martes, 24 de enero de 2017

Blood Rites. Cap 14



Luhan se aferró a la manija en el techo de la avioneta que Jiho había conseguido una vez que habían llegado a Dallas. Él nunca había volado en una tan pequeña y ya había decidido, después de treinta minutos de traqueteo por todo el lugar, que nunca lo haría otra vez.

¿Cuánto tiempo dijiste que tardaría este vuelo? —le preguntó a Jiho.

Nos faltan alrededor de una hora y quince minutos.

Genial —murmuró él en voz baja.


No había sido tan difícil como había pensado conseguir meter a Junsu en el avión. Tuvo que darle otra dosis del sedante cuando Junsu había empezado a gemir de nuevo. Luhan tenía la esperanza de que una vez que llegaran a su cabaña podía permitir que el sedante desapareciera para que Junsu pudiera decirle lo que estaba sintiendo. No había forma de que él midiera el progreso de su enfermedad sin la contribución de Junsu.

>>>♥<<<

Jiho miró a el doctor Jeong y decidió que ya era hora de que él explicara exactamente qué era lo que necesitaba hacerse para arreglar a Junsu. No quería tener que esperar para vincularse con él, sabía que incluso ahora Yoochun estaría haciendo todo lo posible por localizarlo.

Dime otra vez lo que está mal con él —dijo Jiho, más una orden que una pregunta.

Luhan respiró hondo y soltó el aire lentamente, sabiendo que era inevitable que esta conversación tuviera lugar.

Recibió una transfusión de sangre humana. En pocas palabras, debido a que él es medio lobo esa parte de su sangre no la reconoce. Por lo tanto, está atacando a las células. Células que ya han comenzado a fluir a través de su corazón, su hígado, sus riñones, todos sus músculos. La sangre es el alimento del cuerpo, llevando nutrientes y oxígeno a los órganos. Su cuerpo está tratando de evitar que eso suceda porque piensa que la sangre que él recibió es un virus.

El rostro de Jiho era sombrío cuando le preguntó lo que tenía que hacerse.

Él necesita sangre de hombre lobo para reemplazar las células humanas que su cuerpo está atacando —explicó.

Eso será fácilmente remediado.

No si es tan fácil, Jiho. No si él tiene que recibirla por medio de un mordisco y tomar la sangre a través de sus colmillos, ni siquiera sé si tiene colmillos, o si una transfusión funcionaría —admitió.

Sigue siendo fácilmente remediable, haremos las dos cosas —dijo Jiho, con plena confianza en su voz.

El resto del viaje transcurrió en silencio. Luhan se preocupaba por Junsu y por cómo Jiho prácticamente había salivado ante la idea de Junsu tomando su sangre. Luhan no estaba prestando atención al hecho de que no estaba viendo ninguna de las cadenas montañosas que perfilan el horizonte de Colorado.

Fue sacado de su estupor cuando oyó a Jiho en su teléfono.

¿Está listo? —Le oyó preguntar— Bien, deberíamos estar allí en unos minutos.

Al darse cuenta que algo no estaba bien, Luhan miró por la ventana y pudo notar por el paisaje que no estaban en Colorado.

¿Qué está pasando, Jiho? —preguntó con voz temblorosa, traicionando lo nervioso que estaba.

Cambio de planes. —Fue lo único que escuchó antes de que todo se volviera negro.

>>>♥<<<

Jiho miró la forma desplomada de Luhan, sintiendo una pequeña punzada de arrepentimiento por tener que causarle dolor, pero era necesario. Después de haber decidido llevarlo con él se dio cuenta que él podía decirle a Junsu en dónde estaban y luego Junsu podría decirle a Yoochun. No iba a permitirle arruinar todo su trabajo duro si de repente decidía tener una conciencia. Así que había llamado a uno de sus lobos, Sam, porque sabía que le era leal a él y no se pondría en contacto con Junho, y le pidió que alquilara una cabaña en las montañas Ozark en el sur de Missouri y le enviara las coordenadas, así como encontrar un lugar para aterrizar. Su compañero de manada había hecho algo mejor que eso. Había encontrado una cabaña con un campo vacío junto a él. Una vez más, Jiho sintió como si el destino estuviese interviniendo. Él le dijo a Sam que se subiera a un avión y volara hasta el aeropuerto más cercano a su ubicación, luego alquilara un auto y, después de conseguir víveres, lo encontrara en la cabaña.

A medida que se acercaba a la ubicación del campo, comenzó su descenso. Vio la cabaña a la derecha del campo. Cuando las ruedas tocaron la tierra, el avión rebotó ante el contacto. En general, no estaba tan mal como aterrizaje, pensó Jiho.

Una vez que el avión se detuvo completamente Jiho entró en acción, no queriendo que Luhan despertara antes de que lo tuviera con los ojos vendados y esposado. Todavía iba a necesitar su ayuda con Junsu, así que pensó que podía permitirle estar sin las esposas bajo su supervisión mientras él atendía a su paciente. Se fue hacia el lado del pasajero del avión y abrió la puerta. La forma inconsciente de Luhan cayó fuera y él lo atrapó justo a tiempo para evitar que golpeara el duro suelo. Agarró una bolsa de la tabla del suelo frontal y luego se dirigió en la dirección que había visto la cabaña.

Cuando llegó a la puerta, recordó que Sam le había dicho que el lugar que alquilaba las cabañas pondría una llave debajo de la alfombra. Inclinándose cautelosamente hacia abajo para mover la alfombra a un lado sin dejar caer al doctor, vio la llave plateada. A sus ojos era un pequeño trofeo proclamando su victoria por haber llegado finalmente a su destino con la que pronto sería su compañero.

Entró en la cabaña, sin molestarse en mirar a su alrededor, y rápidamente puso a Luhan en la primera pieza de mobiliario que vio. Metió la mano en la bolsa que había traído y tomó un par de esposas. Lo inclinó hacia adelante, halando ambos brazos detrás de él, y aseguró sus muñecas con las esposas. Sintiendo que por ahora eso sería suficiente, se dirigió de nuevo al avión para buscar a Junsu.

Jiho agarró la bolsa de la intravenosa y la puso sobre el estómago de Junsu para trasladarlo desde el avión a la cabaña. Bajó un extremo de la camilla al suelo y luego la haló hacia adelante hasta que las ruedas delanteras estuvieron en el borde de la puerta. Entrando al avión, agarró la parte delantera de la camilla y la bajó al suelo también. Jiho tomó el resto de las bolsas que Luhan había traído con él y cerró la puerta del avión. Empezó a empujar la camilla hacia adelante lo más rápido que pudo sin hacer caer a Junsu de él.

Finalmente llegando a la puerta de la cabaña una vez más, Jiho empujó la camilla dentro de la cabaña, y esta vez se detuvo en seco, sorprendido por cuán despejada era. El techo era a dos aguas y se elevaba por lo menos diez metros en el aire. Había un ático al otro lado del lugar donde estaba parado que estaba abierto para mirar por encima a la planta baja de la cabaña. Bajo el ático había un largo pasillo y podía ver varias puertas que asumió llevaban a los dormitorios. A su izquierda, a lo largo de la pared posterior estaba la cocina, los gabinetes elaborados de un hermoso cedro. Había una antigua olla de hierro fundido en la pared a la derecha, y en la isla que se encontraba en el medio de la cocina había una cocina de tope. Todos los aparatos tenían frentes de cedro a juego que tenían que haber sido hechos a medida. A su derecha vio una enorme chimenea de piedra y varias sillas y un sofá hecho de cedro que parecía tener cojines de gamuza, todos formando un semicírculo alrededor de la chimenea. Había mantas tiradas en sillas y cojines apilados en el suelo, por lo que era obvio que se trataba de un lugar de comodidad, para relajarse y alejarse del resto del mundo. El lobo de Jiho hizo un ruido sordo en aprobación del lugar que llamaría su guarida.

Necesitando averiguar el mejor lugar para colocar a Junsu y Luhan, caminó por el pasillo hacia las distintas puertas. Dos de ellas eran sólo regulares dormitorios cuadrados, cada uno tenía una cama de cedro y una mesita de noche. Entre las dos habitaciones había un pequeño baño. La tercera puerta a la izquierda era el dormitorio principal, que era más grande que los dos primeros y Jiho podía ver dos puertas que se abrían a un amplio baño. Finalmente entró en la puerta al otro lado de la habitación principal y entró en un espacio acogedor que parecía ser una biblioteca/estudio. Había estanterías que cubrían la parte izquierda de la pared al otro lado, llena de libros de diferentes tamaños y colores. En el centro de la habitación había una alfombra mullida que, tras una segunda mirada, se dio cuenta era una piel de oso. Alrededor de la alfombra había varias sillas de cedro con mullidos cojines y mantas tiradas sobre sus respaldos. En la pared más alejada de la puerta había un hermoso escritorio de cedro con un aparador con estantes que tenían iluminación incorporada. Este era el lugar donde pondría a Junsu y a Luhan. Ellos se sentirían cómodos aquí, y la mejor parte era que no había ventanas en esta habitación.

Jiho regresó a la sala de estar y volvió a cagar a Luhan. Lo llevó a la biblioteca y lo puso en una de las sillas de cedro. Luego se fue y recogió a Junsu de la camilla y lo colocó en una de las sillas que era más del tamaño de un sofá de dos plazas. Cuando comenzó a salir de la habitación, oyó a Luhan gemir y se volteó para ver que estaba despertando. Él gimió y trató de mover sus brazos, sus ojos se abrieron de golpe al darse cuenta que estaban atrapados detrás de él. Mirando a su alrededor salvajemente, tratando de orientarse, sus ojos se posaron en Jiho.

¿Qué has hecho, Jiho?

No podía tenerte diciéndole a Junsu donde estábamos cuando de repente decideras que no podías seguir adelante con la elección que habías hecho. Así que decidí que lo mejor sería no ir a tu cabaña. Lamento tener que esposarte, pero hasta que pueda poner un candado en la parte exterior de esta puerta tendrás que permanecer de esa manera.

Sabes, podría simplemente cambiar y estar fuera de ellas en un segundo —lo desafió, tratando de sostenerle la mirada.

Jiho gruñó y dio un paso hacia él, con los ojos brillantes. Luhan tuvo que dejar caer la mirada. Mierda, era más dominante que él. Por supuesto que lo sería, era un maldito Beta.

Puedes tratar de cambiar, pero conoce esto: hay sólo una razón por la que no soy el Alfa de una manada ¿Puedes adivinar cuál es?

Luhan se dio cuenta que lo que él le estaba diciendo era que su poder era lo suficientemente fuerte como para evitar su cambio. Él tendría que ser material de Alfa con el fin de hacer eso. Lo único que le haría más débil que otros Alfas, por supuesto, pensó, mirando a Junsu…

No tienes un compañero —respondió él.

Eso será remediado lo suficientemente pronto —gruñó Jiho, sus ojos todavía brillando.

Jiho giró para salir de la habitación, diciéndole que no se moviera. Independientemente de lo que le había dicho él trató de cambiar, pero Jiho le había dicho la verdad. El poder que él tenía fluyendo a través de la casa impedía su cambio.

Jiho regresó con otros tres juegos de esposas. Se acercó a él y le agarró uno de sus tobillos y le colocó la esposa, y luego con el otro extremo esposó el carril de la silla de cedro. Luhan lo fulminó con la mirada mientras lo veía asegurar a Junsu de la misma manera.

Cuando Jiho se apartó, oyó gemir a Junsu. Él lo miró y vio que sus ojos revoloteaban y él estaba tratando de moverse. Se quedó congelado, esperando, pero no tuvo que esperar mucho tiempo mientras los ojos de Junsu se abrían. Él lo miró y luego trató de mirar a su alrededor, sus ojos encontrando a Luhan.

¿Doctor Jeong? —Su voz era ronca y llena de preguntas sin respuesta. Junsu volteó la cabeza hacia él— ¿Jiho? —Él gimió y trató de tirar de sus piernas hacia su pecho, pero no pudo ya que una estaba esposada al riel de la silla. Cuando pareció que el dolor había pasado bajó la mirada hacia sus pies, y luego trató de tirar de sus brazos alrededor, dándose cuenta de que estaba esposado— ¿Alguien quisiera explicarme por qué estoy esposado y no en el hospital? — preguntó Junsu, mirando hacia atrás y adelante entre el doctor Jeong y Jiho.

Has sido secuestrado, Junsu. Jiho quiere hacerte su compañero — respondió Luhan como si fuese un hecho, y con mucha más verdad de la que Junsu esperaba.

Una vez más, el dolor atormentó el cuerpo de Junsu y cerró los ojos, tratando de dejarlo fuera. Cuando pudo respirar de nuevo miró al doctor Jeong.

¿Qué pasa conmigo?

Luhan le explicó lo mismo que le había explicado a Jiho en el avión, pero se detuvo antes de que él le dijera cómo podía ser sanado.

Está bien, doc. No es posible que piense que no sé qué usted debe saber cómo solucionar esto. ¿Por qué más lo habría traído Jiho?

Fue Jiho quien respondió.

Necesitas sangre de lobo. La recibirás de mí.

Excelente —dijo Junsu sarcásticamente incluso mientras alcanzaba a Yoochun con su mente.

«¡Yoochun!» Él no pudo contener el miedo que se vertió en el vínculo entre ellos. Estaba dolorido, podría morir si no recibía sangre de hombre lobo, y algún lobo demente había decidido una vez más que él debería ser suyo. Dicho lobo quería que él tomara su sangre y, sí, tener miedo era un eufemismo en este punto.

Junsu sintió unos brazos alrededor de él y una mano acariciando su rostro. «Junsu.» El desesperado dolor que escuchó en la voz de él fue suficiente para traer lágrimas a sus ojos.


>>> ♥ <<<


Changmin y Jae escucharon mientras Siwon les contaba a todos lo que había sucedido con la manada de Coldspring.

Cuando los lobos habían regresado de su reunión, con los ojos brillantes y el poder emanando de cada uno de ellos aspirando el aire de la habitación, les hizo saber que tenían malas noticias.

Ahora que sabemos quién lo tiene, ¿cómo podemos averiguar a dónde se lo llevó Jiho? —le preguntó Heechul a su compañero.

He estado pensando en eso y lo único que se me ocurre hacer en este momento sería interrogar a los lobos de Junho. —Siwon se volvió hacia el Alfa— ¿Cómo te sientes sobre eso?

Junho asintió en aprobación.

Yo estaba pensando lo mismo. No sé si Jiho hubiera confiado en cualquiera de mi manada, pero la única manera de saber con seguridad es interrogándolos. —Se volvió a sus lobos— Lee, Phillip, Dalton, y Aidan, serán los primeros.

Siwon se levantó y se dirigió a Hani.

Si no te importa, preferiría que ustedes esperen en la cocina. — Antes de que Hani pudiera objetar, Jae tomó su mano.

Vamos, señora K. Que las bolas de pelo hagan lo suyo. Estoy seguro de que estarán encantados de informarnos una vez les hayan sacado la verdad a golpes a estos cuatro.

Jaejoong —gruñó Yunho.

Guárdatelo, lobo —gruñó Jae de vuelta, levantando su mano en indicación que él no quería oír lo que él tenía que decir— tú y yo bailaremos luego.

>>>♥<<<

Hani dejó que Jae la llevara a la cocina, mientras que Changmin y Heechul los siguieron. Changmin fue directo a la nevera y sacó una Coca-Cola. Volviéndose hacia Jae, quien había saltado sobre el mostrador, él le tendió una, sabiendo que la estaría esperando. Luego Changmin tomó la suya y fue a pararse al lado de Jae, con la espalda apoyada contra el mostrador. Heechul estaba frente a los chicos con Hani a su lado.

Heechul, ¿por qué Jiho se llevaría a Junsu? —le preguntó Hani al Alfa.

Heechul se quedó mirando el suelo por unos momentos antes de responder:

Puedo pensar en dos razones. Uno, piensa que está ayudando a Junho al ser el encargado de tomar la decisión de llevarse a Junsu para que así Junho no tenga que hacerlo.

Si ese es el motivo es más tonto de lo que parecía —dijo Jae entre tragos.

La segunda sería la que yo siento que es probablemente la razón, él quiere un compañero. No estoy segura de qué edad tiene Jiho, pero por el poder que pude percibir en él, es lo suficientemente mayor como para estar sintiendo los efectos de no tener un compañero —explicó Heechul.

¿Qué pasa con este asunto de los compañeros? ¿Es realmente tan importante como para que estos hombres lobo estén dispuestos a arriesgar sus vidas? —le preguntó Changmin a Heechul.

Para un humano, parece poco realista —respondió Heechul— La idea de un alma gemela, lo que llamamos un verdadero compañero. Hay tantas facetas en la magia detrás de nuestra especie. No lo entiendo del todo, sólo sé lo que he visto para ser verdad. Hay una oscuridad en el alma de un hombre lobo. Está diseñado para ser feroz, implacable, protector hasta el extremo y despiadado. Si un macho no encuentra a su compañero, la oscuridad empieza a hacerse cargo y gradualmente comienza a volverse loco, incapaz de controlar la oscuridad que una vez fue algo que fortalecía a su familia, mantenía a su manada a salvo. A menudo los hombres lo describen como estando en guerra con el lobo. —Los tres estaban escuchando con tanta atención que no se dieron cuenta que los lobos machos se habían reunido en el fondo, escuchando— Su compañero es la luz que mantiene la oscuridad a raya. Él llena el agujero que ha ido creciendo cada vez más grande en su alma. Cuando se completa el vínculo entre compañeros, sus almas se fusionan, y el macho será capaz de atar la parte oscura de su naturaleza y por fin estar en paz con su lobo.

Hubo una pausa de silencio antes de que alguien hablara.

¿Qué obtiene la pareja de ello? Me refiero a que, suena muy bien para él, pero, ¿qué pasa con el agujero en el alma de la pareja? —La pregunta de Jae fue casi un susurro. Heechul ladeó la cabeza hacia un lado en un gesto muy parecido a un lobo, sorprendido de que tal cuestión hubiera venido de Jae.

Heechul se acercó a Jae y puso su mano debajo de su barbilla e inclinó la cabeza para que él estuviera mirando a la cara de Heechul.

Él consigue a un hombre que lo amará completamente y fielmente. Él consigue a un hombre que no sólo salvará su vida, sino que dará la suya propia para mantenerlo a salvo. Él proveerá para él sin importar el costo, él le dará refugio contra todas las tormentas que vengan en su camino, él será el encargado de traer una sonrisa a su cara cuando nadie más puede hacerlo. Él consigue a un amigo, un amante, un compañero, el único hombre en este mundo que puede completarlo y darle la otra mitad de su alma.

Jae secó las lágrimas que habían comenzado a caer por su propia voluntad, sin entender por qué las palabras de Heechul se sentían como si estuvieran grabándose por sí mismas en el corazón. Él sonrió hacia Heechul.

¿Eso es todo? —medio bromeó él, tratando de quitarse de encima las emociones intensas que las palabras de Heechul habían despertado en él.

Heechul se inclinó hacia delante y le dio un beso en la frente mientras susurraba:

Con el tiempo, todo será revelado. No pierdas la esperanza, por Junsu o por ti mismo.

Cuando Heechul retrocedió a su lugar en el mostrador, fue entonces cuando Jae se dio cuenta que los lobos habían estado escuchando las palabras de Heechul.

Sentía como si un agujero estaba siendo grabado a fuego en la parte posterior de su cabeza y sabía quién lo observaba. Se dio la vuelta lentamente y capturó los ojos de Yunho. Ellos brillaban y nunca se apartaron de él. Después de varios minutos él por fin apartó la vista, incapaz de pensar bajo su intensa mirada. En cuanto se dio la vuelta, vio a Yoochun y la expresión de su rostro amenazó con desgarrarlo. Él no había pensado en cómo las palabras de su madre le afectarían cuando su compañero, la otra mitad de su alma, estaba en manos de otro lobo.

Siwon se adelantó y tomó la mano de Heechul mientras se dirigía a todos.

Los cuatro lobos que Junho trajo con él son inocentes, no saben nada. Así que nuestro siguiente paso es ir a Denver y hablar con el resto de su manada. —Siwon se volvió y miró hacia Hani, su rostro se suavizó mientras contemplaba el rostro de una mujer que se mantenía unida por un hilo— Vamos a alquilar un jet. No voy a tratar de convencer a nadie de ir porque sería simplemente una pérdida de tiempo.

Finalmente un lobo que sabe cuándo ha sido vencido —dijo Jae, volviendo a su ser sarcástico.

Siwon le lanzó una mirada que lo desafió a decir más. Jae sabiamente decidió estar fascinado por la peladura en el esmalte de sus uñas.

El mayor obstáculo serán los padres de Changmin y Jae. Hani, tú y Heechul van a tener que ir con los chicos para hacerles saber que estaremos partiendo inmediatamente, en vez de en un par de semanas. Diles que ha sido una emergencia familiar y tenemos que volver a Corea lo más rápido posible. — Hani asintió, asumiendo una mirada de determinación en su rostro por tener finalmente una tarea, algo que hacer en vez de esperar. Tomó las llaves del auto en el mostrador y le indicó a los chicos y Heechul que la siguieran.

¿Cómo crees que tus padres van a tomar esto, Jae? —preguntó Changmin en voz baja.

Oh, probablemente tan bien como la vez que tomamos los tampones y los colgamos de los árboles frente a la casa del Director Stephens.

¿Así de bien? —preguntó Changmin con sarcasmo.

Recuerda, es por Junsu. Por lo tanto, lo que sea necesario, Changmin. No me importa si tienes que sacar todas las tarjetas de viaje de culpabilidad de tu arsenal, vamos a subir a ese avión a Denver. ¿Estamos claro?

Estoy contigo —confirmó Changmin. Por Junsu haría lo que fuera necesario para asegurarse de estar en ese avión.

>>>♥<<<

Yoochun subió por las escaleras hasta el dormitorio de Junsu y cerró la puerta tras de sí. Respiró profundamente, tomando su olor, dejándolo fluir sobre él. Sintió a su lobo empujando, gruñendo, en busca de su compañero en este lugar donde habían susurrado palabras de amor, y compartido sus sueños para el futuro.

Acostándose en su cama, hundió la cara en la almohada y fue allí que finalmente se vino abajo.

Sólo con Junsu podría dejarse ir alguna vez. Recordó la noche antes del desafío cuando había derramado sus miedos en él. Había desnudado su alma y él le había dado la bienvenida con los brazos abiertos. Sus hombros temblaron mientras el dolor y el vacío lo amenazaban con romper. Las últimas horas sin poder tocar su mente, sin saber si estaba bien, casi lo había puesto de rodillas.

Él había escuchado a su eomma hablar de la importancia de un compañero para el macho Canis Lupis y ahora Yoochun sentía como si un cuchillo estuviera siendo empujado a través de su corazón. Cuanto más había hablado él más se retorcía, destrozando músculos, arterias, venas que enviarían la vivificante sangre por todo su cuerpo. Junsu era su corazón y sin él su alma se marchitaría y decaería, al igual que los músculos y órganos sin sangre. Sin Junsu, la oscuridad que desataría sería tal como la que nunca se ha visto.

Yoochun respiró hondo, tratando de llevar sus emociones bajo control. Necesitaba pensar claramente y no permitir que sus acciones sean dictadas por la ira o el miedo, lo que no traería a su compañero a casa segura. Se incorporó y se limpió la evidencia de su dolor en su rostro. No iba a mostrar la profundidad de sus emociones a nadie sino a su Luna. Sólo él tenía el derecho en sus heridas más profundas, deseos, miedos. Sólo su Junsu.

Se levantó y caminó hacia la puerta y cuando su mano agarró el pomo de la puerta, oyó en su mente una voz que habría matado por volver a escuchar.

«¡Yoochun!» El miedo de Junsu se enlazaba en sus palabras. Yoochun sintió el corazón en la garganta mientras su alma se estiraba por su otra mitad. Su lobo gruñó, rugiendo por ser liberado.

«Junsu.» A pesar de que lo intentó, no pudo evitar la desesperación de por fin escucharlo, de finalmente sentir que su vínculo ya no estaba vacío. «¿Estás bien? ¿Estás herido?» Yoochun tenía que saber. A pesar de que no podía hacer nada al respecto por el momento, tenía que saber.

«Me duele, pero no porque alguien me haya hecho daño. Jiho nos ha secuestrado, a el doctor Jeong y a mí.»

«¿Todavía estás enfermo?»

«No tan mal.» Yoochun sintió una pausa antes de que continuara. «Estaré bien.»

«¿Puede describir tu entorno para mí? Tal vez me dará algún tipo de idea de dónde te encuentras.» Yoochun sabía que era una posibilidad remota, pero por otro lado, podría haber algo que Jiho había pasado por alto que sería suficiente para delatarse.

«La habitación en la que nos encontramos no tiene ventanas. Parece una biblioteca o estudio.»

Yoochun esperó, sintiendo su intento de examinar su entorno.

«Bien, parece que tal vez es una cabaña de troncos. El mobiliario está hecho de algún tipo de madera y las paredes son todas de madera como una cabaña. No veo nada más que de ninguna pista acerca de dónde estamos.» La voz de Junsu estaba empezando a sonar muy nerviosa.

«Luna.» Yoochun suavizó su tono de voz hasta un susurro en su mente mientras se imaginaba acariciando su rostro, envolviendo sus brazos alrededor de él y sosteniéndolo cerca. «Te encontraré. Eres mío, yo siempre iré por ti.»

«Yoochun, date prisa. Por favor.»

El por favor es lo que lo convenció. Su Luna no decía por favor, incluso en la más extrema de las situaciones, su Luna mandaba. Había algo que no le estaba diciendo, pero no iba a presionarlo en estos momentos.

«Junsu, tengo que dejar que mi padre sepa que tú me has contactado. Estamos saliendo en poco tiempo a Denver para interrogar a la manada de Junho. Esperamos que él confiara en uno de los otros lobos y tal vez revelara adónde te estaba llevando» explicó Yoochun, quería que él entendiera que si no lo escuchaba no era porque se hubiera ido.

«Estás bien. Si soy capaz de averiguar cualquier cosa que creo que pueda ayudar, te lo haré saber.»

Y porque no podía dejar de decirle, empujó la imagen de él besándolo en su mente mientras susurraba:

«Te amo, mi Luna.»

«Yoochun, quédate conmigo.»

«Siempre.» Su palabra era una promesa solemne para él únicamente.

>>>♥<<<

Yoochun abrió la puerta y corrió escaleras abajo. Su padre y los otros lobos estaban reunidos en la sala de estar. No vio ninguna señal de los chicos y asumió que no habían conseguido regresar todavía.

Junsu me ha contactado a través de nuestro vínculo —anunció, sin aliento, no por la excursión, sino del ritmo frenético de su corazón, sabiendo que él estaba vivo y hasta el momento ileso.

¿Fue capaz de decirte algo? ¿Te dio alguna pista de dónde podrían estar? —le preguntó Siwon a su hijo.

Todo lo que me pudo decir fue que cree que él lo tiene en una cabaña. Él dijo que la habitación en la que está no tiene ventanas, pero que el mobiliario es de madera de bosque y las paredes eran de troncos, como una cabaña de troncos.

¿Mencionó al doctor Jeong?

Él dijo que Jiho los secuestró a los dos. Parecía como si el doctor Jeong fuera tan víctima como Junsu, pero algo sobre eso no me sienta  bien —admitió Yoochun.

Siwon asintió.

Estoy de acuerdo contigo. No veo al doctor Jeong como el tipo de víctima. Él es una pareja Alfa, toma sus propias decisiones. —Siwon miró a cada uno de sus lobos— Si no han empacado, entonces háganlo ahora, y sean rápidos. Junho, voy a dejar que mandes a tus lobos. No voy a pisar en tu autoridad.

Te lo agradezco, Siwon. Ya he enviado a Dalton y a Lee para que consigan nuestras cosas del hotel, deberían volver en cualquier momento.

En este momento lo único que queda por hacer es esperar a que Hani, Heechul, y los chicos vuelvan.

¿Crees que Hani puede convencer a sus padres para que los dejen ir con nosotros? —le preguntó Yoochun a su padre.

Si Hani no puede, son pocos los que pueden resistirse a tu eomma. — Siwon le dio a Yoochun una sonrisa de complicidad, y por el momento, porque podía sentir la presencia de Junsu en el fondo de su mente, él fue capaz de devolverle una pequeña sonrisa. Era cierto, después de todo. Su eomma siempre parecía salirse con la suya. De alguna manera era capaz de hacer que la gente piense que lo que fuera que él estaba queriendo había sido su idea en primer lugar. Le iban a seguir la corriente con una sonrisa en su rostro, completamente inconscientes. Nunca lo había visto usarlo con malas intenciones, su eomma era demasiado bueno de corazón para eso. Casi estalló en carcajadas ante la idea de los pobres padres de Changmin y Jae cayendo, sin saberlo, bajo su hechizo.

Yoochun sintió a Junsu removerse en su mente.

«Comparte conmigo lo que está apaciguando tu ira, Yoochun.»

«Mi eomma y tu madre están en casa de Changmin y de Jae tratando de convencer a sus padres para que dejen que Changmin y Jae vayan a Corea hoy. Obviamente, eso no es cierto, pero tenemos que decirles algo para que Jae y Changmin puedan venir, viendo como harían autostop si no los traemos.»

«Veo que estás aprendiendo» bromeó Junsu.

«Es curioso, mi amor, pero Jae le dijo lo mismo a mi padre.» Podía sentir el humor que él sentía por esto y se alegró de poder darle una pequeña cantidad de distracción. «Lo que estaba pensando era, que mi eomma parece tener la capacidad de conseguir lo que sea que quiera; la gente sólo le sigue la corriente. Casi me siento mal por sus padres, con mi madre allí, no hay forma de que no logre que ellos estén de acuerdo para que los chicos vengan y encima de eso, van a pensar que es la mejor idea del siglo.»

Junsu estuvo en silencio por un momento. Yoochun no podía recoger lo que estaba pensando o sintiendo, su capacidad de bloquearlo estaba haciéndose más fuerte.

«Luna, me dirías si te ha hecho daño.» Yoochun dio una orden en lugar de una pregunta.

«Veo que la distancia no afecta tu capacidad de ser mandón.»

No pasó desapercibido para Yoochun que él había esquivado su comentario.

«Junsu.» La dejó oír un gruñido en su mente.

«Bajo las circunstancias, estoy tan bien como se puede esperar, hombre lobo. Dime cuando estés cerca de Jae y Changmin, me vendría bien una dosis de su tipo de medicina.»

«Como digas, mi amor, así será.» Yoochun le daría el mundo si él se lo pidiera, y él movería montañas para que esto ocurra.

>>>♥<<<

Jae y Changmin se sentaron en el asiento trasero de la camioneta de Heechul, ambos atónitos por lo que había tenido lugar en sus hogares. En un momento sus padres estaban completamente inseguros de dejarlos ir y luego al siguiente Heechul estaba abrazándolos y haciéndoles saber que eran bienvenidos a venir a Corea en cualquier momento.

Incluso les dijo que Siwon y él pagarían por eso, y consiguió esto, sus padres estaban comiendo de las manos de Heechul como si él estuviera sirviendo la mejor cosa desde el pan rebanado.

Thelma, ¿podrías decirme qué pasó allí? —murmuró Jae, su voz como en un estado de trance.

Estoy tan perdido como tú, Louise —dijo Changmin, luciendo tan confundido como Jae.

Heechul le sonrió a los chicos en el espejo retrovisor.

Todo está en la presentación, niños. Si puedes situar un diamante imperfecto delante de alguien, al principio todo lo que ven son los defectos. Pero si lo tomas y le das la vuelta justo directo a la luz, de repente los defectos quedan en el fondo, sacando a luz el resplandor que se encuentra detrás de esos defectos.

Maldita sea, él es bueno. —Jae sonrió.

Hani miró hacia atrás a Jae y a Changmin y permitió que una pequeña sonrisa cruzara su rostro a pesar de que no llegó a sus ojos.

Heechul repentinamente tuvo una de esas miradas distantes que Jae y Changmin reconocieron inmediatamente.

¿Qué es lo que el gran jefe tiene que decir? —preguntó Jae, sin preocuparse en este momento si era de su incumbencia o no.

Si se refería a Junsu, entonces en lo que a él respecta era definitivamente de su incumbencia.

¿Cómo sabías que estaba hablando con Siwon? —preguntó Heechul, con verdadera sorpresa en sus ojos.

Tienes la misma mirada que tiene Junsu cuando él y su bola de pelo están utilizando su mojo mental. Aunque, le pregunté una vez si estaba estreñido porque sólo tiene esa clase de mirada en su cara cuando está estreñido. —Todos los ojos estaban sobre Jae en el momento en que él dejó de hablar— ¿Qué? — preguntó él.

Hani dejó escapar una pequeña risa.

Gracias, Jae. Necesitaba eso.

Para eso es que estoy aquí, señora K. Su propio comediante y alivio personal. —Jae volvió a mirar a Heechul— Así que en serio, ¿qué dijo?

Heechul miró a Hani, su rostro se suavizó mientras decía:

Junsu contactó a Yoochun a través de su vínculo.

Hani respiró profundamente y cerró los ojos mientras se relajaba.

¿Está bien?

Siwon dice que le dijo a Yoochun que Jiho no le había hecho daño, pero que estaba todavía sentía dolor de lo que sea que estaba mal antes.

Nunca tuvimos la oportunidad de hablar con el doctor Jeong al respecto —dijo Hani a nadie en particular.

¿Dijo si el doctor Jeong estaba con él? —le preguntó Changmin a Heechul.

Junsu dijo que el doctor Jeong estaba allí y que ambos habían sido secuestrados por Jiho.

Jae chasqueó la lengua.

No sé si creer eso. El doctor Jeong tenía agallas. No lo veo siendo intimidado por ningún lobo.

Estoy contigo, Vern —concordó Changmin.

Unos minutos más tarde, se detuvieron en la entrada de la casa de Hani. Todos saltaron de la camioneta y se dirigieron a la puerta, que se abrió antes de que incluso llegaran a ella. Yunho estaba en la puerta, luciendo tan odioso como siempre, pensó Jae.

¿Qué, ningún beso de saludo? —lo aguijoneó él, por alguna razón encontraba satisfacción cuando podía conseguir una reacción de él. Jae no estaba preparado para la mirada que le dirigió en respuesta a su observación. En realidad, parecía como si estuviera considerando besarlo. Se apresuró a pasar frente a él y le escuchó reír, a lo que Jae decidió no reconocer.

Una vez todo el mundo estuvo en la casa, llenaron nuevamente la sala de estar, Siwon repasó otra vez lo que Junsu le había dicho a Yoochun. Finalmente, les contó el plan una vez que llegaran a Denver.

Junho y yo decidimos que sería mejor si no nos quedamos en su sede de la manada, sobre todo porque vamos a estar interrogando a sus lobos y algunos podrían pensar que están siendo acusados de algo. Así que nos alojaremos en un hotel cercano. Nosotros tomaremos mi camioneta, la cual puede llevar a 9 personas, y la camioneta de Junho, que puede con 6, al aeropuerto. Donghae, tu irás con Junho y sus lobos. Son las 2:00 p.m. Ahora bien, para cuando abordemos el avión serán las 3:00 p.m. El vuelo es un poco más de 2 horas y medias, por lo que debemos llegar a Denver alrededor de las 5:30 o 6:00 p.m. ¿Alguna pregunta? — Nadie respondió, así que Siwon se volvió hacia Junho— ¿Tienes algo que necesites decir?

Ahora no. Estoy listo cuando ustedes lo estén. —Siwon asintió y, sin decir una palabra, se dirigió hacia Heechul. Todo el mundo lo tomó como su señal para recoger sus cosas y encaminarse a sus vehículos asignados.

>>>♥<<<

Hani se paseaba por la casa, asegurándose de que todas las luces estuvieran apagadas cuando sintió una mano suave en su brazo. Se volvió para encontrar a Junho mirándola con ojos que lucían tan atormentados como los suyo propios.

Sólo quiero que sepas que voy a hacer todo lo posible para encontrarlo —dijo Junho, y ella podía decir que quería decir cada palabra.

Gracias —fue todo lo que pudo decir. No sabía qué más decir. Aquí el amor de su vida estaba justo delante de ella, lo suficientemente cerca como para tocarla, y sin embargo estaba por siempre fuera de su alcance. Pero era suficiente, decidió Hani, que él amara a su hijo. Aunque él no la podía amar, si amaba a Junsu y eso sería suficiente.

>>>♥<<<

Una vez que todos se montaron en los vehículos, los bolsos de todos amontonados en la parte trasera de cada una de las camionetas, Changmin se tomó un minuto para mirar la disposición de los asientos. Siwon, Heechul y Hani estaban en el frente, Leeteuk, Yunho y Yoochun estaban en la parte de atrás, y Changmin y Jae estaban en el segundo asiento con Shindong sentado entre ellos. Changmin se estiró sobre Shindong mirando hacia su malvado amigo.

¿Qué estás tramando, Lucy? —susurró Changmin.

Jae tenía esa mirada en su cara a la que Changmin estaba muy  acostumbrado. Changmin pensó en él como el rostro antes de la tormenta.

Oh, Ethel, ¿cómo puedes pensar posiblemente que estaría tramando algo? —Jae parpadeó inocentemente.

Changmin negó con la cabeza y se dio cuenta una vez más mientras volvía a sentarse que Yunho estaba ubicado directamente detrás de Jae. Genial, Jae estaba en uno de sus estados de ánimo donde sólo tenía que empujar al león. Él no podía dejar las cosas como estaban. Changmin se preparó para lo que era seguro un viaje entretenido al aeropuerto, por breve que sea.

Efectivamente, en no menos de diez minutos Jae dejó escapar un suspiro dramático.

Changmin, estoy tan malditamente cansado —anunció. Luego trató de apoyarse en la ventana, luciendo como si estuviera tratando de ponerse cómodo.

Una vez que fue obvio que no iba a suceder, se sentó y miró hacia Shindong. Él se encogió de hombros en una actitud de “qué diablos” y justo antes de que él apoyara la cabeza en su hombro, Changmin vio a Jae guiñarle un ojo.

Changmin saltó cuando oyó el golpe en la parte posterior de la cabeza de Shindong, y se volvió para mirar hacia donde el golpe se había originado. Yunho estaba fulminando al lobo con la mirada, sus ojos brillando peligrosamente. Sólo dijo una palabra, pero fue suficiente para ponerle la piel de gallina a Changmin.

Muévete —le dijo Yunho. Shindong se levantó tan rápido que se golpeó la cabeza contra el techo del vehículo.

Se deslizó en torno a Changmin y le dio un empujón a su pierna con la suya indicándole que él quería que le pasara por encima. Changmin miró hacia atrás a Yunho otra vez para ver que sus brillantes ojos estaban ahora fijos en la parte posterior de la cabeza de Jae.

Eres un chico muy malo. Ya te he dicho esto antes, ¿verdad? —le susurró Changmin en el oído a Jae.

Oh, amánsate. No me metería con él si no fuera tan fácil, pero él camina directo hacia ello, ¿sabes? Quiero decir, en serio, Changmin. ¿Cómo puedo pasar eso?

Bueno, podrías hacer como el resto de nosotros y crecer —dijo Changmin en su tono maternal.

Ahh, pero Ethel, querida, ¿dónde estaría la diversión en eso?

Dónde de hecho —murmuró Changmin.


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Continuara \\(^_^)//...
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Gracias…

8 comentarios :

  1. Ay cosonas de Jae haciendole jugaditas a Yunho jajaja estuvo genial...Pobre Junsu y yochun sufriendo x otro hombre lobo... Cuándo dejarán de reclamar a Junsu..Es tan deseado???
    Quiero otro capítulo yaaaaa....Ayy quiero otro por fas....

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Ojala que Yoonchu llege a tiempo y pueda salvar a Junsu y Jae deja de atormentar a Yunho que te las va ha cobrar y tu sabes como y gracias por el capitulo esperare con ansias el siguiente

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  4. por fin se a podido comunicar Junsu con Yoochun y están un poco mas tranquilos pero ese Jiho se quiere hacer su pareja y no creo que lo consiga o eso espero que llegue Yoochun a tiempo y termine con ese como hizo con el otro que quiso arrebatar a Junsu de su lado espero que lo encuentren antes de que pase algo malo y se lo lleve lejos de ese loco
    Jae no deja de molestar a Yunho y es divertido como cada que Jae hace una locura nueva Yunho cae redondito y logra ponerlo muy celoso de quien se atraviese en el camino de Jae
    Gracias me encanto muy divertido

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  5. enserio me encanta como jae provoca a yunho ^^, ojala se resuelva pronto la situación de estos dos, por que me estoy volviendo loca, ohhh junsu podresito tener que pasar por todo eso, la desesperación de yoochun hasta yo la puede sentir en carne propia, porfis porfis sube otro capitulo es que uno no me es suficiente, todos los dias reviso si ya subiste un capitulo nuevo, es que enserio esta muy pero muy buena la historia, aun asi tratare de ser paciente y obviamente esperare con ansias el proximo capitulo :)

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  6. Estoy con Día..Yo todos los días reviso si ay actualización de esta historia...yo quiero más capítulos!!! X favor.....

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  7. Geenial geniiiiallll¡¡¡ al fin ha despertado y por lo que veo el Canis va ganabdo a la sangre ajena¡¡¡Pudieron hablaaar OMG que bello. Dios que bello todo lo que dijo Heechul, movió cositas en Jae woooo¡¡¡ jajaj Oh si si alguíen puede venderle panes a un panadero ese en definitiva es la Chula jajaja. Pobre ShingDong siendo objeto de la mente siniestra de Jae😂😂😂 Yunho controlate el no hizo nada😶😶. En la MMMM JiHo cabó su tumba. PELIGROSO EN SERIO, El TRIO ALFA SiYooHo seguro está maquinando como despellejar a ese traidor.

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  8. Al fin Junsu pudo comunicarse con Yoochun y darle un poco de paz. Espero pronto den con él antes que Jiho logre morderlo o ponerle de su sangre.

    Jae y Changmin son un verdadero respiro para todos, pues hacen que sonrían y se relajen un poco ante cada ocurrencia de ellos. Me encanta como Jae provoca a Yunho.

    Gracias!!!

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