como
era eso, ¿sabes? Algo así como que fuiste el primero de nosotros en afeitarte
las piernas y encerarte la línea del bikini —dijo
Changmin con nostalgia.
—Bueno, la noche aún es joven mi dulce e
inocente flor. ¿Quién sabe lo que podría suceder
entre hoy y mañana por la mañana?
— Jae se rió de la dudosa mirada de Changmin.
— Vamos, Virginia, vamos a buscar algo de
comer. — Changmin se lanzó fuera del alcance
de Jae, sabiendo que iba a tratar
de pegarle ante el sonido
de su nuevo apodo.
—Changmin — gruñó
Jae en advertencia, incapaz de moverse rápidamente debido a la molesta vía
intravenosa.
— ¿Dijiste algo, Virginia? — Changmin continuó burlándose. Lanzándose de aquí para allá para
mantenerse al margen de las palmadas de Jae.
>>>♥<<<
Yoochun
y Junsu levantaron la mirada de la mesa cuando ellos escucharon el canto de Changmin por toda la cafetería.
Él estaba cantando a todo pulmón la
canción de Train “Meet Virginia”. Un Jae viéndose muy enojado estaba
arrastrando el paral de su vía intravenosa lo más rápidamente que podía sin
caer, tratando de alcanzar a su presa. Cuando Changmin hubo llegado a la mesa, había lágrimas
corriendo por su cara de tanto reírse. Se inclinó sobre la mesa,
jadeando, terminando su serenata.
— ¡Su confianza es trágica, pero su mágica
intuición y la forma de su cuerpo, inusual, conoce a Virginia! — terminó Changmin dramáticamente, los
brazos en el aire como Vanna White indicando donde estaba parado Jae ahora.
Para gran disgusto de Jae, toda la cafetería rompió en aplausos.
Jae mostró su más deslumbrante sonrisa y
saludó a todos con adoración, pero a Changmin, le murmuró en voz baja:
—Esto es la guerra.
Changmin se inclinó ante su público, y
luego hacia la mesa donde todos los amigos sentados aplaudían
también. Yunho se puso de pie y se acercó a Jae. Era
obvio que él estaba tratando de no reírse, y Jae estaba decepcionado porque él
realmente quería saber
cómo se veía cuando estaba
abriéndose, pero era a su costa
así que podía soportar la decepción.
— ¿Por qué no te ayudo a llegar a tu asiento?
Jae tomó la mano de Changmin.
—Eso estaría bien, gracias, Yunho. —Arrastró a Changmin tras él mientras
lo seguía a los asientos que le indicaba. Cuando él estaba empujando la silla
de Jae detrás de él mientras se sentaba, Yunho se inclinó hacia delante y le susurró al oído. El cuerpo de Jae se puso
rígido. Changmin los miró con curiosidad, luego miró a Junsu
para ver si él estaba
viendo esto. Él se encogió
de hombros en una forma de: “no tengo idea de lo que pasa”. Changmin vio como Jae inclinó la
cabeza para mirar a Yunho. Él batió sus pestañas dulcemente y sonrió de una
forma muy sensual. Changmin notó que los ojos de Yunho comenzaron a brillar.
—Oye, Yoochun —Jae alzó la voz por encima del ruido en la habitación.
— ¿Sí, Jae?
— ¿No dijiste algo acerca de que tu clase se cura rápido? — le preguntó,
sin apartar los ojos de Yunho. Fue entonces que Changmin notó que Jae había
colocado su mano alrededor de la muñeca de Yunho con la que él estaba
apoyándose en la mesa. Parecía un gesto coqueto a menos que estuvieras viendo
desde el punto de vista de Changmin y pudieras ver que la otra mano de Jae
estaba envuelta alrededor del cuchillo de mantequilla al lado de su plato.
Yoochun se aclaró la voz, sin saber a
dónde iba Jae con esto.
—Sí, eso es correcto, nosotros nos curamos
mucho más rápido que… — Antes de que Yoochun pudiera terminar lo
que estaba diciendo, Jae lo interrumpió:
—Está bien, gracias, eso es todo lo que
necesitaba.
Jae se movió más rápido de lo que Changmin
lo había visto moverse, pero era como si todo estuviera pasando
en cámara lenta. Jae levantó
el cuchillo mientras su agarre en la mano de Yunho se
apretaba. Al mismo tiempo, Changmin y Junsu gritaron:
— ¡Yunho, corre! — Él se dio cuenta de lo que estaba
sucediendo y se movió más rápido de lo que el ojo podía ver agarrando la muñeca de Jae antes de
que el cuchillo pudiese ponerse en contacto con su carne.
A favor de Yunho, él no dio ninguna
indicación de que un cuchillo casi había sido clavado en su mano. Sus ojos
dorados estaban brillando y Changmin pensó
que podía ver llamas en ellos.
— Jae, puede que desees, um, ir a sentarte
donde Junsu o ir-ir-irte. Sólo digo — tartamudeó Changmin.
La mirada de Jae nunca se apartó de la
de Yunho. Toda la mesa se sentó congelada, esperando su reacción.
Yunho
sacó lentamente el cuchillo de la mano de él, sonrió lentamente, mostrándole a Jae que sus
colmillos se habían alargado.
— Te estás quedando sin cheques, Jaejoong.
— Depende de que chequera estés viendo,
¿cierto, Yunho? — Jae igualó su frío sarcasmo.
Antes de que pudieran continuar con su
enfrentamiento, el doctor Jeong se acercó a Siwon y pidió hablar
con él en privado, por lo que, naturalmente, toda la mesa se levantó y los siguió.
Terminaron de regreso una vez más en la
sala de espera familiar. Junsu estaba empezando a pensar que otras familias no
llegaban a este piso porque siempre eran los únicos en usar esta habitación.
—Siwon, cuando dije en privado, quise decir
solamente tú — le dijo el doctor Jeong.
—Lo entiendo, doctor Jeong, pero todo el
mundo en esta sala sabrá lo que me ha dicho en cuestión de horas.
—Más bien en minutos — añadió Changmin.
—Buena respuesta — dijo Jae, yendo a chocar puños con Changmin. Pero se detuvo justo
antes, recordando que se suponía que debía estar enojado con él. Changmin sólo
puso sus ojos en blanco.
— Bien — dijo el doctor Jeong, renunciando a
tratar de persuadirlo de lo contrario — Tengo los resultados de la sangre de Jaejoong.
Toda la habitación pareció contener la
respiración. Jae se acercó lentamente, olvidándose de la vía intravenosa
conectada a él, y si Changmin no lo hubiera atrapado, habría caído sobre la
cabeza de Jae. Jae ni siquiera se dio cuenta.
— ¿Cuáles fueron mis resultados? — preguntó Jae con aprensión.
Changmin y Junsu se pararon a cada lado
de Jae en una muestra de apoyo silencioso.
— Jaejoong, ¿sabes algo acerca de tu
genealogía? — le preguntó el doctor Jeong.
Jae sólo lo miró fijamente. Changmin lo
empujó.
— Jae, ¿él quiere
saber si conoces
algo acerca de tus antepasados? —Aún no hubo respuesta.
Esta vez Junsu lo intentó.
— ¿Jae? ¿Tu linaje, ascendencia, antepasados,
árbol genealógico…?
— Lo entiendo, Junsu — lo cortó Jae— Si usted quiere decir,
si sé que hay algún tipo
de sangre no humana en mi familia, entonces la respuesta es no —le dijo él a el doctor Jeong.
—No estoy seguro de si es un gen lobo o
no. Ya que Junsu no es sangre pura necesito más de su sangre para compararla
con la de Jaejoong. Vendré a su habitación más tarde esta noche para llevarlo
después de que los técnicos de laboratorio se hayan ido a casa. No quiero a
nadie haciendo preguntas.
Continuara \\(^_^)//...
Niñ@s un comentario no les cuesta nada….
Gracias…
Ojala que se den cuenta lo que el Beta de Junho y ese doctor quieren hacerle a Junsu gracias Poleth por el capitulo
ResponderEliminaroooooooo miiiiiii diossssss que podrá ser lo que le pase a Jae el también sera un lobo como lo es Junsu y por eso su cura tan rápida y por eso Yunho se siente atraído por Jae espero que si y ojala que Jiho no logre sus planes de raptar a Junsu pues el padre de Junsu ya no esta seguro de quitarse lo a Yoochun pero Jiho si y eso es en ir en contra de su alfa y pues nomas lo intente Yoochun lo desgarrara y es lo mínimo que se merece por quererse quedar con una pareja que no es la suya
ResponderEliminarGracias
Ohh Dios muero x saber q pasará...Aunque me intriga mucho lo de Jae...Habrá alguna secuela sobre su historia? Xq me encanta el yunjae
ResponderEliminarMira nada mas...Pequeño primer detalle Junho... Tu Beta te ocultó que las marcas de pertenencia y nisiquiera ha habido un regaño???. Amo a esos tres porque son más que hermanos, ChangMin con su rollo bonito le dice a Jae que es un prqueño y coqueto fraude y este nomas se medio intenta enojar aaauuu cositoooos 😊😊. Bravo por Hanni gracias a ella Junho se retracto de su orden de custodiar a Junsu😉. Dios bendiiiiitooo Que habra sido lo que Yunho dijo a Jae que casí se queda manco😱. El Sichul sabe y no nos quieren decir😢😢😢😢 sera que es el compañero de Yunho pero comó es un 1/4 de canis aun no salen las marcas???
ResponderEliminarYunho por poquito y Jae tendría una parte de ti de recuerdo, jajaja..., que le habrás dicho?.
ResponderEliminarEl plan de Jiho parece va bien, ojala logren frustrarlo.
Gracias!!!