miércoles, 6 de junio de 2012

Después de todo


 Autor: Jung Kim Senssi
Extesion: One-shot
Advertencia: Trio
Couple: YunJaeMin

Tenía tantas ganas de sentir aquellas manos que lo recorrían sin parar. Más de un año, un maldito año reprimiéndose las ganas de sentir, de amar. Sus propias manos no podían darle el placer que tanto anhelaba y es que para eso, su cuerpo buscaba otras manos y en ese momento ya no tenía que esperar ni suplicar más.

Unos labios sonrosados tomaron los suyos en un beso posesivo, unas manos traviesas jugaban con sus pezones y él... él sólo podía gemir y estremecerse ante las sensaciones que le recorrían completo, ese vacío en que se instalaba en su estómago ante la emoción de lo que vendría después.

¿Y qué venía? Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando esos labios que antes estaban en los suyos se deslizaron rápidamente por su piel pálida y suave hasta uno de los pezones que ya se notaban duros por el masaje de aquellos dedos traviesos.

Y mientras esa lengua se ocupaba de eso, otros labios se dedicaron a recorrer su cuello lentamente hasta llegar a su oreja, la cual mordió ligeramente antes de murmurar.

- Ya veo que sí nos extrañaste, Boo... No te preocupes, lo vamos a recompensar.- y el aliento del moreno en su piel lo estremeció, junto con esa promesa de placer y amor que no se tardó en confirmar.
- No volveremos a dejarte ir, Jae...- los labios del menor se movían contra la tetilla, rozándola.- nunca volverás a irte.

 ¿Fue una promesa o una amenaza? No lo sabía, estaba demasiado excitado para poder pensar en aquel momento.

No supo en qué momento había quedado desnudo hasta que la mano de su Dongseng tomó su miembro comenzando a masturbarlo y los labios de Yunho se hallaban en los suyos acallando cualquier gemido de placer que pudiera salir de ellos...

- Silencio o despertarás a los vecinos...- le dijo en tono de broma.
  
¿De cuándo acá le molestaba que gimiera o gritara por el placer que le daban? Al contrario, a Yunho siempre le había excitado escucharlo gemir de placer.

 Iba a protestar cuando sintió la deliciosa lengua de Changmin rozando la punta de su miembro excitado, causando que gimiera de placer.
  
- Aún no, Minnie...- le regañó el moreno con una sonrisa en los labios.- faltamos nosotros.

Se señaló pues aun tenía la mayoría de su ropa puesta, la camisa abierta y el pantalón  desarreglado, Changmin con el cabello revuelto y la camisa fuera del pantalón era quien se encontraba con el mejor semblante, cosa que Yunho se encargaría de corregir.

Dejó a un lado a Jaejoong para dedicarse a devorar los dulces y tiernos labios de Changmin, quien no se negó a esa boca demandante a la cual ya se había acostumbrado y que no cambiaría por nada del mundo. A ninguno de sus dos Hyungs favoritos cambiaría por nada del mundo.

El mayor los miraba frustrado, enojado por verse a un lado, pero lo que vio a continuación lo dejó sin aliento. El menor perdió rápidamente su camisa, ante las caricias rápidas que Yunho depositaba en él. El chico empezó a gemir sonoramente, haciendo que la excitación de Jaejoong no decayera, pues el pelicastaño deseaba mil veces ser quien estuviera en el lugar de su Dongseng recibiendo aquellas caricias, quien sintiera aquellos labios recorrer su piel como en ese momento Yunho lo estaba haciendo con su pequeño Minnie.

El mayor llevó una de sus manos hasta su entrepierna, empezando a acariciarse él mismo ante el abandono de sus... amantes, mirando como Yunho chupaba y mordía los pezones duros del menor, y después cómo sus labios se deslizaban por sus pectorales hasta la cintura del pantalón, el cual no tardó mucho tiempo sobre aquel delgado cuerpo, pues fue retirado con todo y ropa interior.

Changmin sonrió ante la mirada lasciva de su Hyung y sin esperar ni una orden o algo parecido, el joven pelinegro abrió las piernas dejándole ver a Yunho su intimidad completamente. El moreno sonrió para sí al ver la entrega del menor sin ningún tipo de reparo y con cuidado comenzó a introducir su dedo índice en aquel delicado interior que conocía tan bien, buscando el punto exacto en el cual su niño se ponía a gemir a punto del orgasmo.

 Al ver aquella escena, Jaejoong no pudo evitar ser él quien emita aquel gemido de excitación, mezclado con algo de frustración, y que un poco de celos lo invadiese, pues había visto que Changmin ya ni siquiera necesitaba lubricación para recibir ese tipo de caricias por parte de Yunho. El mayor se levantó para acercarse a ellos y suavemente abrazar a Yunho para desabrochar rápidamente el pantalón de su moreno compañero y acariciar el miembro excitado por dentro de la ropa interior.
  
- No se olviden de mí.- se quejó con una sonrisa cuando Yunho empezó a gemir sonoramente al sentir sus cálidos dedos deslizarse por toda su extensión, a la vez que los labios del mayor, exploraban los suyos, que esa lengua juguetona se abría paso entre su cavidad, explorándolo. No se había dado cuenta de cuánto había extrañado su sabor hasta aquellos momentos.

 Changmin sonrió al ver a sus Hyungs así, no habían estado juntos desde antes de la maldita demanda y su propio cuerpo ya pedía el contacto con ambos, pero no pudo seguir pensando al sentir que su Hyung introducía un segundo y un tercer dedo al mismo tiempo, moviéndolos en forma circular, dilatándolo, preparándolo.
  
- Yunho… aaah… noo… espera.- gimió el menor ante aquella intromisión, pero el moreno siguió dándole aquel tormentoso trato y era que el más joven estaba a punto del orgasmo cuando los largos dedos de su Hyung tocaban ese punto que lo hacía ver las estrellas.

- Ya  estás listo Min…- dijo al tiempo que retiraba sus dedos de la estrecha cavidad que había estado dilatando y se separaba de Jaejoong.- para recibirlo.- y giró al pelicastaño para que quedara frente a él.- hazlo, amor… sé que tienes ganas de hacerlo tuyo.- le murmuró al oído para después morder su lóbulo y deslizar sus labios por su cuello.
- Hyung… Jae… Joong…- le llamó el menor entrecortadamente.
  
Y Jaejoong no pudo resistirse más ante la petición de su amante y el llamado de su Dongseng, se acomodó entre las piernas del más joven, mientras sentía las manos de Yunho recorrer su espalda hasta su entrada, sus dedos jugaban en su entrada, mientras lentamente entraba en el cuerpo de Changmin, quien lo recibió dando un sonoro gemido de satisfacción al sentirse unido completamente a su Hyung cuando este llegó hasta donde físicamente le era posible.
  
Jaejoong trataba de controlarse ante las sensaciones que lo recorrían al sentir las paredes de Changmin contraerse contra su miembro al acostumbrarse a su grosor,  y la lengua de Yunho al estimular lentamente su entrada, dejando un camino húmedo a su paso, hasta llegar a sus testículos. El mayor no pudo evitar gemir sonoramente, sobre todo cuando Changmin hizo un movimiento con el cual, no supo cómo, pero pudo sentir aún más de aquella deliciosa presión en su miembro.
  
- Minnie… no seas impaciente…- le regañó Yunho con una sonrisa.

- Entonces  ¿Por qué te tardas tanto?- fue Jaejoong quien se quejó en vez del pequeño quien sólo rió para luego besar su sus labios con pasión al mismo tiempo que Yunho entraba en él sin ninguna preparación previa.

Jaejoong gimió con fuerza, ante la mezcla de dolor y placer que sintió al recibir a Yunho en su cuerpo. Hacía tanto que no estaba con nadie y se había desacostumbrado a aquella incomodidad y al dolor del principio, pero sabía que pronto se acostumbraría, además él mismo estaba tan necesitado de sentirlos a ambos así… aunque Yunho se pasara de brusco como en aquella ocasión.

Min fue quien empezó el vaivén, y Yunho quien afianzó el ritmo con Jae, pues mientras entraba en él, Jae salía a su vez del cuerpo de Min y con el movimiento, recibía con fuerza el miembro de Yunho en su interior. A su vez, al recibirlo, Changmin apretaba más su interior, presionando deliciosamente su miembro.

- Más… más… Yunho… dale más… Jae… Ah…- pedía el menor bajo de ellos. El roce del torso de Jaejoong en su miembro y al sentirlo cada vez más profundo en él, estaban llevándolo al límite, sobre todo al ver el rostro de placer de su líder al entrar y salir de Jaejoong y como su Hyung disfrutaba del trato que ambos le estaban dando.

- Dios… Min…- gimió con fuerza al ver el rostro de excitación de su pequeño, disfrutando del miembro de Jaejoong en su interior.- Boo… estás… delicioso… tan… estrecho… como siempre... ahhh…- dijo moreno entrecortadamente sintiendo las estrechez de Jaejoong a su alrededor, esa presión que lo enloquecía y que tanto había anhelado.

- Ya… ya… Yunho… Min… ah…- gemía una y otra vez el pelicastaño, al borde la locura, el placer le inundaba cada poro de su piel, sentía esa deliciosa presión acumularse en su vientre cada vez más, cada vez que entraba más profundo en Min y le aprisionaba en sus paredes, cada vez que Yunho entraba en su interior, cada vez que tocaba en él ese punto que lo acercaba al paraíso. No podía, ni quería detenerse. Ese enorme placer que ambos les proporcionaban.

 Fue entonces que lo sintió, esa corriente eléctrica que le recorrió la espalda, que llegó a su miembro, nublando sus sentidos, haciendo que su cuerpo tiemble, llenando el interior de su pequeño con su caliente semilla.
  
- ¿Tan rápido, Hyung?- preguntó el menor con una sonrisa al ver su expresión de completo placer.

Lentamente, Yunho salió de su interior para que el mayor pudiera abandonar el cuerpo de Min, dejándose caer a su lado en la cama del moreno, que fue donde habían podido llegar. Su respiración aún era rápida, entrecortada, su corazón corría desbocado y por su cuerpo aún sentía los remanente de aquel magnifico orgasmo, como réplicas de un sismo a gran escala que acabara de ocurrir.

Yunho siguió acariciando a Changmin con pasión, para entrar en él y continuar lo que Jae había dejado inconcluso, entrando y saliendo de ese cuerpo que le pertenecía desde hace más de un año atrás, que se había acostumbrado a su ritmo y a quien había aprendido a amar tanto como a su JaeBoo .

 Changmin enredó las piernas alrededor de la cintura de su líder y se aferró a su cuello, a la vez que el moreno lo tomaba de las caderas, haciendo que el menor se sentara sobre él. Min empezó a moverse de arriba hacia abajo, a la vez que su Hyung entraba en su cuerpo profundamente. Yunho llevó su mano hacia el miembro de su pequeño, dándole doble placer. Sintiendo sobre ellos la mirada oscura, profunda de Jaejoong mientras continuaban con sus movimientos.

 - Jae…Ahh…- gimió Changmin, sintiendo el miembro de Yunho en su interior, pero sin dejar de sostenerle la mirada al pelicastaño que les observaba.- Yunho…- le llamó al sentir sus labios sobre una de sus tetillas.

- Minnie… Jae… ah…- les llama el moreno una y otra vez.

Una, dos embestidas más y Changmin terminó derramando su esencia en la mano de Yunho, quien no tardó mucho en hacer lo mismo en el interior de su pequeño niño, al sentir la presión de sus paredes en su miembro. Dejándose arrastrar por esa deliciosa sensación que le invadió, llenando por completo la cavidad de Min.

Se dejaron caer sobre el colchón, junto a Jae. Changmin buscó rápidamente la mano del mayor y entrelazó sus dedos, dedicándole una sonrisa cansada. Mientras, Yunho lo jalaba hacia él para que los tres compartieran un beso que los dejaba sin aliento, sintiendo sus lenguas y labios danzar a un ritmo que habían creído olvidado, pero que habían extrañado a más no poder durante aquel año que estuvieron separados.
  
El moreno salió lentamente del cuerpo de su niño y se acomodó entre ambos dejando que descansaran entre sus brazos.
  
- No es justo…- se quejó Jaejoong.- ¿Cómo es posible que aguantaran más que yo?

Yunho rió suavemente y Changmin buscó los labios del mayor para darle un ligero beso en ellos.

 - No te preocupes, Hyung… recuperaremos el tiempo perdido.- dijo el menor mirándolo a los ojos.

- No sabes cuánto te extrañamos, Jae…- dijo el moreno, buscando también sus labios.

- Y yo a ustedes…- respondió con una sonrisa cansada, pero más que dispuesto a hacer lo que su Dongseng había dicho… recuperar el tiempo perdido.

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