martes, 30 de mayo de 2017

Out Of The Dark. Cap 5



Mi amor. —Yoochun acarició el rostro de Junsu mientras trataba de despertarlo— Tenemos que prepararnos.

Todos los demás ya se habían levantado y comenzado a prepararse para el viaje que cada uno tenía por delante. Yoochun había dejado dormir a Junsu diez minutos extra, sabiendo que las emociones iban a ser intensas hoy. Iba a ser agotador.

Para su sorpresa, su compañero odia-mañanas se sentó repentinamente. Lo miró, su cabello un desastre de dormir. En lugar de una sonrisa vio el duro destello de la determinación en sus ojos esmeralda.


Sé que quieres saltar y salir corriendo por la puerta, Luna, pero no podemos ayudar a Jae o Yunho si no cuidamos de nosotros mismos. Así que una ducha rápida, después comida. ¿De acuerdo?

Dime que vamos a arreglar esto, Yoochun. Sé que me lo dijiste anoche, pero he dormido desde entonces. Así que por favor dime que lo encontraremos y que recuperaremos los recuerdos de él.

Yoochun se puso de pie y caminó al otro lado de la cama. Tomando su mano, tiró de Junsu para colocarlo delante de él. Inclinó su barbilla de modo que estuviera mirando a los ojos que podría mirar por el resto de la eternidad.

Te doy mi palabra. Haré lo imposible por traer a Jae de vuelta con nosotros y restablecer a Yunho. Ellos son tanto mi familia como la tuya y son de la manada. Protejo lo que es mío. Y aunque no soy Alfa, soy el príncipe de los TVXQ de Corea. Yunho y Jae son míos. ¿Está claro?

Junsu miró a la hermosa cara de su compañero. Podía sentir el amor, la preocupación, la inflexible determinación, y la firmeza concentrados en hacer exactamente lo que dijo que haría.

 Está claro. Confío en ti.

Yoochun lo atrajo hacia él, envolviéndolo con sus brazos. Una mano lo sostenía firmemente por la parte baja de su espalda y la otra acariciaba su nuca. Cuando sus labios se encontraron con los de él, el mundo y todas las preocupaciones, pena, lucha y dolor se esfumaron. Eran sólo él y Yoochun. Envolvió los brazos alrededor de su cuello, pasando los dedos a través de su cabello. Presionó su cuerpo más cerca del suyo y fue recompensado con un gruñido bajo. Después de varios minutos, Yoochun se retiró, sus labios húmedos de su beso. Sonrió cuando se dio cuenta que él estaba tan falto de respiración como él.

Podría besarte todos los días, durante todo el día, y nunca tendría suficiente.  —Aunque él había detenido el beso, no había aflojado su abrazo.

Estás de suerte. —Sonrió con picardía.

¿Y eso por qué, Luna?

Junsu se puso de puntillas y presionó su boca en la oreja de Yoochun. Sintió su cuerpo tensarse contra el de él.

Porque planeo dejar que me beses, a menudo y principalmente en la boca —le dijo con un suave soplo de aire contra su oreja y cuello.

Junsu comenzó a reír cuando Yoochun gruñó ante sus palabras. Le encantaba que aún pudiera sacudir su jaula, adoraba tenerlo de puntillas.

«Gracias», susurró Junsu en la mente de él.

«¿Por          qué?» Yoochun sinceramente no sabía por qué podía estar agradeciéndole.

«Por darme eso. Por continuar mostrándome cariño y amor, incluso con todo esto ocurriendo».

Junsu, mírame. —Las palabras de Yoochun fueron amables pero todavía una orden.

Hizo lo que le dijo.

Tú siempre vas primero. Siempre. Y no eres sólo tú el que necesita sentirse amado, querido, y necesitado. Somos lobos, el amor, el contacto, es esencial para nosotros. —Yoochun besó su frente y lo liberó—. Ve a ducharte. Me encontraré contigo abajo para el desayuno.

Espera. —Junsu se dio cuenta de que Yoochun no llevaba la ropa con la que se había ido a dormir. Llevaba un par de pantalones cargo verdes y una camiseta negra de manga larga—. ¿Dónde conseguiste esa ropa y dónde puedo conseguir algo? —Necesitaba muchísimo salir de su conjunto cubierto de hollín.

El dueño fue por la gente del pueblo y consiguió que donaran ropa. Debe haber algo en el baño al final del pasillo. Puede que no se ajuste perfectamente pero al menos está limpia.

No me importa si son harapos o cachemira. Sólo necesito salir de estas ropas. —Levantó la vista hacia él y sonrió—. Gracias, hombre lobo. Te veo en un rato.

Yoochun le guiñó un ojo mientras salía de la habitación.

Junsu llamó a la puerta del cuarto de baño. Sólo había uno en toda la posada y lo estaba compartiendo con el resto de la manada.

Ya casi termino. —Era una voz familiar.

Changmin, soy Susu. Abre.

La puerta se abrió sólo lo suficiente para que Changmin sacara la cabeza. Junsu sintió el vapor de la ducha caliente acariciar su cara cuando se arremolinó más allá de él.

¿Estás solo?

Junsu puso los ojos en blanco.

Sí, sanador, soy sólo yo. Ahora, déjame entrar. ― Changmin abrió más la puerta mientras resoplaba.

Bueno, podías haber tenido a tu lobo contigo. No quería abrir la puerta así… —Changmin hizo un movimiento de arriba abajo con la mano indicando su cuerpo vestido con una toalla—… y estar como “oh, hola Yoochun, ¿cómo te va, Yoochun? Sólo estoy aquí parado en mi toalla pasando el rato y haciendo mis cosas, Yoochun”. ― Junsu cerró la puerta tras él y sacudió la cabeza hacia Changmin.

Eres un pequeño gitano perturbado.

Junsu miró alrededor, viendo rápidamente la ducha en la pared frente a la puerta. Era un sencillo cuadrado embaldosado con un desagüe en el suelo. Una cortina de ducha azul colgaba a través de él. Al lado de la ducha había una pequeña mesa que tenía ropa y toallas. Junsu no pudo evitar la sonrisa que se expandió por su cara cuando comenzó a desvestirse.

Changmin le ofreció una débil sonrisa.

Lo siento. Sólo estoy todo de mal humor. Estoy recibiendo vibraciones extrañas y…

¿Qué quieres decir con vibraciones extrañas? ¿De Jae? ¿El bosque? ¿Sobre Yun? —interrumpió Junsu.

Changmin paró de cepillarse el cabello a mitad de camino. Se dio la vuelta del viejo espejo para mirar a su mejor amigo.

¿Has acabado? ¿Vas a dejarme terminar ahora?

Junsu levantó las manos en señal de rendición.

Oh, hombre. Lo siento. Estoy peligrosamente cerca del furgón de los locos, ¿verdad?

Definitivamente creo que deberías dar un par de pasos atrás. Es demasiado pronto para saltar a ese furgón. Te aseguro que te daré el completo visto bueno cuando sea el momento.

Junsu sonrió.

Bien. Entonces, ¿qué estabas diciendo?

No sé realmente cómo describirlo. Creo que Jae está a salvo, pero al mismo tiempo algo está mal. Tendré que ver cómo está actuando Yunho, eso me ayudará a saber acerca de Jae. No se da cuenta que a pesar de que no lo recuerda, él aún está conectado a Jae. Ellos se afectan mutuamente, lo sepan o no. ― Junsu se metió en la ducha. Changmin soltó una risa cuando escuchó a Junsu gemir.

Oh. Dios. Mío. Esto se siente divino. Casi tan bueno que podría ser malo, pero es tan bueno que no te importa si es malo. ¿Me sigues?

Changmin tenía una sonrisa que se extendía por su cara y sus ojos arrugados mientras respondía:

Sí, princesa lobo, te sigo. Así que, de todos modos, como iba diciendo, otra vibración que estoy recibiendo es de cierto lobo…

Oh, hermano. ¿Estamos preparándonos para tener algunos momentos Jae?

Sin duda un momento Jae. Él no es una opción, para nada, completamente fuera del menú. Pero sigue sonriéndome y guiñándome el ojo. Quiero decir… Vamos. ¿Cuánto se supone que es capaz de soportar un chico?

Déjame adivinar. —Junsu habló por encima del ruido del agua de la ducha—. ¿El nombre de dicho lobo fuera-del-menú rima con Sayami?

¿Sayami? En serio, Susu, ¿con eso es con lo que sales? —Changmin puso los ojos en blanco.

Bueno, está bien. ¿El nombre del lobo es…?

Sí, sí, mierda —interrumpió Changmin— Es nuestro amable camarero del barrio. Quiero decir, ¿me imaginas presentándoselo a mis padres? Hola mamá y papá, este es Hayami, es un hombre lobo y camarero. Así que básicamente podría comerme para el almuerzo y luego servirse a sí mismo una buena cerveza fría para tragarme mejor.

Junsu se estaba carcajeando fuertemente cuando cerró la ducha y abrió la cortina. Agarró una toalla y comenzó a secarse.

Muy buena.

Estoy hablando en serio, Susu —gimoteó Changmin— Está empezando a llegar a mí y no tengo tiempo para cuidar un corazón roto.

Changmin, respira profundamente, déjalo salir lentamente. —Junsu esperó hasta que su amigo cumplió mientras continuaba vistiéndose. Se puso un par de pantalones cargo que eran sólo un pelín demasiado grandes, luego se pasó una camiseta azul con cuello de tortuga por la cabeza— Ahora, no nos estresemos acerca del pequeño asunto del CHL, ¿de acuerdo?

¿CHL? —El ceño de Changmin se frunció.

Sí, el Camarero-Hombre-Lobo. — Junsu sonrió, obviamente complacido consigo mismo.

¿Qué pasa contigo y Jae y los acrónimos? Juro que tienen un cuaderno lleno de ellos.

Si lo tenemos, nunca lo sabrás. —Junsu le guiñó un ojo a su moreno amigo. Changmin miró a Junsu de arriba abajo y luego sonrió.

Dominas totalmente todo el estilo “me di un baño de hollín en un incendio y ahora tengo que llevar ropa de una talla demasiado grande en colores que me arruinan por completo”.

Junsu abrió la puerta del baño y apresuró a Changmin a salir.

Bueno, gracias, Thelma. Aprecio el apoyo.

Cuando quieras, Louise. Para eso estoy aquí, para indicar cuándo logras un buen aspecto, o fallas en el intento.

Bajemos a comer, idiota —dijo Junsu, sacudiendo la cabeza hacia Changmin y tirando de él.

Cuando los dos chicos llegaron abajo vieron que la mayoría de la manada ya había comido y estaba empezando a dispersarse, algunos dirigiéndose a ayudar al dueño de la posada a limpiar y otros ocupándose de cosas que Siwon les había asignado.

Su grupo estaba todo reunido alrededor de la chimenea en la gran sala de reunión. Yoochun caminó hacia Junsu y le tendió un plato de huevos y tocino. Y para sorpresa de Changmin, y disgusto parcial mezclado con alegría, Hayami le tendió a él un plato de lo mismo.

Ambas chicos tomaron asiento en el sofá que los chicos habían desocupado cuando ellos llegaron.

Muy amable de su parte unirse a nosotros, jóvenes. —Siwon se dirigió a ellos con un tono firme, pero sus ojos contenían diversión.

En América, S, hay esta cosa llamada llegar elegantemente tarde. Verás, es mi trabajo como tu yerno, introducirte en todas estas costumbres. —Junsu le sonrió.

Siwon soltó una risa.

Oh. Bien, entonces, ¿supongo que debo agradecerte en lugar de reprenderte?

Ahora lo estás pillando.

Todos aquellos alrededor de la habitación se rieron con la broma, pero se callaron cuando Siwon se levantó.

Tan pronto como todos terminen de comer saldrán en sus direcciones separadas. Heechul y yo, así como la mayor parte del resto de la manada nos quedaremos aquí. Este será el cuartel general, a falta de un término mejor. Yoochun, Junsu, Key, y Leeteuk tomarán el vehículo que queda y se dirigirán de vuelta al aeropuerto para tomar el avión a Corea e ir a la  mansión. Una vez allí, Leeteuk se pondrá en contacto con el historiador de la manada y él debería al menos ser capaz de señalarles una dirección general de dónde empezar a buscar. —Siwon hizo una pausa y pareció reunir sus pensamientos. Todo el mundo esperó en silencio, el fuego chasqueando y estallando mientras la madera se quemaba, y el viento afuera soplando contra las ventanas.

Finalmente miró a Changmin.

Tú, Luhan, Hayami y Yunho se dirigirán afuera a pie.

Los ojos de Changmin se abrieron ampliamente ante esta declaración.

¿A pie? ¿En el frío y la nieve? — chilló.

Yo podría sacrificar un poco de calor corporal por ti si lo necesitas — bromeó Hayami y guiñó un ojo. Le dio un gran placer hacerlo sonrojar.

Hayami. —La voz de Siwon fue una advertencia aunque no había calor verdadero detrás de ellas— Ahora bien, he reunido todas las cosas que necesitarán para encargarse de este tiempo. Tendrán un poco de ayuda a lo largo del camino, aunque no deberían buscarla. Simplemente dejen que vaya a ustedes.

Se oyó un gruñido cuando Junsu se lanzó a mismo hacia atrás en el sofá dramáticamente.

S, me estás matando. Primero, tienen la oportunidad de conocer a la Hada, ¿y ahora consiguen ir a una excursión digna del Señor de los Anillos a través de la montaña? ¿Y aun así todo lo que yo consigo es a un tipo viejo y papel quebradizo?

Sólo recuerda que todo es por Jae y Yunho. —Changmin palmeó la pierna de su mejor amigo.

Esa es tu única salvación. De lo contrario me estaría invitando a mí mismo a su pequeña aventura.

Dos horas, varias discusiones, y montones de quejidos mientras la manada se separaba más tarde, Junsu, Yoochun, Leeteuk y Key estaban una vez más en un Hummer viajando por la larga carretera montañosa de vuelta hacia la mansión de los Lobos TVXQ Coreanos. Mientras tanto, Changmin, Luhan, Hayami y Yunho habían comenzado su arduo viaje a pie.

¿Crees que lo tenemos todo? —preguntó Changmin a Luhan mientras se adentraban en el bosque de los Alpes Transilvanos. Estaban caminando en fila india con Luhan a la cabeza, luego Changmin, Hayami y Yunho en la retaguardia.

Si no lo tenemos, lo único que nos dejamos fue un inodoro.

En serio —añadió Hayami— tenía que haber sido Heechul el que empacara para nosotros. Ningún hombre habría pensado en todas las cosas que tenemos empaquetadas en estas bolsas que estamos cargando sobre nuestras espaldas.

Junsu había sugerido llevar un caballo o un burro, pero Siwon dijo que incluso si pudieran encontrar uno sería simplemente una boca más que alimentar. Así que, sin un caballo/burro de carga, los cuatro estaban en camino.

Todos se quedaron en silencio mientras caminaban. El crujido de la nieve bajo sus botas, y el ocasional pájaro o animal correteando eran los únicos sonidos.

 Yunho estaba perdido en sus pensamientos. Después de que Jaejoong lo hubiera bloqueado, y había tenido algún tiempo para calmarse, había ido a Siwon. Le hizo saber que Jaejoong dijo que las personas que lo habían rescatado eran Minho y Taemin: un Alfa y su compañero que se creía que habían muerto hace tres siglos. Siwon estaba sorprendido, pero no completamente conmocionado. Le había dicho a Yunho que a la luz de las circunstancias de Jae, ir a ver a Peri era el mejor curso de acción para Changmin.

Cuando se había despertado esta mañana supo que algo iba mal. No podía sentirlo en absoluto. No era como cuando él había bloqueado su mente; incluso entonces aún podía sentirlo pero ahora no había nada. Había decidido que tal vez estaba inconsciente, y aunque odiaba la idea de él inconsciente, era un pensamiento mejor que otras posibilidades. No se lo había mencionado a nadie porque no se imaginaba que hubiera algo que se pudiera hacer acerca de ello. Cuanto más tiempo pasaba sin su presencia más débil comenzaba a sentirse, y la oscuridad arrastrándose en su mente y alma se intensificaba. Ahora estaba pensando que tal vez habría sido una buena idea mencionárselo a Siwon. Si iba a peor, decidió, hablaría con Changmin y Luhan.

>>>♥<<<

Jeong Luhan no podía creer dónde estaba, o lo que estaba haciendo. Si alguien hubiera venido a él un año antes y dicho: “Oye, el año que viene estarás en  Rumania con la manada Coreana haciendo senderismo a través del bosque en busca de una hada”, le habría dicho que dejara de esnifar aquellos bolígrafos permanentes. Pero aquí estaba, en Rumania, haciendo senderismo en el frío glacial buscando un hada. Había sabido que las Fae existían en el pasado. A Luhan le gustaba conservar al menos un poco de su historia y la historia de otros seres sobrenaturales. Sin embargo, no había sido tan diligente en los últimos años y no sabía que las Fae eran aún una parte de este mundo. Era increíble.

No había duda de que lamentaba lo que le había hecho a Junsu, pero al mismo tiempo estaba tan contento de que estuviera aquí, capaz de ayudar a su propia especie.

>>>♥<<<

Changmin estaba intentando concentrarse en dónde plantaba su pie en la nieve para evitar tropezar, pero su mente continuaba preguntándose por el lobo demasiado-caliente-para-su-propio-bien caminando detrás de él. No entendía el dolor en su interior cuando lo miraba. Lo que podía entender era su atracción por él: era jodidamente lamible. Changmin sonrió ante las palabras que había escuchado a Jae usar tantas veces antes. Jae, ahí es donde su mente debería estar. Y lo estaba, pero también estaba en Hayami.

«¿Ves, Jae? Te necesito», pensó Changmin. «Tú me dirías que me recompusiera, y si ocurre que soy manoseado en el proceso, entonces qué suerte la mía». Changmin dejó salir una carcajada ante eso. Era exactamente lo que diría Jae. Changmin echó los hombros hacia atrás y se irguió un poco más. Lo que sea que estuviera pasando o no entre él y Hayami aún estaría ahí una vez que Jae estuviera a salvo en casa. Siwon lo había enviado para encontrar respuestas acerca de cómo ayudar a Jae. Lo había apartado a un lado antes de que se fueran y le había explicado todo acerca de Jae y Taemin y su compañero. Él sentía firmemente que Perizada tendría respuestas y sería capaz de ayudarles. La respuesta de él fue:

¿Y si no las tiene?

Siwon había fruncido el ceño ante su pregunta, luego una traviesa sonrisa se había dibujado en su atractivo rostro mientras le decía:

Si te hace pasar un mal rato, lo cual tienes que esperar, simplemente pregúntale si podría por favor al menos asegurarse de que el polvo de hadas golpee sus traseros, junto con la puerta, cuando salgan.

¿Cómo te va por ahí, ojos marrones? —Changmin fue sacado de sus pensamientos por el sonido de la profunda y juguetona voz detrás de él.

Luhan había parado unos metros más adelante y estaba tomando un trago de agua. Changmin se dio la vuelta para mirar a Hayami. Deseó poder decir que su corazón no tartamudeó cuando él sonrió y le guiñó un ojo, pero sería un mentiroso. Changmin era muchas cosas: cobarde, tímido, torpe, pero no un mentiroso. Así que, sí, su corazón tartamudeó y sus palmas estaban tan sudorosas como un cerdo relleno.

Estoy bien. Bueno, en realidad sólo estoy intentando con mucho esfuerzo no caerme de culo. —Changmin se puso una mano sobre la boca justo cuando la palabra “culo” se le escapó. Sabía que su cara se estaba volviendo rojo brillante por el calor ardiendo en él—o, eh, Jae me ha contagiado. Bueno, esa es la excusa que estoy usando de todos modos.

Hayami soltó una risa.

Bueno, no intentes evitar caerte sobre ese precioso trasero por mí. Haré mi misión asegurarme de que sea yo donde aterrizas. —La sonrisa de Hayami era preciosa y tan enorme que un hoyuelo apareció en su mejilla derecha. Changmin tuvo que reírse ante su coqueteo y arrogancia.

¿Funciona esa línea con todos los chicos? —bromeó él en respuesta mientras se daba la vuelta para continuar siguiendo a Luhan ahora moviéndose.

No lo sé, no me importa. Sólo hay una chico con el que me importa que funcione. —La cabeza de Changmin se giró con voluntad propia ante el sonido de la voz de Hayami. Toda la picardía se había ido, la arrogante sonrisa sólo un recuerdo. Sus ojos se posaron en un dominante Canis lupis que había encontrado su presa. La respiración de Changmin se aceleró como si se diera cuenta de lo serio que estaba. Hayami lo empujó amablemente hacia delante pero no dijo nada más.

>>>♥<<<

Hayami vio cómo Changmin se daba la vuelta en la dirección en la que estaban yendo. Sus palabras obviamente habían dado en el blanco. No había tenido la intención de asustarlo pero su lobo estaba empujándolo a dejar perfectamente claro que estaba reclamándolo. Hayami estaba de acuerdo con su lobo, pero no entendía cómo era posible cuando Changmin era cien por ciento humano.

Lo observó voltear sus rizos castaños por encima de su hombro mientras sus ojos vagaban por el paisaje de aquella tierra, las preguntas llenándolos. Él sonrió cuando un conejo se escabulló a través de su camino, luego jadeó cuando un halcón agarró a la criatura con sus garras, precipitándose hacia arriba en el frío aire quebradizo. Y cuando Shim Changmin se dio la vuelta para mirarlo con ojos brillantes, la tristeza de ver a un pequeño inocente tomado en el círculo de la vida, supo que podría derribar montañas para quitar esa tristeza de él. Humano o no, Shim Changmin era suyo.



>>>♥<<<


2 Días Después del Incendio.

Era media tarde cuando finalmente llegaron de vuelta a la mansión. Junsu se estiró mientras salía del Hummer. A pesar de que estaba rígido —y hambriento— por el viaje, estaba ansioso por empezar a indagar a través del pasado de los Canis lupis para descubrir una manera de romper la maldición sobre Yunho y detener a la bruja.

Bueno, Leeteuk —dijo Junsu, alzando una ceja hacia él— guía el camino a los archivos.

Yoochun tomó la mano de Junsu, llevándolo con él mientras caminaban dentro de la mansión. Key los siguió silenciosamente, aún cansado por el viaje. Atravesaron el largo pasillo donde se encontraba la oficina de Siwon. Cuando llegaron al final del corredor, Yoochun abrió la última puerta de la izquierda.

Siempre me pregunté qué había aquí —murmuró Junsu mientras miraba a Leeteuk poner un código en un teclado numérico localizado sobre la pared justo dentro de la habitación, el cual terminó siendo un armario… ¿o no lo era?

Liiiiiindo. —Junsu sonrió— No me dijeron que este lugar tenía pasadizos secretos.

Leeteuk se encogió de hombros.

No preguntaste —respondió secamente. Después de poner el código, Junsu observó lo que parecía ser una pared sólida en la parte de atrás del armario deslizarse a la derecha, dejando una abertura que revelaba una escalera de piedra descendente.

Eso es bastante retorcido. ¿Tú sabías sobre esto? —preguntó Junsu a Key.

Junsu, tengo veintisiete años, sin pareja y a pesar de que soy un dominante, no me dicen nada aquí. —Key le guiñó un ojo— Así que no. No sabía sobre esto.

Está bien, entonces. Bien, aprendemos algo nuevo cada día. —Junsu divagaba mientras seguía a Yoochun a través de la entrada.

Tengo el presentimiento de que vamos a aprender algo más que eso hoy —dijo Yoochun mientras volteaba a ver a Leeteuk— Deberías guiar el camino. Has estado aquí antes, ¿no?

Leeteuk asintió.

Sí. Es fácil perderse una vez que sales del salón principal, así que permanezcan juntos.

El grupo descendió los escalones de piedra, los cuales bajaban en espiral. Junsu notó los candelabros que iluminaban el camino. El pasadizo era estrecho, con paredes de piedra siguiendo el espiral de la escalera. El aire era rancio y frío, e incluso con las luces, parecía hacerse más tenue entre más lejos iban.

Después de llegar al final de la escalera, Leeteuk se detuvo en el centro de una habitación larga y rectangular. A lo largo de la pared izquierda había un escritorio grande. Había pantallas de computadoras, Junsu contó seis en total en la pared enfrente del escritorio, y papeles se dispersaban sobre la parte superior del mismo cubriendo la mitad de un teclado y un mouse. En todas las paredes del cuarto había estantes llenos con libros y objetos. Había un sofá de felpa y dos sillones mullidos directamente a la izquierda de la escalera. Al otro lado de la habitación, en la pared más lejana, había varios arcos que conducían a la oscuridad. Frente a los arcos había mesas redondas con sillas alrededor de ellas. Junsu podía notar que había algo sobre las mesas, pero estaba muy lejos para ver exactamente lo que era. Pasando a Yoochun y Leeteuk, Junsu se movió cerca de las mesas y descubrió lo que había sobre ellas, o en ellas mejor dicho.

Tallado en la parte superior de las mesas había escenas. Cada mesa tenía un diferente tallado. La primera era una manada de lobos corriendo juntos a través del bosque. El artesano le había puesto tantos detalles que pudo ver donde los lobos pateaban la nieve detrás de ellos. Sus rostros se veían iluminados y sin preocupaciones, sin bordes o sombras en sus ojos.

La siguiente mesa era de una escena de dos lobos gigantes encerrados en una batalla. Alrededor de ellos había otros lobos viéndolos, esperando. Los dos lobos peleando entre sí, estaban en sus patas traseras, cada uno tratando de destrozar a su enemigo. Ambos conjuntos de dientes estaban desnudos y saliva goteaba de sus hocicos. Junsu se estremeció mientras estudiaba la mesa; casi pudo sentir la tensión que los lobos debieron haber sentido.

La tercera y última mesa tenía una escena mucho más calmada. Era tan conmovedor que Junsu pudo sentir un tirón dentro de él, el anhelo de lo que vio. Un enorme lobo se sentaba alto y orgulloso. Su cabeza estaba hacia abajo, viendo al lobo más pequeño presionado contra él, y presionado contra él, había un pequeño cachorro. La loba miraba al orgulloso macho con asombro, mientras que la mirada en los ojos del macho sostenía intensas emociones por los dos a su cuidado.

Junsu estaba maravillado por el detalle que mostraba y la cantidad de emoción de alguna manera tallada en la cara de esos lobos.

Es quienes somos, quienes hemos sido, y quienes queremos y necesitamos ser. —Junsu escuchó una voz viniendo de los oscuros arcos. Se volteó para ver a Leeteuk, Yoochun y Key. Yoochun caminó a donde estaba él y lo puso detrás de él.

¿Así que este es el compañero del príncipe? —dijo la voz.

Deja de ser dramático y sal, JangWoo. —Leeteuk puso sus ojos en blanco.

Leeteuk, ¿acabas de poner los ojos? —preguntó la voz, ahora nombrada JangWoo.

He estado con los jóvenes americanos por meses. He aprendido mucho más que sólo poner los ojos en blanco.

Junsu y Key rompieron en carcajadas, pero pararon abruptamente cuando una figura emergió del arco de en medio. Junsu intentó caminar alrededor de Yoochun para ver mejor al hombre, pero Yoochun seguía moviéndose con él.

«Yoochun». La voz de Junsu fue severa cuando habló con él a través de su vínculo.

«No te muevas de mi lado», le dijo mientras cedía y le permitía moverse al lado de él.

Junsu ladeó la cabeza a un lado mientras miraba al nuevo macho.

¿No eres viejo y empolvado? —El hombre que tenía delante de él parecía estar en sus treinta, alto, cabello negro y ondulado. «Tiene absolutamente el estilo de Aragon», pensó Junsu, comparando a JangWoo con el personaje de El Señor de los Anillos.

«¿Eso que escucho en tu voz es admiración, Junsu?» Yoochun obviamente había escuchado sus pensamientos.

«Relájate, hombre lobo. Solo tengo ojos para ti».

«Bien, odiaría tener que encontrar un nuevo historiador». La voz de Yoochun era un gruñido en su mente.

«Nos estamos sintiendo posesivos hoy, ¿verdad?», lo molestó.

«Compórtate».

«Últimamente escucho mucho de eso de ti». Junsu le dio una imagen mental de él sonriéndole amablemente a JangWoo.

De acuerdo, se dio cuenta que quizás esa no era una de sus más grandes ideas, una vez que Yoochun lo jaló detrás de él de nuevo. Dejó escapar un fuerte resoplido pero se conformó con pararse de puntillas y mirar sobre su hombro.

JangWoo usaba una desteñida camiseta gris. Impreso en el centro de la camiseta estaba escrito: “Solo puedo ser amable con una persona al día. Hoy no es tu día… probablemente mañana tampoco lo sea”. Tenía pantalón vaquero azules deslavados y deportivos Converse negros. «¿Este era el historiador de la manada? ¿En serio?», pensó Junsu.

JangWoo río al ver la expresión escéptica de Junsu.

¿Viejo y empolvado? Eso depende sobre quién preguntes —bromeó. Miró de nuevo a Leeteuk y sonrió— Ha pasado tiempo, viejo amigo.

Leeteuk asintió.

Han sido unos meses ocupados, pero estoy seguro que lo sabes.

Saber es mi trabajo, así que por favor, siéntete libre de no compartirlo. —JangWoo sacó una silla de la primera mesa redonda y se sentó frente al grupo.

Linda camisa —dijo Key. Sus ojos se dispararon hacia Junsu, quien le dio unos pulgares en alto.

Mi hermana. —JangWoo sonrió— Me manda estas camisetas con diferentes frases sobre ellas. Dice que es para ayudarme a mantener mi sentido del humor. Aparentemente estoy rodeado de hechos aburridos.

¿A qué te referías hace rato? —preguntó Junsu de detrás de Yoochun, quien aún no lo dejaba pasar.

Estabas mirando las mesas; sentiste el tirón de ellas.

Junsu asintió pero no habló. Sintió a Yoochun enrollando un brazo alrededor de su cintura. Lo jaló, firmemente contra él.

Estas mesas fueron talladas por las Fae. Ahora bien, las Fae nunca hacen algo sin razón. —JangWoo hizo señas hacia la primera mesa— Está imagen es de lo que hemos sido creados para ser. Estoy seguro que conoces la leyenda detrás del Canis lupis, ¿cómo la Diosa de la luna nos creó?

Junsu asintió.

Sí. Ella nos creó para salvar las especies de los Lobos TVXQ.

Es más profundo que eso. —JangWoo se puso de pie para mirar el tallado, sus dedos trazaban los lobos mientras hablaba— La gran Luna vio que el hombre se estaba dividiendo a mismo. La familia ya no era importante. Vio las guerras, el odio, y a los niños afectados por eso.

Junsu se alejó de Yoochun y sacó una silla de la tercera mesa. Los otros siguieron su ejemplo. Mientras continuaban escuchando el conocimiento del historiador de la manada, era obvio para Junsu por qué JangWoo era el historiador. Era tan apasionado con su historia.

Entonces miró hacia los lobos, quienes estaban disminuyendo en número, y de regreso a los humanos, quienes ya no se preocupaban por ellos, y combinó sus espíritus. Tomó la naturaleza leal, protectora y posesiva de los lobos y tomó la inteligencia, emociones y amor de los humanos y las puso juntas. Ella nos diseñó para ser una manada.
»El Canis lupis, ambos, lobo y hombre, fueron destinados a ser una familia una con la otra. Ganamos fuerza a través de nuestro vínculo con cada uno de nosotros. La primera mesa es lo que la Diosa quería para nosotros. La segunda mesa es quienes somos hoy. Hemos atacado a nuestro semejante, dividido nuestra especie, incluso tenido una guerra civil. Sufrimos por ir contra nuestra verdadera naturaleza. —JangWoo sacudió la cabeza— En cualquier caso, la tercera mesa es quien necesitamos ser. No podemos sobrevivir sin los niños. Pero la Diosa de la luna ha visto sufrir a los niños humanos por las guerras y divisiones en su especie. Su manera de asegurarse que entendemos qué precioso es un niño es dándonos unos pocos.
»Ella nunca quiso que olvidáramos la bendición de un niño y la esperanza que traen. La historia revela nuestro camino, estamos en las circunstancias en las que estamos hoy por las acciones que, como especie colectiva, hemos hecho. Esta tercera mesa empuja a nuestro lobo. El lobo en nosotros anhela por una manada, por una familia, por el tacto, por los niños. Estas mesas creadas por las Fae fueron diseñadas para sacar al lobo de uno cerca de la superficie, para abrir nuestros ojos humanos, para poder ver lo que se necesita hacer.

Todos miraron en silencio cuando JangWoo terminó de hablar. Finalmente, Leeteuk habló.

Gracias por eso, JangWoo. Es importante que recordemos por qué estamos aquí.

Bueno, estoy seguro que no vinieron por una lección de historia sobre la Diosa de la luna y nuestra especie. ¿En qué puedo ayudarlos?

¿No te contactó Siwon? —pregunto Yoochun, sus cejas fruncidas.

No, no he escuchado nada de nuestro Alfa. ― Leeteuk miró cauteloso.

Siwon me dijo que llamaría a JangWoo para decirle que veníamos. ― Yoochun encontró los ojos de JangWoo.

¿Ha venido alguien a verte hoy?

JangWoo lo pensó por unos minutos, tratando de recordar, pero su mente estaba nublada y sus pensamientos fuera de su alcance.

No lo recuerdo. Ni siquiera recuerdo qué he hecho hoy. —Justo cuando las palabras salieron de su boca, Yoochun, Leeteuk y Key salieron disparados hacia los arcos.

Key jadeó.

¿Eso es humo?

Luego, todos estuvieron de pie y corriendo en dirección al olor ahumado.

A unos quince metros del pasillo, el humo comenzó a rodearlos.

JangWoo, ve a buscar unas mantas, ¡y apúrate! —gritó Yoochun.

JangWoo salió en dirección a su cuarto. Un minuto después, llegó a la gran sala de archivos y vio montones de pergaminos, papel y libros sobre el piso, las llamas estaban llegando hacia ellos. Le tiró una manta a Yoochun, una a Leeteuk y tomó la que quedaba. Cuando cubrió el fuego con él, pisoteó tan fuerte como pudo, Leeteuk y Yoochun siguieron su ejemplo.

Junsu y Key miraban con horror.

Esto no es para nada bueno —murmuró Junsu.

Creo que es lo que ustedes los americanos llaman un eufemismo —dijo Key incapaz de despegar sus ojos de la escena frente a ellos.

Del siglo —añadió Junsu. Comenzó a toser por el humo, el cual llenó el cuarto mientras el fuego se extinguía.

Yoochun se inclinó contra los estantes detrás de él. Su respiración era laboriosa y su pecho se apretaba mientras trataba de succionar el poco aire limpio que quedaba en la habitación.

Esto tiene que ser obra de esa bruja. ― La cabeza de JangWoo se alzó de golpe.

¿Bruja? —preguntó con horror.

>>>♥<<<

A última hora en la noche ese día, los dos grupos habían decidido ponerse en camino, Heechul se paró en la ventana del dormitorio que él y Siwon compartían en la taberna. Sus ojos observaban la noche. El cielo estaba despejado y las estrellas salpicaban la oscuridad. La luna era creciente, lo que despedía un resplandor misterioso. No sabía por qué, pero se sentía como si pudiera empujar a su manada solo por voluntad, y que si quitaba los ojos de esta vista por un segundo, todo fallaría. Escuchó la puerta detrás de él abrirse y cerrarse suavemente. Fuertes brazos se envolvieron alrededor de su cintura desde atrás y dejó caer y reposar su cabeza en el fuerte pecho de su compañero.

Siento tu resolución, Naui. —El aliento de Siwon susurró suavemente sobre su cabello.

Siento que si me alejo, o dejo de pensar sobre ellos por incluso solo un pequeño segundo, sus pies vacilaran y su coraje fallará. ¿Qué tan vanidoso es eso?

Siwon se rió entre dientes.

Mi amor, eres un Alfa. Está en tu naturaleza controlar y proteger. Date un descanso. Hemos mandando a los que más aman a Jae y Yunho. Ellos continuarán hasta que todo esté bien de nuevo. No dudo de ellos.

Heechul sabía que él tenía razón, pero no hacía menos difícil sentarse y esperar escuchar de ellos. Para escuchar si estaban a salvo y cerca de encontrar a Jae y restaurar a Yunho.

Necesitas descansar. Ambos lo necesitamos. Ven. —Siwon lo jaló hacia su cama y se acostó al lado de él— Duerme, Luna. Confía en que tu manada es fuerte.

Heechul se sumió en el sonido de la gentil voz de su compañero cantando suavemente. Sonrió a sí mismo ante el pensamiento acerca de cómo los otros machos lo molestarían si supieran que le cantaba a su compañero para dormir.

>>>♥<<<

Changmin y Luhan reunieron ramitas mientras Yunho y Hayami rompieron ramas de árboles para construir una fogata. Changmin no podía recordar un momento en el que tuviese tanto frío. Una vez que el fuego estuvo ardiendo, los cuatro se sentaron juntos tan cerca cómo pudieron. Cada uno estaba envuelto en capas y capas de ropa, gorros, bufandas, guantes y mantas. Yunho pasó la cecina y el pan que el dueño de la taberna les había proporcionado. Proteína, carbohidratos y agua. Sorprendentemente, Changmin sabía por su clase de salud de décimo grado que el cuerpo podría sostenerse incluso de menos si lo necesitaba.

¿Cómo vamos a saber que llegamos a donde se supone que debemos llegar? —preguntó Luhan a nadie en particular.

Siwon dijo que ella nos encontraría. Que sólo necesitábamos llegar lejos en las montañas y eventualmente Perizada se daría a conocer. —Changmin miró a cada uno de sus amigos, sus compañeros de manada, tan raro como sonara, se sentía bien.

Todos permanecieron callados mientras terminaban su comida y bebida, todos mirando las rojas, amarillas y naranjas flamas que danzaban enfrente de ellos. El silencio fue roto cuando Changmin se volteó hacia Yunho.

Sé que es una cosa privada entre compañeros, pero cómo le está yendo a Jae. ¿Se ha comunicado contigo?

Los tres vieron como Yunho se tensaba visiblemente. Su cara hizo una mueca, casi como si le doliera.

Yo… —comenzó Yunho, pero se detuvo. Agachó la cabeza brevemente para quitarse la sensación de que algo estaba mal— No puedo sentirlo. Cuando trato de contactarlo, es como si el vínculo que nos une hubiera sido cortado.

Changmin sacudió su cabeza.

¿Por qué no habías dicho nada?

 Yunho gruñó por la acusación en la voz del sanador.

Y exactamente, ¿qué es lo que hubieras hecho?

Hayami dejó salir un bajo gruñido y se movió para sentarse entre Yunho y Changmin.

Sé que eres mi Beta, pero no le hablarás a él de esa manera.

Hayami —la voz de Changmin fue suave— está lastimado, no entiende. No seas tan duro con él.

Hayami se volteó y miró los ojos color miel de Changmin, los cuales estaban llenos de dulzura y entendimiento.

Entiendo que está lastimado. Pero tú eres un sanador y eres mío y te tengo que proteger.

Changmin tomó un fuerte respiro.

¿Tuyo?

Hayami cerró sus ojos por un momento, maldiciéndose por el desliz.

Eres de la manada. Pero yo estoy aquí, soy de la manada, y te protegeré incluso de uno de los nuestros.

Changmin puso su mano suavemente sobre su hombro.

Gracias. Yunho no va a lastimarme. Necesito ver si puedo averiguar lo que está pasando.

Hayami asintió pero se quedó dónde estaba.

Ahm, Hayami. — Changmin alzó sus cejas al guapísimo, pero aun así exasperante, lobo frente a él — Eso significa que necesito estar cerca de Yunho. ― Cuando Hayami no se movió, Changmin se puso de pie con un resoplido y murmuró: —Jae tenía razón. Malditas bolas de pelos tercos y mandones.

Luhan río mientras los ojos de Hayami se abrían de par en par ante el amable sanador mostrando las garras.

Changmin tomó asiento al lado de Yunho.

¿Puedo tocarte?

Un gruñido bajo provino del otro lado del fuego.

Hayami —le advirtió Luhan. Hayami no lo tomó en cuenta, pero paró de gruñir.

 Yunho asintió a Changmin para hacerle saber que estaba bien. Changmin puso su mano sobre su pecho y cerró sus ojos. Se sintió tan ignorante cuando intentó usar este tan mencionado “don”. No entendía cómo funcionaba. Todo lo que podía hacer era abrir su mente y dejar que cualquier magia que pareciera estar dentro de él hiciera su trabajo.

Changmin sintió energía flotando dentro de Yunho mientras buscaba el vínculo del que él había hablado. Se sintió como un intruso sabiendo que el vínculo entre compañeros, de lo que Junsu había explicado, era muy íntimo. Su mente buscó a través de él, encontrando la conexión que el Beta tenía con su Alfa y con la manada, una intricada red. Finalmente se encontró con lo que parecía un cordón de oro, fuerte y brillante. Siguiendo su camino, casi se retiró cuando vio en extremo cortado. Parecía roído, como una cuerda desgastada en las puntas. Changmin notó que la punta y varios centímetros del cordón ya no eran doradas, sino oscuras, muertas.

Se aproximó a las partes oscuras. Tan pronto como su conciencia lo tocó, se sintió siendo expulsado de la mente de Yunho y volver al presente.

Changmin estaba sin aliento. Abrió sus ojos para ver a la cara de Yunho cubierta en sudor, su boca apretada en dolor, y la agonía que era tan evidente en el interior, sangraba por sus brillantes ojos ámbar.

Changmin —habló Hayami con un bajo gruñido— aléjate de él.

Changmin lo ignoró y en lugar de alejarse, se movió alrededor hasta que estuvo arrodillada justo enfrente de Yunho.

Tu vínculo con él ha sido cortado. Está muriendo.

>>>♥<<<

 Yunho cerró sus ojos, apretándolos fuerte. Tal vez si los cerraba lo suficiente fuerte y por el suficiente tiempo, las palabras del sanador no serían ciertas. Él no recordaba a Jaejoong; no recordaba su esencia, su toque, o la hermosa cara que había visto en las fotos del celular de Changmin. Pero quería hacerlo. Quería tener la oportunidad de conocerlo de nuevo, de amarlo de nuevo.

¿Cómo? —Su voz sonó ronca.

No estoy muy seguro, pero se siente como magia. Sin embargo, no es oscura. No es como la magia de la bruja.

¿Qué te dijo Jae cuando fuiste capaz de hablar con él? —preguntó Luhan.

 Yunho se dio cuenta entonces que Luhan no sabía nada de Taemin teniendo a Jaejoong. Lo miró, recordando la noche en su oficina con Siwon y Heechul. Sentados ahí, escuchándolo leer acerca de un latente llamado Taemin. No recordaba por qué él le estaba diciendo acerca del latente, pero sintió que debía ser importante.

Me dijo que Taemin y su compañero Minho lo rescataron de la caverna.
Luhan saltó a sus pies.

¿¡Qué!? ¿Cómo es eso posible?

Tú mismo dijiste, cuando estabas leyendo la historia sobre ellos, que sus cuerpos nunca fueron encontrados. Aparentemente, vivieron.

Luhan continuó mirando a Yunho como si estuviera hablando en un idioma extranjero y estuviese buscando desesperadamente la traducción en su mente.

¿Dijo dónde están o dónde han estado por los últimos tres siglos? —Su tono era de alguna manera sarcástico.

No me diría nada sobre ellos. Los estaba protegiendo.

¿De qué? —preguntó Changmin antes de que Luhan terminara de decir las palabras.

No lo sé —gruñó Yunho— Se rehúsa a decirme. Se niega a someterse a su compañero.

Hayami trató de disimular la risa que forzó su camino en su pecho con una tos, pero no tuvo éxito. Yunho lo miró.

¿De qué te ríes, cachorrito?

Hayami mostró esa sonrisa detiene-corazones y guiñó un ojo a Changmin mientras le contestaba a Yunho.

Estos chicos americanos no se someten, Beta. Tal vez quieras acostumbrarte a la idea.

Entonces, ¿cómo vamos a protegerlos? ¿Cómo vamos a evitar que hagan cosas estúpidas?

Bueno, tú estás emparejado con Jae. —Changmin se río entre dientes— Su segundo nombre cambia día a día. Los básicos son “ninfómano”, “impetuoso”, “muy inteligente para su propio bien”, “sabelotodo” y el más conocido “estúpido”. Tienes un trabajo muy difícil por delante.

Entonces, ¿no piensas que sea magia negra? —preguntó Yunho, cambiando de tema.

No, definitivamente no. Pero sí es magia. — Changmin miró a Luhan — ¿Dijiste que este Taemin es un sanador? ¿Pudo haber hecho algún tipo de magia?

Honestamente, Changmin, no lo sé. No sé lo suficiente sobre sanadores y la magia que invocan. —Luhan pensó por un momento— Tal vez sea Fae. Si esta Perizada es lo que Siwon dice que es, tal vez conozca a Taemin, tal vez lo haya ayudado a hacer esto.

Changmin estaba de pie, paseándose. Hayami miraba cada uno de sus movimientos.

¿Por qué Taemin rompería el vínculo si él es uno de los buenos? —Changmin estaba pensando en voz alta, tratando de razonar todas las posibilidades.

Tal vez han estado escondiéndose —sugirió Hayami.

Eso explicaría por qué nadie ha escuchado de ellos en siglos —concordó Luhan.

Changmin continuó caminando alrededor del fuego, su mente dando vueltas.

Si estuvieran en la clandestinidad, tal vez se preocuparían sobre Jae siendo capaz de decirle a Yunho cosas que tal vez revelara su paradero. —Miró a Luhan, quien asintió en acuerdo.

Seguramente él entendería que hay consecuencias por romper el vínculo de verdaderos compañeros. —Luhan sacudió su cabeza con incredulidad— A menos que piense que no los afectará mucho, o incluso en absoluto, ya que no han completado los Ritos de Sangre.

Cualquiera que sea la razón, tenemos que encontrar a este personaje Peri —resopló Changmin— Si lo que sentí que estaba pasando con Yunho, está pasando con Jae, ambos están en problemas.

La cabeza de Yunho se disparó en alto.

¿Jae podría estar sintiendo esto?

Lo más probable es que está soportando lo mismo. Tu vínculo con Jae es inusual, por lo que sé, para un par que no está emparejado. Ambos son tan intensos. Tenemos que tratar de movernos rápido mañana.

Cada uno de ellos puso sus mantas cerca del fuego. Hayami y Yunho acordaron tomar turnos para mantener vigilado el lugar. Yunho tomó el primero. Sentía demasiado dolor para poder dormir. Y sabiendo que posiblemente Jaejoong estaba sintiendo esto también, se le hizo un nudo en su estómago. Su lobo estaba inquieto y enojado. Yunho seguía teniendo la sensación que su lobo recordaba a su compañero. Si su lobo lo hacía, ¿por qué él no? Cualquiera que fuera la razón, hasta que estuviera reunido con Jaejoong, su lobo era peligroso. Él era peligroso.

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Continuara \\(^_^)//...
Niñ@s un comentario no les cuesta nada….
Gracias…

6 comentarios :

  1. esto se pone muy bueno espero que pronto encuentren a Jae y a esa hada para que revierta el hechizo pues no quiero que sufran y menos que muera el vinculo entre ellos quiero que estén juntos cada uno con su pareja y siendo felices con sus bebes lobitos
    Gracias

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  2. Hayami y Changmin, si ha de haber algo de lobo en él y además sanador. Ojalá ya se les aparezca la ada para que ayude al YunJae y además eliminen a la bruja y Kangta.

    Gracias!!!

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  3. Si ojala que aparesca la hada para que pueda romper el hechizo que puso entre Yunho y Jaejoong ya que ellos estan sufriendo y que es lo que esta pasando en el palacio de la manada ya que los papeles del historiador se estan quemando y no quiere que sepan nada de la bruja gracias Poleth esperare con ansias el siguiente capitulo

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  4. Ameeee y super ameee el Hayamin de este Cap a mas no poder OMG Hayami le dejó ir un "eres mio" que si literal me hizo gritar de emoción, no entiendo como es que ChanGMin lo tomó como si le diera el buenos días una mañana cualquiera... ok estoy feliz por ellos pero super preocupada por lo que Yoochun y su grupo encontraron. Sera se la bruja hechizó a JangWoo??? AY NOOOO¡¡¡ Bueno pero el equipo ChangMin ya tiene algo en mente y eso es bueno. Gracias infinitas por el Cap¡¡ Cuando el lafommalo no hace ruido... algo feo va a pasar😢😢😢verdad???

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  5. Hayami ya le dijo a Changmin que el es suyo y lo defendera de todo.
    Me gusto lo que estaba representado en la tercera mesa es muy lindo,sera que la bruja hechizo a JangWoo???
    Chamgmin ya sabe porque no se rompio el vinculo de Yunho y Jae
    Yunho esta sufriendo porque no se puede comunicar con Jae y mas al saber que esta sufriendo

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  6. Muchas gracias por un capítulo más.

    Ya quiero saber que es lo que va a pasar, Hayami todo confiado le dice "eres mio" que lindo lo amé en esta parte. Pobre Yunho y JaeJoong que están sufriendo, Ojalá no tarden en encontrar al hada.

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