Una semana transcurrió luego de que Yunho llorara desconsoladamente en los brazos de Yoochun, este no fue capaz de saber que era lo que atormentaba tanto a su novio, preocupado hablo con Jae pero ambos no supieron encontrar la respuesta.
-Yunho me preocupas… ¿Qué es lo que me escondes?
Decía Yoochun mientras arreglaba unas cosas en el departamento. Después de aquello notaba que Yunho se había vuelto más amable que antes, le preparaba todos sus antojos, se entregaban una y otra vez sin descanso, lo abrazaba todas las noches como si temiera que se escapara de sus brazos, definitivamente algo no andaba bien en el comportamiento de Yunho. Debía averiguarlo cueste lo que cueste.
……………….
Yunho luego de meditar durante toda esa semana que hacer con respecto a la amenaza de Taeyeon, decidió contarle todo a cierta persona que sabía lo ayudaría a encontrar una solución.
Se encontraba en una cafetería de la ciudad, sentado en una mesa alejada esperando a la aparición de esa persona.
-¿Para que me querías con tanta urgencia?... Hyung
-Changmin… amigo…
Yunho se levanto de su asiento y abrazo a Changmin, sabia que con la inteligencia de este chico no tendría que separarse de Yoochun ni de su hijo.
-Hyung… ¿Qué pasa ahora?
Ambos jóvenes tomaron asiento, Min pidió un café y se pusieron a conversar.
-Veras… hace una semana recibí una llamada de Taeyeon
-Eh?... ¿Qué quiere contigo esa bruja?
-… me pidió… más bien me exigió que me casara con ella… y si no lo hacía le haría daño a Yoochun y a nuestro bebé- Yunho frunció el seño al decir esas palabras
Changmin miro a Yunho… ¿Había escuchado bien?... ¿hijo?... ¿Cómo es que Tae lo sabía?
-Espera… ¿Ella sabe que Yoochun está embarazado?
-Sí, no sé cómo se entero pero lo sabe… Changmin no se qué hacer…
Yunho miraba preocupado a Changmin necesitaba encontrar una forma de acabar con Taeyeon pronto. Changmin sabía lo mucho que su Hyung amaba a su pequeña familia, necesitaba pensar una forma de ayudarlo.
-Hyung… debemos encontrarle un punto débil, algo que nadie quiera que se sepa, es de la única manera de conseguir que te deje de molestar
-Lo sé Min… pero no se me ocurre nada, no sé dónde buscar te recuerdo que desde hace años que no sabía nada de ella, no sé que ha hecho con su vida este último tiempo
-Tienes razón… ah- Min se rasco la cabeza algo frustrado, tendría que pedirle ayuda a esa persona - tendré que pedirle ayuda a esa persona…
-¿A quién?- Yunho miro intrigado la actitud de Changmin
-… A… Junsu
Aquel nombre lo dijo en un susurro que Yunho fue capaz de escuchar. Desde hace una semana, desde aquella noche en la que le pidió que se fuera de su casa que Changmin no había visto a Junsu, ni siquiera lo ha ido a buscar aun no es capaz de asimilar el hecho de ser padre.
-Pero si ustedes se estaban llevando tan bien
-Lo se Hyung… pero…
-Pero…
-No sé si deba contarte- Min miro con un dejo de tristeza a su Hyung
-Changmin sabes que puedes confiar en mí, soy tu Hyung y escuchare todos tus problemas
-Hyung entonces, puedo hacerte una pregunta
-Las que tú quieras
-¿Qué sentiste cuando te enteraste que vas a ser padre?
Min miro a los ojos a Yunho expectante ante su respuesta, era la única persona que podía entender la situación por la que estaba pasando ahora.
-Sentí… demasiadas cosas, al comienzo sentí demasiado miedo de enterarme de que todo pudiera ser una mentira, pero cuando mire a los ojos a Yoochun pude saber que era verdad… una felicidad indescriptible recorrió mi cuerpo en especial mi corazón, la felicidad del saber que seré padre, de tener un hijo con la persona que más he amado en mi vida, un fruto del amor que ambos nos sentimos… es algo único e irrepetible…
Los ojos de Yunho brillaban cuando dijo aquellas palabras. Min se sintió un completo idiota por haberle dicho todas esas cosas a Junsu, no haberlo apoyado sabía que su prometido tuvo que haber sentido miedo en ese momento, pero no lo supo ver, la rabia que sintió en aquel momento lo cegó, la rabia de no haber sido capaz de cuidarse un poco más, la rabia de ser tan inmaduro para algo tan importante como lo era tener un hijo… pero las palabras de su Hyung abrieron sus ojos, Yunho tenía razón un hijo es el fruto del amor de dos personas, y de eso si estaba seguro del amor que sentía por Kim Junsu…
Yunho se preocupo al ver el semblante preocupado en su amigo.
-Min… ¿Qué pasa?
-Veras hyung… voy… a ser padre
-Eh?!!!... – Yunho casi se cae de su asiento con esa noticia… Min ¿padre?
-Junsu hace una semana vino a mí para contármelo… pero yo… lo eché de mi casa
-¿Qué hiciste qué?
-Lo eché de mi casa porque no fui capaz de creer en sus palabras, mi inmadurez y rabia me segaron y ahora… me siento tan arrepentido- una lagrima solitaria bajo por su afligido rostro al no saber qué hacer
-Dile lo mismo que me acabas de decir ahora, cuéntale tus miedo y lo arrepentido que estas ahora y por sobre todo… no dejes de decirle cuanto lo amas… Min aprovecha esta oportunidad en tus ojos puedo ver que amas sinceramente a Junsu, pero que tus miedos te cegaron… se que juntos serán felices por eso no demores más y ve a pedirle perdón, no sólo a él sino que a tu hijo también…
Min miraba asombrado las palabras de su Hyung, tenia razón ya no había tiempo que esperar debía pedirle perdón a su querido delfín.
-Gracias Hyung… me tengo que ir… ah y no te preocupes te ayudare a encontrar una solución, de eso no lo dudes
Se levanto de su asiento y salio corriendo de la cafetería rumbo a la casa de los Kim, en busca del amor de su vida esta vez hablaría con su corazón. Yunho lo observaba alejarse con una sonrisa en su rostro, Changmin había madurado.
-Espera por mi Kim Junsu… no te dejare ir ni a ti… ni a mi hijo…
………………
Yoochun estaba leyendo tranquilamente un libro sobre cuidados de bebé recostado en el sillón de la casa. Cuando sintió como tocaron la puerta dos veces. Se levanto de su lugar para ver de quien se trataba.
-Si… ¿diga?
Al abrir la puerta no encontró a nadie, miro para todos lados pero nada, sin embargo se percato de un sobre blanco a sus pies. Lo levanto y entro a la casa.
-¿Qué será esto?
Abrió el extraño sobre sin remitente, desdoblo la nota que el contenía, al leerlo sus ojos se abrieron a más no poder dejando caer ambos papeles al suelo.
-¿Qué… que está pasando?
Abrazo sus pequeña barriga y se fue a sentar al sillón con un semblante preocupado al no saber qué estaba pasando, y el por qué de esa nota anónima.
La nota decía; “Disfruta tus últimos momento de felicidad, mi querido Chunnie”. Lagrimas descendieron por su rostro al recordar aquella cruel frase, un miedo recorrió todo su cuerpo como si se avecinara algo terrible.
-¿Cuándo podremos ser por fin felices… Yunho?
Se abrazo a su cuerpo acariciando tiernamente su barriga… no dejaría que nada malo le pasara a su hijo, era una bendición que no quería perder, menos ahora que su relación con Yunho iba tan bien…
………………….
Las nubes comenzaron a cubrir el cielo de la ciudad de Seúl al parecer la lluvia se avecinaba, mientras poco a poco las temperaturas comenzaron a descender.
Changmin llegó a la casa de Junsu lo más rápido que pudo, estaba seguro que su prometido se encontraba en la casa de sus padres. Tocó el timbre siendo atendido por el mayordomo de la casa a los minutos después.
-¿Diga?
-Necesito hablar con Kim Junsu por favor
-El joven Junsu…
-¿Quién es?
La señora Kim venia bajando las escaleras tranquilamente, pero al ver de quien se trataba su semblante se endureció.
-Señora necesito…
-Vete de mi casa
-eh?... – Min se percato del enojo en la mirada de la señora Kim, supuso inmediatamente de por qué actuaba así
-Como lo escuchaste, no te quiero en mi casa ni cerca de mi hijo
-Señora por favor necesito hablar con Junsu, se lo suplico
La severidad en la mirada de la señora Kim no disminuyo, no dejaría que su hijo volviera a sufrir por la inmadurez de su prometido.
-¡Vete de mi casa!
-¡Señora por favor!- Min estaba afligido necesitaba hablar con Junsu
-Mamá ¿Qué pa… sa?
Junsu se asomo desde las escaleras para saber por qué su madre estaba gritando, al ver a su prometido ahí abajo su cara volvió a reflejar la tristeza de días atrás.
-Hijo vete a tu cuarto, el joven Changmin ya se iba
-No señora – Min miro a Junsu- necesito hablar contigo Junsu
-No tenemos nada de qué hablar- Junsu intento irse hacia su cuarto ver a Changmin ahí en su casa lo estaba afectando
-¡Junsu! ¡Por favor!
-¡Vete de mi casa! ¡Sáquenlo de aquí!
-¡No me iré sin antes hablar contigo! ¡Por favor Junsu escúchame!
Los sirvientes de la casa comenzaron a sacar por la fuerza a Changmin debido a la resistencia de este al no querer salir.
-¡Suéltenme! ¡Junsu!
Junsu se fue hacia su cuarto tapándose sus oídos para no escuchar los gritos de Changmin, las lagrimas nuevamente bajaron por su rostro mientras se recostaba en su cama, al verlo en su casa se dio cuenta que no ha podido olvidarlo, el amor que sentía por su prometido era mucha más fuerte que antes.
Se encogió recostado en su cama mientras las lagrimas no dejaban de caer por su rostro al recordar aquel fatídico día en el que Changmin lo hecho de su casa, aún no podía superar el dolor que le causaron aquellas palabras.
-Eres un tonto… te odio… pero… aún te amo…
Changmin estaba afuera de la casa de Junsu, no pensaba irse de ahí hasta que no fuera capaz de hablar con Junsu y corregir sus errores, lo amaba y no lo dejaría ir.
El cielo se oscurecía cada vez más, las gotas de lluvia poco a poco comenzaron a caer en la ciudad, Changmin estaba sentado afuera de la casa de los Kim no le importaba quedar completamente empapado, su prioridad era hablar con Junsu.
Junsu después de tanto llorar se quedo completamente dormido durante unas tres horas, con esto del embarazo le daba bastante sueño últimamente. Se levanto de la cama al ver lo tarde que ya era y la lluvia cayendo cada vez más fuerte.
Fue hacia la cocina de la casa en busca de algo de comida cuando escucho los murmullos de los trabajadores.
-Ese pobre chico pescara una pulmonía si sigue ahí sentado a plena lluvia
-Lo sé, pero la señora dijo que nadie podía acercarse a él que pronto se iría
-Pero de eso ya pasaron tres horas
Junsu abrió sus ojos, fue hacia corriendo el living y miro por unas de las ventanas, ahí frente a su casa estaba Changmin sentado en el frio suelo completamente empapado, cubrió su boca asombrado con la tenacidad de su prometido.
-Idiota…
-Idiota…
Susurro levemente, fue hacia la salida de su casa dispuesto a ir a buscar a ese idiota, pero una mano lo detuvo de toda acción.
-Hijo déjalo, se irá pronto
-Pero mamá es un idiota si sigue ahí pescara un resfriado
-No hijo, el no quiso escucharte cuando le contaste sobre tu estado, no tiene ningún derecho a venir ahora a pedir tu perdón
-Pero mamá
-Si sigues así me veré en la obligación de prohibirte la salida
Junsu miraba sorprendido ante la actitud de su madre, nunca antes la había visto tan enojada como ahora, pero aun así estaba preocupado por la salud de Changmin. Acepto la orden de su madre, sabía que ella sería capaz de encerrarlo en su cuarto con tal de que no se pudiera ver con Changmin.
-Está bien…
-Me alegro hijo… no te preocupes pronto se ira
Pero equivocada estaba dos horas después cuando la oscuridad de la noche cubrió por completo los cielos, y la lluvia inclemente no dejaba de caer sobre el cuerpo dolido y frio de Changmin.
-No me importa la lluvia ni el frio… necesito hablar contigo…
Los labios de Changmin tiritaban al igual que su cuerpo debido al frio, pero necio no quiso pararse de aquel lugar sin antes hablar con Junsu…
Junsu se encontraba caminando de un lado a otro en su habitación, una y otra vez miraba por la ventana la figura de Changmin, sabía que si no lo ayudaba pronto como medico que era podría contraer un grave resfriado… sabia que lo que iba hacer estaba mal, pero su amor por aquel tonto era más grande…
Salió de su habitación y bajo las escaleras silenciosamente para que su madre no lo descubriera, tomo un paraguas y salió de la casa.
-Junsu
La señora Kim se había percatado de la salida de su hijo, pero fue detenida por su marido.
-Déjalos ellos son lo suficientemente grandes como para arreglar sus propios problemas, lo único que debemos hacer nosotros es apoyarlos en sus decisiones querida
La señora Kim suspiro algo frustrada, pero su marido tenía razón no debía entrometerse más allá, si alejaba más a Junsu de Changmin sabía que le podía causar una gran tristeza a su hijo.
-Está bien
-Me alegro de que entiendas
Junsu corrió hacia la figura solitaria de Changmin con el paraguas abierto. Cuando estuvo frente a él puso la sombrilla sobre su cuerpo, este al no sentir la lluvia caer levanto su rostro tratando de enfocar y ver la figura frente a él.
-¿Eres tu… Junsu?
-¿Quién más va a ser… idiota?
-Junsu yo…
Changmin se levanto lentamente sus piernas se encontraban dormidas debido a todas las horas que paso sentado, su cuerpo temblaba debido al frio, pero se sentía feliz de tener al fin a Junsu frente a sus ojos… con una leve sonrisa en su rostro se acerco un poco a Junsu.
-Lo siento… sé que soy un idiota y que nunca he sabido valorarte como te lo mereces pero yo… cof cof
-Min será mejor que entres a mi casa para revisarte- toco la frente de Changmin sintiéndola arder- mira estas ardiendo en fiebre- decía preocupado
-No Junsu, déjame terminar por favor… yo de verdad que quiero tu perdón… Te amo con todo mi ser, al principio tuve miedo, el ser padre me tomo por sorpresa y no supe darme cuenta que tu también tenias miedo… - se acerco a Junsu posando sus frías manos en las cálidas mejillas de Junsu- por favor no me alejes de tu lado, Te amo y sé que juntos saldremos adelante y le daremos a nuestro hijo todo el amor que se merece…
Lagrimas bajaban por el rostro de ambos, lagrimas mezcladas con el miedo del saberse padres tan jóvenes, miedo de lo que pueda pasar en el futuro con una mezcla de felicidad al saberse completamente enamorados el uno del otro. Un beso tierno y lento fue dado bajo aquella lluvia inminente, un beso que poco a poco comenzó a sanar las pequeñas heridas.
-Tonto…- decía Junsu entre lágrimas
-Lo se
-Idiota
-También lo se
-Eres… eres… un…
-Te amo Junsu… y a ti también bebé- dijo mientras acariciaba el plano vientre de Junsu sintiendo una extraña felicidad, esa felicidad de la cual le hablo Yunho
-Y… nosotros a ti…. Aunque seas un idiota inconsciente
-Jajaja s… i
Changmin no pudo decir nada la alta fiebre y el frio le ganaron a su cuerpo cayendo inconsciente en los brazos de Junsu.
-¡Changmin! ¡hay, reacciona! ¡Por favor necesito ayuda!
Los sirvientes de la casa salieron en su ayuda llevándose al joven Shim inconsciente hacia la habitación de Junsu, este pidió todo lo necesario para tratar la alta fiebre de su prometido.
…………………
Yunho aquel día estuvo contactándose con todos los agentes de la policía que le pudieran entregar información sobre Taeyeon, información que le fuera útil para acabar con ella, hasta que uno de sus conocidos le envió a su computadora información sobre malversación de fondos y uniones ilegales que tuvo con el señor Jung, su padre.
Con una sonrisa en su rostro imprimió todo el material para analizarlo, este era su llave para salvarse del matrimonio con Taeyeon. En eso estaba cuando tocaron la puerta de su oficina.
-Yunho… te traje algo para comer…
-Yoochun te dije que no debías hacer ningún tipo de fuerza
-Esto no es nada para mi… lo tengo bajo control…
Yunho se levanto rápidamente de su escritorio para quitarle a su novio la bandeja de las manos, la coloco en la mesita de centro que tenia y se sentó en uno de los sillones.
-Veo que estás trabajando
-Si… ¿Por qué no comes conmigo?
-Pero ya comí
-Ven
Yunho hizo a Yoochun sentarse sobre su regazo, beso su pequeña pancita acariciándola un poco.
-¿Cómo está el bebé más hermoso?
-Bien
Yoochun reía ante la actitud de Yunho, definitivamente sería un buen padre eso no lo dudaba. Acaricio los cabellos de Yunho depositando un beso en su cabeza.
-Y eso…
-Fue un beso… pero si no quieres más
-No si quiero… muchos besos tuyos
Hacia un tierno puchero Yunho para llamar la atención de Yoochun, este tan sólo reía ante su actitud tan infantil. Le dio un beso en sus labios, lento y delicioso mientras en su cabeza recordaba las palabras de aquella extraña nota, pero ese día no le tomaría gran atención compartiría y atesoraría cada uno de sus momentos juntos a su novio, aunque eso implicara que en un futuro muy cercano la separación se hiciera más palpable.
-Yunho hazme tuyo ahora
-Eh?? Aquí…
-¿No quieres?
-¡No, claro que si quiero! sería capaz de hacerte el amor todos los días de mi vida… Te amo Chunnie
-Y yo a ti Yunnie
Aquella noche se entregaron completamente, sus almas se fundieron en un momento que sólo pertenecía a ellos, un momento en el cual se declararon una y otra vez el amor que clamaba en sus corazones, dejaron los miedos a un lado para entregarse en cuerpo y alma en aquella noche de lluvia temiendo el final de su relación, temiendo que todo terminara más pronto de lo pudieran imaginar.
La lluvia inclemente una vez más fue testigo de la entrega de cuatro almas, luchando incansablemente por ser felices una vez más, de poder estar al lado ahora y para siempre junto al amor de sus vidas…
Ya están juntos de nuevo, ahora solo falta se arregle lo de Yunho y que logre encontrar el modo de quitarla de encima.
ResponderEliminarGracias!!!
Que lindo¡¡¡ ChangMim no vive sin su delfín y Yunho sin mi ratón.... obvio quien no????
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